.
.
.

--¿Qué mierda es lo que está pasando contigo, Jeon Somi?--

La nombrada dejo caer su toalla quedando en completa desnudez para agarrar su vestido y empezar a ponérselo sin siquiera mirar a su esposo.

--¿A qué te refieres?--

Las fosas nasales de Jungkook se ensancharon con una respiración de disgusto total por lo despreocupada y descarada que estaba siendo la mujer con la que se caso.

--La reunión de padres, Somi era hoy.--...--Tira su saco en la cama y pone sus manos en su cadera paseándole por la habitación.--...--Le dijiste a los niños que irías con ellos.--

Somi se sentó en la cama mirando al suelo, probablemente las palabras de Jungkook si hicieron efecto en ella, pero tan pronto como se lo permitió recuperó la postura seria y demandante de siempre. Se puso su ropa interior.

--Solo era una reunión como todas las anteriores. He estado muy ocupada en el trabajo, ya sabes cómo es esto de cansado y la fiscalía ha sido una locura estos días.--...--Se coloca el brasier.--...--¿Y tú de dónde se supone que vienes? Deberías estar trabajando.--

--Vengo del instituto de los niños.--

--Oh... Así que fuiste a la reunión. ¿Dijeron algo muy importante? Apuesto que no.--

--No fue una reunión cualquiera o la misma tutora de los niños no me hubiese llamado para que asistiera. Llegué media hora tarde a esa bendita reunión.--

--Vaya, asumo que debió ser muy duro para ti llegar tarde.--...--Ya estaba vestida por lo que procedió a tomar su cartera para sacar su maquillaje.--

--Pues me perdí gran parte de la reunión donde hablaron de los proyectos finales de año, los próximos exámenes y el viaje que todos harán a Busan al finalizar todo. ¿Entonces sigues pensando que fue una reunión sin importancia?--...--Se cruza de brazos y la mira fijamente.--

Lo único que traiciona su postura desinteresada son sus labios frunciéndose.

--Ya, Ya igual fuiste así que todo está bien ¿o no?--

--Eres imposible. Son tus hijos.--

--También son tuyos.--

--Exacto, ambos somos sus padres y tenemos que cumplir con nuestras obligaciones. Dices que tienes muchas cosas que hacer pero sigues aquí a medio día, pudiste haber ido a la reunión en lugar de tener que hacerlo yo porque me toco salir de mi trabajo, a hora pico. Ni siquiera recordaste que era hoy.--

Si hubiera sido algo de una o dos veces Jungkook no estaría tan molesto, pues si ha sido disgustante recibir la llamada de la tutora solicitando la presencia de algún representante, salir corriendo de su oficina, manejar rápidamente, llegar tarde y tener que ser presa de las miradas juzgadoras de los demás padres en el salón. Eso fue disgustante y puede dejarlo pasar, pero lo que no puede dejar pasar son las expresiones decepcionada de sus hijos al verle llegar. Él sabe que Sunno y Suho esperaban a Somi ya que ella les prometió ir. Ella lo prometió.

--Pues no pude, ¿ok? Estaba muy cansada y lo olvide.--

Y con esta ya eran varias las veces en que Somi le queda mal a sus hijos.

--Te olvidas de mucho últimamente.--

--Deja de hacerme quedar como la villana, Jungkook.--

--Ese puesto te lo estás ganando tu sola y sin ayuda.--

Somi al fin dejó lo que estaba haciendo para mirar a su esposo.

--Si no tienes nada bueno que decir mejor lárgate y déjame en paz, no estoy para soportar tus sermones. No eres mi padre para darme lecciones de vida ni regañarme.--

--No soy tu padre, soy tu espos...

--¡Ya basta! No quiero seguir discutiendo contigo. Sunno y Suho no son unos niños pequeños ¿ok? Ya están grandes como para entender que mamá está muy ocupada.--

--Entonces deja de prometerles cosas que no vas a cumplir.--

--Hay ciertas situaciones que se me escapan de las manos y ellos lo tienen que entender, tu lo tienes que entender.--

Jungkook lo entiende más que nadie porque a él mismo le ha tocado obtener un resultado diferente a lo que planeaba, pero lo que le molesta es que Somi está así por andar revolcándose con Dios sabe quien y dejando a sus hijos de lado. Hace años Somi tuvo una agenda tan apretada que daba miedo, apenas estaba entrando en fiscalía y tuvo que trabajar muy duro para desenvolverse, pero nunca dejó a sus hijos de lado, siempre los ayudaba, los llevaba a la escuela y asistía a las reuniones, pasaba tiempo con los niños. Así que Jungkook sabe que Somi puede dar cualquier excusa para su descuido ¿pero usar el trabajo como excusa? No, simplemente no.

Jungkook se acerca a su esposa solo para inclinarse un poco y decir casi susurrando:

--Las cosas en mi trabajo también han sido... una locura, no tienes idea Somi pero no por eso voy a dejar de lado los asuntos de mis hijos.--...--Y parte de esa locura se daba de la mano con los asuntos de Somi, pues ahora no solo era trabajo, ahora estaban ligándose con otra persona fuera del matrimonio y ella no sospechaba que él lo sabía, ella era ignorante ante la infidelidad devuelta.-

El matrimonio sin duda estaba atrofiado por dónde se le viera y lo único que los mantenía unidos eran sus hijos, pero si ellos no se sentían en familia ¿Valía la pena seguir con esto? Jungkook siente que está aguantando en vano, que está buscando de controlar lo incontrolable.

--Eres un imbécil, Jungkook. Juro que ya no te soporto.--...--Se levanta con sus cosas y se va al baño para seguir maquillándose.--

Jungkook la ve irse como siempre: discuten, unas veces más intensas que otra pero ya no podían tener conversaciones tranquilas como gente civilizada o el matrimonio que son, ni siquiera en nombre de los años que han estado juntos, la amistad, la relación de colegas o una simple pareja que lo único que los une son sus hijos porque esa es una unión para toda la vida. Mínimo deberían poder conversar en calma.

Pero ni eso ha sido posible estos días.

Lo peor es que ya no importa de quién es la culpa ya que si no llegan a una solución buscar culpables solo es una perdida de tiempo y agotamiento mental del que Jungkook prefiere pasar.

Agarra su saco y se lo coloca de nuevo para salir de la habitación con bastante prisa y le alegra que sus hijos estén en su curso de idioma ya que no quiere que sean testigos de estas discusiones que se han vuelto rutina en su matrimonio.

Se sube a su camioneta y se queda unos cuantos segundos mirando hacia el frente sin saber qué hacer y a dónde ir; no piensa volver al trabajo hoy, no llamaría a Cristian ni a Alexa ¿Para qué? Han de tener sus propios problemas como para escucharlo y... no, simplemente no. La situación es bastante complicada como para explicarla y él ya no quiere explicar nada.

Encendió el motor y arrancó para manejar y que la vida lo llevara a dónde fuera.

.

.

.

La vida lo llevó a un edificio con muchos departamentos.

*La vida no te obliga a manejar ni decide por ti. Estás aquí porque es al único lugar donde puedes acudir*

Tocó el timbre.

Escuchó unos pasos acercándose, se escuchaban cada vez mejor y fue entonces que la puerta se abrió dejando ver a un Jimin con el cabello húmedo, una toalla en su mano mientras lo frotaba, vestido con su pantalón negro tubo y una simple camisa blanca que no yacía metida dentro de sus pantalones. La expresión del abogado era muy sorprendida.

--Jungkook... ¿Qué haces aquí?--

*Si señor Jeon ¿Qué hace aquí?*

--Pasaba por aquí y vi el edificio, entonces pasé a visitarte.--

--¿Así como así sin avisar? Claro.--...--Jimin ríe sarcástico y rueda los ojos.--...--A otro estúpido con ese cuento ¿Qué quieres? Me estoy arreglando para salir.--...--Se señala obvio y entra. Jungkook no espera invitación y entra al departamento.--

--Ya te lo dije, solo pasaba por aquí.--

--No nací ayer señor juez ¿Quieres algo?--...--Tiende la toalla en el espaldar de una silla.--...--Ya está, de seguro quieres que te la chupe.--...--Dice lógico.--...--Si es así solo haré eso ¿Ok? Y para la próxima debes avisar, no llegar de la nada.--...--Va hacia donde Jungkook y sin permiso alguno coloca sus manos en la bragueta ajena. Ya está acostumbrado de todas formas.--...--Pero como nunca me escuchas estoy seguro de que no...

Jungkook dejó de escuchar lo que Jimin decía para concentrarse en el movimiento de esos labios abultados y rosados por la tinta que Jimin le ha aplicado. Recordó el beso que se dieron la última vez que se vieron hace dos días y... aquello se sintió más íntimo que tener su polla dentro del abogado. Era un beso, no era para tanto, la gente normal inicia cualquier relación con besos antes de pasarse a cualquier otra cosa más intensa, un beso no es algo del otro mundo.

Ellos debieron de haberse besado desde el primer día.

Pero la cuestión es que todo se dio al revés.

--No he venido por eso.--

Jimin detuvo todo su discurso y lo miró con su ceja arqueada.

--¿Y entonces?--

Jungkook desliza su mano derecha por la cadera del menor para atraerlo más hacia su cuerpo, guio su izquierda a la nuca de este y Jimin miraba sus manos con los ojos muy abiertos.

--Jungkook...

Y si tenía la intención de decir algo más se quedó atrapado en la boca del mayor ya que este le estaba besando.

El corazón de Jimin dejó de latir por unos instantes y él no se movió, no hizo nada más que estar quieto con su cabeza revuelta mientras el juez le besaba y... joder Jimin no pudo quedarse quieto por más tiempo, Jungkook no besaba ni un tanto mal y a Jimin le causaba más placer y nada de disgusto (tal vez confusión) por lo que procedió a rodear el cuello de Jungkook.

Se estaban besando por segunda vez.

Ninguno se separó a decir algo, ni a mirar por dónde iban mientras sus pies se movían a cualquier dirección del departamento, lo único que Jimin supo fue que su espalda chocó contra algo suave: su cama.

Tal parece que hoy no podrá salir y hacer sus diligencias. Cómo siempre Jungkook arruinando sus planes.

.

.

.

Las cosas no fueron tranquilas, ellos tampoco se detuvieron a hablar.

Lo loco fue que no tuvieron sexo como tal, pues habían estado besándose más de lo esperado, Jimin le dio una mamada al juez hasta que se corrió en su boca, el juez le hizo una paja al abogado (no fue la mejor del mundo pero fue suficiente) hasta que se corrió también y los dos quedaron tendidos en la cama sin decir prácticamente nada. Fueron largos minutos de silencio hasta que Jimin por fin decidió hablar.

--¿Qué pasó señor del control? Hoy estás raro.--

--¿A qué te refieres?--...--Jungkook se acomodó mejor los pantalones pero no abrochó los botones de su camisa, hacía demasiado calor para estar muy cubierto.--

--No haces algo sin tenerlo planeado antes ¿O me equivoco?--...--Se acuesta de lado viendo el perfil del juez.--...--Eso de venir a mi departamento sin avisar no es algo que harías, además, me dijiste que aquí encerrado no podré lograr nada, pero de pronto te apareces aquí de lo más extraño y no puedo avanzar.--

--No era mi intención interponerme en tus asuntos.--...--Solo fue consciente de dónde estaba cuando ya estaba tocando el timbre.--

--Pero lo hiciste.--...--Jimin suspira.--...--Pero ya qué, no lo vuelvas a hacer ¿Qué hubiera pasado si no estaba?--

--Solo me hubiese marchado.--...--Se encoge de hombros mirando al techo.--

--Claro que si, después de perder el tiempo viniendo hasta acá, subiendo muchas escaleras y todo para no encontrarme en casa en lugar de llamarme, no es típico de ti, es hasta irresponsable ¿Qué edad tienes eh? ¿trece años?--...--Niega y le da la espalda al juez. No vale la pena ni llamarlo estúpido cuando este ya debe saber que lo es.--

Jungkook miró de reojo la espalda desnuda del abogado la cual estaba adornada con unos cuantos lunares por aquí y por allá, unos mas oscuros que otros. Jungkook los contó todos.

--Tienes once lunares en la espalda.--

Jimin juntó sus cejas y abrió la boca para decir algo, la cerró y la volvió a abrir sin saber exactamente qué decir.

--Vaya dato innecesario.--...--Bufa con una risa no muy contenta, más bien es apenada. Jungkook debería estar mirando a otro lado y no a el, le pone los pelos de punta saber que tiene esa oscura y juzgona mirada en su cuerpo.--

--Este de acá...--...--La punta de su dedo impacta contra uno de los lunares que estaba ubicado en las costillas.--...--Y este de acá...--...--Desliza su dedo hasta llegar a la cadera, muy cerca del coxis.--...--Son los más grandes. Y este de acá...--...--Su tacto sube con cuidado, un recorrido suave que llega muy cerca de la nuca del abogado a lo que este se encoge con una risita.--

--No hagas eso, me dan cosquillas.--...--Pasa su mano por la zona a ver si puede borrar la sensación.--

--Lo siento, eres cosquilloso por lo que veo. Pero quería decirte que ese lunar de ahí es el más oscuro.--...--Jeon ve con fascinación el lunar bien redondito y negro, resaltaba muchísimo en toda esa piel blanca y lisa, muy bien cuidada y él tuvo ganas de... dejar un beso ahí.--

¿Y cuando Jeon Jungkook se negaba lo que quería?

Acercó sus labios y dejó un casto beso encima del lunar.

Jimin sintió que se le erizó todo el cuerpo. Encogió sus hombros ante aquel pequeño beso y giró lentamente su cabeza para encontrarse a un Jungkook que lo miraba con atención desde arriba.

--Deja de hacer eso.--

--¿Qué cosa? Los besos no están prohibidos.--...--Sonríe algo socarron.--

Los ojos de Jimin se ampliaron al ver esa sonrisa, la cual era burlona y sexy. Maldita sea, Jeon Jungkook realmente es muy guapo, muy sexy ¡Solo sonrió! No es la gran cosa.

--No hablo de los besos.--...--Jungkook alza sus cejas casi diciendo un "¿Entonces?" y Jimin pensó que esas cejas gruesas eran muy atractivas, tal vez lo más atractivo de su rostro junto a sus ojos.--...--Dejar de empezar a ser impredecible, es aterrador. Me das escalofríos.--...--Se acomoda mejor y se encoge hasta a quedar en posición fetal.--

--No estoy haciendo algo del otro mundo.--...--Y mientras decía eso llevaba su mano por la cadera del menor, echándose más cerca hasta que estaban en cucharita.--

--Lo estás haciendo justo ahora.--...--Quiso sonar desinteresado pero su corazón estaba bombeando con fuerza, el brazo de Jeon pesaba magníficamente en su cadera. El juez es un hombre necio pero es cálido a su modo.--

Y Jimin estaba tan frío que esa calidez fue bien recibida, tanto que no se puso a pensar demasiado en que este hombre estaba casado, era una figura bastante importante para el país y que después del juicio de Jungwon ellos no volverán a coincidir como lo han estado haciendo.

*Echalo lejos, vamos, no seas un niñito débil. No seas patético* y aún si todo en su cabeza le gritaba que debía alejarse de Jungkook... él no hizo nada por separarse y se quedó ahí bien quieto mientras aquel juez mayor lo abrazaba por la espalda, sintiendo mucha tranquilidad, calor corporal, piel tibia y desnuda rozando contra la suya propia y fue... fue reconfortante, muy bueno.

--Creo que voy a divorciarme de Somi.--

--Oh.--...--Si, Oh.--...--¿Y quieres eso?--

--Es lo mejor que puedo hacer.--...--Cerró sus ojos y se acostó.--

Jimin cerró los ojos y respiró profundamente cuando el aliento del juez chocó contra un nuca, podía sentir la nariz de Jungkook rozando parte de su cabello y le causó escalofríos.

Había dejado la etapa de la pubertad hace muchos años atrás, y el que sea sexualmente activo no lo hace tan sensible pero ahora mismo lo estaba ¿Desde cuándo se supone que un simple toque le cause tanto?

¿Desde cuándo Jungkook lo hacía sentirse tan sensible y quisquilloso al mínimo toque, a la mínima cercanía... a su sola presencia?

.
.
.
.
.

Buenas buenassss ¿Qué tal todo? Espero que bien <3
Traigo el capítulo días después porque esta semana estuvo muy ocupada para mí ya que tuve un viaje a otra provincia, una competencia con mi grupo de baile y fue muy atareado.
Si puedo, les actualizo otro cap esta semana aunque no prometo nada, igual trataré de escribir hoy que tengo libre <3
Gracias por leerme y esperarme. Les adoro Soldadxs 💕