Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

29

El aliento quedándose estancado en su garganta, sus párpados fuertemente cerrados sin querer afrontar la realidad a su alrededor, a pesar de que sabía que debía percatarse de la reacción del hombre, él no hizo ningún movimiento.

Pero pudo sentir cuando Jungkook retiró su frente unida haciéndolo sentir vacío.

Jimin evitó observarlo, las lágrimas continuaban su recorrido como momentos antes de confesarse.

Su corazón latiendo con tanta fuerza a la deriva, esperando una respuesta que lograría afectarlo hasta el punto de tomar una nueva decisión al respecto, pero tenía miedo.

Él estaba horriblemente asustado de la respuesta de Jungkook.

La ingenuidad de esperar un estallido alegre por parte del contrario, tal vez unas íntimas caricias que lograran calmar su llanto o simplemente algo más que el silencio que los estaba consumiendo a ambos en esos momentos.

— ¿De qué estás hablando? — fue la respuesta de Jungkook, una clara insinuación de que no comprendía la situación.

Jimin ocultó nuevamente su rostro con desespero esta vez.

— No quería arruinar nuestra amistad — confesó el más bajo — así que me prometí no decirte nada para no interferir en tu vida, en tus pensamientos o sentimientos que van dirigidos hacia mi.

Suspirando, Jimin tomó una gran bocanada de oxígeno llenando profundamente sus pulmones.

— ¿Desde cuándo te sientes de esa forma? — cuestionó el contrario.

Él se tomó su dulce tiempo para pensarlo.

— Al principio estaba seguro de que mi fijación en ti se debía a que te quería como un amigo — relató sin mover las manos de su rostro, su voz sonando ahogada — pero me di cuenta de que me estaba engañando a mí mismo tiempo después.

Escuchó a Jungkook moverse de forma inquieta en la sala.

— Nunca quise que mis sentimientos interfirieran entre nosotros — confesó Jimin — incluso cuando saliste con chicas — una risa dolida ahogada — ni siquiera cuando conociste a Sunmin, estabas tan feliz con ella que asumí que mis sentimientos solo debían marchitarse y estar feliz por ti.

— ¿Por qué harías algo así?

— Porque quería verte ser feliz — admitió — pero incluso así me prometí que si todo esto era demasiado, pondría mi felicidad primero.

— Por eso te fuiste — dijo Jungkook de repente — porque no eras feliz.

Jimin ahogó un nuevo sollozo, la voz de Jungkook se había quebrado al decir eso.

— ¿Te hice infeliz? — cuestionó repentinamente el más alto logrando que Jimin saliera de su escondite.

La expresión rota en el rostro del más alto aturdió bruscamente a Jimin.

— ¿Qué? No, no es así — se apresuró en responder.

— Pero no estabas feliz tampoco — Jungkook elevó su voz sin percatarse de ello — se supone que eras mi amigo, que mi felicidad era tu felicidad y viceversa, sin embargo, la única persona que se sentía feliz con todo eso era yo.

— Jungkook, no estoy diciendo que tienes culpa en esto.

— Pero si la tengo, incluso si no es consciente — agregó — yo debí velar por tu felicidad y no solo por la mía.

— No era tu trabajo Jungkook — respondió Jimin observándolo.

— No es como lo siento yo — confesó — creí que mi vida estaba yendo por buen camino, estaba completamente seguro de que había conocido a la mujer que llevaría al altar, tendría a mi mejor amigo como mi padrino e incluso mi familia estaría allí presente.

Jimin no pudo evitar bajar la mirada.

— Lo que conseguí de todo eso fue absolutamente nada — agregó el más alto — perdí a la chica que amaba, no he hablado con mi familia últimamente y te perdí a ti.

De alguna forma, Jimin se sintió culpable.

— No quiero a Sunmin de vuelta a mi lado — aquello tomó por sorpresa a Jimin quien le regresó la mirada — te quiero a ti de vuelta en mi vida Jimin, sé que es mucho pedir debido a tus sentimientos, pero incluso así quiero ser egoísta, serlo más y tenerte cerca de nuevo.

— ¿A qué te refieres? — cuestionó Jimin sin comprender sus palabras.

Jungkook se acercó para arrodillarse de nuevo frente a él.

— Podemos hacerlo funcionar — dijo de repente — puedes regresar o tal vez yo podría buscar algo aquí cerca, y si eso es mucho pedir, tal vez fijar fechas para encontrarnos más seguido.

— ¿Encontrarnos más seguido? — murmuró Jimin en respuesta.

— Si, yo podría viajar aquí si no puedes debido a tu trabajo — respondió Jungkook — yo hallaré la forma de hacer que esto funcioné Jimin. 

— Hallarás la forma — repitió el mencionado en medio de balbuceos — ¿Eso es lo que piensas? ¿Estás seguro? 

Jungkook claramente notó el sarcasmo en el tono de voz ajeno.

— No estoy haciendo a un lado tus sentimientos hacia mi — confesó — pero no quiero que te alejes solo porque no los estoy correspondiendo.

Jimin desvió el rostro hacia un costado, su vista fija en la gran cortina que se balanceaba debido a las ráfagas suaves de aire. La primavera estaba comenzando.

— ¿No vas a decirme "Lo siento"? — le recordó sus propias palabras.

Un suspiro escapando de los labios ajenos.

— No — respondió luego de varios segundos — porque sé que te amo Jimin.

El mencionado giró el rostro para encararlo, las facciones del hombre que amaba estaban peligrosamente destruidas en una expresión llena de tristeza.

— Es diferente — contestó el más bajo.

— ¿Qué tan diferente es? — cuestionó el contrario.

— Es diferente — insistió Jimin — mientras tú quieres a alguien que te apoye inconscientemente durante toda tu vida, yo quiero a alguien que no solo esté allí, quiero a alguien con quien despertar cada mañana, o esperar en la noche, o encontrarnos durante el almuerzo.

— Nosotros hemos hecho esas cosas — le recordó Jungkook.

— Pero no había algo más que solo amistad — agregó Jimin — no había besos, caricias, palabras dulces dedicadas al otro, no había amor.

Pudo notar el momento exacto en que las lágrimas se agruparon en los costados de los ojos de Jungkook.

— ¿Entonces que había allí? — interrogó Jungkook en voz baja.

— Solo había un chico sintiendo amistad mientras el otro sentía amor.

Jungkook apretó con fuerza sus labios entre si, un surco formándose en su blanquecina frente, arrugas marcadas al inicio de sus cejas que se estaban juntando. 

— ¿Qué se supone que debo hacer ahora? — preguntó el más alto.

— No lo sé — admitió Jimin — es por eso que no quería confesarme, porque no sé qué se supone debes hacer.

— ¿Entonces volvemos a como era antes? Estar separados sin saber nada del otro. 

Jimin no respondió a ello.

— Hice un gran esfuerzo para llegar hasta aquí, para pensar cuidadosamente en mis respuestas con la intención de que me permitieras dejar acercarme a ti de nuevo — murmuró — no quiero irme ahora que lo sé todo.

— Pero no puedes quedarte por culpa de mis sentimientos — le recordó.

Jungkook parecía una persona que acababa de ser derrotada, como si todo su armadura hubiera cedido al fin y una ballesta atravesó su corazón.

— ¿Y qué hay de mis sentimientos Jimin? 

Bajando la mirada, Jimin no sabía cómo continuar afrontando el tema, su reacción fue levantarse de la silla manteniendo distancia con el hombre quien permaneció en el mismo lugar, llevó su mirada a la maleta que Jungkook había traído consigo mismo.

Pensó en que lo mejor era pedirle que se quedara en un hotel.

Pero su cuerpo estaba desconectado de su cuerpo, sus manos tomando la maleta para llevarla en dirección hacia su propia habitación dejándola a un costado del armario. Pudo escuchar cuando Jungkook se levantó para seguirlo. 

Jimin giró parte de su rostro para encararlo.

Jungkook solo estaba allí de pie observándolo, como si temiera que alguno de sus movimientos asustara al contrario al percatarse de la maleta en la habitación.

— Prepararé algo para comer — soltó de repente Jimin sintiéndose abrumado por la situación. 

Sus pies moviéndose hacia el frente para cruzar al costado del más alto, pero unos dedos largos alrededor de su muñeca derecha le impidieron continuar con su camino hacia la cocina. 

— ¿Te estoy forzando de alguna manera? — cuestionó repentinamente Jungkook.

Jimin elevó el rostro demasiado rápido de forma alerta.

— No — respondió enseguida.

— ¿Estás seguro? ¿No me estás mintiendo?

— No, no te estoy mintiendo. 

Jungkook giró parte de su torso para encararlo, haciendo notarle a Jimin los pocos centímetros de diferencia que había entre ellos, la nariz del contrario solo quedando a poca distancia de la suya misma, el cálido aliento chocando contra su rostro.

Su corazón acelerándose al sentir la presión en su muñeca aumentar gradualmente con el paso de los segundos.

— No sé qué estás planeando Jungkook — dijo — pero no hagas algo de lo que te vas a arrepentir.

— Me arrepentiré si no lo hago. 

Jungkook llevó sus labios hacia los contrarios, los cepilló con los suyos mismos sin crear realmente un beso, como si tanteara el terreno antes de decidir cualquier cosa, Jimin pudo sentir los belfos ajenos temblar con fuerza.

— ¿Cuál es el punto de reprimirlo ahora Jimin?

Solo eso bastó para Jimin, como si se tratara de un permiso que necesitaba para dejar salir lo que sentía, su cuerpo en respuesta buscando el contrario para estrecharlo contra el suyo mismo, bebiendo con fuerza de los labios de Jungkook como si su último aliento estuviera estancado entre ambos luchando por sobrevivir mutuamente.

La incertidumbre que se generó en su pecho al sentir a Jungkook devolverle la misma intensidad como respuesta, los brazos del hombre rodeándolo hasta apretarlo lo suficiente como para cortarle el aliento, los labios buscando desesperadamente los suyos.

Jungkook no lo soltó, Jimin se aferró a él.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro