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Capítulo 1 - Lo normal.


Narra Gwen:

Después de estudiar años tras años en casa, por fin puedo ir a una institución normal, con personas... ¡Con personas de verdad! Eso es muy emocionante. Ya no estudiaré dentro de estás cuatro paredes, ya no tendré tutores sólo para mi, ahora creo que puedo ser normal, o por lo menos eso espero. 

—¡Gwen baja de inmediato! —grita mamá desde el otro piso, salgo de mi habitación y bajo las escaleras corriendo hasta llegar a la cocina donde esta ella—. Ahí esta todo para tu nueva escuela —señala una caja con distintas cosas adentro.

—Universidad —corrijo. 

—Lo que sea, ¿Gwen... Segura que no quieres seguir estudiando en casa? —pregunta frunciendo el ceño con esperanza de que cambie de opinión, hay va otra vez con esto.

—Sí mamá, no quiero seguir estudiando en casa, es ridículo, niños de seis años van a escuelas normales, ¿Por qué yo no? 

—Porque tu no tienes seis años.

—¡Exacto! Tengo diecisiete, puedo ir a una escuela normal en las afueras de mi casa como todos, pero al parecer la que tiene que aprender a ser normal eres tú —señalo enojada, ella es tan sobreprotectora e irritante. 

—¡Irás a tu estúpida escuela, universidad normal! si quieres escaparte de casa está bien, empiezas mañana —lunes.

Es un amargo alivio saber que puedo asistir, sé que a ella eso no le contenta, lo sé, pero ya han pasado diez años desde que a mi hermano lo arrollo un camión cuando iba a su escuela, ya asistí a psicólogos, psiquiatras, traumatólogos, me he sometido a sitas durante años con todas esas personas que nunca me agradaron, ya es hora de qué pueda hacer algo por mi propia cuenta, como ir a una universidad que no este adentrada en las paredes de mi cuarto. Me sigue mirando como si temiera perderme, como si ese miedo acabará con ella; más el claro enojo que siente hacia mi por querer salir más de casa.

—¿Mamá... Qué pasa? —pregunto cautelosa.

—Nada. Simplemente la irá me está provocando un pequeño ataque al corazón.

—Eres tan exagerada... —suspiro.

—No quiero que te pase nada, Gwen —suelta acercándose a mi.

—No me pasará nada, lo prometo, sólo sácate esas malas ideas de la mente y haz lo que te dice el psiquiatra por siquiera una vez en tu vida —pido, me fulmina con la mirada.

 —No me hables como si tuviera diez años y no supiera que hacer con la suciedad en mis manos, soy tu madre —reclama, sí ya sé que eres mi madre...

—Lo siento. 

(...)

El despertador marca las 6:00am estoy lista para ir a la universidad, una de verdad. Me levanto y me doy una ducha, cepillo mis dientes, me visto rápidamente y bajo a desayunar. Me encuentro con mi madre algo agitada, hablamos poco mientras desayuno es obvio que se encuentra al borde de los nervios, pero estoy segura de lo que hago, ya es tiempo de seguir con nuestras vidas. 

Tomo mis cosas y salgo de la casa dejando sus suspiros atrás, estoy lista para la universidad fuera de casa.

(...)

Es grande, el campus es como sale en los folletos, no se si es por el echo de qué jamás he asistido a una escuela que no sea dentro de casa o si es porque se ve realmente genial, creo que es la primera... ¿Por Dios Gwen quién se emociona tanto por ir a la universidad? 

Me adentro en la universidad algo despistada, no conozco absolutamente a nadie y aquí todos parecen estudiar juntos desde tiempo inmemorables, hay chicos corriendo por el lugar, chicas hablando en las esquinas, algunos me miran de arriba a bajo, otros ni siquiera notan mi existencia. Me tropiezo con una rubia ojos cafés, viste casual pero pretenciosa, su cabello esta cuidado aunque despeinado por andar corriendo al igual que su aspecto, tiene un aire de tranquilidad mezclado con diversión, parece ser agradable. 

—¡Hola! —exclama con energía—. ¿Tú eres la nueva, no? Nos hablaron de ti, yo soy Liz —me tiende la mano, la estrecho.

—Gwen —digo un poco tímida. 

—Nos avisaron que llegaría alguien nuevo, una chica... Rubia, eres tú —comenta encogiéndose de hombros—. ¿Estás perdida?

—No, bueno... Acabo de llegar, el lugar es muy grande a penas vengo entrando —comento, me mira con una sonrisa dulce, se la devuelvo. 

  —¿Cuál es tu primera clase? 

 —Historia, con el profesor Peter —contesto.

 —Ven conmigo —hala mi mano y me arrastra hacia un salón—. Esa clase empieza en unos... Cinco minutos, nos toca juntas —sonrió, no estaré tan sola—. Por cierto, me fascina tu cabello, ¿Eres rubia natural o oxigenada? —rió por su espontaneidad con las preguntas.

—Hasta donde yo sé soy rubia natural.

 —Eso tiene sentido... Después de todos tus ojos son azules —comenta, que detallista—. Te pareces a mi hermano, aunque menos inútil y sin pene, será lindo tener a una amiga sexy a la cual pueda exhibir con los chicos, tal vez esta vez hasta gane algo de dinero.

—¿Piensas prostituirme? —pregunto fingiendo horror mientras arqueo la ceja, Liz ríe.

—Si te parece bien...

—De acuerdo—digo en broma, espero que se de cuenta que es en broma.

Liz es simpática, en los pocos segundos que llevamos juntas me he divertido un poco, ¿Vez mamá? no es tan grave. El profesor Peter entra y empieza la clase, no me presenta y de cierto modo no me incomoda, no quiero ser el centro de atención. Es de ese tipo de profesores que sólo hablan de su vida y no se dan cuenta que ha algunos alumnos no nos interesa saber como conoció a su esposa ni como hizo para no desmayarse en el parto de su primera hija. Luego de la primera media hora de clase empieza a hablar de historia y no precisamente de la suya, Liz esta aburrida jugando con mis crayones, parece una niña de nueve años.

—Los pintores antiguos eran unos sádicos... Sólo pintaban mujeres desnudas exhibiendo sus sheshes —dice mientras me muestra el dibujo, rió mientras le dibujo una tanga con mi lápiz—. Así esta mejor —evito una carcajada y niego con la cabeza, luego de cubrir a la pobre mujer exhibiendo sus "sheshes" como la llamo Liz prosigo a hacer la tarea en el pizarrón—. ¿Qué te pondrás está noche en la fiesta?

 —¿Una fiesta? —arqueo mi ceja, ¿Cuál fiesta?

 —Todos los años hacen una fiesta a principio del semestre. El año pasado fue una con la temática de Hawaii, este año será formal pero no tan formal. Todos están invitados, así que... ¿Qué te pondrás? 

Yo que sé que me voy a poner, me acabo de enterar de la existencia de la fiesta, soy nueva Liz, recuerda.

—No lo sé, ya veré que tengo en mi armario, ¿Por qué formal? 

—Porque las idiotas que organizarán la fiesta declararon que sería formal —dice encogiéndose de hombros.

  —¿Tú que llevarás?—pregunto.

  —Yo iré en jeans —frunzo el ceño en confusión, ¿no acaba de decir que es "formal"?, capta mi confusión y vuelve a hablar—. Querida Gwen, sólo esas tontas irán formal, los otros iremos como nos provoque ir, después de todo es un país libre —responde tranquila mientras se copia de mi tarea con cierta gracia.       

No pregunte más y me centre en la tarea la cual yo si estoy haciendo, ¿Formal o no? No lo sé, tal vez yo también me aparezca en jeans, aveces es mejor ser notado por ser diferente.

(...)

Son las 8:00pm y estoy lista, llevo unos jeans cintura alta negros, una blusa blanca y unas zapatillas negras con un pequeño lazo blanco también, mi cabello esta suelto descansando una parte en mis hombros y la otra en mi espalda, llevo poco maquillaje, tomo mi bolso y bajo a esperar a Liz que venía a buscarme con su hermano el "Mujeriego pene pequeño"  llamado así por ella misma. 

Una vez abajo veo a mi madre mirándome de pies a cabeza, no voy como una zorra y es una fiesta formal así que no debería reclamarme. 

—¿Una fiesta en el primer día de clases? ¿Un lunes? —arquea la ceja mientras me mira.

—Yo también pensé lo mismo, pero es tradición de ellos —¿Quién soy yo para juzgar?, suspira y se dirige al sofá.

Mi teléfono vibra y es Liz:

De: Lizii.

Para: Gwen.

Hora y Fecha: 8:07pm 10/05/2016.

Ya estoy afuera de tu casa, se ve bastante grande, apresúrate que no aguanto un minuto más a el torpe de Michael.

No sé quién diablos es Michael pero a juzgar por el hecho de que Liz me trata como si fuésemos amigas desde los tres años e ignora que nos conocimos hoy, supongo que Michael es su hermano. 

Me dirijo a la puerta y la abro.

  —¡Adiós, mamá! —grito.

  —Te quiero aquí antes de la una de la mañana.

Ignoro sus palabras pero aun así las guardo en mi mente, me sorprende de que me haya dejado venir.

Salgo de casa y me encuentro con un corvertible negro con Liz al volante, ¿A quién diablos le quito eso? Me acerco y a su lado esta Michael de copiloto con una expresión de fastidio que cambia al mirarme, incomodo.

 —Sube, nena —no sé si lo dijo Liz o Michael, le resto importancia y subo al auto.

Ella arranca y debo admitir que me sorprende que Michael siga vivo del recorrido de su casa hasta la mía, conduce como una persona ebria que necesita ayuda, y supongo que ni siquiera a bebido. Supongo. Llegamos rápido a la fiesta, es en una casa grande que parece más bien un club, piscina, campo, adolescentes emborrachándose, tragándose entre sí y apenas son las ocho de la noche, esto estará bueno. Bajamos del auto y logro detallar a Michael, es rubio al igual que Liz, sus facciones son bastantes parecidas sólo que él tiene los ojos azules, un azul claro y poco intenso, lleva jeans y una camiseta a cuadros, sin duda sabe lo bien que se ven los hombres usando de esas, lleva deportivos y el cabello no muy arreglado, se ve bien. Liz lleva unos jeans blancos, pobres pantalones, terminarán acabados al finalizar la noche, una blusa de seda celeste combinada con unos tacos no muy altos, tiene una trenza desaliñada que le sienta bien.

 —¡A divertirse! —exclama la rubia.

Esperen... Los tres somos rubios. Genial.

 —Debido a que a mi hermana no se le ocurrió presentarnos, lo haré yo mismo, Michael Torrejeen —estrecho su mano.

—Gwen, Gwen Climorf.

—Mujeriego pene pequeño —comenta Liz detrás de nosotros, evito reír.

—¡Ya cállate, Liz! —exclama Michael enojado—. ¿Qué sabes tú del tamaño de mi pene? Por dios...

—Me bañe contigo hasta los ocho años, sé mucho del tamaño de tu pene, hermanito —contesta ella triunfante, toma una bebida y me pasa una a mi, sigo tratando de no reirme en la cara de Michael, este se va enojado y nos deja solas.

Miro a Liz arqueando la ceja y esta se encoje de hombros dando un sorbo a su bebida, ¿Estás son sus típicas peleas con él? ¿Metiéndose con su pene? Dejo de pensar en el posible tamaño y miro a mi alrededor, no hay muchas personas con vestidos o de traje, la gran mayoría viste casual como yo y otros como Michael. Supongo que no toman muy en serio a las "tontas" que organizan esto como yo pensé. 

Una pregunta invade mi mente, he pasado la mayor parte del día con Liz y no la he visto con otras chicas, ¿Es qué no tiene más amigas? Disfruto mucho de su compañía pero me extraña que no este en un grupo más grande. 

—¿Y tus amigas? —pregunto, me mira con una sonrisa.

—Estás a mi lado —contesta, me sorprendo, ella lo nota—. No pienses que soy una asocial, pero la mayoría de mis "amigas" —dice haciendo comillas con sus dedos—. Sólo quieren acostarse con Michael y cuando lo hacen y él empieza a rechazarlas, ellas simplemente no pueden convivir más con la hermana del idiota.

—¿Dices que él aleja a tus amigas?

—No, yo quiero mucho a mi hermano a pesar de ser un torpe, te digo que mis antiguas amigas son unas zorras que no saben lidiar con el rechazo y la estupidez, entonces el zorrismo les llena el alma —rió por sus comentarios, es ridículo que se alejen de ella, Liz es genial.

—¿Y qué te dice que yo no me vaya a acostar con tu hermano y hacerte lo mismo? —pregunto, parece ahogarse con la bebida. 

 —Tu tienes cierta madurez que a ellas les faltaba, Gwen. No creo que te vayas a acostar con mi hermano, y sí lo haces, sé que tienes la capacidad necesaria para afrontar lo que sigue luego —me guiña el ojo. 

—¿Liz como demonios haces para verme de ese modo y tener menos de veinticuatro horas conociéndome? —pregunto anonadada, realmente quiero saberlo, ella ríe.

 —Te ves diferente, no pareces ser esas rubias idiotas hambrientas de sexo con las qué me las pasaba, eres una rubia inteligente, Gwen.

—Gracias... —sonrió, Liz es genial y ella tampoco es una rubia tonta, tiene sus momentos de seriedad.



El reloj marca las 12:25am, he bebido pero no me comparo con Liz, ella esta ebria, demasiado. No me siento mareada aunque mi olor corporal grita "Vodka"a los cuatro vientos, la fiesta esta buena pero creo que ya es hora de que vuelva a casa, Liz no recuerda su nombre y mañana hay clases. La deje en el baño hace unos diez minutos y aún no regresa, en vez de estar ella conmigo esta Michael el cual también esta igual, sólo que él si se sabe su nombre y sabe la necesidad que le esta pidiendo su amigo de abajo mientras esta junto a mi.

 —Eres bastante atractiva, Gwen... —comenta mirándome.

 —Tú también —admito, sus ojos se iluminan—. Pero eso no significa que me voy a acostar contigo —agrego, frunce el ceño y se acerca más a mi, yo retrocedo.

 —¿Por qué no? —se acerca más a mi y se inclina para besarme, lo evado.

 —No sé... ¡Tal vez porque no soy una zorra! —vuelve a acercarse a mi, pero esta vez no soy yo la que lo empuja. 

Es un chico, cuerpo muy bien formado, su cabello esta despeinado de manera que derrite a cualquiera, es uno de los pocos que tuvo la decencia de ir con un traje algo formal, me mira y estoy sorprendida.

 —Dijo que no se acostaría contigo, Michael. Ya déjala —dice, su voz es grave, pero no trata de intimidarlo o amenazarlo, sólo alejarlo.

Michael sonríe y se va, volteo a mirarle pero él también se va dejándome con las palabras en la boca, ¿Qué rayos...? 

Liz aparece tambaleándose a mi lado.

 —¿Quién era ese chico? —pregunto.

 —¿Quién...?

 —El que empujo a Micheal, se conocen —agrego.

 —Quizás haya sido Elliot... Nha el esta igual de ebrio que yo...—dice tambaleándose—. A lo mejor fue Matt, o Liam... ¿O Ryan?... ¡O a lo mejor fue Trevor...!

 —Creo que no sabes quién fue Liz... Mejor ya vámonos a casa —asiente—. Yo conduzco, no quiero que nos mates.


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Bien, aquí el primer capítulo, espero que les haya gustado. El de la foto es el chico misterioso que empujo a Michael. 

Quiero recomendar la historia de una de mis hermosas lectoras:@Fucking_princess00 ¡ALEX!, pueden encontrar la historia en su perfil.

Hasta lo próxima....


























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