______________________________

Louis coquetea mucho con el entrevistador australiano Angus O'Loughlin, durante su entrevista para los ARIA AWARDS junto a Zayn y Liam. 

Una vez que llega a casa debe ganarse el perdón de un Harry celoso.

• Smut + 18
• Harry tops, Louis bottoms
• Dirty talk 

______________________________

Louis es alguien vanidoso y le gusta tener la atención sobre él, al igual que le gusta saber que pude hacer que muchos caigan ante él con solo mirarlos o sonreírles. Y muchos llaman a eso manipulación, pero él lo llama saber lo que tienes, lo que quieres y lo que puedes conseguir.

Además, él también era alguien muy coqueto por naturaleza, de verdad, había veces en las que lo hacía sin pensarlo ni premeditarlo, simplemente lo hacía y ya.

Pero, a pesar de coquetear con mucha gente a su alrededor sin importarle que es una figura pública y fuera a ver especulaciones al respecto; a Louis no le importaba realmente la atención de esas personas, la que verdaderamente le importaba era la de su esposo; él podría tener todas las atenciones y propuestas del mundo, pero nadie que no fuera Harry le interesaba en absoluto.

Es por eso que ese día estaba molesto, más que molesto, porque se había pasado más del tiempo necesario en elegir su atuendo para las entrevistas y premios que tenían planificados para ese día, para que Harry no le hiciera ni un solo comentario al respecto.

Él había elegido un traje ajustado que marcaba a la perfección la curva de su cintura, junto con pantalones que se pegaban a sus piernas, marcando sus muslos y la curva de su trasero.

Además de que había pasado tiempo extra con la estilista del grupo para que peinaran su flequillo de una manera diferente.

Louis lucia fantástico, jodidamente sexy diría él, pero Harry no fue para decirle nada respecto a su look, en su lugar se la había pasado riendo y perdiendo el tiempo con Niall.

- No creo que sea una buena idea. - negó Zayn asegurándose de que su traje estuviera bien para la entrevista.

- ¿Por qué no? - preguntó Louis acomodando su flequillo. - Es guapo, no como mi Harry, pero lo es. - murmuró, mirando al entrevistador que estaban arreglando a unos metros de distancia de ellos.

- Si es guapo. - admitió Zayn asintiendo, mirándolo también. - Pero habías dicho que Harry celoso daba miedo. - comentó pensativo del plan del chico.

- También dije que era caliente. - respondió Louis riendo. - Además, no va a pasar nada, Harry no va estar con nosotros, así que no importa, no le hago daño a nadie. - argumentó, encogiéndose de hombros y restándole importancia al tema.

A pesar de que Louis le había comentado a Zayn sobre su plan, el pelinegro no había esperado que fuera hacerlo desde el momento en que se encendieron las cámaras y comenzó la entrevista, al igual que no estaba que fuera hacer un poco más que obvio con su coqueteo hacia Angus O'Loughlin. 

El castaño se había estando riendo en alto de cada chiste que hacía el entrevistador, incluso cuando era algo tonto o sin gracia, al igual que casi se lo había estado devorando con la mirada, mirándolo sin nada de discreción, mojando sus labios cada cierto tiempo y sonriendole coquetamente al hombre, al grado de que incluso Liam se había dado cuenta de lo que estaba haciendo y no le quedó otra más que seguirle la corriente junto con Zayn.

Louis no se había conformado con solo reírle y sonreírle al entrevistador, si no que también era el primero en responderle en cada pregunta que podía, de una forma muy poco discreta; como cuando Angus comentó que deberían cambiar de ropa y el castaño no dudo en decir que si, con una sonrisa.

Quizás eso no fue tan obvio, como cuando el castaño dijo: "¿Hay algo que no puedes hacer?", haciendo que el entrevistador le sonriera igual.

A Louis tampoco le basto con solo coquetear con Angus O'Loughlin, si no que más tarde también había estado jugueteando con otro entrevistador, igual alto y guapo, durante una pequeña entrevista que tuvieron en una alfombra roja, sin importarle que ésta vez Harry sí estuviera presente, incluso lo había estado mirando un par de veces para ver su reacción, pero el rizado se había mantenido tranquilo y neutral en todo la entrevista, como sí no le importara que su pareja estuviera coqueteando.

Y eso lo hizo pensar que Harry no estaba de humor o de verdad no le importaba, asi que decidió dejarlo por la paz y dejar su juego de coqueteo por el resto del día, quizás y con un poco de suerte Harry no fuera a molestarse y ellos podrían pasar un rato agradable juntos una vez que estuvieran solos.

Louis se da cuenta de lo equivocado que estaba al pensar eso, cuando ellos llegaron al penthouse que les había conseguido el staff para pasar el tiempo, que Harry no estaba muy contento con él.

Podía sentir la tensión en el ambiente, mientras seguía con la mirada cada movimiento de su esposo, el como agarró una botella del whisky más costoso y un vaso con hielos para después sentarse en el banco que está junto con el piano que estaba en el centro del lugar.

- Dime, Lou. - habló lentamente, abriendo la botella. - ¿Te divertiste en tu entrevista con los chicos? - cuestionó en voz baja, dedicándole una mirada dominante al castaño.

Louis mordió su labio inferior sin saber si la pregunta era porqué realmente quería saberlo o lo estaba poniendo a prueba, pero él conoce muy bien a su esposo, de la misma manera en la que el rizado lo conoce a él y sabe que es más probable la segunda opción.

- Lo normal. - se limitó a decir encogiéndose de hombros, restandole importancia.

- Lo normal. - repitió Harry bebiendo de su whisky, analizando de pies a cabeza a su pareja, admirando su cuerpo y lo jodidamente sexy que lucia en ese traje. - ¿Te gusto estar coqueteandole descaradamente a ese tipo? - preguntó con la voz ronca, demostrando que estaba hablando muy en serio, notando como su chico se ponía tenso al oír eso y sonrió de lado sabiendo que tenía poder sobre Louis como nadie más y solo él podía tenerlo de esa manera, pero aún asi no podía permitir que el castaño fuera por ahí coqueteando con todos sin hacer nada al respecto. - ¿Sabias que es una entrevista muy interesante? - habló lentamente disfrutando la tensión de su esposo. - Fueron cuatro minutos con trece segundos en los que puede ver como mi querido esposo estaba coqueteando descaradamente con ese australiano de cara bonita. - agregó tensando mandíbula.

- Solo estaba bromeando un poco. - respondió Louis con una sonrisa, fingiendo inocencia. - ¿Por qué no lo olvidamos y mejor vamos a la cama? - preguntó pesteñando coquetamente hacia su esposo.

- Tienes que ganartelo. - respondió Harry, sintiendose con el control de situación al grado de comenzar a sentirse excitado, que sus pantalones estaba comenzando apretarle de la parte de enfrente.

- ¿Disculpa? - dijo el castaño indignado. 

- Lo que oíste, Lou. Gánatelo. - repitió el rizado con una pequeña sonrisa altanera.

- ¿Quieres que me gane tu perdón? - preguntó el castaño alzando una de sus cejas.

- Si, justamente eso es lo que quiero que hagas. - dijo el ojiverde bebiendo de nuevo.

- No fue nada en serio, amor. Además, tú ni siquiera me miraste ésta mañana antes de irnos y eso me hizo enojar, por eso lo hice. - se excusó el castaño. 

Harry suspiró, mirando a detalle a su pareja, admitiendo que era uno de sus mejores looks, por lo mismo se había estando esforzando por no tirarsele encima desde el momento en que lo vió esa mañana.

- Ven. - pidió el rizado dejando su vaso de whisky sobre el piano.

El castaño suspiró pesadamente antes de caminar hacia su pareja, hasta quedar enfrente suyo.

- Estás muy guapo, amor mío. - habló Harry lentamente, colocando sus manos en la curva de la cintura del chico, amando la forma en la que encajaban en esa zona. - Claro que te vi, pero créeme, si te hubiera besado o me hubiera acercado a ti, no hubiéramos asistido a las entrevistas. Quise follarte tanto desde el momento en que vi. - confesó bajando una de sus manos al trasero de su pareja, apretandolo.

- Entonces... ¿Podemos hacerlo? - preguntó Louis mordiendo su labio inferior, estando ansioso, inclinándose para besarlo, enredando sus dedos en los rizos de su pareja.

- Aún tienes que ganarte mi perdón, cielo. - murmuró Harry contra sus labios. 

Louis rió rompiendo el beso, viendo como los ojos de su esposo bajaron por un segundo hacía su entrepierna antes de volver a mirarlo, entendiendo el mensaje de esa mirada.

- Bien, lo haré. - aceptó el castaño antes de dejarse caer de rodillas, abriendo las piernas de su pareja para acomodarse entre ellas.

Harry reprimió un gemido ronco que quería salir de sus labios, viendo como las manos de su esposo se movieron rápidamente hacia la hebilla de su cinturón, quitandoselo con desesperación antes de abrir la bragueta de sus pantalones.

Mientras tanto, Louis miraba como su esposo tomaba de nuevo su vaso de whisky con la botella para llenarlo, dando un largo trago.

- ¿Te hace sentir poderoso beber mientras tu esposo va a chupartela? - cuestionó el castaño, una vez que liberó la erección del rizado, pasando su lengua por toda su longitud. 

- Si, un poco. - admitió Harry dando un trago más de su bebida. - Ahora, hazlo. - ordenó llevando una de sus manos a la nuca del castaño, acercándolo a su pene, con su cabeza de su polla golpeando los labios del chico.

Louis sonrió de lado, mojando sus labios por la anticipación antes meter la cabeza de la polla de su esposo en su boca, jugando con su lengua en la hendidura de su glande, saboreando el presemen en su lengua.

- Louis. - gimió el rizado ronco, enredando sus dedos en el cabello castaño de su chico. - Hazlo. - gruñó como una orden, desesperado.

El castaño jadeo contra la glande de su esposo, antes de obedecer los deseos de su chico y comenzar a bajar por toda la longitud, obligándose a respirar profundamente para no ahogarse con todo el gruesor y longitud del pene del rizado en su boca.

Harry soltó un profundo gemido, una vez que Louis lo tomó por completo.

Era verdad lo que decía su esposo, se sentía poderoso de tener a Louis tomándolo en su calida y húmeda boca, bajando y subiendo por toda su longitud chupandosela, mientras que él tenía una de sus manos en su cabello, animandolo a seguir haciéndolo, mientras seguía bebiendo algo de licor; era una sensación única y le gustaba mucho más de lo que debía admitir.

- Deberíamos hacer esto diario. - murmuró Harry entre jadeos, dándole un último trago a su vaso, antes de colocar sus dos manos en la nuca del chico. - Te ves precioso con ese peinado, tanto que no quiero arruinarlo. - halagó asegurándose de no hacerlo.

El rizado se sintió perdido cuando Louis abrió los ojos y miró, con sus ojos azules cristalizados por el esfuerzo que estaba haciendo por tenerlo hasta lo más profundo de su boca y sus mejillas ahuecadas que lucian aún más tentadoras con ese tono carmesí que tenía por lo caliente y excitado que de seguro estaba por estar haciéndole una mamada a su esposo.

- Voy a follar tu boca. - afirmó no pudiendo resistirse más, con el calor acumulándose en la parte baja de su estómago. 

Louis jadeo contra la polla del rizado, estando de acuerdo con eso, antes de sentir como los dedos de Harry se apretaban en su cabello y comenzaba a mover sus caderas contra su boca.

Harry no estaba siendo gentil o suave con él, como solía hacerlo algunas veces, pero no se quejaba en absoluto, la mayoría del tiempo le gustaba que fuera duro y autoritario, le gustaba saber que el rizado tan solo quería usarlo a él para su placer y que solo él podía darle eso.

Y él conoce tan bien el cuerpo de Harry, como todo él en general, que sabe cuando es el momento en que el rizado está por alcanzar su orgasmo, así que solo sigue moviendo sus labios por la longitud, encontrándose con los movimientos de cadera de su esposo, sin importarle lo sucio que pueda verse por estar siendo follado por la boca mientras aún ambos vestían sus impecables trajes.

Una descarga de semen golpea su garganta, sintiendo como la polla en su boca palpita mientras se vacía en su interior, disminuyendo muy poco su tamaño y ablandandose, antes de que la deje salir de su boca, asegurándose de tragar todo el semen, sabiendo lo mucho que eso le gusta al rizado y en el fondo a él también le gustaba demasiado.

- ¿Estoy perdonado? - preguntó Louis con un tierno puchero en sus labios, inclinando su cabeza hacia un lado, mientras Harry se vuelve acomodar el pantalón, admirando lo bien que luce su esposo con su cabello un poco alborotado ahora, mejillas rojas y ojos cristalizados.

Él definitivamente debió follar a Louis antes de la entrevista para que así el castaño no hubiera coqueteado con ese tipo, o quizás no, nadie más podía ser digno de ver destrozado de esa manera a Louis, solo él.

Y Louis debió de preocuparse o imaginarse algo cuando su esposo quitó la botella de whisky y su vaso de encima del píano para ponerlos en el suelo.

- Levántate. - ordenó Harry con la mirada oscura, ansioso por lo que tenía en mente.

- ¿Fui un buen chico? - preguntó Louis en un tono coqueto, tocando el pecho del rizado, una vez que éste igual se puso de pie.

- Fuiste un descarado coqueteando con ese idiota rubio. - murmuró en voz baja y profunda, colocando una de sus manos en su cuello, apretando ligeramente su garganta dejándolo sin aire por un segundo. - Una perra descarada, Lou. - agregó mirando los labios rojos e hinchados de su chico por el trabajo que le había hecho.

- Hasta Zayn y Liam coquetearon con él. No es para tanto. - se excusó el castaño haciendo otro puchero. - Vamos a follar, por favor - pidió.

Louis pensó que ahora Harry si podría llevarlo a la habitación y follarlo como corresponde, y realmente piensa que eso es lo que va a pasar cuando el rizado bajó su mano de su cuello y lo tomó del brazo.

Y para su sorpresa, Harry no lo lleva a la habitación, de hecho no dan muchos pasos; el rizado tan solo lo llevó del otro lado del piano.

- Estabas muy divertido riéndote de sus malos chistes, sonriendole, mojandote los labios y comiéndotelo con la mirada como toda una puta necesitada de una polla. - comentó Harry sintiendo aun esos celos en su pecho.

Antes de que Louis pudiera defenderse con algún comentario sarcástico, las manos de su esposo lo tomaron por la cadera y lo giró, dejandolo de espaldas a él.

- Si quieres tanto una polla, Louis. Voy a dártela. - murmuró Harry apretando sus caderas. - Pero no voy a follarte en la cama como una persona decente. Voy a follarte en donde yo quiera, como la perra sucia que eres. - sentenció, antes de llevar una de sus manos a la parte baja de la espalda del chico, obligándolo a inclinarse en el piano, pegando su pecho en la superficie fría y dejando su trasero elevado a su disposición.

- Harry. - gimió, no pudiendo creer que realmente vaya a ser follado sobre un piano.

- Ni siquiera considero que te merezcas ser preparado. - siguió hablando Harry pegando su polla al trasero del castaño, para que sintiera como ya estaba duro de nuevo. - Quizás debería romperte los pantalones y follarte sin piedad, sin importarme sí te lastimo. - murmuró comenzando a mover sus caderas contra él trasero de Louis simulando embestidas duras en seco. - ¿Tú que piensas, amor? - cuestionó dándole una bofetada en su trasero.

- Puedes hacer lo que quieras conmigo, Harry. - respondió en un gemido, no teniendo cabeza para pensar en sí debía o no ser preparado, quizás haya arrepentirse de eso más tarde, para ahora estaba tan jodidamente duro que solo quería tener la polla de Harry en su interior y que lo follara hasta correrse.

- Voy a ser considerado contigo. - habló el rizado llevando sus manos a la bragueta del castaño para abrirla y poder bajarle los pantalones con su ropa interior hasta los tobillos, dejándolo totalmente expuesto para él y llevó sus dedos a su boca para mojarlos.

Louis soltó un sollozo desde lo más profundo de su pecho cuando sintió como los dedos de su pareja entraron en su agujero, comenzando a estirarlo y abrirlo para estar preparado para él.

El calor era demasiado para el castaño e intento llevar sus manos a los botones de su saco para quitárselo, pero la mano pesada de Harry sobre su espalda lo detuvo.

- No. - gruñó el rizado. - Querías que te viera con tu lindo traje, ¿No? Así que voy a follarte con el puesto. - sentenció.

Louis asintió, tratando de sostenerse de algún lado, pero le era imposible, la superficie del piano era demasiado lisa como para hacerlo.

- Harry, por favor. - sollozó desesperado, comenzando a mover sus caderas contra los dedos de su pareja, follandose el mismo.

- Convenceme de meterte mi polla, Louis. - habló Harry dándole una bofetada más en su trasero. - Quiero oírte suplicar por mi polla, para que te folle. - murmuró si detener el movimiento de sus dedos en el interior de su chico. - No te escucho, amor. - demandó dándole otra nalgada.

- Follame Harry. - rogó en un sollozo débil. - Por favor, puedes correrte tan profundo en mi interior, seré bueno para ti, estoy tan apretado solo para ti. - habló con dificultad, sintiendose demasiado cerca del abismo.

Escuchó un jadeo bajo de parte del rizado antes de sentir como sus dedos abandonaban su interior, y se sintió agradecido y ansioso al escuchar como Harry abría su bragueta, seguido del sonido de su saco y pantalones cayendo al suelo.

Louis jadeo agudamente el nombre de su esposo, queriendo poder rasgar algo cuando las fuerte manos de su pareja se posaron en su caderas antes de embestirlo de una, entrando de golpe en él, haciéndolo sentir como sus piernas temblaron. 

Y como si no fuera suficiente el no poder sostenerse de nada y depender por completo de su pareja, Louis se sintió aún más vulnerable cuando el rizado tomó sus dos brazos y los llevó detrás de su espalda, manteniendolos ahí con una de sus manos, mientras que la otra estaba en su cadera para llevar el control de sus caderas.

Luego de la primera embestida el cuerpo de Louis ardía por el calor de la excitación, sumándole el calor por la tela de su traje que lo hacía sentirse aún más caliente, con el sudor cubriendo su cuerpo mientras era embestido con fuerza por su esposo, no teniendo más opción que pegar su frente al material frío del piano para sostenerse, jadeando en busca de aire con cada arremate que recibia.

Por su parte, Harry estaba un poco fuera de control, pero no podía culparse, cuando tenía a la persona más hermosa y sexy de todo el mundo inclinado en un piano dejándose follar por él de la manera que quisiera; se sentia algo enfermo de poder, más viendo como las piernas del chico estaban débiles y no podía sostenerse de nada con sus manos detrás suyo, mientras que él estaba apretando con fuerza la piel de sus caderas mientras se impulsaba con determinación en interior, sacandole sollozos y jadeos agudos cada vez que su polla golpeaba con fuerza su próstata.

Podía ver como el piano se movía ligeramente cada uno de sus movimientos de caderas, pero no le importaba en absoluto, lo único que estaba en su mente era follar lo más duro que pudiera a Louis para hacerlo recordar lo mucho que odiaba que fuera un coqueto con todos los entrevistadores que conocía.

Louis seguía sollozando, sintiendo como los testículos llenos de Harry golpeaban su trasero en cada arremate, no estando ni cerca del clímax, a diferencia de él que podía sentir como su orgasmo estaba formándose en la parte baja de su estómago en cada movimiento.

- Voy a correrme en ti. - habló Harry inclinándose sobre su espalda, yendo más profundo en Louis en esa posición, aumentando la fuerza de su embestidas. - Voy a correrme tan profundo en tu interior que para la próxima entrevista vas a seguir chorreando mi semen, recordando a quien le perteneces y lo que pasa cuando te portas mal. Y si no es así, voy a follarte antes de cada entrevista y te llenaré tanto con mi semen, que no van a quedarte ganas de ser un coqueto con los extraños. - sentenció profundizando cada una de sus palabras con sus embestidas.

Louis no creyó que eso fuera lo que necesitaba para alcanzar su orgasmo, gimiendo en alto con las palabras de Harry dándole vueltas en la cabeza, manchando parte de su traje y del piano con su corrida.

El ver al castaño correrse solo por su palabras hizo sentir aún más poderoso a Harry, que dejó libre las manos del castaño, para llevar las suyas a la curva de su cintura que estaba perfectamente ajustada y marcada gracias al traje; y Harry mentiría sí dijera que no era su parte favorita de ese saco, lo volvía loco lo bien que le ajustaba a la cintura, haciéndolo lucir aún más folllable de lo que ya era.

- Harry. Harry. Harry. - jadeaba el castaño sintiéndose hiper sensible post orgasmo, sintiendo como el rizado realmente lo estaba follando sin piedad, yendo más fuerte y profundo que antes, alzando un poco sus caderas en busca de su orgasmo.

Un fuerte jadeo de satisfacción atravesó los labios al castaño, a la par de que Harry gemia roncamente cuando su polla soltó una ola de semen, pero incluso asi, no detuvo su movimiento de caderas y siguió follando a Louis, soltando más semen con cada nueva embestida, vaciandose como nunca antes en el interior de su chico.

Louis no podía evitar gemir encantado cada vez que sentía como la polla de su esposo palpitaba en su interior con cada descarga; sintiendo como algo del semen comenza a bajar por sus muslos.

Después de un par de embestidas, Harry gimió complacido una vez que la última descarga de semen salio, llenando a su chico, dejándose caer exhausto encima de la espalda del castaño.

Se quedaron así por unos minutos, respirando con dificultad, tratando de recuperarse del todo el placer que habían tenido, con el sudor cubriéndolos a ambos, pero sobre todo al ojiazul.

- Espero que con eso te quede claro que no debes estar de coqueto. - susurró Harry dejando cortos besos en el cuello y nuca de su esposo.

Louis solto una tierna risa, mojando sus labios y gimiendo sensible una vez más, cuando sintió al rizado salir de su interior.

Podía escuchar como el rizado volvía a vestirse, mientras que él seguía sintiendose débil y sensible por la follada que había recibido.

- Acabas de arruinar un traje carismo, Styles. - se quejó el castaño, apoyándose en sus manos para enderezarse, jadeando en voz baja, cuando sintio como más y más semen salía de él, vaya que Harry se había tomado muy enserió lo que le había dicho.

- Creo que no fue lo único que arruine, Tomlinson. - dijo el rizado con una sonrisa burlona, acercándose al castaño para darle un pequeño golpe en su trasero antes de agacharse para vestir a su esposo.

- En eso debo darte la razón. - admitió Louis sonriendo en grande. - No creo poder caminar. - suspiró.

Harry suspiró igual, tomando el rostro de su pareja entre sus manos, antes de besarlo intensamente, transmitiendole todo su amor con ese beso.

- Ésto lo hago, solo porqué te amo muchísimo, pequeño descarado. - dijo el rizado, antes cargar al chico de forma nupcial.

- Y yo te amo mucho a ti, mi idiota celoso. - respondió Louis antes de besarlo una vez más.

El haber coqueteado con aquel australiano había sido una de sus mejores ideas, pues gracias a eso había tenido uno de los mejores sexos de su vida con la única persona de la que realmente le importaba tener su atención.

Y ésta definitivamente no iba hacer la última vez que Harry follara a un Louis coqueto.

______________________________

• Cuenta secundaria: blackswanalle

• Ig wattpad: justsope_ 
• Ig para ser besties: uarmynalle