Jisung caminaba por todo su apartamento, ordenando algunas cosas que había dejado tiradas el día anterior, ¿que si estaba nervioso? Demasiado, no sabía qué tipo de relación tenían ahora, era triste pensar en que tenían incluso algún tipo de relación, no les iba a durar mucho. Estaba evitando pensar al respecto, no quería ponerse a llorar, pero se le hizo imposible, sintió las lágrimas salir mientras limpiaba los muebles de la sala, deseaba que las cosas fueran menos complicadas para los dos, sabía que Minho también estaba sufriendo, quizás era el que sufría más de los dos, no quería ni imaginar cómo era el dolor por el que estaba pasando.

Limpió sus lágrimas con el dorso de su mano, terminando de limpiar los muebles, no podía dejar que Minho lo viera de esa forma, no iba a causarle preocupaciones en ese tiempo.

Minho sacó la maleta de su auto, dirigiéndose al apartamento del menor, había dejado las llaves de su apartamento con Changbin para que se quedara ahí, sabía que sería una semana en la que no saldrían para nada, pareciéndole la mejor idea del mundo.

Tocó la puerta y un muy sonriente Jisung lo recibió, dándole un fuerte abrazo.

ㅡOyeㅡrió Minho al sentir la fuerza con la que Jisung lo abrazabaㅡSolo me fui por una horaㅡle dijo antes de dejar un beso en la cabellera del menor.

ㅡ¡No importa, déjame!ㅡdijo Jisung sin soltarloㅡ¡Puedo pasar así todo el día si quiero y no tienes que quejarte!

Minho rió con ternura, Jisung parecía molesto, pero eso solo le causaba más ternura. No se iba a quejar por tenerlo pegado a él todo el día, claro que no.

Jisung se separó de Minho, mirándolo con el ceño levemente fruncido, pero el pelinegro de acercó a darle un suave beso, alejando cualquier signo de molestia en el menor.

ㅡOdio que sepas convencerme tan rápidoㅡdijo el menor con una sonrisa, viéndolo fijamenteㅡTenemos que hacer las compras, revisé lo que tengo y creo que debemos comprar más cosas.

Minho asintió, dejando su maleta en la habitación de Jisung, luego tomó la mano del menor para ambos salir. En el auto, Jisung se había apoderado de la música, empezó a cantar y rapear como loco, el pelinegro solo reía ante tal imagen, viéndolo por momentos sin distraerse del camino. El castaño estaba demasiado animado, haciendo saltar de felicidad el corazón de Minho, olvidando todos sus problemas, porque por ese momento se estaba permitiendo ser feliz con Jisung a su lado. No quería pensar en cómo serían las cosas después, no sabía cuanto tiempo iba a llorarle al único chico al que fue capaz de amar a pesar de sus signos zodiacales opuestos, eso ya ni siquiera importaba para ambos, cualquiera pensaría que eran extraños, que estaban enfermos, pero ellos no podían verlo de esa manera, la vida los juntó por alguna razón, y si al final esa razón era hacerlos sufrir no les importaba, no les importaba porque se conocieron, se amaron.

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ㅡAmor, ¿sigues enojado?ㅡpreguntó Minho entrando al apartamento después de Jisung.

ㅡEs que yo iba a pagar. ¡Mira todo lo que compraste!ㅡdijo el menor con molestia, cruzándose de brazosㅡTe daré una parteㅡsacó su billetera, buscando dinero.

ㅡNo aceptaré tu dineroㅡdijo con seguridad el mayor, guardando las comprasㅡNo me importa el berrinche que hagas. Pareces un niño.

ㅡ¡No soy un niño!ㅡexclamó con más molestia el castaño, haciéndolo reír.

ㅡPues ahora mismo pareces uno.

ㅡTe odio.

ㅡYo te amoㅡdijo Minho, dándole una sonrisa.

Jisung sintió su corazón latir con fuerza, solo esas palabras lograban tranquilizarlo, no sabía cómo es que Minho tenía ese peculiar poder sobre él.

Minho se acercó a él, rodeándolo con sus brazos y repartiendo besos en su cara, podía hacer eso todo el día sin cansarse, estaba tan enamorado de Jisung, estaba locamente enamorado de él, no le importaba aguantar sus berrinches, sus quejas, sus insultos, los aguantaría con mucho gusto, había aprendido a manejar eso y deseaba una vida entera junto a él.

El castaño se separó de Minho, sonriéndole como si no hubiera estado enojado hace unos minutos.

ㅡVeamos una películaㅡsugirió el menorㅡQuiero ver películas todo el día.

ㅡMe parece perfectoㅡlo besó con cariñoㅡPreparemos algo de comer y ponemos algo.

Jisung asintió en aprobación, cualquier cosa que hacía junto a Minho le parecía el plan perfecto, todo junto a él era perfecto.

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El miércoles, Jisung y Minho decidieron dormir hasta tarde, estuvieron jugando y bebiendo hasta la madrugada, solo los dos. No pasaban aburridos, siempre encontraban algo que hacer.

Jisung se despertó de golpe al sentir algo golpear su cara, era el brazo de Minho. Lo quitó con suavidad para no despertarlo, pero Minho se dio cuenta, acercó al menor a su cuerpo, a modo de que éste quedará sobre él. Lo miró con dulzura, quitando los mechones que caían en su frente.

ㅡBuenos díasㅡdijo con voz ronca el mayor, viendo a Jisung que seguía un poco sorprendido.

ㅡNo creo que siga siendo temprano- respondióㅡDéjame salirㅡempezó a removerse, pero el brazo de Minho lo sostenía con fuerza por la cintura.

ㅡMejor dame un besoㅡpidió divertido el pelinegro, parando los labios para que Jisung se acercara.

ㅡ¡No! La boca aún te apesta a alcohol. Lávate los dientes y lo pensaréㅡdijo con exageración el menor, haciendo reír a Minho.

ㅡ¿Y? Tú también apestas a alcohol y no me quejo.

ㅡAy no, déjame ir a lavarmeㅡse tapó la boca con horror.

ㅡBien, vete de aquíㅡdijo Minho, tirando a Jisung a un lado, escuchando sus quejidos.

ㅡ¡Eres un salvaje!ㅡexclamó el castaño, viendo que Minho no dejaba de reírㅡNo le veo lo gracioso.

ㅡEs porque no viste como saliste volando.

Jisung hizo un puchero que Minho rápidamente besó, pero lo apartó, haciendo una mueca por el fuerte olor a alcohol. Minho se hizo el ofendido, pero no estaba molesto, simplemente le gustaba molestarlo.

ㅡNunca volveré a darte un besoㅡdijo el pelinegro, levantándose de la cama.

ㅡSolo pedí que te lavaras los dientes.

ㅡA eso voyㅡrespondió caminando hacia el baño de la habitaciónㅡPero no quiere decir que voy a dejar que me beses.

ㅡPero…

ㅡPero nadaㅡfinalizó, enseñándole la lengua como si estuviera pequeño.

Jisung hizo un gesto de sorpresa, ¿en serio se había molestado por eso? Solo era un beso.

ㅡLuego dice que yo soy el niñoㅡmurmuró Jisung desde su cama, viendo la puerta por la que Minho entró.

Unas horas después, ambos se encontraban cocinando algo para la cena acompañados de música suave, Minho había mantenido su palabra de no darle ni un solo beso, aunque había intentado que se lo diera. Jisung se sentía un poco frustrado, no era fácil estar con Minho sin estarlo besando como quería.

Jisung dejó a un lado lo que estaba haciendo con frustración, dirigiéndose al mayor que estaba demasiado concentrado en cocinar.

ㅡMin, ¿en serio no me vas a dar ni un solo besito?ㅡle preguntó con un puchero.

Minho se giró a verlo, muriendo de ternura y de ganas de besarlo, se veía extremadamente tierno, pero iba a castigarlo un poco más por haberle negado un beso momentos antes.

ㅡSi, en serioㅡle sonrió sarcásticamente, regresando a lo que estaba haciendo.

Entonces a Jisung le tocó recurrir a su arma secreta: la seducción.

ㅡMinho~ㅡcanturreó el menor, llamando la atención del contrarioㅡ¿Me ayudas a hacer esto? No sé cómo hacerloㅡhizo un puchero mientras señalaba la tabla de picar con algunas zanahorias mal cortadas.

Minho se acercó obedientemente hacia donde el menor le señalaba, poniéndose detrás de éste para enseñarle como hacerlo. En ese momento Jisung aprovechó y pegó su trasero a la entrepierna del mayor, haciendo como si fuera accidental, lo miró con inocencia y regresó la mirada hacia lo que Minho le estaba enseñando, pero la verdad es que no estaba prestando ni un poco de atención.

Jisung volvió a pegar su trasero a Minho, pero esta vez empezó a moverse con disimulo, no sabía qué expresión tenía el mayor, pero de seguro le estaba gustando porque no se opuso. Movió sus caderas con más fuerza, pegándose totalmente a Minho, sintió como las manos de éste se posicionaban en cada lado de su cadera para hacer más presión.

ㅡEsto es jugar sucio, ¿lo sabías?ㅡdijo el pelinegro con su cabeza en el hombro del menor, hablándole al oídoㅡ¿Tanto lo quieres?

Jisung sonrió con satisfacción, sabía que Minho no podía resistirse por tanto tiempo. Y a esas alturas, ambos tenían una muy marcada erección.

ㅡSolo quería un besitoㅡdijo Jisung, girándose hacia el mayor, pasando sus brazos alrededor del cuello de éste.

ㅡEs trampa, pero lo aceptaréㅡsusurró Minho sobre los labios de Jisung, sin tocarlos.

Con rapidez, Minho subió a Jisung en una parte desocupada de la encimera de la cocina, quedando a la altura perfecta, se posicionó entre sus piernas y empezó a besarlo con deseo, haciendo sonreír con suficiencia al menor, al final del día, si pudo conseguir un beso de Minho, un beso y mucho más.

[♉♌]

El viernes fue una mañana tranquila, la pareja pasaba los días sumidos en su felicidad, llenándose de amor, de cariño y tranquilidad. Pero ambos en sus momentos de soledad, sentían que el mundo se le venía encima, la realidad los estaba golpeando poco a poco, deseando que los días fueran más largos o que el tiempo se detuviera, cosas que se quedarían como lo que son: deseos.

Minho y Jisung se encontraban comiendo una pizza en el cuarto del menor, sentados en el suelo alfombrado de éste, escuchando la música favorita de Jisung. Todo era perfecto, pero había algo que Jisung y Minho no habían hablado a detalle, y era sobre la partida del pelinegro. No habían querido tocar el tema porque sabían que se pondrían triste, pero tarde o temprano debían hacerlo.

ㅡMin, hay algo que quiero decirteㅡempezó a hablar Jisung, dejando su porción de pizza en la caja.

ㅡ¿Sobre qué?ㅡpreguntó, imitando la acción del menor.

ㅡEs sobre el domingo… ¿A qué hora te irás?ㅡpreguntó, viendo fijamente al mayor tensarse.

ㅡEn la tardeㅡrespondió con simpleza, viendo tristeza en sus ojosㅡBebé, ven aquí, no te pongas asíㅡlo abrazó, sosteniendo su cabeza sobre su pecho.

ㅡ¿No me dirás por qué te irás?ㅡJisung esperó por un momento, sin escuchar respuestaㅡEstá bien… No preguntaré de nuevo.

ㅡ¿Qué tal si vamos al cine?ㅡsugirió de repente.

ㅡ¿Ahora?

ㅡClaro, está tempranoㅡbesó su frente con mucho cariño para luego levantarse y salir del apartamento.

Al regresar más tarde, quedaron dormidos de inmediato, abrazados como todos los días, Jisung sintiéndose tan cálido y Minho sintiéndose amado.

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ㅡ¿Cómo me veo?ㅡpreguntó Jisung frente a Minho que lo miraba desde la cama.

ㅡTe ves tan caliente que te haría mío de nuevo justo ahoraㅡrespondió, viéndolo de pies a cabeza.

ㅡMin, ya vamos tarde justo por eso.

ㅡ¿Es solo mi culpa? Tú me provocaste.

ㅡSilencioㅡse sonrojó levementeㅡSolo dime cómo me veo.

ㅡTe ves precioso, igual que siempreㅡrespondió con cariñoㅡAsí que vamos ya, porque como dijiste, vamos tardeㅡdijo, dándole una nalgada al menor, riendo mientras salía de la habitación.

ㅡ¡Oye!ㅡse sorprendió, sonriendo segundos después.

Llegaron a la casa de Félix ya que ahí sería la fiesta (cómo siempre). Al entrar encontraron rápidamente a Félix y Changbin que se encontraban ya bailando con mucha euforia. Se dirigieron a la cocina, encontrándose con Hyunjin y Jeongin besándose apasionadamente.

ㅡ¿Saben que hay por lo menos tres habitaciones vacías, cierto?ㅡinterrumpió Jisung a la pareja.

Hyunjin se alejó de su novio al escuchar la voz de Jisung, Jeongin se sentía un poco avergonzado porque sus amigos los vieron. Luego de eso, se quedaron hablando un rato hasta que Jeongin dijo que quería bailar, alejándose de Minho y Jisung.

El reloj marcaba casi la media noche, la fiesta se había puesto más ruidosa, así que Jisung salió de la casa, yendo con Minho hacia el patio en donde había menos gente, esa noche la luna brillaba con más intensidad.

Era la noche perfecta.

ㅡJisungㅡllamó Minho, parándose frente al menor, tomando ambas manos de ésteㅡEste día te ves igual de perfecto que el día en el que te conocí. Quisiera poder explicar con palabras todo lo que significas para mí, pero es imposibleㅡle sonríe con cariño, sobando su mejilla con suavidadㅡMe has hecho demasiado feliz todo este tiempo, a pesar de todo, sabes que te amo demasiado. Mereces mucho más de lo que imaginas, incluso más de lo que yo podría ofrecerte. Eres lindo, inteligente, muy talentoso… También eres berrinchudo, perezoso, quejumbroso y a veces manipuladorㅡrió sin quitarle la vistaㅡPero eso no quita lo asombroso que eres. Te amo y lo haré por mucho más tiempo, eres mi primer amor, mi primera vez, mi primero en muchas cosas y estoy agradecido de que así seaㅡvolvió a sonreír hacia el menor que había empezado a llorar.

ㅡ¿Te estás despidiendo, verdad?ㅡdijo con la voz quebrada el menor, sintiendo que Minho limpiaba sus lágrimasㅡTe amo tanto, gracias por estar a mi lado desde el inicio, incluso cuando todo empezó a irse a la mierda. Estoy tan agradecido por amarme tal y como soy, sin ponerle atención al hecho de que somos incompatibles. No hay nada que quisiera más que te quedaras conmigo, eres lo mejor que tengoㅡlloró con mucho sentimiento. Odiaba las despedidasㅡTe amo, Minhoㅡfinalizó, dándole un beso cargado de amor, anhelo y con el deseo de quedarse así por mucho tiempo.

Llegó la media noche, todos en la casa estaban repartiendo abrazos, incluso las personas que no se conocían. Minho y Jisung decidieron abrazarse por más tiempo.

Tiempo después, buscaron a sus amigos para celebrar junto ellos.

Al siguiente día, Changbin y Minho emprendieron su viaje de regreso, pensando en que no volvería a ver a sus amigos ni a Jisung durante mucho tiempo, sintiendo la tristeza esparcirse en todo su pecho con solo recordar su última noche juntos.

Definitivamente iba a llorarle por muchísimo tiempo, Jisung fue lo mejor que le había pasado y lo había dejado ir por su bien, pero eso era lo importante, siempre Jisung sería su prioridad, porque era la persona que más amaba en su vida.

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¿Qué les pareció? Decidí hacer este capítulo más enfocado en ambos porque casi no hubieron momentos de ellos juntos a lo largo de la historia.

Esta historia me está quedando más larga de lo que creía😂

Espero que les haya gustado💖