Minho seguía mordiendo la uña de su pulgar mientras esperaba a que Ryunjin saliera de clases. Ideó algunas maneras en la que podría decirle lo que había pasado, pero ni siquiera él estaba convencido de lo que le diría, no es como si hubiera una buena forma de confesar una infidelidad, las consecuencias serían catastróficas, lo sabía, sus padres lo iban a castigar, estarían decepcionados de él y nunca iban a dejar de repetírselo.

A lo lejos, vio como la pelinegra se acercaba con una gran sonrisa, ¿por qué no podía gustarle como debía? Todo parecía muy confuso, muchos quisieran estar en su lugar, pero él lo había arruinado.

ㅡVamos, Honnieㅡtomó su mano y entrelazó sus dedos.

No se sienten cómodos como los de Hannie, pensó.

Apartó ese pensamiento, y sin darse cuenta, ya iban rumbo a su casa en el auto de sus padres, escuchando la voz de Ryujin demasiado lejana, no estaba prestando atención. Sus nervios iban incrementando mientras más se acercaban a su hogar, dándole menos tiempo para idear algo que no vaya a sonar tan brusco.

Al estar en la entrada, sus ojos se posaron en dos chicos que iban saliendo de la casa de los Han, logró reconocerlos pocos segundos después, recordando que ya los había visto algunas veces con Jisung. Una punzada de tristeza apareció en su pecho, se sentía un poco envidioso, él quería poder llegar como ellos y pasar el resto de la tarde despreocupado, sin padres que estuvieran encima casi siempre, regañándolo. Soltó un suspiro y se adentró a su hogar; estar ahí le parecía deprimente, las paredes demasiado blancas para su gusto, muchas fotos familiares en las que tenían sonrisas falsas, todos estantes llenos de diplomas y logros de su maravilloso hermano. Pero nada de él, porque sus calificaciones o logros nunca eran suficientes a pesar de ser muy buenos.

ㅡEstaré con Ryujin en mi habitaciónㅡavisó el castaño a su madre que estaba en la cocina preparando el almuerzo.

ㅡNada de puertas cerradas, Minho.

Soltó un bufido y subió las escaleras siendo seguido por la pelinegra, odiaba que le repitieran lo mismo siempre, estando solo o en compañía, nunca dejaban de decirle las mismas reglas. Al entrar a la habitación, quiso alargar el tiempo mientras fingía que arreglaba algunos libros en su escritorio en total silencio, pero la chica estaba muy impaciente esperando a que su novio dijera algo, pero de un momento a otro, se había quedado parado viendo hacia la casa de enfrente, poniéndola un poco molesta porque sabía que seguía entablando conversación con Jisung, y eso no le gustaba, porque las pocas veces que Minho decía algo de su vida, solo mencionaba a Jisung, nunca dejaba de repetir lo bien que se sentía en su compañía. Al principio, le pareció entendible, eran amigos y quizás, era el único amigo cercano que tenía, pero luego de conocerlo en persona, todo le pareció fuera de lo normal, empezando por la imagen de Jisung y por su sexualidad. A Minho no parecía molestarle en lo absoluto, lo cual le parecía extraño porque los Lee se la pasaban diciendo cosas muy malas de él, no entendía por qué su novio parecía estar de acuerdo con todo lo que su mejor amigo hacía o decía, como si por momentos olvidara lo que está bien y lo que no.

ㅡEntonces, ¿de qué quieres hablar?ㅡtomó asiento en la orilla de la cama, a la expectativa.

Minho vio por última vez la ventana de su vecino, viendo únicamente lo que creía ser su silueta de un lado a otro. Se giró hacia Ryujin y se sentó a su lado, calmando su nerviosismo.

ㅡYo... Es algo serio, y de verdad no espero que lo entiendas o que debas reaccionar de buena manera a lo que voy a decirteㅡempezó, sintiendo una terrible sensación de tristeza y de culpabilidad al ver la atenta mirada de la chica en él.

ㅡClaro, dimeㅡdijo casi en voz baja, asustada por la expresión del castaño, nunca lo había visto tan nervioso y distante.

ㅡYo... ㅡmordió su labio inferior, dudando en ese momento. Recordó ese preciso instante en el que se atrevió a besar a Jisung, sintiendo de nuevo un cosquilleo en su estómago que no hacía más que alterarloㅡYo te engañé con alguien masㅡsoltó directamente, sintiéndose incapaz de mirarla a los ojos.

ㅡ¿Qué?ㅡsusurró, su corazón acelerándose-No te creo.

ㅡNo estoy mintiendo, simplemente pasó y entiendo las consecuencias que vienen con mis acciones, no puedo escapar de eso.

ㅡPero... ¿en qué momento? Pasamos juntos casi todo el tiempo.

Minho suspiró, tenía muy claro que no iba a confesar que se había besado con su mejor amigo, mucho menos que a pesar de la culpabilidad, lo había disfrutado, eso se quedaría con él para siempre.

No sabía ni siquiera qué responderle, solo quería que las cosas pasarán rápido y lo dejara solo para poder pensar todo con calma.

ㅡDebemos terminar.

ㅡ¡Eres un idiota!ㅡexclamó con furia, levantándose de la camaㅡ¿Con quien fue? Al menos dime eso.

ㅡNo, eso no importaㅡse negó, repitiéndose que no diría nada que lo perjudicara más.

ㅡClaro que me importa, ¡solo dime quien fue!

Minho la miró por fin, ella no estaba llorando, simplemente estaba ahí, muy enojada, tratando de no elevar tanto la voz para que su madre no apareciera, su rostro un poco rojo por el enojo y sus ojos viéndolo con repudio.

ㅡCreo que es mejor que te vayas.

ㅡ¿Hiciste algo con Jisung?ㅡpreguntó, viéndolo a los ojos, buscando respuestas en ellos y fácilmente las encontró. Empezó a reír, no parecía ella en lo absoluto, sus emociones estaba mezclándoseㅡAcabas de delatarte, no eres capaz de aceptarlo en voz alta, pero tu expresión lo dice todo.

Entró en pánico, no sabía cómo reaccionar, como fingir que no había sido descubierto, simplemente hubiera hecho como si nada, pero no pudo evitar tensarse y cambiar su expresión, ¿por qué ella había llegado a esa conclusión?

ㅡHe visto como lo miras. Siempre hablando de él, viéndolo de manera disimulada cuando lo encuentras en la calle, abrazándolo de esa manera tan... Íntima, incluso como le hablas, ¿es por él, cierto?

ㅡNo sé de qué hablas, no seas ridículaㅡfue ofensivo por primera vez, pero al verse expuesto no pudo contenerse-Estás inventando todo.

ㅡ¿Acaso eres gay también? Dios, que ascoㅡretrocedió, viéndolo de manera despectiva.

ㅡ¡No es así! Nada de lo que dices es ciertoㅡtrató de defenderse, pero nada lógico salíaㅡClaro que no soy gay, ambos sabemos que eso no está bien, ¿cómo podría hacer algo como eso?

Ryujin rió, negando con la cabeza por la manera en la que inútilmente se defendía cuando todo era más que obvio, no era estúpida, conocía perfectamente qué significaban esas miradas entre ambos, lo sabía porque él no la miraba de la misma manera, con adoración, cariño y se atrevía a decir que con amor, ella solo recibía miradas indiferentes, frías o simplemente no la miraba.

ㅡNiégalo lo que quieras, me das asco, al menos si hubiera sido con otra mujer, no fuera tan humillante.

ㅡVeteㅡdijo casi en voz baja, sintiéndose incapaz de seguir escuchando el montón de tonterías que le decía, tonterías que muy en el fondo eran ciertas, pero no quería aceptarlo, estaba mejor de esa forma.

ㅡEsto no se quedará así, pero no te preocupes, no le diré nada a tus padres, ellos se darán cuenta porque no vas a poder esconder tu obvia homosexualidad por mucho tiempoㅡsoltó molesta, saliendo de la habitación a paso rápido.

Minho volvió a sentarse en la cama, revolviendo su cabello en clara señal de frustración, ¿ahora qué? No le quedaba de otra que enfrentar a sus padres también. Estaba asustado, muy asustado, quiso pensar en el lado positivo de las cosas, al menos había sido sincero, también por fin había terminado con Ryujin, aunque la manera no fue la mejor, estaba consciente de que lo que había hecho no tenía perdón.

Se acercó con lentitud hacia su ventana, apartó las cortinas y vio como la pelinegra salía de su casa, notándose verdaderamente molesta.

ㅡPensé que Ryujin iba a quedarseㅡentró su madre a la habitación, viéndolo con seriedad.

ㅡDijo que tenía cosas que hacer en casaㅡmintió, preguntándose de donde había salido tan rápido esa respuesta, la mayoría del tiempo se le hacia difícil decir una que otra pequeña mentira que al final solo lo hacían sentir culpable.

ㅡDebo salir, la comida está hechaㅡavisó, caminando hacia la puertaㅡNo hagas cosas que sabes que no debes hacer, si mientes, Dios no va a perdonarte y serás un mal hijo, ¿entiendes?

Sabía por qué lo decía, nunca confiaba totalmente al dejarlo solo porque estaba la posibilidad de que fuera con Jisung, y siempre recurría a esas amenazas que últimamente solo lo hacían sentir molesto en lugar de tenerle miedo.

Asintió sin mirarla, ya estaba cansado.

La mujer salió de la habitación y se fue rápidamente de la casa, prometiendo no tardar tanto.

Luego de unos minutos pensándolo, creyó que lo mejor era ir con Jisung y aclarar todo, tal vez de esa forma dejaría de sentirse tan mal consigo mismo. Necesitaba pedirle disculpas, además, quería desahogarse por lo de Ryujin.

Salió por la puerta principal y tocó la puerta de los Han, pero otra vez, nadie atendió. Sabía que Jisung estaba ahí porque vio a sus amigos salir, pero no entendía por qué no estaba respondiendo. Pensó de nuevo en la posibilidad de entrar como siempre por su ventana, siendo una gran idea para esos casos, a lo mejor, estaba tomando una ducha o estaba con sus audífonos puestos y por eso no atendía. Se encaminó hacia la parte trasera de la casa y subió como normalmente hacía hasta llegar al balcón.

Se quedó quieto un momento antes de entrar, había visto la silueta de Jisung desde su ventana, pero no sabía qué hacía, tampoco quería interrumpirlo en algo que era privado para él, aunque la idea de verlo de nuevo no le aterraba tanto como la última vez.

Justo cuando decidió acercarse, escuchó un suave quejido al interior de la habitación, y no pudo detenerse a sí mismo de espiar un poco, otra vez, ya ni siquiera pensaba en sí estaba bien o mal, la curiosidad que tenía era mucho más grande.

Apartó un poco la cortina y se asomó con cuidado; abrió los ojos con sorpresa, su respiración se cortó por un instante ante la escena frente a él, sintiendo una inexplicable ola de celos en su interior al mismo tiempo que un cosquilleo en su estómago se hacía presente, un cosquilleo que hizo su piel erizarse.

Era Jisung con otro chico.

☆.。．†：＊・゜☆．。†．：＊・゜☆．

Jisung estuvo demasiado sorprendido al recibir un beso por parte de Chan, no entendía cómo habían pasado de hablar sobre la escuela hasta su habitación, una cosa no tenía nada que ver con la otra. Se encontró demasiado sorprendido al haber logrado eso sin siquiera coquetearle.

ㅡ¿Crees que no me doy cuenta de cómo me miras desde el primer día?ㅡle había dicho al peliazul antes de besarlo por segunda vez, respondiendo a su evidente sorpresa.

Por nada del mundo se imaginó que ese amable y simpático chico resultara ser tan atrevido y directo, pero él no era nadie para juzgarlo, le encantaba ese atrevimiento.

Chan lo sostuvo con sus brazos, las piernas del menor alrededor de su cadera, besándolo con tanta pasión que a Jisung se le dificultaba seguirle el ritmo.

Lo recostó sobre su cama y rápidamente se puso entre sus piernas, besándolo con fuerza mientras sus manos viajaban hacia su entrepierna. Jisung gemía por lo bajo con cada toque, sintiéndose maravillado ante el montón de sensaciones. ¿Hace cuánto no había estado realmente con un chico? Ni siquiera lo recordaba, había pasado ya un tiempo. Su cuerpo respondía automáticamente, temblando ante le toque de los labios del peliblanco en su cuello, haciéndolo jadear suavemente.

ㅡSe siente... Tan bienㅡcerró sus ojos con fuerza al sentir el miembro erecto de Chan hacer fricción sobre el suyo aún con la ropa puesta.

Chan sonrió ladino, ejerciendo fuerza en sus movimientos mientras sobaba la cintura del peliazul por debajo de la camisa de uniforme, sintiendo su piel tan suave.

Minho miraba con atención todo lo que sucedía en la habitación de su mejor amigo sin saber exactamente por qué se sentía tan celoso y atraído al mismo tiempo.

¿Qué se sentirá hacer eso con Jisung? ¿Tendré la oportunidad de besarlo otra vez? Pensó. Su entrepierna empezó a doler, buscando atención. No supo qué más hacer en ese momento, quería irse, pero el morbo por ver hasta donde llegarían era predominante.

Segundos después, con esfuerzo llegó a la conclusión de que debía apartarse, estaba actuando mal, invadiendo la privacidad de su mejor amigo. En su intento de alejarse sin apartar la mirada del par, tropezó con una pequeña maceta, haciéndolo caer de golpe.

Entró en pánico, antes de caer había agarrado las cortinas con la intención de no tocar el suelo, dejándolas abiertas.

Jisung levantó la cabeza tan pronto escucho ruido en su balcón, encontrándose con Minho sentado en el suelo mientras limpiaba la tierra sus zapatos. Chan se apartó de Jisung muy confundido, preguntándose a sí mismo quién era ese chico.

ㅡ¿Minho?ㅡsubió la cremallera de sus pantalones y colocó los botones del mismo antes de acercarse.

El castaño se sonrojó fuertemente bajo la mirada del peliazul, buscando una buena explicación.

ㅡ¿Quién es él?ㅡse acercó, Chan, viéndolo directamenteㅡ¿Lo conoces?

ㅡSi, es mi mejor amigoㅡrespondió con naturalidad.

ㅡYo, eh, solo pasaba... Quería hablar contigo y... Nadie atendió la puerta, así que pensé que... que podría subir hasta aquí y me tropecéㅡexplicó de manera entre cortada, aún sin poder mirarlo.

Jisung asintió para sí mismo, teniéndole la mano para ayudarlo a levantarse. Minho la tomó rápidamente y limpió sus pantalones, viéndolo por fin a los ojos.

ㅡAsí que... ¿Cuándo no abren la puerta de la casa subes directamente hasta aquí sin saber qué podría estar haciendo tu mejor amigo?ㅡpreguntó el peliblanco, cruzándose de brazos. Estaba un poco irritado, había interrumpido su momento con Jisung, y dudaba que pudieran retomarlo.

ㅡPues... Siㅡrespondió nervioso.

Jisung suspiró, notándolo demasiado avergonzado.

ㅡ¿Cuánto tiempo llevas ahí parado?ㅡsiguió preguntando, Chan.

ㅡAcabo de venirㅡmintió.

Se le estaba haciendo un mal hábito decir pequeñas mentiras.

ㅡEntra, Minhoㅡlo dejó pasar, intentado creer en su palabra, porque sería demasiado vergonzoso para él si lo hubiera visto de esa forma con Chan.

Chan suspiró, entendiendo que de ninguna manera, Jisung iba a prestarle atención a lo que estaban haciendo. No estaba molesto, solo un poco irritado, pero no era culpa de nadie, Minho no sabía que ellos estaban ahí. Acomodó su camisa y decidió que era mejor irse, sentía un poco tenso el ambiente, haciéndolo sentir incómodo.

ㅡCreo que mejor me voy.

ㅡ¿Tan rápido?

Chan sonrió de manera cálida, como si nada.

ㅡTe veo mañana en la escuelaㅡrevolvió el cabello azul de Jisung y salió de la habitación, cerrando la puerta tras él.

El silencio reinó por un momento hasta que escucharon la puerta principal cerrarse. Ninguno sabía cómo empezar, ambos tan tímidos y nerviosos.

ㅡPerdón por espantar a tu amigoㅡquiso sonar natural, pero su tono de voz salió diferente, como si estuviera molesto por algo, pero Jisung no lo notó del todo.

ㅡE-Está bienㅡtomó asiento en la cama, juntando sus manos con los nervios a flor de piel.

ㅡJisung, lo siento. No estaba hablando en serio el viernes. Por favor, entiéndemeㅡlo miró con súplica, yendo directamente al punto, buscando las palabras adecuadas para seguir hablando, pero estaba tan nervioso por todo que no sabía formular bien las palabras en su cabeza.

El peliazul rió incrédulo de manera automática, pero al notar la expresión de Minho, se detuvo, tomando una posición más en calma. No tenía por qué ser grosero también, aunque aún se sentía un poco dolido al respecto, él creyó que ser gay no era algo que lo molestara hasta el punto de decirle que eso estaba mal, ¿estaba mal para quien? ¿para su familia homofóbica? Claro que si, ellos eran los peores, siempre viéndolo de menos, diciéndole que se iba a quemar en el infierno, haciéndolo reír con estupideces así, pero tenía la esperanza de que Minho no pensara de esa manera, que por ser amigos no tuviera problemas con eso, pero al parecer, si los tenía, solo que no lo decía.

ㅡEstaba asustadoㅡagachó la mirada hacia sus pies, avergonzado por recordar cómo se habían besado esa vezㅡPor favor, escúchameㅡlo miró de nuevo, esperanzado en no obtener una mirada de rechazo por parte del otro.

ㅡAdelante, habla.

Minho suspiró, sintiéndose tan pequeño ante la atenta mirada de Jisung.

ㅡNo creo que seas diferente a mi, Jisung, sabes que nunca he tenido problemas con tu sexualidad, te he querido de la misma manera desde que me lo dijiste, no ha cambiado nada...

ㅡPero...

ㅡPero sabes también como he sido criado toda mi vidaㅡvolvió a agachar la mirada, todo era demasiado complicado de explicarㅡA veces no sé de qué lado estar, en mi escuela todos dicen que eso es lo peor, que es una enfermedad, que Dios no va a perdonarlos. En mi familia es igual, sabes cómo son mis padres, cada vez que te miran hacen un comentario al respecto y me siento como un idiota por no poder defenderte como debería. Me siento en el medioㅡlevantó la mirada hacia Jisung que se veía sorprendido por decir aquelloㅡPero luego te veo y sé que no eres una mala persona, eres incluso mejor que todos los que me rodean que no hacen más que criticar a todos por no seguir nuestras creencias, y sé que hacer eso tampoco está bien, solo que ellos no lo entienden... No creo que seas diferente, no creo que esté mal que te gusten los chicos, pero de alguna manera siento que está mal para mí mismo.

ㅡ¿Por qué tendría que estar mal para ti?ㅡtomó su muñeca y lo sentó a su lado, notándolo cada vez más nervioso.

ㅡPorque soy yo, porque yo no tengo permitido eso.

ㅡNo es cuestión de permisos, no es como que yo sí pueda y tú no, es algo que no se elige de esa manera.

ㅡTengo miedo, Sungㅡdijo casi en voz bajaㅡDe verdad lo siento, no quise que sonara como si fueras alguien diferente, eres un gran chico y eso lo tengo muy claroㅡle sonrió débilmente, su corazón latiendo muy rápido por la manera tan dulce en la que su mejor amigo lo miraba.

Jisung dejó de lado su enojo y orgullo, escucharlo hablar lo hizo entender que también era muy complicado para él aceptar su sexualidad, claro que lo entendía, su familia no era muy fácil, y que al menos haya ido hasta a él a disculparse a pesar de todo, le demostraba que Minho era diferente en cuanto a su forma de pensar, solo que estaba confundido.

ㅡ¿Por qué me besaste?ㅡse atrevió a preguntar, sintiendo el cuerpo de Minho tensarse a su lado.

Minho suspiró, buscando las palabras para dar una respuesta, pero ni siquiera él estaba totalmente seguro del por qué, o quizás si, pero le daba miedo decirlo en voz alta y que todo a su alrededor se complicara más.

ㅡNo lo sé, de verdadㅡtapó su rostro con sus manos, sintiendo de nuevo sus ojos cristalizarseㅡSolo quise hacerlo. Cuando me regresaste el beso, no estaba pensando con claridad y me dejé llevar.

ㅡ¿Sentiste algo diferente en algún momento?

ㅡJisung...

ㅡEstá bien, tranquiloㅡle sonrió de nuevo, limpiando las pequeñas lágrimas que se habían escapado de los ojos del castaño, lo mejor era no presionarlo, en algún momento tendrá que aclarar sus propios sentimientos, así que por el momento, solo debía apoyarloㅡ¿Puedo abrazarte?

Minho asintió rápidamente, dejando que Jisung se pegara a él y lo rodeara con sus brazos. De alguna manera, sentía eso demasiado reconfortante, sus problemas desaparecían en ese instante, enfocándose únicamente en la sensación de ser abrazado por su mejor amigo.

ㅡGracias por escucharme.

ㅡTe quiero mucho, Minho.

ㅡY yo a tiㅡcerró sus ojos, queriendo permanecer de esa manera por mucho tiempo, porque estar con Jisung siempre se sentía diferente.

Minho se sentía bien.

☆.。．†：＊・゜☆．。†．：＊・゜☆．

Félix entró junto a Hyunjin con mucho cuidado a la casa de los Han, al llegar a la sala, notaron que no había nadie. Se sonrieron con complicidad y supusieron que Jisung había logrado llevar a Chan a su habitación, pero notaron un detalle muy específico.

Solo estaban las cosas de Jisung, las de Chan no.

Félix golpeó su frente con la palma de su mano, llegando a la conclusión de que algo había pasado para que Chan tuviera que irse. Subió las escaleras en dirección a la habitación de su amigo, pero voces en el interior lo detuvieron de abrir bruscamente la puerta, se pegó a ésta y trató de escuchar; esa voz para nada era la de Chan, no escuchaba exactamente qué estaba diciendo, pero sabía que no era Chan.

ㅡ¿Qué pasó?ㅡapareció Hyunjin a su lado, susurrando.

ㅡCreo que Chan se fue porque Jisung trajo a otro chico.

ㅡNo creo que haga algo como esoㅡnegó el más altoㅡ¿Y si es Minho?

Félix lo consideró, y eso tenía mucho más sentido, así que asintió.

Jisung escuchó los murmullos tras la puerta y rió, sabiendo perfectamente que eran sus amigos.

ㅡMis amigos están aquí, ¿quieres conocerlos?

ㅡClaroㅡsonrió Minho, peinando su cabello con los dedos sin levantarse de la cama. No iba a negar que se sentía un poco tímido.

Jisung abrió la puerta de golpe, dejando ver rápidamente al par de chicos que disimulaban que no estuvieron ahí desde hace un rato.

ㅡOh, Jisung, justo veníamos a ver qué hacíasㅡhablo Félix, fingiendo que acababan de llegar.

ㅡAjáㅡse hizo a un lado, dejándolos entrar a su habitación.

ㅡChicos, él es mi mejor amigo, Minhoㅡlo presentó, ambos saludando con la mano de manera amableㅡMinho, ellos son Hyunjin y Félix, amigos de la escuela.

ㅡEs un gusto conocerlosㅡdijo con amabilidadㅡJisung habla mucho de ustedes.

ㅡÉl también habla mucho de ti, hasta siento que somos mejores amigosㅡHyunjin se sentó a su lado, sonriéndole más de la cuenta.

ㅡQue bien... ㅡse sintió apenado.

ㅡYa, quítate de ahíㅡrió Jisung, rescatando al castaño de esa situación.

Los cuatro estuvieron hablando mucho tiempo de cualquier cosa, pero nadie tocó el tema de Chan, no podían con Minho ahí enfrente. Cuando una hora había pasado, Minho le avisó a Jisung que debía irse, en cualquier momento su madre llegaría y si no lo encontraba en casa, sería un enorme caos.

Se despidió con amabilidad de Félix y Hyunjin, y caminó hasta el balcón de la habitación junto a Jisung.

ㅡTus amigos son agradablesㅡsonrió Minho, sintiéndose mejor que como cuando llegóㅡNo sé si mis amigos te caerían bienㅡdudó.

ㅡAún así me gustaría conocerlos.

ㅡEstá bienㅡdebía pensar mejor esa posibilidad, no quería que ninguno hiciera sentir malㅡYo... quería saber si puedes venir a mi habitación mañana en la noche, quisiera hablar contigo.

ㅡClaro, llegaré a eso de las diez, ¿está bien?

ㅡPerfectoㅡse acercó y lo abrazó, despidiéndose de él de esa manera, algo tan normal como un abrazo se había convertido en algo muy íntimo para ellos.

Jisung se quedó ahí hasta que lo vio entrar a su casa, divagando en sus propios pensamientos, hasta que salió de ese pequeño trance para dirigirse de nuevo a su habitación.

ㅡNo puede ser... ㅡsusurró al encontrarse con sus dos amigos besándose sobre su cama como si nadaㅡOigan, ¿tan necesitados estaban?

Ambos rompieron el beso y lo miraron divertido, sabían que Jisung no estaba molesto, pero quizás si debieron esperar un poco más.

ㅡSi no te nos vas a unir, puedes irteㅡcomentó Hyunjin aún sobre el rubio.

Jisung rodó los ojos y suspiró, sus amigos nunca iban a cambiar.

ㅡTentador, pero mejor los espero abajoㅡse dirigió hacia la puerta de la habitaciónㅡ¡Limpien si ensucian o jamás los dejaré entrar!

ㅡ¡No te preocupes!ㅡrespondió Félix antes de jalar la camisa de Hyunjin para atraerlo hacia él y besarlo con pasión de nuevo.

Jisung cerró la puerta tras él y negó con la cabeza, se dirigió hacia la sala y se recostó en el amplio sofá, pensando en todo lo que había hablado con Minho.

Algo en él le decía que Minho por fin estaba descubriendo su sexualidad. 

☆.。．†：＊・゜☆．。†．：＊・゜☆．

Holi~ con este cap inicio el maratón❤️

Les recuerdo que Minho actúa y hace ciertas cosas debido a su curiosidad, para él todo es muy nuevo y llamativo, no es que sea mal intencionado. Al estar tanto tiempo reprimiendo ciertas cosas, causa que no sepa como reaccionar ante algunas situaciones, se podría decir que es un chico "inocente" todavía.

También entiendo que ciertas situaciones creen que son muy extremas, pero son cosas que escuché de mis propios compañeros o cosas que viví estando en un colegio cristiano, sé que no todas las religiones son así, pero si existe u-u es para que lo tengan en cuenta porque habrán situaciones aún peores, y también quiero aclarar que no busco señalar ni criticar religiones o creencias, como les había dicho, son experiencias mías o de mis compañeros con los cuales conviví durante un tiempo.

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