「ᴍɪɴʜᴏ」

—Debes de tener muy claro el hecho de que arruinaré de tu patética vida con tan solo un chasquido de dedos— le advertí con tono serio. —Yo tengo más poder que ese hombre que te ha comprado. ¿Entiendes eso?

La chica de cabello rubio agachó de nuevo la mirada y asintió con la cabeza a modo de respuesta. Claramente la tengo en mis manos, pero deseo que se arrepienta de por vida por lo que ha hecho.

No puedo permitir que la vida de mi querido Hyunjin se vaya a la mierda por una completa mentira a causa de que el CEO se encuentra atrapado entre la espada y la pared gracias a las mierdas que ha hecho y que ahora desea ocultar sin importar lo que deba hacer para lograrlo.

Ese imbécil cree que podrá arruinar a Hyunjin porque tiene poder, pero se ha metido con la persona equivocada puesto que ese chico me tiene a mí como apoyo y estoy dispuesto a hacer uso de todos mis contactos para entrar al juego y obtener el triunfo.

—Yo...

—Te daré una última oferta— le interrumpí. Extendí mi mano hacia Heechul que no dudó en entregarme el maletín negro para después colocarlo en la mesa, lo abrí y le pregunté—: ¿Te parece bien medio millón de dólares a cambio de la verdad?

La chica elevó la mirada y pude notar el brillo en ella tan pronto escuchó la cantidad de dinero que vale la maldita verdad con la que cuenta.

—¿Medio millón de dólares?

—Tómalo o déjalo. La oferta se termina tan pronto salga de este lugar— dije mientras me levantaba de la silla.

Heechul se posó detrás de mí al igual que Chan tras tomar el maletín pues es momento de irnos ya que la chica ha decidido quedarse en silencio y no puedo continuar perdiendo el tiempo.

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—Minho, ¿estás completamente seguro de que lo que harás? — me preguntó Chan tan pronto salimos de la empresa a la mañana siguiente.

—Nunca antes había estado tan seguro como en esta ocasión— aseguré.

—Las cosas se podrían malinterpretar...

—Estoy seguro que él lo entenderá. Acaso, ¿no confías en mí?

—Sería una completa estupidez no hacerlo— se rio. —Confío plenamente en ti, pero debo confesar que tengo la certeza de que todo esto podría terminar mal.

—Haré que Hyunjin continúe siendo el excelente y talentoso idol que ha sido hasta hoy sin importar lo que deba hacer para lograrlo.

—Entiendo.

—¿Me acompañarás a la junta? — le pregunté tan pronto Heechul abrió la puerta del auto para mí.

—Claro, pero estaré esperando por ti con Heechul en el auto.

—¿Por qué?

—No deseo que todo se arruine tan pronto me vea entrar a ese lugar.

—Está bien. Es momento de irnos.

Nos subimos al auto y no pude evitar sentirme demasiado nervioso a causa de que estoy a punto de llevar a cabo un paso que podría arruinar todo lo que he logrado al lado de Hwang Hyunjin, pero estoy dispuesto a arriesgarme con el objetivo de que no sea pisoteado ni mucho menos dañado por algo que claramente él no cometió.

Me bajé del auto al llegar a mi destino y caminé a paso seguro hasta la oficina de cierta persona que se merece lo peor del mundo por la mierda que está haciendo.

La mayoría de los presentes dirigieron sus miradas sorprendidas hacía a mí pues no suelo venir a estos lugares a menos que sea de suma importancia como lo es la situación de hoy; toda persona con la que me encontraba mientras me abría paso hacia la oficina principal no dudaba en hacer una reverencia para demostrar el respeto que me merezco y eso me agradó bastante porque saben perfectamente quien soy.