125|Sueño frustrado
Era un día cualquiera y la casa estaba pacifica. Una noche fría, no bebés llorando, el ruido pasajero de algún auto pasando fuera de la casa, todo estaba tan tranquilo que podían fácilmente recuperar sus horas de sueño perdidas.
"Alexis." Pero, Alejandro era Alejandro.
"Yo la cambié la última vez..." Murmuró Alexis entre su sueño.
"No es eso." Rápidamente gateó a él para mirarlo con una sonrisa.
"¿No puedes esperar a mañana?" Susurró.
"No, no puedo." Dijo sonriendo. Se escuchaba muy emocionado.
"Mm..."
"Alexis, quiero ser policía." Soltó de la nada con una gran sonrisa.
Fue tan repentino que Alexis se reincorporó para mirarle con los ojos rojos e hinchados del sueño. "¿Qué mamada acabas de decir?" Dijo.
"Bueno, legalmente, soy militar." Decía al explicarle. "Ser policía no será la gran cosa, ¿no?"
"Estás delirando por el sueño, Alejandro. Ya duérmete." Ordenó el de greñas acostándose para arroparse.
"Pero—"
"Duérmete." Volvió a ordenar sin mirarle.
Alejandro dejó de sonreír. Claro que no le iba a tomar en serio. Ninguno de sus trabajos duraban tanto y siempre volvía a estar desempleado viviendo de su esposo, cosa que odiaba.
No tuvo de otra que acostarse a dormir con un sabor agridulce en la boca.
[...]
"¿Cómo por qué chingados quieres ser policía, Alejandro?" Preguntaba el mayor de los dos con su taza de café en la mano.
"He hecho miles de cosas. Pero ninguna me llena." Le decía Alejandro tímidamente.
"¿Qué pasó con lo de ser aeromozo?" Preguntó tomando de su taza.
"Ser aeromozo me encanta, pero me mantiene lejos de ti. No quiero eso para nuestra familia otra vez." Le explicó jugando con sus propios dedos.
"¿Y las construcciones?"
"Odio tener que hacer todo ese trabajo. Lo hago por que sé hacerlo pero no me gusta." Él sabía a la perfección cómo trabajar en construcciones gracias a sus tíos, mismos que lo pusieron a trabajar desde muy pequeño en ese mundo.
"No me vengas a decir ahora que tampoco te gusta editar mis videos ni nada de eso.." el menor negó avergonzado. "¿Llevas años trabajando para mí y nunca te gustó?" Preguntó indignado.
"No..."
"¿Te estuve forzando todo este tiempo? ¡Puta madre, Alejandro!" Exclamó molesto, no con él, sino, consigo mismo.
"Perdón, solo lo hacía para poder ver tu carita." Dijo con una pequeña sonrisa. "Además, no me gusta tener que vivir de ti. Quiero conseguir dinero propio y poder ayudarte."
"No."
"Pero—"
"No es no." Dijo Alexis molesto. "Correrás peligro. Prefiero mil veces más que te dediques a otra cosa a que tengas un arma en la casa y que salgas a jugarte la vida todos los días."
"¡Pero, Alexis!" Parecía niño haciendo berrinche.
"No es no. Punto final."
Alejandro guardó silencio. Agachó la mirada hacia su propia taza de café y no volvió a sacar el tema.
.
.
.
Si hay faltas de ortografía o un error,por favor déjenme saber.
.
.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro