Bitácora tercera.
Encontré el camino correcto hacia el Amnis.
Los 35 pasos con la letra "A", significaban "abajo", y lo descubrí de la peor forma posible. Resbalé y caí por una colina llena de musgo. Fue demasiado divertido, pero estaba muy asustado cómo para disfrutarlo.
Cuando llegué al suelo (o lo que creí que era el suelo), me tropecé con alguien. Un Amneano. Uno real. Cómo mi madre.
(O, bueno, así les oí llamarse a sí mismos. Amneanos)
Paseamos un poco por la ciudad, lo que ellos llaman "reino", y hablé con ellos... no mucho, pero lo hice. Al final, terminé en la casa de un Amneano.
Su nombre es Kevin, y a mamá le caería muy bien. Es divertido, bastante gracioso y, aunque no nos entendemos mucho el uno al otro, sabemos cómo comunicarnos. Estoy escribiendo esto de noche, antes de poder irme a dormir.
Se ofreció a darme la cama de su habitación, pero preferí dormir en el sofá hoy. No se opuso a mi deseo. Mientras escribo esto, intento dormir.
Ah, mi padre estaría orgulloso... por fin completé mi cometido, pero, ahora que estoy aquí; necesito buscar más respuestas.
A papá le caería bien Eddy, es bastante parecido a él.
Oh, ese es otro nuevo amigo, Eddy. Es parte del personal Real del Amnis, el primer general de una tropa importante. Una tropa que salvaría al Príncipe si una guerra se avecinara pronto.
Kevin trabaja en la parte de la Biblioteca. Tiene acceso a todos los recuerdos de millones de años atrás, cada rey y reina del Amnis, cada memoria en estos árboles, cada flor de cada temporada. Millones de memorias. Memorias de cada amneano en esta ciudad escondida.
Memorias que podrían compartirse con las memorias de mi madre. Qué podrían ayudarme a encontrar la verdad.
Esto de "la verdad" se está volviendo un tanto cliché. Lo siento.
Tengo que admitir que el lugar es cómodo. El sofá en el que estoy durmiendo, las flores decorando el lugar, la forma de divertirse de los amneanos, su gente, su pueblo.
Todo es realmente encantador.
Uh, seguro te preguntas cómo es que sé todas estas cosas. Lo escribiré aquí de todas formas, por si alguna vez me olvido de esto (espero no hacerlo jamás de los jamases).
Cuando me desperté, Kevin ya estaba en la casa. Se rió de mí por dormir en el sofá, pero entendió que lo hacía para que él no tuviera problemas con la gente de su pueblo.
Cenamos una sopa de vegetales y exprimió jugo de naranja para ambos, dijo que me ayudaría a no enfermarme mientras estoy aquí. Me explicó que a las personas del Amnis se les dice "amneanos", y que se había encontrado con Eddy en Palacio.
Me comentó que me explicaría lo que quisiera saber, pero que primero necesitaba descansar y decirle de dónde he venido. He hecho lo posible por mantener mi cuadernillo de bitácoras escondido, y las cosas de mi madre también.
Kevin me ha dicho que conseguirá un lugar en el que yo pudiese dormir, algún espacio disponible en su habitación, en la que pudiese poner una cama extra para mí.
También me habló más de Eddy, y de sus razones para preocuparse por haberme encontrado en aquella caminata junto a Kevin. Me siento mal por irrumpir en sus vidas de una forma tan... horrible.
Mañana por la mañana tendré que idearme algún plan... algo que decirle a Kevin sobre mi antiguo paradero, sin mencionar a mi "especie", ni el por qué he venido hasta aquí.
O cómo he descubierto cómo llegar. Eddy tenía razón, la gente no cae aquí por error, todo está cerrado y oculto. Escondido.
Tal vez, y aunque me duela y me haga sentir aún más horrible, luego de que obtenga la información que quiero; pueda irme sin dejar rastro de que estuve aquí.
Mamá... ojalá pudieras decirme qué hacer.
Ojalá mi padre estuviera aquí, para sostenerme.
Ojalá mi estúpido corazón no se enamore de este lugar.
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