━━━━━━✧Hanabi Hyuga✧━━━━━━

Caminé hacía la sala de los Taketori una vez terminé de arreglarme. Al entrar me encontré con mi padre, Kazuo y Kaito, este ultimo me sonrió levemente como saludo, a lo que yo le devolví el gesto. Luego de conversar con él me di cuenta de que ya no había necesidad de tratarlo mal, ya que él tambien quería impedir este matrimonio.

Me cae bien, y supongo que ahora somos amigos.

―Buenos días.―los saludé a todos, haciendo una leve reverencia antes de sentarme junto a Kaito, ya que mi padre estaba en el asiento junto a Kazuo.

―Hanabi, ¿que tal dormiste anoche?―pregunta amablemente Kazuo, regalándome una ligera sonrisa.

Hasta ahora me parecía un hombre bastante simpático, no se como logró empatizar con alguien tan arisco como lo es mi padre.

Eso me recordó un poco a mi relación con Sasuke.

―Muy bien, gracias.―sonreí, a lo que él asintió. Mi padre aclaró su garganta para llamar la atención, haciendo que lo observara de reojo.

―Ahora que ambos están aquí, hay algo que queríamos comentarles...―habla con su característico semblante neutral. Casi me atraganto con mi propia saliva al escucharlo, y pude sentir como mis manos empezaban a sudar por los nervios.

Intercambié miradas con Kaito, el cual se veía casi tan angustiado como yo. Seguramente iba a sacar el tema del matrimonio, y no creo estar preparada para escuchar su decisión.

―Kazuo y yo estuvimos conversando anoche y... creemos que lo mejor sería que Kaito pasé una temporada en Konoha ―informa, dejándonos perplejos. Fruncí las cejas observando a mi padre, a lo que él me devolvió la mirada―, vivirá con nosotros, y tú te encargaras de hacerle compañía.

Pude jurar que mi rostro se desencajó completamente al escuchar eso último. Aquella extraña decisión que tomaron me hizo deducir que solo querían seguir evaluando mi convivencia con Kaito, y dependiendo de como nos llevemos esos días, se llevará a cabo la boda.

Eso es malo, muy malo.

―P-Pero... mis estudios...―balbuceó Kaito, a lo que su padre hizo un ademán con su mano.

―Tranquilo, parece que en Konoha hay un excelente hospital y Hiashi te consiguió pasantías allí, ¿no es una oportunidad genial?―sonríe entusiasmado. Kaito tragó saliva, asintiendo lentamente.

―Será divertido ―comenta mi padre con semblante serio, haciéndome reír un poco―, Hanabi me dijo que este fin de semana habrá un festival, pueden ir juntos.

Paré de reír inmediatamente al escuchar eso, mientras fruncía el ceño enojada―Iré con Sasuke.―gruñí, a lo que él se encogió de hombros.

―Pueden ir los tres.

No creo que le agrade mucho esa idea.

―¿Quien es Sasuke?―le pregunta Kazuo a mi padre. Este se acercó para susurrarle algo al oído, y por desgracia no alcancé a escuchar―. Oh... ya veo, entonces no habrá problemas.

Alcé una ceja desconcertada, sin entender muy bien lo que acababa de pasar.

Ellos siguieron conversando un poco más sobre como sería la estadía de Kaito en mi casa. La verdad no les presté mucha atención, estaba muy ocupada pensando en como le diría a Sasuke que ahora nuestra salida sería de tres.

━━━━━━✧Sasuke Uchiha✧━━━━━━

Caminé tranquilamente por las calles de Konoha, en dirección a la entrada de la aldea. Hoy volvería Hanabi de su reunión con los miembros del clan Taketori, y quería recibirla para averiguar en que quedó todo ese asunto de la boda.

Además, quería verla.

He estado muy feliz desde que me permitió besarla hace dos dias. No soy experto en el amor, pero supongo que eso significa que yo también le gusto.

Ahora solo debía esperar el día del festival para confesarle mis sentimientos.

―¡Sasuke!―escuché la escandalosa voz de Naruto llamándome a lo lejos. Rodé los ojos con fastidio, acelerando el paso para alejarme más de él.

Pero aún así logró alcanzarme, colocando una mano sobre mi hombro para detenerme. No entiendo que hace aquí, ayer les dije a todos los voluntarios que podían tomarse el día libre, y él fue el primero en emocionarse por eso.

―¿Que quieres, dobe?―mascullé, a lo que él me sonrió.

―¿A dónde vas?, ¿saldrás de la aldea?―me pregunta, retirando su agarre de mi hombro para empezar a caminar hacía la entrada de Konoha. Lo seguí porque no tenía otra opción, maldiciendo internamente el no haber caminado más deprisa antes.

―Estoy esperando a alguien.―contesté simplemente, haciendo que me observara de reojo.

―¿Tú, esperando a alguien?―cuestiona sorprendido, alzando las cejas―. Eso si que es raro dattebayo, ¿a quién esperas?

―A Hanabi ―respondí sin tomarle mucha importancia. De pronto deje de sentir su presencia a mi lado, haciendo que me girara a observarlo con curiosidad―. ¿Que te pasa?

―¿Por qué estás esperando a la hermana de Hinata?, ¿te hizo algo malo? Sabes que no está bien golpear a las mujeres.―frunce el ceño, mandandome una mirada de reproche. Solté un bufido, empezando a caminar nuevamente.

El hecho de que haya tratado de asesinar a Sakura no significa que sea así con todas las mujeres.

O por lo menos no con Hanabi.

―Idiota, nosotros... somos amigos.―hice una mueca. No me gustaba llamarla de esa forma, pero por el momento no tenía otra opción.

―Si... hablando de eso...―murmuró, acelerando el paso para colocarse a mi lado―, ¿como es que son amigos? Digo... ella es muy amable y linda, en cambio tú eres... Sasuke.

¿Qué demonios significa eso?

Se que ambos no tenemos mucho en común, por no decir nada. Pero eso no significa que no podamos llevarnos bien, es más, creo que precisamente por eso me gusta.

Dudo mucho que pueda mantener una relación con alguien similar a mi. Por eso necesito a una chica que me complemente de forma emocional, y esa persona, sorpresivamente, resultó ser Hanabi.

Cuando estoy con ella me siento tranquilo, como si nada me faltase. Su sola presencia hace que me olvide de todas mis preocupaciones e inseguridades, sustituyendo esos sentimientos negativos por unos completamente diferentes y agradables. No se como lo hace, o si yo he llegado a causar alguna sensación similar en ella.

Espero que así sea, y sino, me encargaré de hacerlo con el tiempo.

―Deja de ser tan entrometido.―gruñí, mandándole una mala mirada. Él no pareció prestarme atención, y en cambio siguió divagando estupideces.

―¿O es que acaso te gusta?―cuestiona en tono burlón, observándome con una ceja alzada. Yo me encogí de hombros, haciendo que soltara una exhalación anonadado―. ¿¡Eh!? ¡Yo lo decía en broma!, ¿en serio te gusta?

Rodé los ojos fastidiado. Precisamente por eso decidí no comentarle nada con respecto a mis sentimientos, además, dudo mucho que me sirva de algo su opinión.

―Si, ¿algún problema?―mascullé, a lo que él negó lentamente, sin quitar su estúpida expresión de asombro.

―Pobre Hanabi...―susurró, pero alcancé a escucharlo―. ¿Y ella lo sabe?

Ladeé ligeramente la cabeza, pensando en la respuesta. Cualquier chica normal podría llegar a deducir mis sentimientos luego de habernos besado de esa forma, pero tratándose de ella...

―No, no lo sabe ―suspiré, bajando los hombros con cansancio―. Se lo diré el fin de semana.

―¡Oh!, ¿la llevarás al festival?―pregunta entusiasmado, a lo que yo asentí―. Yo saldré mañana con Hinata, y tambien pensaba invitarla al festival.

―No te pregunté, pero bien por ti ―bufe, para luego fruncir el ceño―. ¿Te gusta la hermana de Hanabi?

Un ridículo sonrojo empezó a cubrir sus mejillas, a la vez que abría y cerraba la boca sin formular una respuesta. Naruto es demasiado idiota para darse cuenta de sus propios sentimientos, y sumándole a eso la timidez de Hinata, dudo mucho que la relación entre ambos avance mucho.

Menos mal que Hanabi y yo no somos así.

―Como sea, tampoco me importa.―dije al ver que seguía balbuceando incoherencias. El suspiró aliviado, sonriendo tímidamente.

―¿Te parece si vamos los cuatro juntos? ¡Será una cita doble!―exclama emocionado, alzando sus brazos.

―No aceptaré nada que te incluya a ti y una cita en la misma oración.―negué, a lo que él hizo un mohín desanimado.

―¡Vamos, teme! Seguro Hanabi-chan se pondrá feliz al estar junto a su hermana.―insiste, observándome con suplica.

―Ya dije que no, y ni se te ocurra volver a llamarla Hanabi-chan.―fruncí el ceño, mandándole una mala mirada. El sonrió apenado, asintiendo con la cabeza.

―Bien... entonces se lo preguntaré a Hanabi...―canturreó, a lo que yo rodé los ojos.

Quiero estar solo con ella, así que espero que no acepte esa estúpida propuesta.

Luego de caminar un rato, por fin llegamos a la entrada. Naruto seguía hablando y hablando sin parar, mientras yo me limitaba a observar distraídamente el camino, esperando a que Hanabi apareciera.

―¿Y si invitamos a Sakura-chan tamb-...

―No ―lo interrumpí rápidamente, a lo que él frunció el ceño―. Será incomodo, y cuando me vea con Hanabi seguro se pondrá triste.―expliqué. Él asintió lentamente, dejando de lado el tema.

No me interesaba mucho eso, por mi podía ir si quería. Después de todo, una vez formalizara mi relación con Hanabi, nos iba a ver juntos más de una vez. Pero no quería que el ambiente se tornara tenso cuando estuviéramos todos juntos, ya que arruinaría por completo la salida.

Y todo debía salir perfecto esta vez.

―Ah mira, ahí vienen ―señaló Naruto, apuntando el camino frente a nosotros.

Desvié la mirada al punto donde me indicó, encontrándome con Hiashi, Hanabi y...

¿Quién demonios es ese tipo?

Parecía estar hablando animadamente con mi futura novia, mientras ella solo lo escuchaba y le sonreía de vez en cuando. Fruncí el ceño, sintiéndome repentinamente irritado.

―Wow, si las miradas mataran... bueno, creo que la tuya si puede hacerlo.―comenta Naruto, dándole una mirada fugaz a mi Rinnegan. Solté un gruñido y decidí ignorarlo, a la vez que empezaba a caminar para alcanzar a Hanabi.

Su padre iba un poco alejado de ellos, y al percatarse de mi presencia me observó con las cejas fruncidas, pero inmediatamente cambió su semblante, asintiendo como saludo. Le devolví el gesto rápidamente, no podía ser maleducado con mi suegro.

―Hanabi.―la llamé, parando de caminar cuando estaba por llegar a su lado. Ella desvió la mirada de aquel chico, posando sus aperlados ojos en mi.

Ignorando el hecho de que se encontraba junto a ese chico, me alegré mucho al verla nuevamente. Ella tambien pareció contentarse con mi presencia, o por lo menos eso deduje al ver la expresión en su rostro.

―S-Sasuke.―sonrió, separándose de él para acercarse más a mi.

Bien, así me gusta.

Ya que me encontraba más cerca de ellos, me tomé la molestia de analizar mejor al tipo con la mirada. Era un poco más alto que yo, desgraciadamente, sus ojos eran intensamente azules y su cabello sumamente oscuro. Tenía un rostro bastante común, y logré deducir gracias a su postura y movimientos corporales que se trataba de una persona bastante insegura e introvertida.

Para nada atractivo.

―¿Quién es ese?―lo apunte disimuladamente, observandolo con el ceño fruncido. Él desvió la mirada, seguramente asustado.

―A-Ah, b-bueno... es Kaito.―río un poco, mandándole una corta mirada de reojo al muchacho.

Gracias, con eso todo quedó claro.

―¿Kaito qué?―mascullé, a lo que ella hizo una mueca, jugando con sus dedos.

―Kaito Taketori, un placer.―se presenta el mismo, alzando momentáneamente su mano izquierda.

Hmm, ¿acaso se está burlando de mi porque justamente me falta ese brazo?

―Taketori...―repetí, a lo que él asintió. Bajé mi mirada para observar a Hanabi, pero ella se encontraba viendo "distraídamente" los arboles del bosque―. ¿Acaso él es...?―asintió antes de que pudiera terminar la frase, dejándome desconcertado.

Tragué saliva ansioso, observando nuevamente a ese tal Kaito. Él era el heredero de su clan, lo que significaba que tambien sería el futuro esposo de Hanabi, y el hecho de que esté con ellos ahora mismo, solo me daba a entender que habían confirmado el matrimonio.

No pude formular ningún otro comentario, ya que un enorme nudo se formó en mi garganta. Por fin luego de tantos años, había logrado encontrar a una persona que me transmitiera paz y tranquilidad, y aunque aún no éramos pareja, yo ya la veía de esa forma.

Pero como siempre, algo tenía que salir mal.

Hanabi frunció las cejas, tomando mi mano derecha entre las suyas―Sasuke... mi padre aún no toma una decisión, no estamos comprometidos.―murmura, sonriendo sin despegar sus labios.

Mierda, ¿que le costaba empezar con eso? Casi me pongo a llorar.

―Oh, conque él es Sasuke...―susurra el desagradable acompañante de Hanabi, analizándome con la mirada.

Chasqueé la lengua y decidí ignorarlo, a la vez que tomaba la mano de Hanabi para arrastrarla conmigo. Ella se plantó bruscamente en el suelo, a lo que yo me giré para observarla con curiosidad.

―Kaito se quedará en mi casa durante un tiempo y... papá me dijo que debía hacerle compañía, así que no puedo dejarlo solo.―hace una mueca, dándole un leve apretón a mi mano.

Genial, lo que me faltaba.

―Entonces que venga con nosotros, así me ve mientras te bes...―paré de hablar al percatarme de que el padre de Hanabi no se encontraba muy lejos de nosotros, y que nos observaba fijamente― me ve mientras te enseño como van las construcciones de mi distrito.―balbuceé, a lo que ella sonrió emocionada.

―¡Genial! Vamos, Kaito.―lo llama animadamente. El chico me observó un par de segundos, para luego sonreírle y acercarse a ella para empezar a caminar a su lado.

Agh, lo detesto.

Espero que les haya gustado el cap uwu

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