22 - Secuestro
Gojo mando a Megumi, Itadori y ______ a buscar el dedo de Sukuna que Itadori y Megumi no encontraron por qué tenían poco tiempo.
Era la mañana de un Lunes, los tres chicos ya estaban cambiados, solo faltaba que desayunaran, los tres chicos estaban despreocupados mientras que una peli castaña estaba preocupada por su amiga, pidiendo que se cuidara.
Estaban por salir hasta que Nobara abrazo por última vez av______ pidiendo que vallan con cuidado.
Estaban cerca de un cementerio, buscando el objeto maldito, mientras de vez en cuando se atravesaba una Maldición solo era cuestión de exorcizarla.
Ya era de noche, estaban por retirarse cuando salió una Maldición llamada Mahito, lo conocían bien gracias a Nanami.
Cuando salió de su escondite, mostró el dedo de Sukuna, era una clara provocación, de un momento a otro empezó a esquivar ataques de Itadori y Megumi.
En unos de los descuidos de los chicos ______ ya no estaba, voltearon para buscar a la chica pero nada... Cuando volvieron a ver a Mahito tampoco estaba y solo estaba el dedo en el piso.
Sentías como en medio de la batalla contra Mahito te pincharon con algo que parecía ser una aguja, y caíste desmayada.
Al despertar te dolía la cabeza, sentías el cuerpo débil, tus párpados te pesaban, poco a poco fuiste abriendo los ojos, para encontrarte con Mahito
— Buenas linda ~ —canturreo este — Ya veo que por fin despiertas
— Ya dime que diablos quieres, no estoy para sermones — dijiste de mala gana ya que no querías escuchar un sermón en ese momento
— Ara ~ pero que lista — dijo mientras s le formaba una sonrisa — Quiero que me digas donde quedan los otros dedos de Sukuna
— Eres idiota o que? — dijiste de mala gana — No soy un profesor para saber donde los guardan, soy una estudiante
— Pero eres hija de Gojo no? Y no digo adoptiva, de sangre... — sus palabras te desconcertaron.
No sabías si querían hacerle algo a Gojo o a sus amigos, pero tampoco es que pudieras ayudar mucho, a ella nunca le dijeron sobre dónde se encontraban los dedos y nunca necesito saberlos.
— Dime que diablos es lo que quieres? — dijiste ya desganada — y deja de inventar cosas como que soy hija de sangre de Gojo ¿si?
— Que paguen tu rescate con los dedos de Sukuna — dijo despreocupado — Lo único que tengo que hacer es mandar una fotografía o video hacia la preparatoria donde te estén torturando
— Ahh? — dijiste desconcertada
Sabia que si hacían algo así posiblemente si envíen los dedos para poder rescatarte, pero te negaste, le dijiste a Mahito que hiciera lo que quisiera contigo pero que no metiera a tus amigos.
Al principio no dijo nada y siguió sin decir nada, parece que estaba pensando.
Llevaste solamente 1 día ahí y Mahito se va, vuelve, te observa y se vuelve a ir.
Y aquí estamos de nuevo, Mahito sigue observandote sin articular ninguna palabra.
— Cuanto tiempo vas a seguir viéndome? — para este momento ya estabas nerviosa
— Ya se que haré contigo — dijo para acercarse a mi - Sabes en que consiste mi ritual no?
Esas palabras te hizo crear una idea de lo que este quería hacer contigo.
— Por tu expresión creo que sabes que quiero hacer — dijo con una sonrisa burlona — Pues cambiare tu alma y haré que ataques a la preparatoria, fácil ¿no? Como se pondría el gran Gojo al ver a su hija atacandolo~
Mientras estaba sumergida en tus pensamientos sientes como alguien coloca su mano en tu cara, y ese "alguien" era Mahito, simplemente cerraste los ojos esperando a que tu cuerpo cambiará, pero.
Nada paso, Mahito tenía una cara de confusión.
— Ehh? Como es que mi ritual no se activa? — dijo viendo a su mano
—Hmm que entraño...¿Verdad?
Mientras tanto, lejos de ahí, en la preparatoria.
Estaban desesperados todos en la escuela, tanto alumnos como maestros.
Entre ellos Megumi.
Perspectiva de Megumi
No sabían en que momento te fuiste, pero estuve contigo y no pude protegerte... Yo te necesito, necesito que estés a mi lado, quiero abrazarte y recargar mi cabeza en tu pecho, escuchar los latidos de tu corazón mientras me acaricias la cabeza
Quiero disculparme por no protegerte, decirte lo mucho que te quiero, y que lo que estas pasando no volverá a pasar, necesito sentir tu aroma otra vez, necesito sentir tus labios sobre los míos, necesito un cálido abrazo tuyo.
Estuve apuntó de perderte una vez...
Ni dejaré que vuelva a suceder, después de todo eres el amor de mi vida, la persona que me puede sacar una sonrisa sin que yo lo note, la persona con la cual me siento seguro de mi mismo.
Solo te necesito a ti. Solo ¿por qué?
¿Por qué te llevaste a la chica que amo?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro