
Capítulo 18
Capítulo 18
La tripulación perdida ~Parte 2~
[Región desconocida, en una tormenta eléctrica a 1200 km de altura]
[En el pasado: 2 días atrás]
Narrador Neutral:
Los entrenadores, atónitos, presenciaron con sus propios ojos a la aparición de otra ave desde un dirigible destrozado, tenia un color morado, negro y las puntas de sus alas tenían un color claro, más bien blanco, y eran muy afiladas. Su cola era larga y, a pesar de todo el viento que irradiaba, tenía una secuencia de movimiento.
Era extraño, porque a pesar de tener alas, él Pokémon no las usaba para mantenerse levitando, todo indicaba a que tenía el mismo tipo de poder que el que tiene Celebi, el poder psíquico. Este, a pesar de tener una mirada calmada, estaba furioso por dentro.
— "¿... Otra?" — pensó Adaman.
El ave no se lo pensó y volvió a cargar un tipo de energía psíquica helada en sus dos ojos azules, extendió sus alas y las puntas de estas cambiaron a un color azul.
Al contrario de Adaman y de la chica, Celebi pudo prevenir el movimiento y reaccionó antes de tiempo, este aviso que se agacharán y se pusieran a cubierto.
El Pokémon disparó un láser a través de sus ojos que Celebi pudo detener usando Pantalla de Luz, pero la pantalla no iba a aguantar toda una hora, tenían que esconderse.
— ¡Hay que huir! — dijo Celebi.
— ¡Eh, deprisa! — Adaman se fue corriendo y el aviso a la tripulante que también lo hiciera.
— ¡Voy!
El punto de mira de la ave seguía en el par de entrenadores y, como si su poder fuera ilimitado, empezó a cargar el mismo ataque, sin embargo antes de poder lanzarlo recibió a lo que se puede llamar una "patada relámpago" en el estómago, la ave naranja que antes atacaba a los entrenadores ahora le estaba atacando a ella, pero tenía su desventaja, ella no podía volar.
Adaman y los demás sé retiraron y se intentaron apartar lo más que pudieron en una esquina, no se podían meter en interior del dirigible porque todo estaba ardiendo, por lo que parecía aquella aves eran las causantes de toda la destrucción en la nave.
La patada que recibió molestó a la ave flotante, está sin contemplaciones se abalanzó sobre la ave naranja para usar Psicocorte en ella, está la empezó a esquivar gracias a la buena agilidad que tenía debido a la fuerza muscular de sus patas.
— "¿Ahora se están atacando entre ellas?"
— Es lo que parece... — dijo Celebi.
— ¿Ellas son las culpables de todo el caos...? – le preguntó Adaman a la chica.
— S-si... todo empezó cuando un rayo cayó en el dirigible, ahí nos dimos cuenta que de aquel rayo apareció esa avestruz... — explicó la azabache — Pero tampoco sabía que había otra ave...
— Entiendo, un ataque accidental, seguramente ellas dos se estaban peleando desde antes pero se toparon con esta nave y decidieron usarla como un campo de batalla... — teorizó el jerarca.
— Es una buena teoría... "Vaya, si que es inteligente" — pensó.
— Pero porque son tan poderosas... son Pokémon normales o... — Adaman fue interrumpido por nada más y nada menos que su compañero Celebi.
— Los conozco — reveló el Pokémon singular.
— "¿En serio? Espera, entonces... ¿si tu los conoces significa que han existido en todas las épocas...?" — le preguntó mentalmente.
— Si, en pocas palabras, son seres legendarios, Pokémon legendarios, los seres que se encuentran en la cima de la pirámide del poder — dijo Celebi.
— "Legendarios... ¿como Dialga y Palkia...?" — recordó.
— Si, ¿te sorprende saber que el dios que venerabas no era el único legendario? — dijo.
— "Viajó en el tiempo, ya nada me va a sorprender y lo sabes — dijo — ¿Y porque dices "venerabas" acaso ya no venero a Dialga?"
— Es que como ya no hablas todo el rato de la "gran" importancia del tiempo se me hacía raro — explicó.
— "Sabes que, mejor no hablemos ahora de eso, solo ten claro que venero a Dialga desde que era un niño, y ahora... ¿quienes son?" — preguntó refiriéndose a las aves legendarias que pelaban entre sí.
Mientras Adaman conversaba mentalmente con su compañero invisible, las dos aves seguían peleándose, pero al parecer la de tipo Psíquico tenía ventaja sobre la otra, eso se podría deber a que posiblemente la avestruz tenia el tipo Lucha.
Sin embargo la ave naranja uso Corpulencia para aumentar la musculatura de su cuerpo, incluyendo la de sus patas, eso le ayudaba a tener una mayor defensiva, ofensiva y además una mejor capacidad de salto para alcanzar a su enemigo. A pesar de no poder volar, su velocidad era incomparable, por no hablar de su ataque físico.
Celebi procedió a explicarle la entidad de aquellas misteriosas aves.
— Antes de responder... En tu aldea situada en el antiguo Pantanal Carmesí ¿no se os hace conocida la leyenda de las tres aves legendarias?
— "Diciéndote la verdad, no, pero yo sí la conozco, tuve un viaje de exploración a los 15 años en la región de Kanto, ahí es muy popular esa leyenda, el motivo si no recuerdo mal es que aquellas aves se dejaban ver mucho por los humanos... pero no recuerdo nada más, solo se que eran tres" — explicó mientras recordaba.
— Veo que sabes de mitología... pues bien, para completar tu explicación esas aves representaban tres tipos y fueron creadas por el rey del mar, pero del creador no venimos a cuento — dijo el Pokémon singular.
— "Espera, ¿entonces ellas son dos de esa leyenda, son dos aves legendarias?" — intento adivinar Adaman.
— Si y no, verás, no es que sepa mucho del tema, pero si se que esas aves no son las de Kanto —.
— "¿A que te refieres?" —.
— La leyenda que tu conoces relacionada con estas aves es la misma si, pero tengo que decirte que las tres aves de Kanto son diferentes a estas, por mucho que no me creas, en verdad podríamos decir que hay seis formas de aves legendarias, dependiendo de la raza y región.
— "Me estás diciendo que estás aves son distintas en Kanto, ¿como se le llamaba a eso... "forma regional"?" —.
— Eso mismo, estas tres aves son las tres aves legendarias de Galar, las formas regionales únicas de la región — dijo Celebi — sus nombres:
La ave psíquica lanzó de nuevo sus rayos láseres, esta vez la avestruz no pudo reaccionar y recibió el ataque, haciéndole retroceder demasiado y congelando de alguna manera sus patas, los láseres se dispersaron creando explosiones por doquier. Aquella ave flotante no se acobardaba de demostrar su fuerza.
— Ella es Articuno, el Pokémon Calculador — presentó Celebi.
El ave naranja pudo destrozar todo el hielo que lo paralizaba usando de nuevo Corpulencia, agrandando aún más sus músculos y creando una onda expansiva de viento a su alrededor, esta se envolvió en una aura amarillenta para impulsarse usando Pájaro Osado, permitiéndole volar y acercarse a Articuno para arrollarlo.
— Ese es Zapdos, el Pokémon Patas Recias — dijo.
Zapdos logro derrumbar de un solo ataque a su rival gracias al doble aumento de su ataque, Articuno intentó sacarse de su agarre con Psicocorte pero este podía aguantar cualquier ataque físico, sin embargo unas llamas oscuras salieron por sorpresa desde la tormenta y las dos aves legendarias tuvieron que apartarse para esquivarlas, de la tormenta apareció otro pajaro de gran tamaño de color negro y con marcas escarlata, al igual que sus alas llenas de llamas del mismo color.
— Y esa es la que faltaba, Moltres, el Pokémon Malignidad.
Las tres aves volvieron a entrar en combate, ignorando la presencia de Adaman y la chica desconocida. El dirigible poco a poco caía con más velocidad.
— "Gracias por la información Celebi, ahora toca pensar en un plan..." —.
...
— ... "Creo que se me ocurre algo... — dijo el jerarca — Celebi tu ya te has socializado con ellos, ¿verdad?
— Sip, diría que más de dos veces he entablado conversación con cada uno de ellos, ¿porque la pregunta?
— "Celebi con tu poder psíquico en medio de esta tormenta no podemos llegar a la fisura espacio temporal, si un Pokémon puede llevarnos hasta ella, tiene que ser una de ellas dos" — señaló a Moltres y a Articuno.
— ¿Y como vas a hacer eso?, no te harán caso.
— "A mi no, pero a ti puede"
— ¿¡Como?! Quieres que convenza a uno de ellos para llevaros hasta allá?
— "Muy bien, sabes pensar"— le felicito sarcasticamente.
— No es un mal plan... ¿pero como se supone que va a molestarse en llevarnos hasta allí con las dos aves atacandolo? — pregunto.
— "Tu solo convencele, si algo sale mal será culpa mía, apurate, seguramente estaremos a menos de 500 km del suelo, y además la grieta se cierra, o morimos o no llegamos a tiempo" — le dijo mentalmente.
— ¡Esta bien ya voy! — dijo, y acto seguido se fue levitando hacia una de las aves.
— "¡¿Y con quien vas a hablar?!"
— Con Moltres, es con la que más me llevo! — dijo.
— ... —.
— O-oye...
Adaman se olvidó completamente que aquella chica azabache estaba a su lado por culpa de haber hablado tanto con Celebi.
— ¿Tienes un plan...? — insegura.
— No te preocupes, tengo uno, solo hay que tener paciencia saldremos vivos de esta — le intento calmar.
— De acuerdo — dijo, confiando en él.
En el combate, Moltres se intentó dar un respiro apartándose de sus dos rivales, tal fue su sorpresa que de un momento para otro delante de él apareció un Pokémon verde que al parecer antes era invisible.
— [¡Eh Moltres! ¿Te acuerdas de mi?!] — grito el Pokémon singular.
— [¿¡Y tu quien eres!?] — grito molesto en su idioma Pokémon.
— "Vale, no se acuerda" — se rió nervioso — [¡Soy Celebi, aquella hada que te salvo en las Nieves de la Corona, consigues recordar?!]
— [Creo que si, ¿tu fuiste quien sano mis heridas aquella vez verdad?]
— [Aja]
— [¿Y que haces aquí? Estoy en medio de una pelea muy importante con los fastidiosos de Zapdos y Articuno!]
— [Antes de explicarte, podrías tu explicarme a mi porque os peleais ahora?]
— [Es una larga historia, el Maxiarbol se ha quedado sin frutas, y no sabemos como se han acabado ni quien las ha robado— dijo.
Para lo que no entienden, esta parte es un spoiler del DLC de Pokémon Espada y Escudo, el Maxiarbol es una planta enorme de color rojo donde se encuentran por primera vez a las aves de Galar.
— [.... Primero de todo, me acabas de contar la historia no fue tan larga, y segundo, ¿y que hacéis peleándoos aquí en vez de allá? habéis destruido una tripulación inocente sin querer] — le preguntó Celebi.
— [Las frutas del Maxiarbol duran ciclos en volver a madurar, las tres hemos tenido la idea de plantar otro Maxiarbol en un sitio más fértil para que las frutas crezcan más rápido, eso es lo que sucede] — se explicó mejor.
— [¿Y entonces porque os peleáis si los tres tenéis el mismo objetivo?]
— [Simple, se nos ha acabado la paciencia y estamos hartos de compartir las frutas y así hemos acabado, peleándonos en una tormenta en medio del océano] — concluyó.
— [Joder... vale Moltres, ahora que me lo has contado, quiero pedirte un gran favor y te lo suplicare si no quieres, porque eres un gran amigo mío]
— [¿De que se trata?]
— [¿Ves a esas personas de ahí?] — señaló a los entrenadores — [Son mis amigos, y no quiero que se mueran por culpa de vuestro accidente, por favor Moltres tienes que salvarlos] — le dijo.
— [¿Salvarlos? Me temo que será muy difícil en medio del océano y con Articuno y Zapdos] — dijo.
— [No importa, verás arriba nuestro, fuera de la tormenta, hay una fisura espacio temporal, ¿te acuerdas? Esos portales por lo que yo me desplazo por el tiempo]
— [¿Si, me acuerdo, entonces queréis que os lleve ahí?]
— [Por favor]
— [Será muy difícil llevaros a la grieta sin entrar en ella, me temo que tendremos que entrar todos para devolveros a vuestra época]
— [¡¿Vas a abandonar esta época junto a Zapdos y Articuno?!]
— [No te das cuenta, es una oferta increíble, habrá otro Maxiarbol en vuestra época, y como es otra línea temporal este tendrá frutas, ¡¿ves lo inteligente que soy?!] — le dijo Moltres.
— [Bien, como tú quieras, estamos muy cerca del agua hay que darse prisa, te lo agradezco] — le dijo Celebi.
— [Cuando te avise dile a tus amigos que salten en mi lomo, os llevaré hasta el portal] — dijo y acto seguido emprendió el vuelo.
— [¡Entendido!]
El dirigible estaba a menos de 300 km de estrellarse al agua, y cada vez Adaman se ponía más nervioso e impaciente. Sin embargo, una voz detrás de él dijo una palabra que lo desconcertó.
— Liko.
Adaman, confundido, giró su cabeza para ver a la chica que intentaba salvar, esta lo miraba con una expresión neutral, como si intentara ignorar todo lo que sucedía a su alrededor.
— Ese es mi nombre — dijo.
— ... Je, ¿no habíamos acordado que nos presentaríamos antes? — dijo sonriendo apartando la mirada.
— Por si no salimos con vida de esta, de verdad te agradezco todo lo que estás haciendo por mi, no sé cómo has llegado hasta este dirigible, pero quiero saber tu nombre — le dijo, también con una sonrisa.
— Soy Adaman, encantado de conocerte —.
— Yo igual, ahora centrémonos y que nada haya sido en vano — volvió a centrarse la azabache.
— Bien dicho.
— ¡Adaman! — gritó una voz.
El jerarca reconoció esa voz y se levantó para poder ver a Celebi haciéndole señas para que se acercase.
— Liko, vamos — le dijo empezando a correr.
— V-vale!, ¡¿cuál es tu plan?! —.
— Ni yo mismo lo sé — sonrió confiado.
Fin de la segunda parte, la tercera sí que será la última.
Y recuerden, si leen algo que no entienden pregunten.
El problema continúa...
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