(Advertencia: Las acciones violentas de esta capítulo pueden ser muy fuertes y macabras si alguien puede imaginárselas bien, si eres sensible a estas cosas te recomiendo no leerte esta parte)

Capítulo 14

La elección de un emperador autoproclamado

[Lugar desconocido]

{Fuera de la línea temporal}

Narrador ???

...

... ...

... ... ..

¿Uh?

..

.

... ¿Donde estoy? ...

..

Me siento cansado... y no veo nada... esta todo... muy oscuro de momento...

...

Siento que alguien me observa... no me gusta esto... me siento... lejos de casa...
Siento una presión terriblemente fuerte sobre mi... ¿Porque me pasa esto...?

Espera... ahora que recuerdo bien... recuerdo haber viajado por un túnel extraño... a mucha velocidad...

¿Que ocurrió antes...? Necesito saberlo...

¿Eh? Empiezo a dejar de verlo todo oscuro... empiezo a ver lo que me rodea... al fin...

Lo que vi cuando mis ojos se aclararon finalmente me dejo de piedra, estoy en un mundo irreal, lleno de tinieblas y rocas flotantes... este mundo no es la Tierra... es un mundo imposible de imaginar.

Me encuentro arrodillado en un piso lleno de cenizas y piedras, puedo oler el olor a vegetación, siguen habiendo árboles, pero aún así, al mirar arriba mío, me auto convencí de que si, desde luego, estaba muy lejos de mi casa.

Al parecer no existe un cielo ni tampoco un mundo subterráneo, esto mundo es imposible, nada tiene sentido, las casas se conectan de forma vertical al igual que las rocas, eso es algo inimaginable, todo es inimaginable.

Me da la sensación de que no podré regresar a Hoenn, que pensarán mis reclutas al ver que su líder, el gran Archie (Aquiles en español), no está allí para ellos... que haré.. que hago...

— Es el mundo distorsión... "la Ciudad Imposible" — oí una voz cerca de mi.

Voltee mi mirada y pude reconocer la voz y a la persona que me habló, el también era de mi región, y... hasta aquel entonces, era mi enemigo: Maxie. Y este, a diferencia de mi, estaba acompañado.

La que lo acompañaba era su mejor ayudante y general del equipo Magma, ya me enfrente a ella varias veces, pero no consigo recordar su nombre.

— ¿Como conoces este mundo? — pregunte, confundido por todo.

— Durante mi viaje por Sinnoh, aprendí varias cosas Archie, me centré más en toda la mitología Pokémon, y que casualidad, me encontré con un cuadro que explicaba literalmente este mundo: Una dimensión alterna donde las leyes de la física se corrompen.

— ... ¿Me estás diciendo que estamos en otra dimensión? Y porqué acabamos aquí? — pregunté.

— Eso tampoco lo sé, lo único que sé es que todo esto lo está planeando alguien.

— ¿A qué te refieres con todo esto?

— Mira lo que hay más adelante.

Alzo la cabeza y lo que vi me confundió aún más, todos los líderes de gimnasio, todos y cada uno de ellos, de la región de Hoenn, se encontraban también arrodillados y desconcertados delante nuestro, alguien nos había llevado hasta aquí, estábamos todos perdidos en un mundo oscuro.

Y lo más raro, desde aquel punto todos empezamos a hablar en nuestra mente, sin hablarnos entre sí, una fuerza extraña y mental nos obligaba a callarnos por el miedo a que algo nos escuche.

— "¿Que es esto..? Donde estamos? Lo último que recuerdo es haber visto una grieta en el cielo..." — pensaba Brawly, el líder de tipo lucha, asustado.

Yo solamente me dediqué a observar el miedo y el temor que todos tenían de estar en aquella dimensión.

— "¿Donde estamos, este mundo existe realmente...?" — pensó Flannery, líder de tipo fuego.

Ocupaba el lugar un terrible silencio de inquietud.

— "¿Debo volver a casa... como hago para salir de aquí...?" — pensó Wattson, líder de tipo eléctrico.

El líder eléctrico movía la cabeza de lado a lado, era normal, no se podía analizar bien aquel mundo con lo irrealista que era.

La última dirección en la que miró, asustado y preocupado, fue hacia adelante y hacia arriba.

Y... cuando lo hizo.

Todos nos asustamos al verlo, y por alguna razón nadie dijo nada, seguía habiendo el silencio, hasta que él mismo rompió el hielo.

— ¿Porque estáis parados? — preguntó con una voz profunda y penetrante.

Un terror que creaba una presión oprimía el ambiente, como si fuera vital, nuestros reflejos actuaron y por alguna razón nos volvimos a arrodillar y bajamos la cabeza para solamente ver el piso. ¿Quien es esa persona, desde cuando estaba ahí?

— "N- no lo había visto... ¿cuánto tiempo ha estado ahí sin que nadie lo vea?" — se preguntó Wattson.

— En que estás pensando, dímelo — dijo el rubio.

— ... — aterrorizado.

Nadie hablaba ni movía un músculo, había un misterioso miedo a la muerte que nos invadía las mentes.

— Dímelo.

— ... No estoy p-pensando en nada...

— Te has atrevido a mentirme, admiro tu valentía para hacerlo — dijo.

— ¡N-no le estoy mintiendo!

— ¿Porque me estás gritando? — preguntó con una mirada penetrante.

Eso asustó al líder de tipo eléctrico, algo malo iba a pasar y nadie quería saberlo ni verlo.

— P- perdóneme ... — le temblaba la voz.

— Yo no perdonó a nadie, todos me perdonan, pero yo no perdonaré a nadie, soy alguien perfecto, alguien superior, y tú, una persona insignificante como tú acaba de cometer el error de negármelo — dijo el rubio.

— ¡Se equivoca, se lo ruego perdóneme!

— ¿Me estas dando una orden?

El líder no podía hacer nada más que soltar un grito ahogado de terror al ver que se le acababan las opciones.

— Te has negado a la perfección, mereces morir.

— ¡POR FAVOR, SE LO SUPLICÓ, PERDÓNEME!

Una clase de tentáculos negros con una punta roja aparecieron del cielo y estos empezaron a rodear a Wattson, atrapando todas sus extremidades. Estos empezaron a separarlo del suelo y empezaron a estrangularlo.

— ¡SEÑOR, SE LO SUPLICO!

Todos los tentáculos atraparon al líder y empezaron a apretar todo su cuerpo, impidiéndolo respirar correctamente y impidiendo la circulación de su sangre.

Estos apretaron tanto hasta un punto que Wattson explotó como si de un globo de sangre se tratara, esparciendo toda su sangre y órganos por todos lados, una escena macabra que todos nosotros presenciamos con el mayor temor a la muerte.

Después de haber aplastado a un líder, los tentáculos desaparecieron y el rubio volvió a mirarnos a cada uno de nosotros.

— ¿Sabéis porque estáis aquí? — preguntó el rubio asesino.

— Quiero irme a casa... — dijo Tate, el niño líder de gimnasio psíquico con la voz temblorosa y en estado de shock.

— ¿Quien te ha dicho que podías interrumpirme? — preguntó.

El niño, por temor a responder algo incorrecto, se callo y hizo como si no hubiera dicho nada. No quería terminar como Wattson. Y menos con la mente joven que tenía, eso debía ser un trauma para él.

— ¿Porque no me respondes, acaso me estás ignorando? — dijo.

— ... .. No- no es eso.

— Entonces que es, dímelo.

— Es... es... el m-

— El miedo a morir por decir algo incorrecto, ¿no?

— *asiente aterrorizado*

— ¿Me tienes miedo?

— ... — no respondió.

De repente los tentáculos vuelven a aparecer y agarran a una velocidad vertiginosa el cuello de Tate, hecho esto empezaron a elevarlo y a asfixiarlo con lentitud.

— ¡Hermano no! — gritó Liza, la hermana de este.

— Que alguien le tenga miedo a un ser perfecto me parece un insulto, un insulto universal, di que es mentira, di la verdadera razón por la que tienes miedo, confiésate ante mi— dijo.

Lo cierto es que todos teníamos miedo, aquel rubio se creía un rey, o quizá lo era, o aún peor, podría tratarse de un emperador que ninguno de nosotros conocemos...

— ¡No te tengo miedo... le tengo miedo a la muerte pero a ti no...! — dijo casi sin voz.

Los tentáculos dejaron de apretar.

— ¿A la muerte? — serio.

— S-si...

Un silencio se creó después de aquella afirmación, pero todo fue en vano.

Los tentáculos recuperaron la fuerza monstruosa que tenían y asfixiaron completamente al pobre niño, matándolo y dejándolo caer.

— Si le tienes miedo a la muerte no me sirves para mi imperio, púdrete en la miseria

— ¡NOOOO!!! — gritó mientras lloraba la muerte de su hermano.

— Gritas demasiado, tú aguda voz me irrita.

Un tentáculo atravesó todas las entrañas de la niña y la dejó caer por un precipicio, matándola de altura.

¿Que era esto, hemos llegado hasta aquí para sólo morir? Porque está empezando a matar a cada uno de nosotros, que está buscando?

— Os había preguntado algo, ¿sabéis porque estáis aquí?

Ningunos de nosotros respondió, a pesar de saber que nos podía pasar si no respondíamos el miedo podía más que nuestra propia mente.
Por suerte, el rubio no hizo nada y se lo tomó como un no.

— Bien, estáis aquí por mi propia necesidad, os he elegido a vosotros porque sois los entrenadores más populares de la región y me dio la sensación de que podríais saber algo acerca del tema.

Está buscando algo... eso es obvio, ¿pero que tiene que ser para que tenga que acudir a nosotros? yo ni siquiera soy un líder de gimnasio.

— ¿Alguien de vosotros ha visto al Pokémon mítico llamado Celebi? un ser singular y místico con el don de poder viajar por el tiempo, es decir, uno con un poder similar al dios del tiempo el cual yo controlo gracias a cierta cadena roja, ¿alguien... lo ha visto?

No lo conozco... que sucederá con la gente que no lo conoce, viajes en el tiempo... ¿un Pokémon capaz de hacer eso existe...?

— Tú — señaló el rubio al líder de gimnasio de tipo normal: Norman — ¿No te suena... un ser como él?

Su voz era tan profunda, intimidante y amenazante que Norman se tardó unos buenos segundos en responder.

— No... no conozco ningún Pokémon como él...

— ... ... ... Pues entonces ya no me eres de utilidad.

Los tentáculos rodearon las caderas del líder a una velocidad que nadie pudo notar, este grito y suplicó por su bien, pero aquel rubio seguía ignorando los lloros de sus víctimas.

— Puedes quemarte en el infierno por la eternidad, duerme por siempre — se despidió.

— NOO!! — suplicó.

Los tentáculos oscuros cortaron por la mitad al líder, esparciendo todos sus intestinos por el suelo, cada vez, quedábamos menos, y fue una verdadera masacre, porque a partir de ahí, el asesino empezó a preguntarle lo mismo a cada uno de nosotros, y a cada negativa, cada persona inocente que moría.

— Por favor señor! No tengo la culpa de no saber quién es ese Pokémon...! Porfavor déjeme vivir!!! — le suplicaba Wallace, líder de tipo agua— No quiero morir! No quiero morir ahora!

— Tienes toda la culpa, todos vosotros tenéis la culpa, la culpa del desconocimiento, para mi eso es un pecado, disfrutáis de vuestras vidas ganando dinero y humillando a los más pobres que deambulan en el peor de los infiernos, podrías haber evitado presenciar esta masacre sabiendo la mitología de las otras regiones, pero no, igual que hizo un viejo amigo mío... — apareció la imagen de Adaman en su cabeza — seguisteis con vuestras lujuriosas vidas en vez de saber más acerca de la cultura, no te perdonaré, siempre te culpare y no te salvaré.

¿De que estaba hablando? Esta loco... nos matará a cada uno de nosotros.. no hay escapatoria, si nadie de nosotros conoce a ese tal Celebi será inevitable nuestra muerte... ¿pero porque pregunta eso? Porque le interesa Celebi...?!

— NO QUIERO MORIR!!!

Los tentáculos separaron cada extremidad de su cuerpo y por último, su cabeza. No se podía explicar el tipo de trauma que nacía en el interior de cada uno de nosotros.

El líder de tipo lucha, Brawly, no aguantó más y cometió el error de su vida de salir corriendo e intentar escapar, mientras la cabeza de Wallace rebotaba sobre el pavimento y esparcía su sangre por alrededor mientras sus ojos se salían de su órbita.

Obviamente, el rubio lo vio, y antes de hacer lo que tuviese que hacer, le dijo algo a Wallace.

— ¿Sabes? La cabeza de un ser vivo sigue estando conscientes alrededor de 20 segundos después de ser decapitada, aprovecharé esa pequeña cantidad tiempo en hacerte ver cómo muere ese cobarde — le dijo a la cabeza de Wallace.

Los tentáculos se desplazaron y atraparon al líder que huyó, estos lo llevaron hasta el rubio y este, con una sonrisa macabra, se acercó.

Antes de que sea demasiado tarde cerré los ojos, porque lo último que vi fue aquel asesino clavándole los dos pulgares en los ojos a Brawly mientras este era incapaz de gritar por culpa de los tentáculos, pobre Wallace, tuvo la peor muerte de todas al ver como lo mataban a él mismo y a otro.

Era una total masacre, un festival de órganos y sangre que nunca olvidaría, y todo por no saber responder a una pregunta suya. Un detalle del que me di cuenta fue el oscuro dragón colosal que se hallaba arriba nuestro, aquellos tentáculos eran sus alas.

Los demás líderes también murieron, y no especificaré la forma en que lo hicieron porque no es de interés, los únicos que quedábamos con vida éramos los líderes del equipo Aqua y Magma, Maxie y yo, y la ayudante de Maxie: Courtney (Carola en español).

Era el fin, todo dependía de nuestro conocimiento y yo desconocía quién era Celebi, había llegado mi fin e intenté impedir que las lágrimas del terror cayeran por mis mejillas.

Sin embargo, antes de que el rubio me preguntase, Maxie se adelantó.

— Conozco a Celebi.

— ...

¿Que? Es obvio que es mentira, pero porque lo hace? morirá si descubre que es mentira!

— Y como — preguntó.

— Cuando viaje a Johto, me interese en la mitología igual que lo hice en Sinnoh, me encontré un mural donde aparecía ese Pokémon hada de color verde.

— ...

— ...

— ... se que me estás mintiendo...

Se acabó, moriremos los tres, se acabó esta vida tan patética, pues tendré que decir adió-

— Pero no me disgustas, no me disgustáis ninguno de vosotros tres — sonrió.

— ¿Porque?! — pregunté sin miedo.

— ¿Que porque? Las personas a las que maté no podrían comprender el porqué lo estoy haciendo, pero vosotros si, porque sois como yo, queréis un nuevo mundo y por eso sois gente malvada.

Era por eso?! Porque éramos malvados? No íbamos a morir entonces? Pero a costa de que?

— Vosotros os dejasteis ser consumidos por las tinieblas, escogisteis el camino por el que yo pasé, eso... eso es perdonable, al menos por ahora, viviréis únicamente si cumplís con el siguiente cometido...

— ¿Que cometido?

— Quiero que busquéis a un jerarca con un arete en el oído izquierdo, acompañado de ese mismo ser singular.

No teníamos más remedio que aceptar si no queremos morir.

— Os daré estos relojes, son "relojes distorsión", estos calculan el tiempo en esta dimensión en cualquier sitio que estéis, escuchadme bien, si esa aguja da 10 vueltas a vuestros reloj se os habrá acabado el tiempo y os mataré, vuestro objetivo es simple, tenéis que viajar por el tiempo y traerme vivo a ese susodicho jerarca, su nombre Adaman.

— Y tu, como te llamas tu? — pregunté.

— Soy Volo, pero desde ahora en adelante seré vuestro señor, vuestro rey.

— Entendido Lord Volo, ¿pero como viajaremos por el tiempo? nos tenemos vuestros poderes — preguntó Maxie, arrodillado.

— Es simple.

El dragón de Volo abrió un portal en forma de grieta a pocos metros dentro.

— Si atravesáis ese portal os conducirá hasta Cyrus, un general mío, él tiene bajo su control al Dios del tiempo Dialga, él os puede llevar hasta cualquier época.

— Entendido Lord Volo, lo haremos por usted — dijimos los tres a la vez.

— Aquí estaré — sonrió diabólicamente.

Y así fue como pegué un último vistazo a todo el escenario, a todos los cadaveres y todo el terror que hubo en ellos, ahora tendría que cooperar junto con mis enemigos para encontrar a ese tal Adaman, acompañado de ese Pokémon llamado Celebi.
Sin más dilación, entramos en el portal y salimos del mundo distorsión.

Fin del capítulo.

La historia continúa...