𝟭𝟴.
Amelia se encontraba rumbo a la preparatoria Hawkins, hoy la iba a llevar su hermano ya que no tenía deseo de manejar.
— ¿Quien te regaló esa cadena? —Steve miraba de reojo a su hermana la cuál agarraba la cadena con una sonrisa.
— Me la regaló Lily. —Steve frunció el ceño para luego dirigir su vista hacia el frente.
— Pero tiene de inicial una " B " No una " L " —Amelia suspiró para luego observar a Steve—. No me mires así, solo tengo curiosidad.
— No seas tan curioso, hay algunas cosas que es mejor no contarlas. —Steve suspiró para luego asentir—. Luego te contaré, lo prometo.
— Está bien, solo me preocupo por ti, no quiero que nada te pase, ¿Lo sabes verdad? —Amelia asintió para luego besar la mejilla de Steve y este hizo un sonido de queja—. Estoy manejando y me dejaste la mejilla llena de tu saliva, que asco.
Amelia se encontraba en su closet terminando de acomodarse su vestido, sin duda alguna le gustaba como aquel vestido se ajustaba a su cuerpo y la hacía ver radiante.
— ¿Ya estás lista? —Amelia salió del closet con un hermoso vestido negro que resaltaba su hermosa figura—. Wow meli, te ves hermosa, no pareces mi melliza.
— Es que obviamente soy mucho más bonita que tú. —Steve la codeó para luego empezar a carcajear, de repente se escuchó como sonó el timbre abajo—. Ya llegaron, te espero abajo.
Amelia se observó en el espejo, le gustaba como se veía con aquel hermoso vestido negro, después de mucho tiempo Amelia se sentía conforme con su cuerpo, se sentía viva después de todo, aunque sabía que engañar a su novio no estaba bien, pero sin ninguna duda se sentía más feliz ahora, la chica abrió la puerta de su habitación para luego salir y empezar a bajar las escaleras, la chica observaba todas la personas que habían.
— Te ves hermosa. —Ares le sonrió para luego besarla—. Me encanta como se te ve ese vestido.
— Gracias, tú también te ves muy guapo. —Ares le entregó un ramo de girasoles lo que provocó que Amelia sonriera—. Están preciosas, Gracias cariño, iré a ponerlas en agua, no me tardo.
Amelia empezó a caminar hacia la cocina, para luego agarrar un jarro con agua y poner los girasoles, de repente sintió como la puerta de la cocina se abría y Amelia observó a Billy mirándola de arriba abajo con un cigarrillo posado en su boca.
— Casi me matas del susto, ¿Que haces aquí? —Billy se acercó a Amelia para luego pasar su brazo por la cintura de la castaña y agarrarla por el cuello para luego besarla—. ¿Te estás volviendo loco? Si alguien nos ve estamos muertos.
— Te ves hermosa, estoy loco por arrancarte ese vestido tan ajustado. —Billy sonríe para luego apretar el trasero de la chica, el rubio frunció el ceño para luego observar el ramo de girasoles que estaba al lado de ellos—. ¿Te lo regalo tú noviesito? Que patético.
— Son lindas, siempre me han gustado los girasoles. —Billy bufa para luego soltar a Amelia, el rubio sacó una caja que tenía guardado en su chaqueta y se la entregó a Amelia—. Ábrela cuando te vayas a dormir, feliz cumpleaños nena.
— Ya fue suficiente con la cadena Billy, pero gracias. —Amelia miró para todos los lados para luego besar a Billy, Amelia rápidamente se despegó al oír pasos acercándose a la cocina, cuando la puerta se abrió, la castaña observó a Lily allí, la cual tenía una sonrisa coqueta mientras miraba a su amiga y al rubio—. ¡Hola! Por qué no vamos mejor a afuera.
— ¿Que hacía Billy ahí? — Lily codeo a Amelia y está solo negó mientras sonreía—. ¿Se estaban comiendo a besos verdad?
— Claro que no, qué cosas dices. —Lily sonrió para luego agarrar dos vasos de cerveza y darle uno a su amiga—. Sabes que no tomo, pero gracias, tengo que ir al baño, vuelvo en un momento, no te muevas de aquí por favor.
Amelia subió las escaleras para luego abrir la puerta del baño y antes de cerrarla alguien puso el pie, Amelia se volteo y pudo ver a Billy cerrando la puerta con seguro, antes de que la chica dijera algo, el rubio se abalanzó a ella besándola con desesperación, la castaña le quito la chaqueta al chico para luego empezar a desabotonar su camisa, el rubio agarró los muslos de la chica para luego subirla hacia en el lavamanos, el chico le quito el vestido para luego empezar a masajear con una mano su pecho mientras con la otra tocaba la vagina de la chica.
Amelia subió su cabeza hacia arriba sintiendo el exquisito placer que le daba Billy, el chico sacó sus dedos para luego chuparlos, el rubio la bajó del lavamanos para luego voltearla y poner su cuerpo en el lavamanos, agarró el cabello de la chica para luego jalarlo y hacer que su cabeza se levantara.
— Esto es por tu cumpleaños pequeña perra. —Billy lamió la mejilla de la castaña para luego entrar en ella sin previo aviso, la castaña empezó a gemir mientras Billy jalaba su cabello y la agarraba de la cintura para entrar más profundo en ella—. Vamos gime para mi, sé que te gusta pequeña sucia.
— Billy, más despacio.... —Billy agarró el cuello de la chica para luego empezar a ir más rápido, Amelia sentía como ya estaba apunto de llegar—. Sigue así..
Billy metió dos dedos en ella sin previo aviso, lo que provocó que Amelia empezara a gemir por tanta excitación pero de repente los dos escucharon como tocaban las puerta.
— ¿Amor? ¿Estas hay? Lily me dijo que estarías en el baño. —Ares seguía tratando de abrir la puerta sin éxito—. ¿Estas bien?
Se que he estado muy desaparecida,
pero prometo volver con muchos más capítulos.
Por ahora le dejo esté hermoso capítulo.
Ojalá les haya gustado.
Besos! ❤️🩹
Aclaración:
Todos los personajes tienen ya 18 años,
tanto Amelia como Billy son mayores de edad.
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