XII. 𝐔𝐍𝐀 𝐁𝐀𝐓𝐀𝐋𝐋𝐀 𝐒𝐀𝐍𝐆𝐑𝐈𝐄𝐍𝐓𝐀
Kaori, Kei y Emiko fueron inmediatamente a llamar a Gakuto para decirle lo que estaba pasando. No pudieron avisarle a los demás debido a que había demasiadas personas en la multitud, corriendo desesperadamente a la salida. Aunque van a avisarle por mensaje a algunos de ellos.
─Le diré a mi hermano─ dice Kei, sacando su celular y marcando el número de Kazuki, pero no responde. Espera un minuto, pero no hay respuesta alguna de parte del mayor─. Ay no, esto me da muy mala espina─ dice con preocupación.
─Conociendo a los chicos, deben estar peleando contra ese sujeto que dijo Karuta─ dice Kaori─. Seguramente si llamo a mi hermano, no va a atender al teléfono porque debe estar peleando contra él. Sólo espero que pueda resistir...
─En ese caso la que podría responder es Kumiko─ dice la pelirrosa─. Ella no pelea, entonces de seguro atenderá al teléfono.
─Intenta.
Emiko llama a Kumiko al celular.
Mientras tanto, Kokoro y Tomi encontraron unos binoculares en una caja.
─... A.
─Quién diría que había binoculares aquí.
─Con esto podremos vigilarlos.
Kumiko seguía congelada en su lugar, estremecida por escuchar la voz de la difunta peliblanca, hasta que escuchó su tono de llamada. La estaban llamando.
─Emiko...─ los ojos le brillan, e inmediatamente atiende la llamada─¡Emi! ¡Me tenías preocupada!
─Perdón que no te hayamos podido avisar físicamente que nos fuimos, había demasiada gente corriendo como loca.
─¿Dónde estás? ¿Kaori y Kei están contigo?
─Sí, fuimos a buscar al papá de Kei para que se encargue del problema.
─Gracias a Dios que los tres están a salvo.
─¿Y tú dónde estás?
─Sigo en el escenario con Tomi y Kokoro.
─...
─¿Emiko?
─¡Las tres deberían irse de ahí!
─Lo sabemos, de hecho todas las demás se fueron, pero nosotras no quisimos dejar a los chicos solos. Tomi nos dejó bien claro que no iba a dejar sola a Takeshi, Kokoro lo mismo y yo no quiero dejar a Shun solo.
─Mmmm...
─Sé que corro peligro de que ese hombre me mate o a alguna de ellas, pero... no sé cómo explicarlo. No quiero dejarlo solo.
─Mira, entiendo cómo te sientes, y al decir que estás con Tomi y Kokoro, da a entender que Megumi se fue con las demás, ¿no?
─Sí.
─Te voy a dar un consejo, que te vayas de ahí y vuelvas a casa junto con ella. Eres madre, la madre de Megumi, no puedes dejarla sola y exponerte a un peligro de esa magnitud, puedes perder la vida, y vas a dejar sin madre a una pobre niña de casi cuatro años.
Esas palabras tocaron el corazón de Kumiko.
─Si fuera tú haría eso, aun si significa dejar solo a mi novio...
─Pero... si algo le llega a pasar a Shun, va a ser lo mismo, Megumi me tendrá a mí, pero se quedará sin su padre.
─... Sí, pero...
─Yo como su novia no lo voy a abandonar, ¿te quedó claro?
─Pero él lo que quiere es verte a salvo, y si te quedas ahí vas a estar de todo menos a salvo, ¿entiendes, Kumi?
─Sí, pero una parte de mí me está diciendo a gritos que no lo puedo abandonar, o no estaría haciendo lo correcto.
─Mira, tú no sabes pelear, ¿de qué va a servir quedarte ahí si no puedes proteger a Shun? Sólo serás una preocupación más para él...
─Emiko...
─Me tengo que ir, al fin llegamos a donde está Gakuto. Por favor, hazme caso, por Megumi─ cuelga la llamada.
─Kumi, ¿quieres ir afuera a ver qué están haciendo?─ le pregunta Tomi, sosteniendo los auriculares.
─Sí, claro...
─¡No vayas! ¡Vete de ahí, Kumiko!
La voz de Ai de nuevo.
─A-ai...
Shun está muy tranquilo, sabiendo que va a pelear contra un sujeto capaz de detener a Wakashimazu y a todos los que saben pelear muy bien.
─Voy a demostrarle a todos que yo también puedo pelear. Les demostraré que soy el novio de Kumiko y el papá de Megumi, peleando con todas mis fuerzas, tal y como me lo enseñó Wakashimazu. Esta va por ti, Ken...
Hyuga finalmente se despierta luego de haber estado inconsciente un largo rato. La bala que tiene en su cuerpo lo tiene muy adolorido, más la pérdida de sangre.
─Ma-maldita... sea...─ se da cuenta de que cerca de él está Yoshiko, desmayada y con mucho dolor por su herida y también por la brutal pérdida de sangre─Yo-yoshiko...
─Kojiro... N-no creo que pueda durar más tiempo así...
─No digas eso, tenemos que acabar con este sujeto, no descansaré hasta ver su cadá...
─Yo ya no puedo moverme, apenas puedo articular una oración. De... de hecho estuve un rato guardando fuerza para poder gritarles que el arma estaba cerca de ellos, no sabes lo que me costó gritar, pero la voz me salió rota, y sentí como si mi garganta estuviera sangrando....
─Yoshiko...
─Cada vez siento como una calidez en mi cuerpo, y como si mis párpados se cerrasen al igual que unas persianas...
─¡Ni se te ocurra cerrar los o...!
Los párpados de Yoshiko se cierran.
─No tengo fu-fuerzas para abrir los ojos, pe-pero sigo viva, por ahora...
─Yoshiko. ¡Yoshiko! Maldición...
Urabe sostiene a Kishida para que no se desmaye por su cuerpo débil, Nishio sigue inconsciente, Nakayama está tirado en el césped con su brazo roto, Karuta sigue lastimada en el suelo, tratando de recuperar energías para intentar provocarle daño a Zenkou aunque sea, Sawada y Sorimachi están adoloridos en la cabeza y en la espalda por el fuerte pisotón que les dio el grandote, Yoshiko está a nada de desmayarse, Hyuga está muy adolorido como para poder ponerse de pie, además de que si se intenta levantar, ya con hacer fuerzas, hará que pierda más sangre de la que ya perdió, y Wakashimazu está más o menos en las mismas condiciones que Karuta.
La única esperanza ahora es Nitta.
─¡Vamos, atácame, vampiro!─ le dice Zenkou, haciéndole un ademán con la mano para que él se acerque.
─No, ven tú por mí, ya que tanto te encanta golpear a la gente, viejo puto.
─¡¿QUÉ DIJISTE, MISERABLE?!
Nitta le echa el dedo del medio para provocarlo. Y vaya que lo logró.
─¡¿QUÉEEEE?! ¡¿CÓMO TE ATREVES?! ¡NADIE SE BURLA DE ZENKOU MAJIMA Y SE SALE CON LA SUYA!
─Pues entonces ven a mí si tanto te enojaste, sensible de mierda.
Zenkou gruñe furioso, y decide correr hacia Shun para atacarlo.
─¡NITTA!
─¡TEN CUIDADO!
Pero el "vampiro" se queda quieto, esperando a que Zenkou se acerque a él.
─Recuerda lo que aprendiste en tus lecciones de karate con Ken─ piensa, cerrando los ojos para hacer memoria de aquellos días.
─Si alguien quiere pegarte una piña en cualquier parte del cuerpo, un buen truco de defensa es agarrar su mano lo más fuerte que puedas, luego haces fuerza para bajar el brazo, y antes de que tenga tiempo para reaccionar, tú le das un golpe en la cara para debilitarlo, y si sientes que no es necesario, golpéalo tanto como quieras en cualquier parte del cuerpo, ¿te quedó claro?
Shun abre los ojos al darse cuenta de que tiene a Zenkou a unos pocos pasos.
─¡CÓMETE ESTO!─ Zenkou se prepara para golpearlo en la cara, pero Shun agarra su puño con su mano, con toda la fuerza que tenía, ya que el mayor tiene una mano muy grande, además de ser muy fuerte─¿C-cómo es que...?
Luego baja su brazo y le inserta una patada en sus genitales, haciendo que el mayor se doble de dolor.
─¡VAMOS, NITTA!
─¡Maldito infeliz!
Shun se coloca detrás de él y le da una patada en la nuca que estuvo muy cerca de dejarlo inconsciente, y después le arrebata el revólver que había guardado dentro de su pantalón.
─¡ESO!
─¡TIENE EL REVÓLVER EN SU MANO!
─Y como Zenkou no tiene casco puesto, puede matarlo de un tiro en la cabeza sin problema.
Todos ya están cantando victoria.
─Has ocasionado mucho terror en los corazones de las personas, transformaste a personas que sufrieron en su infancia en asesinos que terminaron muriendo y ni siquiera te importó eso. No te lo perdonaré jamás─ le dice Nitta.
Zenkou se cubre la cara con sus brazos para evitar el impacto de la bala en su cabeza, pero Shun le quita los brazos de la cara y los pisa a ambos, sosteniéndolos para que no los pueda mover.
─¡AHORA SÍ! ¡DESPÍDETE!─ tira del gatillo...
Pero el arma ya no tenía balas...
─¿Qué...?─ tira tres veces del gatillo. Golpea el arma, luego le quita la parte donde van las balas, y se da cuenta de que no tenía absolutamente ninguna bala─Me estás jodiendo, ¡¿CIERTO?!
─N-no puede ser...
─¡TAKESHI, MALDITA SEA, TENÍAS QUE GASTARLAS TODAS!─ le grita Sorimachi.
─¡ENTRÉ EN PÁNICO! ¡NO ME ECHES LA CULPA!
─¡¿Y DE QUÉ TE SIRVIÓ DISPARAR ASÍ SI DE TODAS FORMAS NOS HIZO MIERDA A LOS DOS?!
─¡SILENCIO, MOCOSOS MALNACIDOS!─ Zenkou aprovecha la distracción de Nitta para darle un golpe en el estómago que lo deja sin aire, y le quita el arma para lanzársela a los dos que están peleando, con tal de golpearlos y que se callaran.
Sawada se hace a un lado y Sorimachi se agacha para evitar que el arma le diera en la cabeza.
─Uy, estuvo cerca.
─Maldición, justo cuando Zenkou tiene la cabeza desprotegida, el arma se queda sin balas...
Urabe está tan furioso que toma el casco del de tez grisácea que estaba tirado cerca de él, y lo lanza lejos.
─¡VETE AL CARAJO, CASCO DE MIERDA!
Nitta se agarra el estómago por el fuerte golpe que recibió.
─Eres un desgraciado─ tose sangre.
─Estuviste muy cerca, Shun Nitta, es más, realmente pensé que iba a ser mi fin─ el mayor se pone de pie─. Admito que fue una buena técnica la que usaste de agarrar mi puño y bajarme el brazo para propinarme un golpe en los genitales.
Shun empieza a respirar agitadamente por el dolor.
─Pero como les dije a todos ustedes, ninguno tiene la posibilidad de acabar conmigo.
─No creas que he llegado a mi límite, maldito asesino─ corre hacia él, cargando su puño, pero Zenkou le da una patada que lo manda a volar.
─¡NITTA!
El mayor corre hacia él antes de que toque el suelo y le da otra patada que lo vuelve a mandar hacia arriba, y antes de caer, le parte la espalda de un rodillazo. Shun escupió una buena cantidad de sangre.
─N-no, no puede ser... ¡NITTA! ¡NO TE RINDAS!
Zenkou lo agarra de la cabeza y lo levanta en el aire, dispuesto a darle múltiples golpes en el estómago. Por cada golpe, Nitta escupe unas gotas de sangre.
─E-esto es brutal─ dice Sorimachi, horrorizado.
─¡N-nitta! ¡DEMONIOS!─ Wakashimazu toma coraje, sostiene uno de los fierros que estaba tirado, y lo lanza para tratar de abrazar a Zenkou, pero el muy psicópata puso a Shun en frente de él y el fierro le atravesó el brazo─No... ¡NO! ¡NO!
─¡AAAAAAAAAAH!
─¡JAJAJAJAJA! ¡VEO QUE NO LES QUEDÓ CLARO QUE NO PUEDEN LANZARME COSAS DESDE LEJOS, O LAS COSAS LE DARÁN A SUS AMIGOS!
─¡PERDÓNAME, NITTA!
El "vampiro" está agonizando de dolor por tener el fierro atravesado en su brazo. Zenkou se lo quita violentamente y se lo vuelve a lanzar a Wakashimazu, quien se hizo a un lado a gran velocidad, antes de que el fierro lo atravesara, pero el mismo le rozó la mejilla, y estuvo por atravesar a Urabe y Kishida, quienes se tuvieron que hacer a un lado, y el fierro se clavó en el árbol.
Los dos están impactados, viendo cómo el fierro se clavó en el árbol, y que casi los mata a ellos.
─E-eso sí estuvo muy cerca...
─Q-qué puntería tiene...
─U-usa a los demás como escudo humano, y tiene mucha fuerza en su interior, sin importar cuánto lo ataquemos... Es fuerte. Muy... muy fuerte─ dice Wakashimazu, anonadado.
─Todos están muy lastimados para seguir peleando, ¡eso me aburre!─ le da una piña en la cara a Nitta, haciendo que salga sangre de su nariz, de su boca y su frente, y luego lo deja caer en el suelo─Creo que los mataré a todos con el fierro ahora mismo, y luego iré por Sakagami y las demás─ le da una patada en el costado a Shun, que lo hace rodar hasta llegar a Nishio, quien finalmente estaba despertando luego de estar un largo rato inconsciente, pero ambos chocan y se lastiman aun más.
─¡Nitta! ¡Nishio!
─E-es una bestia─ dice Hyuga.
─Oh, más que una bestia. Soy el mismo demonio─ pega un grito monstruoso que se escucha desde lejos, y luego se ríe de manera vil.
Tomi, Kokoro y Kumiko están en shock al ver cómo todos sus amigos estaban heridos, pero Kumiko está horrorizada al ver a Nitta con el brazo apuñalado.
Kokoro le tapa la boca.
─Sé que ibas a gritar. Todas queremos hacerlo, pero si lo hacemos, vendrá por nosotros.
La pelirrosa está muy frustrada, y con ganas de llorar.
Esta batalla se está volviendo cada vez más sangrienta, y parece que no va a tener un final feliz...
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