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── 012


❝ AMONGS THE TWO OF US ❞

 GENERAL KIRIGAN FEM! oc






     DESDE QUE EL GENERAL SE HABIA CASADO CON LA SEÑORITA VOSTOKOFF,  había dos tipos de reuniones del consejo. Por un lado, su nombre pesaba mucho poder político, siendo la hija del noble señor, la princesa era un prestigio con poder en el palacio, alguien de ese enorme nombre al lado del general. Bueno, el propio general nunca se preocupó por el afecto de todo, él era demasiado inteligente el hombre para ver más allá de cualquier beneficio político. T/N, en el pico de su juventud, tenía sueños y esperanzas para su matrimonio que se fueron aplastando uno tras otro con cada poco de desarrollo de su relación con Aleksander, llegando a darse cuenta de que no se había casado con un hombre afectuoso, ni siquiera cuidadoso, pero alguien tan hambriento de poder y frío que no piensa dos veces para doblar su moral. Es lo que T/N pensaba de él a medida que llegagaba a saber más y más de él, pero se mantuvo no tan disgustada después de un tiempo, un año en el matrimonio que acaba de mirar hacia atrás pensando en lo tonto que era esperar nada del hombre con el que se casó.

 Sin embargo, pensó que funcionaba bien, si realmente hubiera querido casarse por amor podría haber tenido una aventura de verano, fugarse con algún mozo de cuadra y llamarlo amor para vivir en alguna casa de campo lejos. Pero no, ella estaba destinada a deberes más que eso. 

 Tuvo su primer consejo del ejército en el pequeño palacio, el ejército del rey. Pero el rey nunca se molestó en asistir. Lady Kirigan, la princesa, se consideraba capaz con el conjunto de oficiales que tenía para tomar la mayoría de las decisiones.

 Su marido no comparte la cama con ella, pero al menos es el jefe de las reuniones del primer consejo del ejército. Rara vez comparten momentos íntimos aunque puedes verlo de campamento en campamento. Y, por supuesto, la fachada más infame de ser la pareja que sí comparte afecto el uno por el otro en las cenas de glamour entre señores y señoras borrachos que se creen toda aquella farza. 

 Honestamente, en el frente político el primer ejército se sentía más liberado y abierto con menos de las entradas del general, dado que él no ensamblaría sus reuniones desde que la, ahora, señora Kirigan fue colocada allí.

─── Dejen la habitación ─── demasiado para un negocio ininterrumpido, el general irrumpió en la sala de reuniones donde los oficiales del primer ejército de su esposa estaban teniendo una discusión en curso dados los mapas y los informes puestos sobre la mesa ─── Tengo algunos asuntos importantes que discutir con mi... señora esposa ─── anunció como los asuntos parecían ser bastante importantes y sobre el trabajo, dado que a la carta sellada en sus manos y la urgencia que presentaba en su voz.

 Con un breve asentimiento de ella, los oficiales salieron de la habitación dejando a los dos solos. T/N se sentía un poco molesta con él sólo por irrumpir a través de su reunión en curso muy consciente de que no habría podido ser si fuera al revés, pero ella deseaba que fuera lo que fuera el asunto que se va a hacer con prontitud por lo que optó por no hablar de ello.

─── ¿Qué es? ─── Aleksander puso la carta en su mano sobre la mesa para que ella la leyera, cuando ella la cogió él habló.

─── Es una carta para Lord Eldon, un querido amigo de tu padre que no me tiene mucho aprecio, necesitamos su ayuda para más hombres en el frente de Ravaka ya que el segundo ejército está ocupado por el redil, pero él no accedería si la carta saliera de mí ─── Aleksander soltó una pequeña burla sobre el hecho de que algún señor de una tierra que apenas cubre unas 5 aldeas fuera desagradable con él, el general, el invocador de sombras. Pero en su opinión, estos señores nobles eran tan mezquinos con sus aliados y Aleksander sabía que no era tan amigable.

─── Necesito que firmes esa carta ─── T/N tenía los ojos fijos en la carta leyendo hasta el final, escrita en primera persona con palabras que parecían como si la hubiera escrito ella misma.

─── ¿Tu escribiste esto? ─── pregunto levantando la vista de la carta. 

─── No ─── Aleksander respondió con rotundidad y sin verguenza, seguramente el general no sería tan libre como para escribir él mismo cartas enmarcadas. 

─── Bueno, la próxima vez que te apetezca escribir una carta en mi nombre, que sepas que yo no sería tan directa con un querido amigo de mi padre que me conoce de toda la vida... ─── se le cortó la voz con una risita reprimida que Aleksander ni siquiera pareció notar. 

─── Muy bien, entonces escríbela tú ─── le tendió un papel en blanco sobre la mesa ─── hazla tan auténtica como quieras ───

─── Podría escribirla pero no voy a firmarla ─── T/N hablaba con sinceridad pero estaba tranquila para exponerlo ─── No lo apruebo ───

 ─── ¿Perdón? ─── dijo Aleksander, levantando una ceja bastante fastidiado de que ella eligiera una decisión que repugnaba a la suya. 

─── Si firmo la carta, Lord Eldon seguramente enviará a sus soldados dado que debe vigilar una finca más grande con su puñado de ejército no sería prudente, así que no. No firmare ───

 ─── Precisamente por eso quiero que la firmes. Si la carta es tuya, enviará a sus hombres... ¿No me has oído bien la primera vez? ─── preguntó incipientemente malinterpretando en su totalidad lo que ella quería decir. 

─── Te escuché correctamente y estoy diciendo que no ─── Ella todavia tenia un tono de voz calmado pero firme a pesar de su obvia molestia ─── Lord Eldon no es un lord soberano, su ejercito es la tercera mitad del ejercito Real. Para el enviar a sus soldados, la domesticidad de la gente de su tierra estaria comprometida. No voy a firmar la carta y atarlo con una obligación moral ───

─── ¿La domesticidad del pueblo? ─── repitió sus palabras con una burlona diversión ─── Estás cruzando longitudes innecesarias para fastidiarme... sólo fírmala ───  Aleksander suspiró sin considerar sus genuinas intenciones de cuidado del pueblo detrás de ella.

─── Oh, seguro que tengo otras cosas que ser lo suficientemente libre como para molestarle, General ─── dijo cruzando sus brazos a una postura firme ─── Si Lord Eldon envía a sus hombres para ti, el crimen, el saqueo y la interrupción aumentará en sus tierras con menos hombres en patrulla, cuando ni siquiera tiene suficiente como es. Lo siento pero no puedo firmarlo ───

 ─── ¿No lo entiendes? Esto es importante. ¡Necesitamos a esos hombres y sólo se requiere una simple firma tuya! ─── exclamó muy agitado mientras dejaba escapar un exagerado suspiro frotándose los ojos para reponerse de la indeseada molestia.

─── Es como si le hablara a una pared...ni siquiera intentas entender ─── T/N habló negando con la cabeza, Aleksander realmente creía que la barrera que los separaba no era el honor y la moral que ella acataba sino la mezquindad. 

─── Si tu necesitas tanto a esos soldados, entonces escribir la carta a ti mismo. Fírmala y envíala como si fueras el general porque francamente 'nosotros' no necesitamos a sus hombres, el segundo ejército sí, tú sí ───

───  T/N no se llega a-... ───

─── Señora T/N ─── le corrigió a media frase encogiéndose de hombros, no tuteaba a su propia esposa ni siquiera el matrimonio era bastante formal y político, en caso de que creyera que tenía autoridad sobre ella para tutearla prefería demostrarle que estaba equivocado.

─── Fírmalo. Acaba de una vez ─── a Aleksander se le estaba acabando la paciencia para convencer o plantear algún debate mientras ella permanecía tan tranquila como siempre, como si su postura no tuviera ningún efecto en ella. 

 Ella exhaló y tomó el papel en sus manos caminando a través de la mesa hacia él, miró la carta una vez como si estuviera considerando firmarla justo antes de romperla en su cara y dejar que los pedazos de papel cayeran al suelo.

─── No lo haré ─── Aleksander resopló, se levantó como si aquella acción no le molestara, algo que esperaba al inicio de su conversación.

─── Es casi cómico e inmaduro ver lo bajo que estás dispuesta a caer sólo para sacarme de quicio ───

 Todo esto sobre una señal, penso en su cabeza, sin embargo sabía que esta conversación solo iría más y más lejos sin fin. Aleksander era tan testarudo que de todo lo que ella trató de explicarle por qué no firmaba la carta, él se mantuvo en su postura.

─── ¡Ah, sí, claro, mi afición favorita! ─── dijo sarcásticamente poniendo los ojos en blanco mientras intentaba pasar junto a él. Aleksander la detuvo en su camino sujetándola por el brazo, sorprendida por esta acción repentina ella trató de mantener su distancia sin embargo él le dio un tirón firme hacia él para sonar más sincero.

─── Puedes pensar que estás muy por encima de mí con tus principios morales y tu honor, princesa alimentada con cuchara de oro, pero estás aquí, en el pequeño palacio, tomando tus reuniones del consejo como la esposa del general... y eso es lo que te molesta tanto ¿no? ─── se mofó ─── Te duele tu mezquina conciencia... lo pongas como lo pongas, no eres muy diferente a mí. Por algo te casaste conmigo ───

─── Sabes Aleksander, yo no tuve nada que ver en esto. Me anunciaron que me casaría con el general... contigo. Antes de nuestra boda ni siquiera sabía cómo eras, mis creencias no tuvieron nada que ver con nuestro matrimonio, mi padre simplemente me casó con un extraño por orden del rey. Eres demasiado arrogante para estar a tu lado ─── respondió sin rodeos mientras ella lo miraba y él parecía sin palabras soltando el agarre de su brazo. 

 Al instante se arrepintió de su frase consciente de que debe haber picado ella, él no era de los que se disculpan, pero antes de que pudiera siquiera mostrar su ligero remordimiento por las palabras que eligió, ella ya estaba saliendo de su oficina, dejándolo solo. Una vista frecuente para él. Una imagen que no quería admitir pero a la que odiaba estar acostumbrado: ella marchándose.

 Un matrimonio desagradable tenía tanto a Aleksander como a T/N atados a la presencia social de ser una pareja bastante alegre, de la mano y sonriendo a los invitados de la gala. Una de las muchas diversiones mensuales del rey. Reunir cotilleos reales y, como Aleksander dijo, contentando invitados de vez en cuando para la buena mesa a pesar de lo que sucede en el país. T/N  se crió entre estas cenas de sonrisas falsas y sutilezas, sólo asumiendo sus sonrisas no sería tan falso en torno a su propio marido era algo que no había planeado. Pero allí estaban, el general y su esposa, graciosamente riendo de sus comentarios mientras hablaban con los invitados reales, del brazo como si no fuera hace apenas unas horas que dos de ellos tuvieron una discusión sobre asuntos del consejo. 

─── ¡Ah, T/N! ─── la llamó una de las damas de los invitados reales mientras se acercaba a ella y a Aleksander ─── General ─── la dama asintió respetuosamente.

─── Estás preciosa esta noche, princesa... ¿o debería decir señora general ahora? ─── comentó la dama mientras soltaba una alegre carcajada.

─── ¡Me hieres al dirigirte a mí con títulos cuando eres literalmente mi favorita! ─── exclamó T/N con una sonrisa cortés ─── ¿Te tuteas, eh? No insultes nuestro vínculo con títulos ─── adecir verdad ni siquiera recordaba el nombre de la señora que tan alegremente la saludó a ella y Aleksander, recordaba su cara de algunas de las cenas reales y galas de antes y eso era suficiente para una pequeña charla. Sin embargo, el "nombre de pila" fue una burla para Aleksander, que debió de notar que sus labios esbozaban una fina sonrisa, como si no le importara. 

─── Dicen que el matrimonio cambia mucho a las personas, pero ustedes dos siguen tan galantes como el día de su boda ─── exclamó la señora.

─── Muchas gracias, es muy cortés ─── Aleksander habló con una pequeña inclinación de cabeza, él nunca fue de los que se involucran tanto en las pequeñas conversaciones, parecía que su esposa era toda una maestra recordando un montón de detalles sobre casi todos los invitados reales, ella hacía la mayor parte de la conversación por él, mientras que él se quedaba allí con pequeñas cortesías. 

─── ¡Seguro! Y para que un matrimonio te cambie, se requiere bastante de la pareja para estar tan presente ¿no te parece? ─── T/N le dijo a la dama de una manera tan sutil aunque sus palabras pesaban comentarios socarrones dirigidos a Aleksander, quien la miro de soslayo.

─── ¡Oh, tienes tanta razón! Con lo adicto al trabajo que es el general imagino que es difícil conseguir su tiempo ─── bromeó la dama, ajena al escenario original de que su matrimonio fuera peor que eso. T/N no consiguió su tiempo, sus pensamientos o atención fuera de estas cenas de todos modos. Nunca se lo comentó a Aleksander, por supuesto, ya que seguro que lo recibía con desdén. Sin embargo, no le caia bien no conseguir el tiempo de Aleksander fuera de su horario "adicto al trabajo". Parecía algo difícil para la dama y no era sobre el tiempo de ella misma, que tambien estaba en el primer consejo del ejército y trabajaba igual.

 Nada nuevo. 

─── Ocurre tan a menudo... ─── la voz de T/N se entrecortó mientras se reía de lo que parecía ser una mención despreocupada de los negocios de su marido a la señora ─── Te sorprenderías ─── añadió en voz baja para que Aleksander lo oyera. Y lo hizo, había estado escuchando estos comentarios y burlas bastantes veces en el transcurso de toda esa noche. 

 Pensó que tal vez tenía algo que ver con la correlación de su discusión anterior, fuera o no su paciencia se agotó. Después de la cena de comentarios sarcásticos, a Aleksander casi le pareció interminable. Una vez que terminó toda aquella farza, caminó de regreso a los aposentos de su esposa con ella, salieron de estos eventos juntos por lo que parecería que tenían la misma alcoba. Sin embargo, cuando T/N entró en la suya pensando Aleksander caminaría más por el pasillo a la suya, entró en la habitación con ella. 

 T/N simplemente se dio la vuelta cuando entró junto a ella antes de que pudiera empezar a preguntar la razón por la que cerró la puerta detrás de él y se quedó lejos exhalando.

─── ¿Qué fue todo eso? ─── habló y parecía tan exigente. 

─── ¿Qué cosa? ─── preguntó realmente despistada, no creía que esos comentarios le llegaran a él, la mayoría de los que hizo probablemente los había olvidado. 

─── ¡No dejaste de burlarte de mí en toda la noche! ─── dijo cruzando los brazos tratando de mantener la compostura, pero su lenguaje corporal era tan enojado y frustrado. 

─── Oh, ¿lo hice? ─── T/N preguntó ladeando la cabeza tratando de ir a través de algunas de las conversaciones en su cabeza donde él debe haber sentido que ella había hecho eso, tal vez.

─── T/N ¿Que-... ─── 

─── ¿Mhm? ─── ella lo interrumpió a mitad de frase como él usó su nombre de pila. Aleksander habló más allá.

─── Fuiste irrespetuosa conmigo ───

─── ¿Vas a tener otra de tus rabietas otra vez? No tenía suficiente vino para esto... ─── ella suspiró con su sutil compostura y eso sólo irritó a Aleksander más y más. Por mucho que él intentara resultarle su mala conducta ella parecía tratarlo tan trivialmente. 

─── Hablo en serio ─── dijo con rotundidad y un tono enérgico de frustración. 

─── Yo también. De verdad que no he bebido lo suficiente como para volver a pasar por esto ─── dijo alzándole las cejas, dedujo que si reaccionaba y se comprometía con él en serio, no era como si fuera a escucharle en segundo lugar estaba esperando a que reaccionara como él quería para poder decirle lo inconveniente que era para él. Para sus planes.

 ─── ¡No puedes ignorarme con sarcasmo! ─── exclamó Aleksander y sintió como si fuera a perder los estribos así que exhaló tomando aire para que esa situación no se presentara, quería demostrar su punto de vista y no sucedería si actuaba con bastante dureza o ella no estaría dispuesta a escucharlo ─── Soy tu esposo, ¿por qué no puedo llamarte por tu nombre? ───

─── ¿Por qué? ¿Señora del General, Señora esposa no es suficiente? ─── contestó ella apoyándose en la mesa de la gran alcoba donde él seguía de pie junto a las puertas. 

─── Me dirijo a ti con títulos cuando estás rodeada de gente y en reuniones por respeto, pero entre nosotros dos... ───

─── ¡No hay entre nosotros dos! ─── T/N gritó esta vez, la sutileza de su tono dejandola. 

 Estaba más allá de su comprensión de cómo él su proceso de pensamiento contó ella el presagio de su matrimonio desagradable. Levantó las manos y le dijo: 

─── ¡Esta puede ser una de las pocas veces que estamos 'los dos' a puerta cerrada y estamos discutiendo! ───

─── ¿Por qué tienes opiniones tan fuertes hacia mí? ¡Nunca te he hecho daño de ninguna manera! ¡¿Por qué eres tan obstinada?! ─── dijo exclamando mientras caminaba unos pasos hacia ella ambos tonos tan por encima de la decencia como su conversación se calentaba. 

─── ¿Yo? ¿Soy muy obstinada? ¿Mi marido ni siquiera comparte la cama conmigo y tú dices eso? En otras circunstancias no te habrías casado conmigo, no soy como tú, ¿verdad? No soy Grisha, y si no fuera por tu estatus político ni siquiera tendrías esta conversación. ¡Soy yo! Soy yo, yo soy la que nunca te ha hecho daño, que nunca te ha buscado para pelear o para tratarte con frialdad, y sin embargo, te desprecio tanto ─── T/N hablo mientras su voz se quebraba al final de la misma, había pasado mucho por esto en su cabeza. 

 Todo lo que podía estar haciendo bien para que él dejara de ser tan frío con ella hasta que la llevó a dejar de creer en ellos. Aleksander hizo una larga pausa antes de hablar, nunca se había dado cuenta de que eso era lo que ella estaba sintiendo por su culpa, pero no era su intención.

─── Tú... no me desprecias ─── habló mirando hacia otro lado casi como si no pudiera encontrarse con su mirada. 

─── De acuerdo... ¡claro! Puedes decir lo que quieras para tener la última palabra de esta discusión pero eso no cambia la verdad! ─── ella hablo frustrada justo en ese momento Aleksander salto hacia ella agarrándola por los lados de los brazos y la inmovilizo contra la pared, logrando que ella solo lo mire sin comprender por lo rápido que había sucedido.

─── ¿Quieres saber la verdad, T/N? La verdad es que estoy agotado de ver como desprecias mi amor por ti una y otra vez porque no lo comprendes. Siempre he odiado esas galas y cenas y sin embargo me haces esperarlas para poder estar cerca de ti, aunque solo sea por la mascara de ser una pareja feliz pero espero tan miserablemente estar cerca de ti. Es difícil incluso trabajar a tu alrededor sabiendo que de todo lo que podría querer del mundo entero te quiero a ti, tu amor y es lo único que no puedo tener. No mereces mi exasperante amor, la oscuridad de él y si no te hubiera alejado me habrías amado como alguien con derecho. No quiero ese amor con derecho, obediente, lo quiero tuyo. Totalmente tuyo. Pero cada vez me resulta más difícil alejarte... ─── terminó mientras los dos se miraban a los ojos durante un largo rato. Era lo más cerca que habían estado y ninguno parecía moverse.

─── Aleksander... ─── ella hablo finalmente y con suavidad mientras su mirada se suavizaba hacia él. Comprendiendo todo lo que acababa de decir. Sus expresiones fueron realmente sorprendidas cuando ella dijo su nombre, para alguien que quería ser esa parte de sí mismo enterrada hacía tiempo.

─── Bésame ─── ella lo miró imperturbable, mientras él la atraía hacia sí desde la cintura soltándola de los brazos y estrellaba sus labios contra los de ella. Tan fuerte deseo de un amor empujado, pesado, insondable, amor desordenado. 




───── 𝐖𝐑𝐈𝐓𝐓𝐄𝐍 𝐁𝐘

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