Las semanas pasaron rápido, Jimin ya estaba un poco mejor. Su situación de embarazo aún era algo delicada, por lo que tenían que tener cuidado con él. Jungkook siempre lo atendía al igual que su mejor amigo quien siempre estaba pendiente de él a pesar de no tener tanto tiempo.

El rubio se sentía feliz de recibir todas esas atenciones, pero también ya quería ir a casa, estaba fastidiado del hospital y el tener que aguantar la espantosa comida. Jungkook le había comentado sobre irse a vivir juntos, a Jimin no es que le parezca mala idea, al contrario, él quería hacerlo, pero era demasiado pronto, bueno eso le dijo Taehyung.

En parte tenía mucha razón, era demasiado pronto para vivir juntos, pero ya esperaba un hijo de él y Taehyung no es cómo que pueda cuidar de él todo el tiempo. Por eso no sé le hacía mala idea vivir con Jungkook. El médico le dijo que su embarazo aún era de riesgo, era sumamente delicado, que no se alteré o se sobre esfuerce, no quería ser una carga para Jungkook no sabía qué hacer.

Pero todo en él le decía que jamás sería una carga en lo absoluto.

—¿En qué piensas tanto nene?, estás muy serio. —Le dice Jungkook a Jimin.

—Pienso en lo que me dijiste sobre vivir juntos.

—No deberías pensarlo tanto. Mira sé que es algo difícil de procesar, a pesar de que no sabemos mucho del otro, pero quiero conquistarte saber quién eres Jimin, saber que es lo que te gusta, lo que no y hacerte inmensamente feliz, a ti y a nuestro hijo —toma su mano sana dándole un beso en el dorso— Eres el padre de mi hijo y quiero que vivamos juntos a partir de hoy que te den de alta. No será fácil, pero te prometo que cuidaré bien de ambos, no son solo palabras.

—¿Y tu familia Jungkook?, no sé si ellos me odien aún por lo que te hice pasar. Ellos no han venido a verme y me siento demasiado preocupado por ello, bueno solo tú hermana. Siento que les falle de algún modo, no quiero causarte conflictos por mi culpa.

Tomó asiento a su lado de su rubio acariciando su cabello dorado con esas mejillas sonrojadas que tanto amaba ver en su pálida carita. Su familia ya sabía la situación en la que ambos se encontraban, incluso estaban tan felices de saber que serían abuelos y tíos. Su hermana habló con ellos explicándoles sobre la razón de Jimin y el porqué aceptó aquella propuesta de Min Jaemin. Ellos lo entendieron y ahora morían por hablar con Jimin y decirle que todo estaba perdonado.

—Soy yo el que te eligió en primer lugar Jimin, soy yo quien estará contigo, no ellos, es mi decisión. —tomó sus mejillas robándole un besito— Vamos necesitas un baño, yo arreglaré tu ropa para irnos en cuanto el médico nos dé los papeles del alta.

El rubio asintió sin quejarse, rápido Jungkook ayudó a Jimin a entrar en el baño para su ducha, quitó sus prendas con cuidado de no lastimar el brazo herido. Cuando terminó de bañarlo lo vistió con cuidado dejándolo sobre la cama. El doctor entró en ese preciso momento con algunos papeles en mano, mirando a la pareja ya lista para irse.

—Veo que ya están listos para dejar el hospital —le dice.

—Si, mi pareja ya está mejor así que prefiero cuidarlo en casa y esté más cómodo. —el doctor asintió.

—Me parece perfecto. Solo les daré algunas indicaciones para el cuidado del joven Park Jimin. —le entrega a Jungkook algunos papeles para firmar— Solo firme abajo a la derecha y su pareja tendrá el alta.— Jungkook firma los papeles y se los devuelve.— Bien, ya que está todo en orden les diré sobre el cuidado del joven Park. Asumo que como su pareja usted estará a su cuidado.

—Por supuesto.

—El joven Park Jimin aún debe de tener reposo absoluto, no es algo que deben tomar a la ligera, señor Jeon. —Jungkook asintió escuchando las indicaciones del médico— Su pierna tardara en sanar y su embarazo aun delicado, no perdió al bebe, pero estuvo a punto así que es recomendable que el joven no se altere o haga sobre esfuerzo, esto podría causarle aun aborto ¿Y no queremos eso verdad? —ambos niegan y Jimin toca su vientre ante la mención de aquello.

—Ahí tiene varias instituciones sobre sus medicamentos y también sobre los cuidados del joven, sigan todo al pie de la letra por favor y cuando menos lo esperen el joven Park estará como nuevo.

—No se preocupe Doctor. Yo cuidaré a mi novio con mi vida, le daré sus medicamentos al pie de la letra. —le dice seguro tomando la mano de Jimi.

—Muy bien, esas son todas las indicaciones, espero que tengan un lindo día, y recuerden que tiene cita conmigo dentro de tres semanas para ver cómo está el bebé y el brazo del joven Park, por suerte la pierna está un poco mejor pero tendrá que usar silla de ruedas por un tiempo —Ambos asienten de acuerdo— Es todo, se pueden ir cuando gusten.

El médico hace una reverencia ante ellos y Jungkook igualmente. Los deja solos a la pareja para que tomaran sus cosas e ir sé al apartamento de Jungkook, en eso la puerta se abre dejando ver a Min Jaemin quien tenía una bolsa de regalo, los dos lo miran confusos por su llegada.

—Hola, Jaemin, ¿qué te trae por aquí? —pregunta Jimin al pelinegro.

—Bueno es lógico que quiera verte, además hoy te dan el alta y te traje esto. —Entrega la bolsa y rápidamente Jimin la toma abriéndola— espero que te guste, yo mismo lo elegí.

Jimin saca un trajecito de bebé demasiado hermoso, era un conjunto de mameluco en color morado.

—Es precioso Jaemin, muchas gracias.

El pelinegro le sonríe.

—No fue nada, espero que mejores y tú, —señaló a Jungkook— cuídalo bien, estaré llenado a tu apartamento para ver cómo sigue mi… —carraspeó rápidamente— Mi amigo Jimin.

Casi la riega.

Jungkook frunció el ceño, después de que trajeron a Jimin ese día el accidente, estaba muy seguro que escuchó a Jaemin decir que era hermano de Park Jimin. No estaba loco, él había escuchado perfectamente aquello y lo comprobaría de una otra manera.

Hablaría seriamente con Min Jaemin.

—Descuida lo cuidaré como es debido, puedes visitarnos cuando gustes.

—Eso quería escuchar. Me tengo que ir porque tengo trabajo que hacer. Sehun te mando saludos Jimin, espera que mejores y cuanto podamos los dos te visitaremos.

—Dile que muchas gracias y son bienvenidos cuando gusten venir, estoy en buenas manos, no te preocupes. —mira a su novio quien le sonríe con amor.

Jaemin pone los ojos en blanco.

—Son tan cursis. Nos vemos después Jimin, bye Jeon. —Se despide saliendo de la habitación.

—¿Estás listo? —pregunta.

—Listo amor.

Lo subió en la silla de ruedas, Jungkook tenía sus cosas en la otra mano con una gran sonrisa en la cara, pues su hermoso novio no sabía lo que le esperaba cuando llegarán al apartamento.

Se sintió tan mal cuando nadie de su familia, a excepción de su hermana Tzuyu, fue a verlo. Pensó que a lo mejor todos lo odiaban por lo que le hizo pasar, pero definitivamente no era así como él se lo planteaba. En realidad no habían podido venir porque estaban ocupados planeando algo para Jimin y para su futuro hijo. No querían que Jimin los viera y se pusiera mal, pero ellos sí lo querían mucho.

Y Jeon esperaba con ansias llegar para darle la gran sorpresa al rubio, el cual estaría demasiado contento y feliz.

Todos estaban en el apartamento de Jungkook para la gran sorpresa. La familia Jeon y los amigos de Jimin estaban adornando el apartamento con globos de diferentes colores, con algunos adornos de bebé y un gran cartel de bienvenida.

Nunca quisieron hacer sentir mal a Jimin con su indiferencia, ellos si estaban algo molestos. Pero al enterarse del bebé que venía en camino no pudieron resistir a querer involucrarse en ello, sería la primera vez que tendrían un nieto y la emoción fue inevitable. Además que guardar rencor para ellos no podía ser más grande que la felicidad de su hijo.

—Mamá está todo listo para la fiesta sorpresa. La comida está en su lugar, los adornos son super hermosos. —Les dice alegre y contenta Tzuyu.

—Me alegro de que esté todo en orden ya no tardan en llegar. Dile por favor a Jin que traiga el pastel y dile a Nam que ayude al señor de las fresas —la castaña asintió y rápidamente dejó a su madre para hacer lo que le pidió.

El señor Jeon miraba todo con ilusión, no podía creer que sería abuelo al fin, después de lo que pasó con aquella perversa mujer. Su esposa lo miró un poco preocupada, se acercó y llamó su atención.

—¿Cariño pasa algo?, te noto preocupado. —Su esposo suspira.

—No es nada cariño solo es la emoción de saber que seremos abuelos después de... ya sabes —Deja el pequeño regalo que le compro a Jimin para el bebe.

—Se a lo que te refieres, pero ella no existe en nuestras vidas, ni él tampoco hace mucho que dejamos de recibir noticias de él y de ella.  Jimin es muy diferente a ella en todos los sentidos y aspectos. Jimin es todo lo que nuestro hijo necesita. No te preocupes por eso, cariño —le deja un beso en su mejilla— Vamos que ya no tardan y esto es una fiesta de perdón y amor.

El señor Jeon Gong Yoo sonríe para seguir a su esposa. Jungkook llegó junto a Jimin, ambos bajaron del auto para adentrarse al gran edificio de Jungkook, ambos se miraron con amor.

Como si nada fuera a pasar, como si todo lo malo ya pasó. Pero por desgracia no sería así de fácil su felicidad, pues alguien venía dispuesta a recuperar lo que dejó ir hace años atrás totalmente segura de que todo volvería hacer lo mismo.

Ya casi llegamos al final de esta historia.
Se viene más drama señoras, porque soy la señora dramas.
💕🐻🥧