La situación se había vuelto complicada, aunque no negaba que el escenario en el que estaba junto con las luces y el humo me sentía como en un show típicos que hacían en la televisión. Por si fuera poco, la música era increíble, mi cuerpo se movía al ritmo quisiera o no. Mientras intentaba no dejarme llevar por el ritmo, pude ver a mi izquierda unas estadísticas y esto me dejó sorprendida.

Mettaton siempre mencionaba de ser algún día famoso, capaz esta era la oportunidad, pero ¿cómo iba hacerlo? Yo no suelo llamar mucho la atención. Nerviosa ante la situación, tuve que esquivar un ataque de Mettaton, agachándome de forma que me deslicé por el escenario.

Eso ganó puntos, la elegancia en como me deslicé logró llamar la atención de muchos, no fue solo un deslizamiento simple, fue uno elegante y con tensión. La gente buscaba acción, sangre, elegancia, belleza... Todas esas palabras que Mettaton me mencionó.

-Me temo que tendré que enseñarte a esquivar y atacar -habló la voz de Cristian a mi oído derecho.

-Nada de sangre, solo defendernos y aguantar -le recordé. Agarré un trozo de hamburguesa, las cuales compré en el hotel, y me la comí, provocando que también subiera los espectadores-. Aquí todo parece subir puntos..

-¡Luces, cámara, acción!

Este ataque que hizo me pilló desprevenida, varias bombas fueron a por mi y por desgracia uno de ellos logró dañar mi brazo, pero graciosamente eso también lo quería ver el público. ¿Sangrar Mettaton? Era un robot, yo era la que tenía que sufrir.

-Ah, me temo que sí que tendrás que aguantar -supuso Christian preocupado-, pero, ¿hasta cuantos espectadores querrá llegar?

-No lo sé, solo ayúdame como mejor puedas -le pedí con seriedad.

-¡Drama, romance, sangre!

Otra vez lanzó un ataque contra mi, pero pude esquivarlo todo bien sin tener que recibir ningún ataque, entre esos ataques, siempre intentaba hacerlo con elegancia, provocando así que los espectadores subieran cada vez más y más. Mettaton no hacía caso a eso, simplemente quería acabar conmigo.

-¡Soy el ídolo que todo el mundo quiere!

Capaz un poco presumido de su parte, perono le iba a rebatir ahora mismo ya que las cosas se complicaban al lanzarme versiones de él mismo en pequeño para lanzarme bombas. Salté de un lado a otro, aunque por desgracia una de ellas me llegó a la pierna. Obtuvo visitas, pero a cambio empecé a temblar de dolor.

-¡Oh! Es hora de un quiz de pop. Espero que hayas traído un teclado... Esta pregunta es muy fácil.

-¿¡Cómo voy a traer un teclado en el subsuelo?! -pregunté algo alterada, pero al girarme pude ver a Christian con un teclado-. ¿C-Cómo has...?

-Vengo de la superficie, tengo teclados y muchas cosas tecnológicas... ¿Enserio te has olvidado de eso? -preguntó sorprendido. Negué rápido con la cabeza para luego ver la pregunta en lo más alto del escenario.

¿Qué amas más de Mettaton?

-¡Di cabello! ¡Cabello! -grité nerviosa. Christian me hizo caso, pero escribió mal cabello, colocando solo una "l" en vez de dos-. ¿¡Chris?! ¡¿No fuiste a la escuela o qué?!

-¡Me puse nervioso! ¡Joder! ¡Me das mas miedo tú enfadada y nerviosa que cualquiera de aquí!

Suspiré molesta, igual forma Metatton entendió lo que dije, provocando y moviera su cabello de forma presumida y graciosa.

-Sí, mi cabello, uso un gel de metal para ello -explicó mientras tocaba su cabello con calma. Arqueé la ceja sorprendida, ¿enserio hay ese tipo de gel?

-Oh, pero eso no importa, porque tu respuesta hizo que todo el mundo enamorara de ti -dijo con una sonrisa mientras se movía de forma fabulosa al ritmo de la canción-, ¿por qué no enseño mi corazón?

De repente pude ver como de su cuerpo robótico sacaba un corazón, rodeado de esferas, empezó a atacarme sin piedad. Yo no sabía bien que hacer, los nervios me ganaron porque yo no quería atacar a nadie, pero Christian tuvo que tomar mi brazo derecho para que disparara.'

-¡Es un robot! ¡No lo vas a descuartizar! ¡Solo lo vas a debilitar! -me gritó molesto para luego disparar, dando en el corazón varias veces.

La sorpresa me inundó al ver como Mettaton se quejaba al dispararle, pero aún así se recompuso rápido y empezó a bailar con cierta rapidez para hacer que nada le había pasado y que era muy resistente.

-¡Ay! ¡Estoy calentando cariño! -gritó con confianza e ilusión-. ¿Porqué no bailas conmigo cariño? ¿Podrás seguir el ritmo?

Aquí las cosas cambiaron a un tono más distinto, pude ver como me daba su mano para que bailara junto con él, los nervios me inundaron por ese momento, escuchando como Christian me susurraba que bailara con él, ya que posiblemente me salvaría y eso aumentaría los espectadores.

El show debía continuar.

Agarré la mano sin pensarlo, provocando que siguiera un ritmo rápido y frenético en el que pensé que todo sería un baile divertido y movidito, pero me equivoqué al ver como varias bombas aparecían en el escenario mientras bailaba con Mettaton.

-¡Luces cámara, bombas! -Su tono era de emoción e ilusión.

Salté de un lado a otro, esquivé con la mayor elegancia posible y en medio a veces tomaba alimentos para no morirme en este baile de la muerte. Cuando creía que tenía bajo control todo, Mettaton tuvo que fastidiarme la paz para gritar con más ilusión

-¡¡Las cosas se van de control!!

Claramente tenían que haber más bombas, a estas alturas la elegancia desaparecía de mi lado y simplemente intentaba esquivar como mejor podía, pero las bombas llegaron impactarme en mis piernas y espalda. Rápidamente me alimenté para recuperar energía y ponerme de pie como mejor pude.

-Es hora de nuestro pequeño descanso.

-Menos mal... -susurré.

-Nos hemos conocido apenas un poco cariño

-¿Ahora uqieres que nos conozcamos? ¿En este momento?

-Bajo presión uno muestra como es realmente su corazón.

Esto lo dijo de forma literal porque volvió a mostrar su corazón, provocando que tuviera que moverme de un lado a otro para evitar se atacada. ¿Descanso? Me temo que no, en un show, programa o lo que fuera, nunca habían descansos. Sin dudar disparé hasta que logré derrotarle, viendo como sus brazos se destruían cayendo al suelo.

-N-No... -susurré preocupada-. ¿E-Estás bien?

-¿Quién necesita brazos con estas hermosas piernas? ¡Voy a ganar igual! -gritó molesto mientras se movía con elegancia, aunque en uno de esos pasos, cuando se giró, pudo ver los espectadores, provocando una gran sorpresa en él- ¡Oh mira esos espectadores! ¡Es la primera vez que tengo tantísimos! ¡Hemos llegado a los 15 mil!

La ilusión se notaba en su tono, sonreí con clama mientras respiraba agobiada, al menos pudo ver las estadísticas para parar de atacarme.

-Un espectador afortunado tendrá la oportunidad de hablar conmigo antes de que me vaya del subsuelo para siempre -explicó con ilusión, aunque esto me pilló por sorpresa, ¿enserio haría eso?-. Veamos quien llama primero.

Esperamos unos pocos segundos hasta que alguien logró llamarnos.

-Hola, estamos en televisión -saludó con ilusión-. ¿Qué nos quieres decir en este último programa?

- Oh... Hola... Mettaton... Realmente me encantó ver tu programa... Mi vida es muy aburrida, pero verte en televisión, trajo emoción a mi vida. No sé porqué, pero supongo que este es el ultimo episodio? Te hecho de menos Mettaton -Al girar mi cabeza pude ver como MEttaton agachaba la cabeza en arrepentimiento, era Naptablock, lo escuchaba claro ante aquella voz tan triste-. Lo siento, no quería hablar mucho, oh...

-¡No espera! BLO... -No pudo terminar su frase, pues él ya había colgado-. Ya, ya ha colgado...

El arrepentimiento se notaba en su rostro, pero movió la cabeza en negación y mostró un rostro más animado.

-Tomaré otra llamada.

Fue entonces cuando varias llamadas aparecieron de golpe:

-¡Mettaton, tu show nos hace muy feliz!

-¡Mettaton, no sé que haré, me gusta ver tus programas!

-¡Mettaton, en mi corazón de Mettaton hay una figura de Mettaton!

No solo fueron esos comentarios, habían más de uno, tantos que sorprendieron al mencionado quien, si fuera humano de verdad, estaría llorando ya que podía ver la ilusión y tristeza en su rostro.

-Ah, yo...ya veo... Muchísimas gracias chicos -murmuró feliz para luego mirarme-. Cariño, capaz es mejor que me quede aquí por un tiempo. Los humanos ya tienen estrellas e ídolos, pero los monstruos, solo me tienen a mi. Si me fuera del subsuelo, perdería su brillo. Dejaría un gran vacío que no podría llenar jamás.

-Lo entiendo -solté una risa suave.

-Así que, creo que atrasaré mi gran debut, aparte me has demostrado que eres muy fuerte, lo suficiente para superar a Asgore -dijo con honestidad, cosa que me sorprendió-. Estoy seguro de que podrás proteger a la humanidad -Tras decir esto, agachó su cabeza con dolor y miedo-. Jaja... Supongo que al final es para lo mejor. La verdad es que esta forma de energía que consume es ineficiente.

-¿¿V-Vas a...??

-En unos minutos, me quedaré sin batería y bueno... -Mi mirada le preocupó, capaz me leyó la mente porque intentó relajar su mirada triste para sonreírme-. Estaré bien. Dales su merecido, cariño. Y todo el mundo, gracias... ¡Habéis sido una gran audiencia!

Una luz blanca ilumina todo el escenario hasta el punto de dejarme ciega, cuando esta se desvanece junto al humo, pude vera Mettaton en el suelo sin piernas ni nada. Sin batería. En ese momento no dije nada hasta que las puertas se abrieron, mostrando a Alphys preocupada.

- ¡Logré abrir la puerta! ¿Estáis los dos...? -Rápidamente pudo ver a Mettaton sin batería ni nada, aunque no parecía saber eso-. Oh dios mío... Mettaton, Mettaton ¿estás...? -Ahí fue cuando se dio cuenta que su robot se quedó sin energías. Suspiró aliviada-. Menos mal, son las baterías. Mettaton, si te fueras, yo me habría, yo me habría... -No sabía que decir, sentía que si hablaba Alphys se pondría nerviosa. Sentía que tenia que irme con mi misión-. O-Osea, no es un problema, ¿sabes? Es un robot, si se rompe, siempre puedo... construir otro...

Respiré hondo y empecé a caminar para irme, no quería molestar, solamente me despedí de Alphys para dejarle su espacio. La oscuridad inundó a ambas por un momento mientras avanzaba por la única salida del cual me llevaría a Asgore.

Hasta que alguien me interrumpió el camino, era Alphys.

-Lo siento por todo. Sigamos juntos -La miré con sorpresa, no entendía porqué me quería acompañar, ahora tenía que estar con MEttaton, no conmigo.

-No es necesario, Alphys.

-No quiero dejarte sola -explicó con pena. Suspiré y seguí avanzando un poco hasta que me volvió hablar-. Así que irás a ver a Asgore, ¿eh? Debes estar... muy emocionada sobre todo esto ¿eh? Al fina-a-a-al... ¡Podrás volver a casa!

Me quedé quieta en el sitio mientras miles de imágenes pasaban en mi cabeza, eran sobre el pasado, era sobre mi misión, era sobre mis amigos del subsuelo y la superficie. Respiré hondo, suspiré y seguí avanzando viendo como el ascensor estaba cerca, pero Alphys volvió hablar.

-E-Espera, me refiero, ehm... Yo iba a... Ehm... decir adiós y... No puedo aguantar más esto... -Al girarme, pude ver como estaba con un rostro de culpa y dolor, casi se le caían las lágrimas-. Te mentí, un alma humana no es suficiente para cruzar la barrera sola. Toma al menos un alma humana y un alma de monstruo.

Cuando la miré con sorpresa, pude ver la culpa en todo su cuerpo, ella en las miles de veces que me llamó siempre me decía que podría volver a la superficie con total facilidad, pero no me decía como. Yo tenía pensado en volver a casa rompiendo la barrera con mi alma, pero al saber esto las cosas cambiaron de golpe.

Escuchaba una risa de fondo, alguien se lo pasaba demasiado bien y esto me cabreaba.

-Si quieres volver a casa, tendrás que tomar su alma. Tienes que matar a Asgore.

Tras un largo silencio, ella rompió a llorar sin control.

-Lo siento...

Dejandome totalmente sola, sentí un gran vacío en mi pecho sin saber bien que hacer, miré de reojo el ascensor para luego subir en él y empezar a sentir como miles de voces hablaban mientras subía. Cerré mis ojos, provocando que las voces se desvanecieran y pudera escuchar las dos últimas voces que me importaban.

-Carol y Zen están aquí -dijo con ilusión Carol una vez que las puertas del ascensor se abrieron-. Si que tardaste, estuvimos esperando desde hace un largo rato.

Al salir del ascensor, pude ver mi alrededor con sorpresa, era cierto que yo había visto antes cuando exploramos el subsuelo por primera vez, pero no tenía la misma importancia y belleza que antes. No fui la única, rodeada de mis amigos, seis elementos extraños me rodeaban, formando cada uno un cuerpo distinto.

-Es posible que tengamos que hacerle frente, queramos o no -supuso Christian con seriedad.

-Tiene que haber otra forma -susurró Elena preocupada.

-Chicos, ahora solo queda seguir adelante, nada de perder los nervios, solo toca seguir adelante y ver que ocurre -pedí con seriedad.

-Cuenta con nosotros Ursula -respondió con una sonrisa Carlos.

-Cualquier cosa...

Estamos aquí y no te dejaremos sola.