¿Qué se supone que uno debería hacer cuando un amigo tuyo te consiente más de lo normal?

"Nochu, ¿por qué a Tae sí le das tus galletas?", preguntó Seok de mala gana mientras yo comía esas galletas con chispas de chocolate blanco. "Porque Tae me cae bien" respondiste con una sonrisa socarrona.

Como me daba igual, le ofrecí una de las galletas que me quedaban a Seok, pero tú me detuviste.

Comencé a temer, a temer de ti, de cuan cercano te estabas volviendo.

"Tae, las hornee para ti, ví que comentaste algo en Stigma sobre estas galletas", observé las galletas un par de segundos y luego sonreí, porque el gesto fue lindo. "Gracias, Nochu", dije con alegría en mi pecho.

Pero con temor en mi corazón.

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