|Jeon Jungkook;

—Por situaciones como estas me parece buena la idea de que mi madre les haya dado una llave de la casa— dije sosteniendo el móvil en mi oreja, por otro lado solo escuché la risa de Taehyung.

—Estamos...casi todos aquí, ven ya— me dijo, asentí aunque este no me viera.

—Ven pequeño Kook, te daremos unos besitos— escuché al fondo la voz de Jimin, reí al igual que los demás y colgué la llamada.

Dejé caer el celular dentro de la mochila que me llevaría a casa ya que dejaría la maleta con lo que no consideraba indispensable en mi apartamento. Me coloqué el casco y emprendí camino hacia la casa de mis padres que aún, por supuesto, no habían regresado de España.

Al llegar, le entregué la moto al portero y caminé hacia la entrada, abrí esta, dejando caer las llaves y la mochila en uno de los asientos del vestíbulo.

—¿Chicos?— grité, pues era raro llegar y no escucharlos hablar.

Me encaminé por el pasillo en busca de ellos pero para mi sorpresa, el recibimiento que obtuve fue muy distinto a como pensaba que sería.

Un puñetazo en seco se aproximó con fuerza hacia mi rostro, haciendo contacto con mi mejilla a la cual le propocionó un dolor bastante molesto. Por el propio impulso del golpe mi cuerpo dio varios pasos atrás y medio aturdido agité mi cabeza para asombrado mirar al causante del golpe.

Yoongi...

Su respiración agitada, su pelo desorganizado y su rostro molesto, solo me indicaba algo muy obvio.

Se había enterado de todo.

Maldita Chae Won, lo tienes que arruinar todo ¿Verdad?

—Tú eres un hijo de puta— gritó, volviendo a lanzarse sobre mí, esta vez la presencia de los demás lleno el pasillo e inmediatamente intentaron detenerle.

No lo lograron.

Yoongi se aproximó de nuevo hacia mí, con intenciones de volver a golpearme. Esta vez no me tomó por sorpresa, y por supuesto, no dejé que sus manos llegarán a mi cuerpo.

Lo esquivé, haciendo que este diera varios pasos hacía adelante por el propio impulso que había ejercido para abalanzarse sobre mí. Aprovechando ese descuido de su parte, le lancé una patada hacia la espalda, haciéndolo caer al suelo.

Maldito estúpido.

¿En serio viene a recriminarme las cosas a mí?

—Si yo soy un hijo de puta, tú eres un maldito estúpido— le dije, dejando que la molestia volvieran a envolver mi cuerpo.

A la mierda, estoy cansado de pensar en como se sientes los demás. En dejarme tratar como una basura cuando yo no he hecho nada.

¡Nada!

Antes de que lograra ponerse en pie, le lancé otra patada, de su boca salió un quejido, los chicos intentaron detenerme pero no me dejé.

—¡Estoy harto de que me traten como una mierda cuando yo fui una víctima de ella, de ti, de su puto juego tóxico absurdo!— me lancé sobre él dejando caer mi puño sobre su rostro, directamente en la nariz, haciendo que sangrara.

—¡Jungkook!— gritaron los chicos, decidí ignorarlos.

—Me importa una mierda si te sientes traicionado o si te duelan los putos cuernos que te ha puesto, yo no tengo la culpa, nunca la he tenido, tenías razón, ella no es como yo creía— me aparte de él, dejándolo a un lado retorciéndose. Mientras intentaba controlar mi respiración acelerada.

Los chicos al ver que ya no haría nada más, unos se aproximaron hacia yoongi, ayudándole a levantarse del suelo mientras los otros fueron hacia mí.

No les permití tocarme.

—Vete de mi casa— ordené, mirándole con desprecio.

—Jungkook, estas cosas hay que hablarlas con calma— habló Namjoon, me negué.

Mis ojos hicieron contacto con los de Yoongi, este me miraba con el mismo desprecio. Era recíproco, al parecer.

—Vete de una puta vez, no vuelvas más, no quiero estar nunca más cerca de personas como ella o como tú. Lárgate— y zafándome del agarre de Taehyung y Hoseok me alejé de todos caminando en dirección a mi habitación.

Necesitaba estar solo, una vez más.

╰─────── ⋆ ˚｡🏍⋆｡───────╯

Levanté mi vista cuando el sonido de la puerta de mi habitación me indicó que alguien la había abierto, me sequé con rapidez las lágrimas mirando hacia el frente.

Se trataba de Taehyung.

—Jimin y Hoseok se fueron con él para asegurarse de que no hiciera alguna tontería— comenzó diciendo, no dije nada.— Jin está preparándote algo para que comas y Nam esta esperándote abajo.

—Vale— fue lo único que logré decir.

Tenía un molesto nudo en la garganta.

Taehyung soltó un suspiro, y se encaminó a mi cama, sentándose a mi lado.

—¿Quieres hablar?— preguntó, y quise negar, pero solo me quedé en blanco, sin hacer nada más que no fuera mirar el suelo de mi habitación y mis pies descalzos sobre este.

—Supongo que sería bueno para sacar la molestia del pecho, pero al mismo tiempo tengo esta sensación de que no me hará sentir mejor hablarlo, así que prefiero no hacerlo— le hice saber, colocándome de pie buscando en mi closet un pullover para ponerme.

—Entiendo— dijo y esperó a que me acomodara la prenda para abrirnos pasos y salir de mi habitación.

Bajamos las escaleras en silencio y manteniendo este caminamos hasta la cocina, donde estarían los demás.

—Toma, te sentará bien— dijo Jin colocando un tazón de ramen frente a mí. Le agradecí y me senté, tomando los palillos para remover los fideos.

—Kook... creo que deberían hablar las cosas— Namjoon me miró con suavidad. Llevé un poco de fideos a mi boca.

—¿Vale la pena?, ni siquiera me dejó hablar, fue directamente a golpearme, así que por lo visto no, no hay nada que hablar.

—¿Vas a perder a un amigo de toda la vida por una chica?— reprochó Jin.— Estás precipitando las cosas.

—¿Yo?— me señalé a mi mismo sin poder creerlo.— Él me perdió a mí, yo no quería que Junsook la escogiera a ella, no le pedí a Yoongi que me la lanzará encima ni que nada de esto pasara, sabes, solo quería mis motos de regreso— dije, frunciendo el ceño y mirando de mala manera a Jin.

—Bien... hablemos de otra cosa.

—No, se acabó, esto se acabó, la apuesta, ella y él. No quiero saber más nada de él y lo digo en serio. No voy a permitir que personas que me dañen estén en mi vida y si no están de acuerdo con eso, les pediría entonces que se retiraran también— dije, como últimas palabras del asunto, esto había terminado, es mi decisión final.

—Lo comprendemos, no te dejaremos de lado por eso, tienes tus motivos y no podemos ninguno— dijo Taehyung mirando a los otros dos presentes.— cuestionarlo

Asentí mientras concentraba una vez más la atención en mi tazón de ramen.

Dando por terminada esta maldita etapa.

Se acabó todo, para siempre.

FIN.

—notita:

Holis, antes de que acabara el año quería terminar la historia, realmente no se si esperaban este final, pero este es el que tenemos. Espero lo entiendan y que hayan disfrutado la historia.

Gracias por todo.

Besos.

[Aún queda el epílogo]