Antes que nada, este cap se lo dedico a -Mitsu_Aishi- por siempre brindarme su voto, ella fue la primera chica de la cual recibí en voto en esta historia, muchitas gracias ( ˘ ³˘)♥

Narradora omnisciente:

Año 849
«~Un año luego de ingresar~»

Torpemente Eren introdujo su lengua en la cavidad bucal de TN, ninguno de los dos había besado antes a nadie por lo que era primerizos y no sabían bien como hacer las cosas. El beso se hacía cada vez más profundo y tierno, las mejillas de TN y Eren estaban tibias. Las piernas del castaño se entrelazaron con las de la contraria, el lugar era silencioso, acababan de llegar de un exhausto entrenamiento y todos estaban en el comedor. La chica rompió el beso algo jadeante y luego negó varias veces.

-N-no vuelvas a hacer eso E-Eren...- se echó para atrás.

-P-pero TN..., tu me gustas mucho- dijo con vos tímida y se acercó otra vez, aunque ahora fue para abrazarla.

-N-no...- susurró, Eren se separó y la miró con una expresión de tristeza, desde su reencuentro empezó a sentir sentimientos de más que amigos hacia TN, pero ella sabía que no debía aceptarlos, lo engañaría más de lo que ya lo estaba haciendo... pero algo la incitaba...

Ella también lo quería

-¿N-no... qué...?- susurró entredientes.

El corazón de la castaña latía rápidamente y sus manos sudaban, ella lo quería, pero eso solo estropearía sus planes. Se preparó mentalmente para ver a un Eren destrozado delante de ella, abrió su boca para responderle con las palabras adecuadas y no intentar lastimarlo, pero...

-Bien, también te quiero-

Las palabras salieron solas de su boca y sus pensamientos no eran más que un "¡¿Qué?! ¡¡Incluso mi poder!! ¡¿Pero por qué?!"

Los orbes jades de Eren destellaron de alegría y se lanzó a besar los labios de TN y esta lo aceptó sin pensarlo, dejándose llevar por sus impulsos.

"Si mi propio poder me lo aconseja es por algo... tal vez está unión sea de ayuda... aunque por alguna razón... no estoy totalmente segura... es la primera vez que estoy dudando de mi poder... pero no puedo evitarlo... algo me dice que este no es el camino correcto"

Desde ese entonces la joven TN estuvo de pareja con Eren, su hermano por parte de padre, el poseedor del Titán de Ataque y el Titán Fundador, un chico que se cree libre de pecado hasta ahora, un joven inocente de toda la carga que le ha sido puesta a la fuerza sobre sus hombros, pero TN sabe que algún día todo saldrá a la luz, y en ese momento romperá el corazón de Eren y quizás también el suyo... pero eso solo el tiempo lo sabe...

Y como dicho está, el tiempo hizo de las suyas, y cada segundo que pasaba TN se enamoraba más de Eren, el chico era muy detallista, siempre tenía la palabra correcta en el momento idóneo, siempre había un beso, abrazo o caricia presente, nunca fallaban ni siquiera antes de dormir, y TN caía cada vez más en la red de encantos del chico de ojos verdes. Pero ella sabía que no era bueno... realmente no lo era.

Año 850
«~Un año después~»

Cómo siempre el grupo de cuatro amigos tomó asiento en la misma mesa. TN se encontraba al lado de Eren, y Mikasa al lado de Armin, este penas dejó el plato se sentó y recargó la mayor parte de su cuerpo en el mueble de cuatro patas.

-Fue difícil pero mantuve el paso- Dejó escapar un suspiro.

-Superaste tus límites, eso es bueno- comentó Eren a la vez que mordía la hogaza de pan.

-Lo hiciste bien- comentó Mikasa.

-Bueno, aunque TN me dió ayuda unas cuantas veces- se encogió de hombros el ojiazul y TN respondió a esto:

-No digas eso, solo fueron dos, y además... enseguida volvías a ponerte de pie- recostó su cabeza en el hombro de Eren quien comenzó a acariciar sus cabellos castaños, ya todos sabían que ellos estaban juntos y no era que tuviesen que sorprenderse por este tipo de cosas.

-Si hubiese sido una misión real, un Titán ya me hubiese devorado por culpa de mi poca resistencia- miró abajo con la cabeza gacha.

-Nunca dejaré que un maldito Titán intente devorarte- aseguró la de orbes verdes con el seño levemente fruncido -Además, tú eres bueno con el equipo 3D, no podrán tocarte-

El rubio quedó pensativo, luego sonrió y dijo:

-Lo que tú digas-

La chica dejó de fruncir el seño y sonriente dijo:

-¿Sabes? Para mí tú serás Comandante algún día, eres muy inteligente, lo que no tienes en resistencia tu rendimiento académico lo compensa- sonrió aún más y las mejillas de Armin enrojecieron por el halago.

-G-gracias...- susurró avergonzado.

-Jiji- rió maliciosa y Armin ocultó su rostro entre sus manos.

-Oye ¿Por qué a mí no me halagas así?- dijo Eren en tono juguetón.

La chica levantó la vista y sonriendo con el seño fruncido dijo:

-Porque tú no compensas ni con resistencia ni rendimiento académico- dijo burlona y Eren quedó tiezo con una gota de sudor cayendo por su cien.

-¿En serio?- comentó desanimado.

-Jajaja, claro que no, tú eres más fuerte de lo que te imaginas- sonrió y obtuvo este mismo gesto como respuesta.

-Déjense de cursilerías y terminen de comer- comentó Mikasa mientras introducía a la fuerza un pedazo de pan a la boca de TN y esta blanqueaba los ojos.

-¡Fhifhafa efhefa!- balbuceó la castaña mientras Eren reía.

-No hables con la boca llena-

La chica tragó el pan e inflando sus cachetes dijo:

-¿Se te ha hecho costumbre darme de comer?-

-Eso será porque eres una niñita- el comentario burlón por parte de Eren logró enfurecer lo suficiente a TN como para que tiraste de sus mejillas y dijese:

-¡Que no!- le sacó la lengua -¡Además sigues siendo un gritón!- contraatacó.

-¡No soy gritón!- entrecerró los ojos y se miraron de forma desafiante.

-Aquí vamos de nuevo- murmuró Armin, a pesar de que ahora TN y Eren fuesen novios, no dejaban de pelearse por cosas tontas y tener un espíritu competitivo entre los dos.

Así empezó la pelea de pareja, nada grave, solo insultos y apodos infantiles, una competencia de quién había obtenido las mejores calificaciones en uso del equipo de maniobras tridimensionales (TN), el que obtuvo mejores calificaciones en los últimos exámenes teóricos (Eren), el que permanecía más tiempo sin pestañear (TN, por soplarle los ojos)

-¡Eres una tramposa!-

-No habían reglas, así que prácticamente no hice trampa- sonrió de medio lado con aire triunfante.

-¡No lo mencionaste!-

-Deténganse y terminen de comer-

La competencia entre los dos castaños terminó cuando Mikasa hundió la cara de ambos en sus platos, Armin tuvo que evitar reírse al ver las caras manchadas de sus amigos, mucho más cuando TN dibujó una carita feliz en el rostro de Eren y este frunció el seño, dándole un aspecto más cómico, incluida Mikasa sonrió ligeramente.

Luego de la cena todos fueron a sus respectivas habitaciones... claro, excepto TN, quien desde el principio durmió en la cama de Eren, ya era costumbre para los chicos verla todas las noches allí, incluso todos creían un milagro que el instructor no se hubiese dado cuenta de que ella hacía esto.

-Hola otra vez TN, dime ¿Cuándo piensas dejar de dormir con tu noviesito?- dijo Jean en tono burlón viendo cómo TN pasaba por su lado en dirección a la litera de Eren.

-Cuando desapruebes el examen de mañana- sonrió de lado restándole importancia.

-¡Eres...!- Jean fue callado por la acción de Armin colocar una mano sobre su hombro.

-No seas tonto, ella dijo que es nunca-

Jean se le quedó mirando con cara de "No entiendo"

El rubio dió un suspiro y dijo:

-Que ella no va a dejar de dormir aquí porque tú no vas a desaprobar- se alejó de Jean, quien ahora tenía cara de "Ah ok..."

TN se asomó su cabeza a la litera de Eren y este, quien ya estaba acostado le sonrió.

-¿Ya vas a dormir?- dijo la castaña una vez que se subió por completo, sentada en el borde de la cama dejando caer sus piernas hacia abajo.

-Supongo...Mañana tenemos un examen y hay que estar descansado- cerró sus ojos.

TN suavemente deslizó sus manos hacia el rostro de Eren y volvió a abrir sus ojos con sus propios dedos.

-No te duermas- infló sus cachetes y Eren sonrió a la vez que se sentaba, quedando su rostro a unos centímetros de el de TN.

El castaño acortó la distancia y besó rápidamente la comisura de los labios de la contraria.

-Eres una niñita- se burló volviéndose a acostar, cubriéndose con sus manos su cara sabiendo que iba a recibir unos cuantos golpes.

-¡Jeageeeer!- exclamó TN con molestia al mismo tiempo que le hacía cosquillas a su pareja y este reía sin parar.

-¿Otra vez diciéndole niñita?- comentó Armin deteniendo las acciones de TN.

-Regáñalo Armin- hizo puchero la de orbes esmeralda.

-Eren malo- el rubio palmeó la cabeza del castaño quien sonrió como respuesta -Ahora duérmanse ambos... y TN, no vuelvas a armar alboroto como anoche- sentenció mientras se acostaba en la cama de abajo.

-Si si, ya vamos a dormir- la chica se acurrucó en el pecho de Eren quien los tapó a los dos con una manta.

El castaño la abrazó por la cintura y apoyó su cabeza sobre la de ella.

-Te quiero- susurró la "menor"

-Yo más- sonrió Eren.

Después ambos cayeron rendidos.

La prueba del día siguiente consistía en desplazarse entre los árboles con el equipo tridimensional. El objetivo era dar con las figuras de entrenamiento que remplazaban a los Titanes para practicar cortarles la nuca, todo era cuestión de reflejo y percepción del entorno, uno debía estar siempre alerta de cuando apareciese algún Titán. Los primeros en encontrar una figura fueron Jean, Annie y Bertholtd. Con sus cuchillas en mano, los últimos dos se lanzaron y realizaron un corte con buena profundidad, en cambio el castaño claro solo pudo hacer la mitad del resultado de sus compañeros

-Annie Leonheart, si bien sus habilidades de combate son sobresalientes, ella no trabaja como parte de un equipo, es un lobo solitario-

El instructor Shardis evaluaba a los reclutas desde cierta distancia, parado en una rama extremadamente gruesa de un árbol.

-Bertholtd Hoover, tiene bastante talento, pero le falta iniciativa-

Anotó algo en su cuaderno.

-Jean Kirstein, sus habilidades de control tridimensional son excepcionales, pero su personalidad desafiante causa roces con sus camaradas-

-No puedo luchar como ellos, ¡Debo encontrar mi propio Titán!- exclamó Jean al mismo tiempo que tomaba un camino diferente al de Annie y Bertholtd -¡Me aceptarán en la policía militar!-

Dió con otra figura que tenía la nuca intacta y sonrió confiado de ser el primero en encontrarla.

-¡Gracias, Jean!-

El nombrado borró la sonrisa de su rostro cuando alguien pasó por delante de él. Y ese alguien había resultado ser Connie.

-¡Fue una buena decisión seguirte!-

Se abalanzó sobre la figura levantando sus cuchillas listo para cortar, ya muy cerca no lo logró, alguien lo hizo unos segundos antes que él.

-¡Lo logré!-

Se trataba de Sasha, sonriendo ante el buen corte que había realizado e impulsándose de vuelta al aire por casi tocar el suelo.

-Sasha Blouse, es talentosa operando el equipo de manera poco convencional, pero esa mentalidad hace que no pueda trabajar de manera organizada-

El chico rapado veía a la de cabello marrón indignado.

-Connie Springer, es bueno tomando decisiones ingeniosa, pero no es muy astuto-

A unos cuantos metros de allí, en este orden: Mikasa, TN y Eren, eran los que se dirigían a una figura recién elevada. La primera hizo dos cortes perfectos. La segunda también, solo que un poco más profundo y fino. Y el tercero pudo hacer un corte la mitad de bien que sus compañeras.

-Mikasa Ackerman, su desempeño es ejemplar en todos los campos, realmente una genio sin precedente alguno-

El instructor volvió a anotar algo en su cuaderno.

-Eren Jeager, mientras carece de talentos sobresalientes, logró mejorar sus calificaciones mediante el esfuerzo y trabajo duro-

Otra anotación.

-TN Ackerman, su desempeño en todos los campos es comparable al de Mikasa, su dominio del equipo de maniobras tridimensionales y el rendimiento académico son excepcionales, pero...-

-¡Tienes que darle con más profundidad!- exclamó la castaña posicionada al lado de Eren.

-¡Lo sé, lo sé! ¡No molestes!- frunció el seño y desvió la mirada, de cierta forma le molestaba que sus dos amigas fuesen mejor que él.

-¡Enojón!- se alejó -Y yo solo que lo ayudaba-

-Aunque suele tener una personalidad fría, cuando está al lado de Jeager se deja llevar la mayoría de las veces por sus impulsos, también no es buena siguiendo órdenes y siempre que puede las desafía-

TN pasó por al lado del instructor, no sin antes sonreírle levemente en forma de saludo.

-Además, ella posee una similitud con su pareja, ponen todo lo que tienen en lograr su objetivo-

Acabada la evaluación entregaron el equipo de maniobras tridimensionales y se dirigieron a un campo más apartado. Esta vez consistía en hacer prácticas de combate y como es que se enfrentarían ante personas armadas, era la práctica favorita de la de ojos verdes.

A cada pareja se le entregó un cuchillo de madera, uno tendría que ultilizarlo mientras el otro intentaba bloquearlo. Eren parcticaba junto con Reiner, Armin con Marco, Mikasa con un recluta y TN con Bertholtd, aunque la castaña quería practicar con Annie pero no pudo encontrarla y Bertholtd se ofreció a ser su oponente.

La diferencia de tamaño era muy notoria, el de cabello negro le sacaba dos cabeza de altura, el medía 1,92 y la chica 1, 59. Ella sería la atacante, y el debería bloquearla. Tomaron separación de un metro de distancia colocando posición de combate.

-¿Estás lista?- preguntó.

-Solo un pequeño consejo- interrumpió TN sonriendo amistosamente y bajando ligeramente el cuchillo.

El pelinegro bajó los brazos confiado de que tendrían una breve conversación, pero no fue así. Todo ocurrió en casi un instante. TN había tumbado al más alto boca abajo contra el suelo, apoyando su rodilla en la espalda, haciéndole una llave a uno de sus brazos. El brazo que sostenía el arma había pasado del hombro derecho al izquierdo y ahora el cuchillo apuntaba cerca de su cuello.

-Nunca te fíes de tu oponente, porque usará ese momento para asesinarme sin dudarlo- la expresión en su rostro era tenebrosa y amenazante, algo que Bertholtd pudo ver de reojo y tragó duro.

-A veces llegó a pensar que ella sería el peor enemigo de cualquiera- Esos fueron los pensamientos del de hebras azabaches.

-¡Perdón, Bertholtd!-

La chica se paró y rápidamente ayudó a el contrario a ponerse de pie, dándose cuenta que se había excedido con su contrincante de práctica.

-Se me fue la mano, ¿Estás bien?-

-S-sí, no hay problema- asintió llevándose una mano a su nuca -Por algo es que hacemos esto, para ser buenos soldados-

-Sí, pero si me dejaba llevar un poco más, y me olvidaba que eras tú, ya te hubiese mordido el cuello- suspiró desviando la mirada.

-¿P-por qué?- parecía interesado y curioso de la razón.

-En cualquier momento te hubiese considerado el Titán Colosal- volvió a mirarlo.

-¿Q-qué?- pareció tensarse.

-Ya sabes, por lo alto que eres- estiró su mano sobre su propia cabeza y la agitó indicando la diferencia de altura.

-Ah, es cierto, jajaja- rió incómodo y a la vez divertido, viendo cómo es que TN se paraba de puntillas en un intento fallido de llegar a la altura de su cabeza.

-¿Cuándo dejarás de crecer?- infló las mejillas con molestia -Vas a ser igual de alto que la Muralla-

Desde que TN había conocido a Reiner y Bertholtd, se hizo amiga de ellos. Los encontraba divertidos y sabios, además que siempre le daban consejos, aunque siempre era cuando estaba Eren presente, ya que la chica se comportaba seria y fría cuando estaba lejos del ojiverde, por esto Reiner y Bertholtd siempre se aseguraban de que el castaño estuviese cerca. En una situación ella les había aclarado que sospechaba que eran pareja por siempre estar juntos, algo que los hizo ponerse rojos y muy incómodos, una situación entretenida para ella, a lo que tuvieron que explicar que eran como hermanos desde niños pero la ojiverde no se lo tragó. En otra ocasión cuando fue a dormir a la habitación de los chicos, cargó a Bertholtd por ser más ligero, a la cama de Reiner y los hizo dormir juntos. A la mañana siguiente los encontró abrazados por la cintura, cuando salió de la habitación escuchó un par de gritos en el interior, pensando que había sido un agradable despertar para ellos, aunque no fue así, en el desayuno se notaba la incomodidad y no pasó nada hasta que alguien descubrió que lo había hecho la castaña, teniendo que correr de Reiner siempre que se veían y este juraba venganza, cosa que si pasó... hizo lo mismo con ella, amaneciendo en la cama de Jean y armando un gran escándalo, resultando en golpes, pero el castaño claro que no entendió lo que pasó, supuso que la chica comenzaba a sentir algo por él desde ese momento, esto también trajo consigo algunas discusiones entre Eren y TN, pero no pasó a nada grave, al final se arreglaron y dijeron que había sido un mal entendido.

A pesar de todo, la chica siguió pensando que el rubio y el pelinegro querían ser más que amigos.

-No lo creo, me gustaría quedarme así-

-Aunque la ventaja de que seas más grande es que puedes dar sombra cuando haga calor- rió entredientes y extendió el arma de madera hacia adelante -Tu turno, no te contengas-

-De acuerdo, intentaré no hacerlo- recibió el cuchillo.

Sin avisar el de orbes verde oscuro se avalanzó sobre la castaña, quien pudo retenerlo comenzando un tipo de forcejeo, pero en fuerza el más alto ganaba y hacía retroceder a su oponente, aunque la castaña era más perseverante e insistente. Barriendo el pie izquierdo empujó la pierna derecha de Bertholtd desequilibrándolo, tomándolo de la ropa, usando su peso en su contra para derribarlo, haciendo que soltase el arma y un quejido de dolor se hiciese presente.

-¿Estás bien?- sujetó la mano del de cabello negro.

-Sí, pero dolió un poco- comenzó a ponerse de pie.

TN fijó su atención en cierta persona que parecía escabullirse entre los reclutas, su expresión se tornó alegre y sonrió.

-¡Annie!-

Soltó la mano del azabache y salió corriendo en dirección a la rubia, dejando al chico otra vez tirado en el suelo.

-Debo aprender más de ella- murmuró TN refiriéndose a Annie.

TN no era de hacer amigos con todos, mucho menos era sociable, pero cuando demostraba interés en cierta persona intentaba hacer alguna interacción con ese individuo, eso era en este caso. Para la castaña Annie era una persona interesante, aunque algo en ella le hacía pensar que no era de fiar, pero de cierto modo le agradaba. A pesar de que la rubia nunca empezase una conversación salía intercambiando algunas palabras, nada personal, solamente sobre entrenamiento y prácticas, lo único que pudo saber de la de orbes azules fue que quien la había entrenado había sido alguien de su familia y punto, nada más, hasta allí. Tenía experiencia tratando con personas calladas, ejemplo perfecto era "él" y Mikasa, así que no le afectaba la frialdad de la rubia, y conversaba con ella siempre que podía.

-¡Oye, Annie!- llamó la chica acercándose.

La nombrada al darse cuenta se detuvo y volteó en dirección de la de orbes verdes, quien ya estaba frente a ella.

-¿Puedes entrenar conmigo? Quiero aprender de más de tus habilidades y técnicas de combate- dijo seria, solía tratar de esta forma a la rubia para hacer igualitarios sus comportamientos.

-No tienes por qué tomártelo en serio, es solo una simple práctica- dijo neutral.

Ackerman resopló y Annie intentó alejarse pero no pudo al ver cómo Reiner le cortaba el paso.

-¿Andas buscando que el instructor te de un cabezazo?- preguntó el rubio de cabello corto.

Eren se acercó a un lado de TN y pasó su brazo izquierdo detrás de la castaña, abrazándola por la cintura.

-Si no quieres hacerte más pequeña, sugiero que recuerdes tu primer día aquí y hagas las cosas en serio-

-Oye ¿Qué estás diciendo?- el castaño no sabía que quería lograr el rubio.

La castaña y Eren retrocedieron un paso sin decir nada, la expresión de la rubia decía todo.

-Ya valiste Reiner- pensó la castaña sonriendo de medio lado.

-Está furiosa- pensó Eren ante la expresión de Annie -Siempre creí que tenía una cara aterradora, pero esa no es nada comparada a la de ahora-

Reiner se puso detrás de Eren y lo tomó de los hombros, empujándolo hacia el frente.

-Andando Eren-

-¿Yo?- pareció un tanto alarmado.

Annie posicionó sus brazos frente a su cuerpo, formando dos puños frente a su cara. El ojiverde tomó el arma de madera y se colocó en posición de pelea.

-Annie, sabes qué hacer ¿Verdad?-

-Eso no se pregunta, gritón- murmuró la castaña, permaneciendo a un lado de Reiner. Sus palabras fueron captadas por Eren quien le envió una mirada molesta.

-¡Ahí voy!-

Eren se abalanzó sobre Annie con el arma en mano, pero la chica ni siquiera tuvo que hacer nada, haciendo tropezar al castaño fácilmente con su pierna, asombrando a los dos espectadores y a otros reclutas que estaban cerca.

-¿Qué? ¿Me pateó en la pierna?-

Intentó ponerse de pie pero volvió a sentarse en el suelo por el breve dolor.

-¿Ya puedo irme?-

-No. No se acaba hasta que el oponente suelte la daga- comentó el rubio y Annie suspiró resignada.

-Quieres ver el mundo arder ¿No?- comentó TN.

-Algo así- el rubio sonrió de medio lado.

-Que malo eres- codeó al más alto.

-¡Espera, Annie!- intentó detener a la chica enseñando el arma -Se supone que debemos hacerlo como nos lo-

Y de un movimiento rápido volvió a ser derribado, esta vez con más brusquedad, quedando tirado en el suelo, en una posición embarazosa. Ahora Annie había conseguido quitarle el arma.

-Toma- la rubia le lanzó el arma a Reiner e intuyó lo que seguía -Ahora es tu turno de atacarme-

-Yo no...- intentó negarse.

-Hazlo, Reiner-

El nombrado bajó la mirada para dar con el rostro de Eren, quien claramente quería que le dieran una cucharada de su propia medicina a la causante que lo dejó en tal posición.

-Le vas a enseñar la responsabilidad de ser un soldado ¿Verdad?-

En ese momento Reiner sintió el verdadero terror, pero se lo tuvo que tragar y hacerse el fuerte.

-Sí, hay veces en las que un soldado no puede hechar de para atrás- tomó valor para hacerle cara a la de ojos azules -¡Cómo ahora!-

Y un milagro ocurrió... Reiner fue el vencedor... Neh, mentira, Annie volvió a ganar igual que hizo con Eren. Este último logró pararse gracias a una "suave" patada que le dió su pareja en el trasero.

-Había otras formas ¿Sabías?- miró con mala cara a la "menor"

-Jeje~ lo ví más fácil así- sonrió burlona y Eren frunció más el seño -Venga no te enfades amorcito...- besó brevemente los labios del moreno y las mejillas de este enrojecieron, pero... -...gritón- dicho esto Eren iba a atraparla pero TN salió corriendo en dirección a ayudar al humillado Reiner.

-¿Necesitas una mano?- se acucliyó frente al rubio sonriendo burlonamente.

-Has lo que quieras- desvió la mirada.

-Bueno- volvió a erguirse.

TN le dió una patada en el trasero y exitosamente lo volteó.

-Podría perfeccionarme haciendo esto- rió.

En lo que TN se burlaba de Reiner, Eren hablaba con Annie acerca de su técnica de pelea.

-Sí, fue mi padre- dijo la rubia neutral.

-Tu padre podría- Annie interrumpió a Eren.

-¿A quien le importa? Hacer esto es inútil-

-¿Te refieres a este entrenamiento?-

La castaña y Reiner prestaron atención a la conversación de aquel par, en especial la primera.

-Las técnicas anti-humanos no tiene relevancia en nuestras calificaciones, así que la mayoría lo toma con calma hasta que se acaba-

TN giró el cuello para cerciorarse de esto, Annie tenía razón, no solo eran algunos, todos parecían estar tonteando en vez de practicar con seriedad.

-El derecho de unirse a la Policía Militar y vivir de manera segura en el Distrito Central, solo es concedido a los diez graduados con las mejores notas. Las personas que se molestan en participar en esto seriamente son tontos que se lo toman en serio como tú y tu novia- miró de reojo a la ojiverde -O simplemente son tontos-

-Puede que tengas razón- interrumpió TN acercándose al lado de Eren -Para ellos puede que sea así, pero para mí no- se cruzó de brazos -Este entrenamiento no es usado por soldados que matan Titanes, se usa contra seres humanos y por esto es que me es útil, aunque creo que es difícil que ustedes se den cuenta de ello-

Los dos rubios presentes parecieron abrir sus ojos más de lo normal y luego fruncieron el seño, siempre habían estado alertas ante TN, algo en esa chica los hacía ponerse ansiosos, pero ahora estaba aclarando un poco las cosas de forma poco entendible.

-Entonces me estás diciendo que tú- Eren interrumpió a Annie.

-¡El instructor!-

Rápidamente Annie reaccionó y apuntó a Eren con el cuchillo de madera. TN también lo hizo, solo que fue con Reiner, nadie quería que Keith les llamase la atención por estar conversando en la práctica. TN, a pesar de centrarse en la pelea contra el rubio de ojos azules, seguía pendiente a la plática de Eren con Annie, de igual forma Reiner también lo hacía, aparentando muy mal un falso forsejeo.

-¿Cómo es posible que aquellos con más aptitudes para enfrentarse a los Titanes son los únicos que reciben el privilegio de evitarlos por completo?¿Cómo crees que llegó a ser semejante farsa?-

-¿Quién sabe?-

El castaño intentó arrebatarle el arma a Annie haciéndole un tipo de llave, pero ella repelió el accionar como si nada, tumbando al chico boca arriba y sentándose sobre su pecho, a la vez que le apuntaba con el arma al cuello. Para evitar que la daga la tocase su garganta agarró las muñecas de la de ojos azules, frenando así el avance.

-¿Quisás solo sea la naturaleza humana que llevan en parte?-

Annie se puso de pie dejando de apuntar a Eren.

-El punto es que ni siquiera puedo pretender ser lo suficientemente tonta como para ser una soldado en este desquiciado mundo- se alejó del castaño que se estaba levantando.

-Entonces no eres apta para ser un soldado- agregó Reiner soltando el agarre de TN al no sentir ninguna aplicación de fuerza por parte de la contraria.

-Y como siempre repite lo mismo cada vez que quiero practicar con ella- la castaña suspiró.

-Estaba tan obsesionado con hacerme más fuerte que no me di cuenta. Es una contradicción tan obvia- Eren observó a todo su alrededor -Solo están mejorando sus habilidades de combatir Titanes para alejarse de ellos- fijó la mirada sobre TN quien parecía tener una conversación con Reiner sobre algún tema incómodo para el rubio y ella reía de manera cómplice, el castaño observó al suelo sumergido en sus pensamientos -¿Te habrás dado cuenta ya? ¿O sigues viendo todo como una niñita?-

-Te he dicho mil veces que no me llames niñita-

El castaño dirigió su mirada algo sobresaltado hacia la castaña, quien estaba a su lado observándolo fijamente.

-¿Eh?-

-Ya me he dado cuenta, desde el principio... todo esto es una farsa... ellos solo quieren huir de los Titanes, para mí sería más lógico que los que obtienen mejores calificaciones fuesen los que entrasen a la Legión de Reconocimiento ¿No crees?- sonrió de lado.

-Sí... Oye, ¿Cómo es que sabes lo que estaba pensando?-

La chica pareció tensarse, pero luego sonrió.

-Llevo el tiempo suficiente contigo y te conozco más de lo que te imaginas... Sabía que pensarías así-

-P-pero...-

TN se percató de que el instructor ahora estaba mucho más cerca que antes y no dudó en arrebatarle la daga a Reiner de las manos.

-¿Qué hac- ¡¡Aah!!- TN lo había tumbado como lo había hecho Annie, entonces con el arma en mano saltó sobre su pareja, que estaba inmóvil metido en sus pensamientos, derribándolo lo contuvo de cara contra el suelo, y lo amenazó con el arma cerca de su cuello.

-¡¿Qué fue lo qu-?!-

Todo lo que había hecho la castaña lo había presenciado el instructor, parándose a un lado del rubio que ahora por segunda vez había sido humillado con esa técnica.

-Gran manera de enfrentarse con dos oponentes a la vez, Ackerman-

La nombrada le dió una patada en el trasero a Reiner logrando voltearlo.

-Siempre deben estar preparados para lo que sea, independientemente del número, tamaño o peso de sus oponentes, nunca deben subestimarlos-

Tras decir esto se alejó, dejando a un adolorido Reiner y otros dos que seguían en el suelo.

-Sigo teniendo mejores reflejos que tú, amorcito- rió burlona la de orbes esmeralda.

El castaño sonrió y se acercó a su rostro peligrosamente para después decir:

-Lo que tú digas niñita, ahora quítate- sonrió malicioso y TN frunció el seño por el apodo.

-¿Cómo se dice?-

-No lo diré- desvió la mirada.

TN aumentó la presión del agarre.

-¡Auch! ¡Bien!- cerró sus ojos por el golpe, luego volvió a abrirlos con una forzosa sonrisa en su rostro y frunciendo el seño, como odiaba decir esto-TN hermosa y preciosa, ¿Podrías soltar a tu novio gritón?-

-Claro que sí, amorcito gritón- sonrió burlona levantándose pero Eren la volvió a tumbar y se colocó sobre ella, posicionando las muñecas de TN a ambos lados de su cabeza -Soy más ágil que tú, por eso pude hacerlo. Pero tú eres más fuerte, puedes vencer a tipos más grandes que tú, incluso a más de uno, tienes más agallas que nadie y cuando se trata de lograr tus objetivos no crees en nadie- sonrió enseñando los dientes.

Eren sonrió también, pero con las mejillas rojas, después se acercó al rostro de TN y cerró sus ojos dispuesto a besarla, pero la castaña colocó sus manos sobre la boca del ojiverde impidiendo el avance y este la vió confundido.

-Si el instructor nos ve nos mata, así que quítate de encima- hizó puchero intentando levantarse, Eren dió un suspiro desanimado y se levantó un poco quedando sentado sobre las caderas de TN.

-Pero me lo debes más tarde- Sonrió malicioso y después se paró por completo, las mejillas de TN se ruborizaron y después desvió la mirada -¿Y Reiner?- dijo Eren observando a todos lados -Hace unos segundos estaba aquí-

-Debe de haberse ido con su querido Bertholtd- TN sonrió cruzando los brazos.

-¿"Querido"?- el castaño no entendió a lo que se refería.

-Olvídalo, cosas mías- agitó su mano de arriba hacia abajo restándole importancia -Ve por él tigre-

Todos ahora estaban en el comedor, intentando cenar con tranquilidad, pero había dos pequeñas molestias...

-¡No me importa, estoy muy celoso!- exclamó Jean a la vez que jalaba del cuello de la ropa de Eren.

-¡¿De qué estás hablando?! ¡Ya te he soltado!- respondió el castaño.

-¡Lo sueltas o te haré soltarlo, caballo de mierda!- TN se levantó de su lugar y amenazó a Jean con solo mirarlo.

Eren le había dicho en cara a todos lo mismo que le había comentado Annie en el entrenamiento, y por esto mismo ahora se reveló ante esto como un acertijo recién resuelto, todos en el comedor estaban observando la disputa, en especial Annie y Reiner, ellos parecían más pendientes de lo que vendría a continuación.

-Ya veo, solo se está desahogando, al igual que hicimos en ese entonces- pensó TN recordando la vez que golpearon a Hannes y otros dos soldados -Supongo que ya te diste cuenta... ¿No, Eren?-

Y de la nada, como si sus pensamientos hubiesen sido escuchados, Eren quitó la mano de Jean sujetándola por la muñeca, usó la otra mano tomándolo por el cuello de la ropa y con el pie derecho barrió el suelo, empujando al castaño claro e hizo que perdiera por completo el equilibrio, separó ambos pies del suelo y cayó bruscamente de espaldas. TN dejó de fruncir el seño y una sonrisa leve se plasmó en su rostro, sabía que esa técnica era la misma que Annie había usado contra él, también en algún momento sintió la fuerza de tal técnica, y al igual que el castaño, ella la había aprendido.

-Bien- alzó su puño cerca de su rostro en señal de victoria.

-Eso dolió...-

Jean sobó la zona que había sido dañada.

-¡¿Qué diablos fue eso?!-

-Ese fue un movimiento que aprendí mientras tú perdías el tiempo. Si piensas que la realidad es solo vivir cómodamente y seguir tus caprichos, ¿Te atreves a llamarte soldado?-

Repentinamente todos se tensaron, la puerta había rechinando al ser abierta y la persona responsable de esto había sido el instructor Shardis, quien se hallaba de pie con un semblante aterrador.

-Creo haber escuchado un ruido bastante fuerte, ¿Alguien puede explicarme lo que está sucediendo?-

Nadie dijo nada, Armin hizo presión en los hombros de TN para que se sentase y Eren se sentó al lado de la castaña. Mikasa alzó la mano y dijo:

-Sasha acaba de tirarse un pedo, señor-

Sasha abrió la boca sorprendida y avergonzada.

-¿Tú de nuevo?- el instructor se tapó la nariz con la mano.

La expresión de Sasha lo decía todo, era más que claro que la acusación había sido falsa y todos lo sabían, pero de todas formas no dijeron nada e intentaban no reírse.

-¡Aprende a controlarte un poco!- y se marchó.

La chica de ojos ámbar fue a sentarse al lado de Mikasa, y tanto esta como TN le dieron su ración de pan en forma de disculpa, por otro lado, Jean y Eren seguían viéndose con enojo y gruñían por lo bajo de vez en cuando.

Y así la graduación de los 218 reclutas se acercaba, Jean parecía tomarse más en serio las prácticas, Annie y TN entrenaban más seguido, la mayoría de las veces ganaba la rubia, pero en otras ocasiones TN lograba vencerla, aunque desde luego que la ojiverde se contenía, ella no dejaría salir a la luz su verdadero potencial, no aún... ella sabía que eso lo decidiría el tiempo y muy pronto, mientras más cerca la graduación, más cerca salir de las murallas, más cerca llegar a Merley, más cerca destruirla, pero aún más... Más cerca destrozar su corazón... Más cerca romper el corazón de Eren.

-¿Me lo prometes?-

-¿Eh?- dijo Eren sin entender.

-Prométeme que pase lo que pase, cuando salgamos de las murallas... vas a confiar en mí y no vas a creer nada de lo que te digan sobre cuáles son mis objetivos y por qué hago lo que hago, todo lo que pase lo haré por ti y mis seres queridos ¿Entiendes?-

TN estaba acostada al lado del castaño, quien la veía con completa confusión, todos ya estaban dormidos, los dos susurraban para no ser escuchados.

-¿Por qué dices eso? ¿A qué te refieres?- ladeó la cabeza.

-Solo promételo- escondió su cabeza en su pecho, mientras jalaba con su mano la ropa del contrario.

-Yo... Lo prometo- accedió mientras seguía con un millón de dudas rondando por su cabeza.

Se escuchó una risa seca por parte de la chica, quien abrazó a Eren dando pequeños suspiros, no había que decirlo para saber que estaba llorando.

-¿Por qué te pones así de repente?- dijo preocupado mientras afirmaba el abrazo.

-No es nada... solo... vamos a dormir ya- desvió el tema y cerró los ojos, Eren seguía dudoso y quería preguntar qué ocurría, pero prefirió no molestar a la castaña, ya tendría que darle explicaciones después

-¡Manos sobre el corazón!-

-¡Sí, señor!-

De los 218 reclutas, solo diez encabezaban a todos en una fila horizontal para destacar, el resto estaba detrás a unos metros de distancia, y en la cima de unos escalones de piedra se encontraban el instructor Shardis y otras seis personas del mismo o mayor rango. El lugar se encontraba al exterior, iluminado por dos grandes antorchas y todos, como se les había ordenado, hicieron el saludo militar.

-Hay tres caminos para los graduados de hoy- explicó -¡Pueden estar estacionados en los muros y defender a los ciudadanos como miembros de las Tropas Estacionarias! ¡Pueden ser miembros de la Legión de Reconocimiento y arriesgar sus vidas luchando contra los Titanes en su propio territorio! ¡O pueden servir al Rey al controlar las multitudes y preservar el orden como miembros de la Brigada de la Policía Militar!-

-¡Por supuesto, solo las diez personas con las mejores calificaciones que enunciamos antes podrán ser parte de la policía militar!-

La fila seguía este orden según las calificaciones: Mikasa, TN, Annie, Reiner, Bertholtd, Eren, Jean, Marco, Connie y Sasha.

-¡Por fin llegamos hasta aquí! ¡Directo a la Legión de Reconocimiento se ha dicho!- celebró mentalmente la castaña de ojos verdes, pero luego su sonrisa se borró de su rostro al ver la cara de emoción de Eren, recordó de golpe todo por lo que hacía esto, de cierta forma lo había olvidado, diariamente se engañaba a si misma diciendo que quería ser una soldado, pero en realidad y prácticamente estaba traicionando a sus amigos, engañándolos, ella sabía la historia detrás de las Murallas, ella sabía quién era el verdadero enemigo, pero debía callar, así protegería a sus seres queridos. Cuando saliesen de las Murallas quizás ella no vuelva, aunque en realidad ella prometió matar a todos los Titanes y lo haría, por dentro lo sabe pero no quiere irse, ella no quiere dejar a Eren, quiere permanecer a su lado, ¿Y si él muere? El aún no sabe acerca de su poder y ella no va a decirlo, su cabeza estaba echa un lío hasta que salió de su trance cuando volvieron a hablar.

-Mañana entregarán sus solicitudes de admisión. ¡En el día de hoy, la Unidad de formación N° 104 queda disuelta!-

-¡Si, señor!-

Después de esto los chicos fueron al comedor a celebrar su graduación, era mucho más espacioso que el que estaba en el campo de entrenamiento, todos festejaban y brindaban por ser al fin soldados, algunos charlando en grupos y otros sentados comiendo.

El cuarteto de amigos se encontraban juntos con unos vasos con jugo en la mano, Mikasa y Armin estaban parados al lado de TN, quien estaba sentada en las piernas de Eren. Luego de unos minutos unos reclutas se les acercaron para hablar con los dos castaños.

-Oigan ¿No quieren unirse a la Policía Militar? ¿Lo dicen en serio?- dijo un chico de cabello café.

-¡Pero fueron de las mejores diez calificaciones!- habló un chico rubio claro.

-¿Y qué? Estuvimos enfocados en nuestra meta desde el principio. Ninguno de los dos entrenamos para vivir cómodamente en el Distrito Central. Además, entrenamos muy duro para poder pelear contra los Titanes- explicó TN con el rostro serio, sacudiendo los hombros y bebiendo un poco de su vaso.

-Exacto, no vamos a retroceder ante nuestra decisión- agregó Eren.

-¡Pero no hay forma en la que ganen!-

Thomas había alzado lo suficiente la voz como para callar todas las conversaciones en aquel lugar, ganándose las miradas de los nuevos soldados, al darse cuenta de esto bajó su volumen y volvió a hablar.

-Lo saben muy buen... saben muy bien cuántos fueron devorados por ellos...-

No había excepción, cada uno de los presentes prestaba atención a la conversación que sobresaltaba en ese comedor, incluso Jean parecía interesado.

-Ya hemos perdido el viente por ciento de la población, la humanidad no tiene oportunidad alguna contra ellos-

Aquel muchacho rubio habló con tal seguridad que trajo consigo un ambiente desalentador y oscuro sobre todo ser allí presente, a más de uno se le fueron las ganas de seguir celebrando, cambiando de un momento a otro, de expresiones animadas a más sombrías. Algunos se limitaron a bajar la cabeza por la cruda realidad que vivían. Todo estaba tan silencioso que se podía escuchar el ruido de las chispas de las antorchas en completa claridad.

-¿Y?-

Eren rompió el silencio.

-¿Te vas a rendir solo porque piensas que no puedes ganar?-

-Bueno...-

-Sí, es verdad. Solo hemos tenido derrota tras derrota hasta ahora- admitió TN cruzándose de brazos y cerrando sus ojos -Pero...- observó a Eren para que continuase, ella no era quien para decir eso.

-¡Eso era porque no sabíamos nada sobre ellos! ¡Fallando uno consigue experiencia y sabe cómo prepararse para lo que se avecina! ¡No hay que esconderse y tirar esas oportunidades a la basura! ¡Es algo que debemos usar a nuestro favor!- exclamó el castaño con el seño fruncido -Tampoco podemos vencerlos simplemente siendo más. Puede que hayamos perdido, pero el conocimiento que obtuvimos de esas batallas es nuestra esperanza. Y sin embargo descartas el progreso táctico obtenidos gracias a cientos de miles de sacrificios ¿Solo para poder comer en bandeja de plata? ¡No me jodas!-

TN se levantó y dejó el vaso vacío en una mesa, de la nada perdió por unos segundos el equilibrio en el momento que Eren la rodeó por el cuello con su brazo.

-¡Mataremos hasta el último Titán y nos liberaremos de estos muros! ¡Ese es nuestro sueño!- de sus orbes esmeralda comenzaron a emerger pequeñas gotas de lágrimas -¡La humanidad todavía no lo ha perdido todo!- sentía ganas de llorar, quitó el brazo de la chica y salió corriendo.

-¡Espera, Eren!-

Mikasa y Armin fueron tras él, TN iba a ir pero fue detenida por cierto caball- digo... Jean, quien se paró delante de ella cortándole el paso.

-¡Ja! ¡Si pudieran oír lo que dicen!-

-¡¿Qué dijiste?!- levantó la mirada más amenazante que podía encarando al castaño claro.

-¡Mira a tu alrededor! ¡Nadie está de acuerdo con ustedes!-

TN vió a su alrededor, rodeada de rostros ensombresidos.

-Sí, lo entiendo- chasqueó la lengua -Cada quien escoge, como tú por ejemplo. Puedes irte al Distrito Central si es así, ¡Porque si llegásemos a tener un simplón derrotista como tú en frente nos bajaría la moral!-

Una venita se le marcó en la frente a Jean.

-Tranquila, eso mismo pienso hacer ¿Pero que hay de ti y de Eren? Tienen la intención de atravesar el Muro ¿Verdad? ¡Hagánlo! ¡Vayan! Sus queridos Titanes los están esperando-

-Claro que lo haremos- una sonrisa de medio lado se plasmó en su rostro -Como me gustaría restregarte en la cara que los Titanes a mí me obedecen-

La mayoría de los soldados tuvieron un sentimiento premunitor.

-Eso...-

-Significa que...-

-Es la señal de peligro...-

De la nada ambos se lanzaron un puñetazo, TN recibiendo uno en la cabeza y Jean uno en el mentón.

-¡Siiiiii!- gritaron desde el fondo.

Al parecer todos esperaban una pelea desde hace tiempo.

-¡Ahí van!-

-¡¿Quién ganará?!-

-¡¿Qué no es obvio?! ¡Jean la tiene acorralada contra la pared!-

-¡¿Qué dices?! ¡TN acaba de tirarlo al suelo!-

-¡Mira bien!-

-¡Cómo ruedan!-

-¡Aléjense de allí si no quieren que los golpes les lleguen!-

-¡Casi, dale otro golpe TN!-

-¡Es así como debe acabar una buena graduación!-

-¡Así se usan los puños!-

-¡Esa es una pelea de soldados!-

-¡Vamos Jean, dale otro en el costado!-

-¡¿De qué hablas?! ¡Si parece como si los golpes de Jean no le dolieran!-

-¡Esa chica es de hierro!-

Varios chicos apoyaban a Jean, pues TN varias veces había molestado el sueño de ellos cuando iba a el dormitorio de los chicos, ganándose la molestia de unos y el aprecio de otros por ser tan singular.

-¡Ugh! ¡Eso debió doler!-

-¡Levántate Jean!-

-¡Dale TN!-

-Oigan ya paren- dijo Reiner desde su asiento -¡Oye no uses la-!-

"¡Crach!"

-Ella...-

-Acaba...-

-¡De romper la silla en Jean!-

-Olvídalo- Reiner pasó la mano por su cabeza -Puede que no sea tan fuerte como Jean pero...-

-¡Lo tienes contra las cuerdas!-

-¡Una más y lo acabas!-

-¡Escapa Jean!-

-¡TN! ¡TN! ¡TN!- echaban barras.

-De todos los resultados de agilidad, TN es la mejor de todos los reclutas...- continuó el ojiazul.

La chica estaba sobre la espalda de su oponente, quien no podía casi moverse por estar aturdido gracias al golpe de la silla, a punto de rematarlo con un puñetazo, de la nada apareció cierta azabache que la tomó de la cintura y la puso sobre su hombro.

-¡¿Eh?!- exclamó sorprendida.

-A menos que... fuera la segunda, después de Mikasa- concluyó Reiner bebiendo un poco de su jugo.

-¡Mikasa, bájameeee!- gritó TN haciendo puchero y pataleando.

Todos comenzaron a reír divertidos, mientras algunos rodeaban a Jean para comprobar su estado.

-Oye ¿Sigues con vida?-

-¡Tsk!- Jean chasqueó la lengua -¡Tienes suerte TN! ¡Que Mikasa te lleve en brazos como una niñita!-

Una vena se marcó en la frente de TN, y antes de salir de allí, pudo con el brazo lanzarle una silla en dirección al castaño claro.

-¡Cuidado!-

Todos lograron esquivarla, menos Jean quien seguía sin reflejos por los golpes anteriores así que cayó al suelo inconsciente.

Mikasa se había llevado a TN hacia unas escaleras dónde se encontraban Armin y Eren, este último tenía los ojos hinchados y cuando TN se dió cuenta dejó de patalear. La azbacahe arrojó a TN y esta cayó de rodillas con las manos en el suelo.

-¿Siempre tan cuidadosa, no?- gateó hasta quedar a un lado de su novio -¿Estás bien?-

Eren observó su rostro y frunció el seño.

-¡¿Yo?! ¡Mira esos arañasos!- apuntó a su cuello.

-¿Arañaso?- pasó sus dedos por aquel lugar, si bien tenía sangre pero sonrió divertida y dijo: -¿Estás ciego o qué? No estoy lastimada y esta sangre no es mía-

-Es de Jean- agregó Mikasa sentándose a un lado de su amiga.

-Tuve que suponerlo- Armin suspiró -¿Tu armaste todo ese alboroto?-

-Por bocón- respondió mientras Eren limpiaba su cuello -Estuve por darle el último golpe para noquearlo, peeeero, Mikasa no me dejó-

-Como lo esperaba de mi princesa- las mejillas de TN enrojecieron al mismo tiempo que Eren codeaba su brazo -Cuéntame, ¿Pudiste dejarle un ojo morado?-

-Le rompí una silla en la espalda y también le lancé una cuando Mikasa me sacaba del salón, creo que conseguí dejarlo inconsciente- rió entre dientes.

-¿Por qué lo hiciste?- Mikasa la fulminó con la mirada.

-¡Por ser un derrotista!- bufó molesta -Además, se burló de nuestro sueño...-

-Ahora que lo mencionas...- todos giraron el cuello hacia Armin, mientras TN se acostaba sobre el regaso de Eren también observando al rubio -¿Podemos hablar de su sueño...?-

-Sí, después de todo lo obtuvimos gracias a tí- aceptó Eren.

Los cabellos de TN ocultaron su rostro, no hubo respuesta por parte de ella y todos quedaron extrañados por esto, pero aún así continuaron hablando.

-Entraré a la Legión de Reconocimiento- anunció Armin.

Ambos castaños se asombraron, TN levantó su vista sorprendida y tanto Eren como ella intercambiaron miradas, conocían bien a su amigo y como que algo no calzaba en su declaración.

-¿Lo dices en serio, Armin?- comentó Eren.

-Sí, ya lo sé...- bajó la mirada -Soy débil físicamente, es un auténtico milagro que pasase el simulacro de batalla de nuestro examen-

-Eres nuestro mejor estratega, no desperdicies eso. Aprovéchalo, ¡Eso fue lo que dijo el instructor!- agregó TN -No serás más fuerte por olvidarte de tus puntos débiles y estar en un lugar de violencia sin control-

Armin vió a la chica, luego bajó la mirada y dijo:

-No me importa morir mientras sea de utilidad...-

-Armin...- susurró Eren.

-Yo también entraré a la Legión de Reconocimiento-

Los tres se sorprendieron y voltearon en dirección de la de ojos onix.

-Saliste como la mejor ¿no? ¡Ve a la Policía Militar!- dijo Eren acariciando los cabellos de TN, dirigiendo su mirada hacia Mikasa.

-Mikasa, amiga del alma, ¿Acaso lo haces porque nosotros iremos?- esta vez habló la castaña.

La azabache asintió.

-Y si van a las Tropas Estacionarias, yo también lo haré. Si no voy con ustedes, morirán antes de tiempo- dejó en claro, Eren y TN rodaron los ojos.

-Nunca pedimos eso (7n7)-

-Como que nos sobreestimas un poco amiga (-_-)-

-No es eso, es que no quiero perder lo que queda de mi familia-

Vieron que la mirada de Mikasa era triste, esas palabras los sorprendieron y conmovieron a la vez, nadie dijo nada, habían quedado en un cómodo silencio, de un momento a otro los cuatro levantaron la mirada hacia el cielo nocturno estrellado, una estrella fugaz pasó delante de sus ojos e hizo sonreír a la "menor".

Varios de los nuevos soldados paseaban por la ciudad, algunos de ellos por el camino principal que conducía directamente a las puertas que daban al exterior y también a la entrada de la siguiente Muralla.

-¡Ya llegaron! ¡La fuerza principal de la Legión de Reconocimiento ya llegó!- anunció alguien.

Algunos se acumularon a ambos lados de la calle para ver a los soldados que iban a salir al exterior.

-¡Comandante Erwin! ¡Destruya a todos los Titanes!-

Entre los ciudadanos se encontraban Eren, TN, Mikasa, Armin y una pareja amiga de ellos. Eren miraba fascinado y con admiración al Comandante, TN también lo observaba, pero busca a alguien más... "él"

-¡Mira!- TN desvió la mirada hacia un hombre que señalaba con su dedo a la parte de atrás de la fila -¡Ahí está el Capitán Levi! ¡Dicen que él solo cuenta como un grupo entero!-

Seguido de Erwin venían otros cuatro personajes, estaba un hombre de cabello rubio, una muchacha castaña con gafas y aquella persona tan importante para TN.... cabello negro, ojos afilados y orbes azules grisáceos, cara de pocos amigos, así era él.

-¡¡Levi-aniki!!- gritó emocionada la castaña. Eren la miró extrañado y el azabache frenó el caballo en seco con los ojos más abiertos de lo normal.

-Oye Levi, apúrate o te quedarás atrás- dijo una castaña a caballo, pasando por al lado de Levi.

El de orbes grisáceas observó al lado izquierdo en la multitud, luego miró a la derecha, chocando con la mirada feliz de la de ojos verdes. El pelinegro la miró serio y se bajó del caballo, a paso lento iba caminando hacia la chica, pero fue interrumpido su accionar, ya que TN salió corriendo en su dirección y se lanzó a abrazarlo.

-Tiempo sin verte, mocosa- saludó el azabache aceptando el abrazo.

-Tan amable como siempre- sonrió la chica mientras se separaba de él y sus amigos la veían con la boca abierta... osea... ¡¿Desde cuándo TN conoce al soldado más fuerte de la humanidad?!

-¿Ya te graduaste?- dijo neutral.

-¡Sip!- sonrió enseñando los dientes.

El azabache sonrió muy levemente, casi imperceptible, pero TN ya veía esas sonrisas como algo milagroso, después de pasar tanto tiempo con él, sabía perfectamente que eso significaba orgullo o felicidad, en este caso sería lo primero y era muy difícil lograr esta expresión por parte del mayor.

-Procura no morir tan pronto- removió los cabellos de su cabeza y la chica sonrió con los ojos cerrados.

-Creeme que no lo haré- amplió su sonrisa.

Levi alzó una ceja sin despegar aquella pequeña sonrisa, luego de la nada TN volvió a un lado del camino y agarró desprevenido el brazo de Eren y lo arrastró hacia el azabache.

-¡Mira! Este es mi noviooo- sonrió cómplice peyiscando la mejilla morena del castaño, quien no tenía la cara más roja porque no podía.

-U-un g-gusto c-conocerlo, Capitán L-Levi- dijo Eren avergonzado y sin entender nada.

Levi fulminó a Eren con la vista y el nombrado tragó duro, luego el de más alto rango desvió la mirada y dijo:

-Ten cuidado, ella es peligrosa- se dirigió a Eren con el rostro serio y aterrador, luego subió a su caballo y se marchó, no sin antes enviarle otra mirada a la castaña.

-¿P-por qué d-dijo eso?- preguntó el ojiverde notablemente nervioso.

-¿Uhm? Ni idea- sonrió frunciendo el seño, algo que estremeció a Eren por completo.

Los dos castaños volvieron con sus amigos, claro que Eren pidió explicaciones y TN prometió aclarar eso después. Eren observó a su alrededor diciendo:

-Es un aura completamente distinta a como era hace cinco años, la gente realmente cree en la Legión de Reconocimiento-

-La artillería a mejorado- comentó Franz -Ese Titán Colosal no volverá ¿Cierto?-

-Cierto- apoyó la chica a su lado.

-¡¿Cómo pueden ser tan ingenuos, pareja de casados estúpidos?!- Eren en vez de conseguir bajarle los ánimos, solo logró sonrojarlos por completo.

-T-todavía no estamos casados- la chica les dió la espalda moviendo su mano de un lado a otro.

-No te apresures, Eren- el chico se tapó su rostro igual de avergonzado -A-además, ¿Por qué no se casan ustedes?- contraatacó.

Las mejillas de Eren se tornaron rojas, a la vez que las de TN. Armin reía incómodo por la situación, incluso Mikasa sonrió levemente.

-¿Así se verían Reiner y Bertholtd?- se preguntó la castaña observando a la pareja -Sería interesante verlos-

-Hola chicos-

Los cuatro amigos voltearon en dirección a aquella voz, la cual conocían muy bien. Sus ojos se toparon con un adulto de cabello rubio y corto, que pertenecía a las Tropas Estacionarias.

-¡Hannes!-

El rubio abrió sus ojos más de lo normal mirando de arriba a abajo el cuerpo de TN y de la nada la abrazó, luego se separó y dijo:

-Cielos, estás viva, como me preocupaste muchacha- sonrió acariciando el cabello de la chica y está sonrió de lado.

-Gusto en verlo otra vez, Hannes-san- sonrió.

-Se graduaron ayer ¿no?- se dirigió a los otros presentes y estos asintieron como respuesta -No puedo creer que hasta hace no mucho eran solo niñitos, lo hicieron muy bien-

-No me alegra escuchar eso del borracho Capitán de las Tropas Estacionarias- dijo Eren sonriendo burlón.

-Pero que honor- agregó TN de igual forma.

-¡Mocosos!- Hannes con sus dedos tocó la frente de ambos, haciendo que moviesen su cabeza hacia detrás.

-Borracho- contraatacó la castaña divertida.

Hannes dejó de sonreír y su expresión se tornó de arrepentimiento.

-Lo siento, no pude salvar a tu madre- se dirigió a Eren -Y no pude estar ahí para salvar a la tuya- volteó a ver a TN.

Eren y TN bajaron la mirada y luego el castaño dijo:

-No fue tu culpa-

Hannes se sorprendió por lo dicho.

-Ya no somos niñitos- comentó TN levantando la vista -No dejaremos que una tragedia como esa vuelva a ocurrir-

-Mataremos a todos los Titanes- dejó en claro el de ojos verdes.

Hannes quedó sorprendido por las palabras de ambos, después los cuatro amigos tuvieron que ir a la cima de la Muralla Rose, cumpliendo órdenes de organizar la artillería pesada.

-¿Qué?- la de ojos verdes estaba asombrada.

-¿En serio te uniste a la Legión de Reconocimiento?- Eren no lo creía -¡Connie!-

Eren destapaba la caña del cañón, y TN comprobaba la cuña del mismo, miraban asombrados al chico rapado, que había calibrado la mira del cañón del lado derecho. Todos estaban equipados con el Equipo de Maniobras Tridimensionales, como todos a los que se les encargaba tal labor.

-¡Dijiste muchas veces que te unirás a la Policía Militar!-

-¡Si, lo sé...! Pero...- respondió Connie.

-Al parecer el discurso de ustedes ayer lo conmovió-

Minna se acercó a la pareja, Eren dejó de limpiar la caña y TN lo imitó.

-¡Cállate!- Connie giró el cuello en dirección a la conversación, sus pómulos estaba levemente teñidos de rosa en señal de vergüenza -¡Esta es mi propia desicion! ¡También es que TN sabe cómo divertirse, sería aburrido si elijo una opción dónde no esté ella!... Y menos mal que está Eren si no parece más fría que el hielo...-

-¿Que yo qué?- TN se puso de pie ladeando la cabeza.

-No te avergüences- Thomas se acercó a los chicos, uniéndose a la conversación -No eres el único, además, es cierto que TN sabe cómo entretener la cena-

-¿Qué les gusta que rompa las sillas en alguien o qué?- se cruzó de brazos sin entender.

-Dejémoslo en que sabes cómo alegrar la situación- concluyó Minna sonriendo.

-En serio...- Eren se asombró por la desicion de sus compañeros.

-Umm, chicos...-

Sasha se acercó al grupo de soldados, traía algo escondido bajo su chaqueta.

-Tomé prestado un poco de carne de las raciones matutinas de los oficiales- enseñó el trozo de carne que traía, era una expresión de emoción y deseo lo que reflejaba su rostro.

Los presentes dieron un respingo y jadearon sorprendidos.

-¡Sasha...!- exclamó Eren -¿Quieres que te castiguen? ¡Ni siquiera TN haría algo así!-

-No, sí lo haría- susurró Connie.

-Incluso ya perdí la cuenta de las ocasiones en las que nos trajo comida demás a los chicos- susurró Thomas a Connie.

El castaño sorprendido por esto le envió una mirada recriminatoria a su pareja, la cual se interpretaría como "¿Cómo ¿Dónde? ¿Cuándo? ¿En qué momento?"

-¡Solo fueron un par de veces!- se defendió TN levantando ambas manos -Pero en serio Sasha, creo que te pasaste esta vez...-

-¡De verdad eres idiota!-

-Su idiotez asombra...-

A la de ojos ámbar no le importaban mucho esos comentarios, su expresión deseosa seguía en ella y hasta la baba comenzaba a salirse de su boca.

-¡Cortémoslo y compartámoslo más tarde! Podríamos cortarlo en rodajas y comerlo con pan, mmmm jeje~- comenzó a temblar del placer, imaginando lo que acababa de decir.

-Oh, con patatas cocidas a un lado- murmuró la de ojos verdes.

-Te oí- Eren jaló su oreja, y TN infló sus cachetes desviando la mirada. De la nada sintió como el castaño agarraba su rostro y plantaba un beso en sus labios.

-¡Regrésalo!- sentenció Connie observando a Sasha.

-¡Sí!- apoyó Minna -¡La carne es un lujo debido a que perdimos muchas tierras!-

-No se preocupen-

La de orbes ámbar caminó hacia la caja de suministros, se hincó sobre sus rodillas y guardó la porción de carne.

-Una vez que recuperemos las tierras, podremos criar muchos cerdos y vacas-

-¿Eh?-

-Tiene sentido para mi-

Todos fijaron su atención en la chica de ojos verdes, que estaba abrazada a el castaño de ojos de igual color.

-Un tipo de celebración antes de la recuperación de la Muralla María ¿No?- sonrió confiada, aunque no era de la forma que los chicos pensaban, TN planeaba que la humanidad recuperase sus tierras perdidas -Una vez que comamos, solo quedará reunir valor para seguir adelante-

-¿...?-

-...-

-TN...- susurró Eren.

-¡Yo comeré de esa carne!- decidió un soldado llamado Samuel.

-¡Yo también, déjenme un poco!- agregó Connie.

Eren volvió a asombrarse, dirigió su mirada a la creadora de tal entusiasmo, TN, quien sonreía viendo a sus amigos. El castaño sonrió y agarró la barbilla de la chica captando su atención.

-¿Eren...?- dijo TN algo confundida por la mirada sonrojada que le enviaba el chico de ojos verdes.

Eren lentamente juntó sus labios con los de TN en un tierno beso de solo algunos prolongados segundos.

-Te ves muy linda cuando te sonrojas- sonrió el chico mientras acariciaba la mejilla de la contraria y esta lo empujó ligeramente hacia atrás.

-D-deja de decir tonterías y no te quedes parado, s-si no terminamos nuestra labor nos van a regañar-

TN volvió al cañón que anteriormente atendía, revisando sus otras partes restantes, sonreía con las mejillas ruborizadas y eso lo decía todo para el de orbes verdes, quien ahora le dió la espalda y observó toda la ciudad apretando un puño.

TN se levantó y se paró a un lado del castaño, quien la observó de reojo unos segundos.

-Han pasado cinco años desde ese día...- pensó la más baja -Con mi poder ayudaré a los eldianos y los libraré de la amenaza que asecha tanto fuera de las Murallas, como fuera de esta isla. Allá... cruzando el mar, están los verdaderos enemigos... ¡Ganaremos!-

Parecía que todo iba bien, pero como si a el destino le gustasen los obstáculos hizo de las suyas...

Un gran relámpago se hizo presente a unos metros de la Muralla, y en tan solo un parpadeo, fuera de la realidad y a la vez de la mano con la irrealidad, el mismo Titán de aquella vez hizo su aparición envuelto en vapor y polvo, ante los ojos de cualquiera que tuviese la mirada sobre el Muro Rose.

Ninguno sabía si era real o no, por esos segundos e inconscientemente nadie quería creerlo, había sido tan inesperado y fuera de todo pensamiento que era racional imposible... aunque, por más dificil que fuese asimilarlo, allí estaba, frente a ellos, exponiendo la poca piel y aquella sonrisa aterradora de lado a lado que tenía su rostro.

La que parecía estar mucho más cerca de aquel ser era TN, con la boca entreabierta y el rostro inocente, pero fue la primera en reaccionar y ponerse en alerta, llena de furia y rabia por aquel Titán, culpable de la muerte de su madre.

-¡¡TÚ!!-

Una gran ola de vapor los azotó, junto con todos los demás que se encontraban arriba, TN salió volando expulsada de la Muralla.

-¡¡TN!!- gritó Eren buscando con la vista a la chica mientras posicionaba su equipo tridimensional anclándolo a la Muralla para sostenerse.

Entre el alboroto se escuchó un fuerte estruendo. El Titán Colosal había echo exactamente lo mismo que antes, destruyó la puerta del Muro Rose con una sola patada. Seguido del vapor vino una corriente de aire derribando a los que habían quedado sobre el muro.

-¡¡Usen su equipo de maniobras 3D!!- gritó TN siendo avistada por la mayoría, la chica ya estaba en la pared de la Muralla, colgando de forma vertical, sostenida por los finos hilos de acero de su equipamiento.

Todos escucharon la orden y obedecieron, pero solo uno de ellos siguió cayendo por estar inconsciente.

-¡¡Samuel!!- gritó Connie, quien estaba demasiado lejos de su compañero.

-¡¡Sasha!!-

La nombrada descendía corriendo rápidamente, estando a la distancia suficiente, usó una extensión de su equipo, logrando envolver del pie al inconsciente y engancharse a la pared con el otro extremo , todo estando a unos 20 metros cerca del suelo.

-¡Samuel! ¡No te muevas!- gritó Sasha.

-Estuvo cerca- Eren sintió un ligero alivio pero no duró cuando miró hacia abajo.

-La puerta... está destruida- susurró TN.

El agujero era aproximadamente de unos 10 metros de altura, y lo suficientemente ancho como para que Titanes de ese tamaño o más pasasen por allí.

-Otra vez... ¡Los Titanes volverán a entrar!-

Los recuerdos de las madres de Eren y TN siendo devoradas pasaron por las mentes de los dos castaños, entonces Eren susurró:

-Hasta... el...-

-Último...- TN terminó la frase.

Entonces ambos dejaron de lado eso y se concentraron en la realidad de la situación.

-¡¡Preparen la artillería!! ¡¡Cuatro grupos, prepárense para la batalla!!-

TN y los demás dirigieron su atención hacia el Jeager más alto, quien sacó sus cuchillas y se balanceó ascendente.

-¡El objetivo está delante de nosotros! ¡Es el Titán Colosal!- pasó por delante de todos.

TN rápidamente siguió al castaño.

-¡Es nuestra oportunidad! ¡No la dejen pasar!- TN sabía que no podía mostrar sus poderes aún, pero sí que podía realizar alguna estrategia para vencer al Colosal con sus amigos, sería difícil usar la coordenada en un Titán cambiante y nunca lo había echo, así que prefirió no intentarlo ahora.

Llegaron de nuevo a la cima, Eren en un giro lateral y TN sobre si misma, posicionándose frente a aquel mounstro, quedando cada uno a cada lado de su rostro, frunciendo el seño con más que odio en sus mentes y cuerpos.

-Hola desgraciado- saludó la castaña.

-Han pasado cinco años maldito- agregó Eren.

Hola hola, aquí está su esperado capitulo. Me esforcé en hacerlo largo, ¿Saben cuántas palabras tiene? 10 688!! Me tiemblan las manos! XD

Espero les haya gustado, ahora una cosita... Estoy enfermita de un resfriado y pues no voy a poder terminar la maratón, espero su comprensión y bueno, cuando me mejore subo los otros 2 cap que faltan (｡･ω･｡)ﾉ♡