Al salir de la habitación me tropiezo con la alfombra de terciopelo del hotel, haciendo que Blair caiga justo al lado mío. Me empiezo a reír como una foca retrasada y parece que a Blair se le ha contagia la risa.

-Ejem-las risas cesan. Blair se levanta rápidamente.
Emily está delante de nosotros con los brazos cruzados, unos tacones de veinte centímetros, una mini falda y una camiseta a la que le falta media tela. -Blair, deberías estar preparándote para la reunión - ruedo los ojos. Maldice para sí.

-Tenemos cosas mas importantes que hacer-le digo a Emily mientras Blair me ayuda a levantarme.

-¿Más importantes que una reunión con el alcalde de Madrid?- pregunta Emily seca.
Blair y yo asentimos.-¿Te crees que voy a ir por ti a esa reunión?-añade.

-Esa es la idea- dice Blair antes de salir corriendo y agarrarme de la mano para que lo siga.

-¡Pues esta vez no lo haré!- oímos que Emily grita

-¡Para eso te pago!-le contesta Blair y nos reímos.

-Si tomamos el ascensor puede que nos detengan antes de salir, es mejor que vayamos por las escaleras - se detiene y me mira.

-Chica lista-me guiña, ruedo los ojos y bajamos de dos en dos las escaleras.

Ahora mismo parecemos dos niños de diez años cuando en realidad tenemos veinticinco años los dos. Es algo que me gusta de Blair. Nunca madurará.

Salimos por las puertas grandes del hotel y seguimos corriendo hasta llegar al Mercedes Benz negro de Blair, pero justo cuando íbamos a arrancar, una voz nos detiene.

Oh, no. ¡¿Y ahora qué?!

-¿A donde se suponen que vais?-una chica parecida a Blair se acerca a mi ventanilla.

-¡Jane!-grito y salgo del coche otra vez.

-¿Qué haces aquí, hermanita?-le pregunta Blair cerrando la puerta del coche y acercándose hacia nosotras.

-He venidi para ayudarte con tus problemillas de reunión - le guiña un ojo.

-Para eso ya está Emily- le dice él restándole importancia. Jane se cruza de brazos, indignada.

-A parte que vengo a ayudarte a ti, en vez de estar en mi casa en la piscina... ¿Me lo pagas así?- cierra y abre los ojos con cara de "desagradecido".

-No quise decirlo de esa manera- Blair intenta arreglar las cosas y yo trato de aguantar la risa.

-¿¡Sabes el calor que hace en este país en Mayo?!- se queja Jane.
Tyler estaría acostumbrado a este clima.

-Hermanita, agradezco tu presencia y tu iniciativa en ayudarme pero para ello ya tengo una secretaria a la que le encanta trabajar para mí y se ocupará de ello ¿Así mejor?- Blair sonríe.

-No, me ha dolido en el alma- dice Jane a punto de reírse.
Blair hace una reverencia.

-¿Y así, su majestad?

-Así si. ¿A donde íbais?- cambia de tema Jane. Me empiezo a reír.

-Es una sorpresa

-Ten cuidado Bequi. Cuando mi hermano dice que tiene una sorpresa... No se puede esperar nada bueno, sino una de sus jugarretas de niño pequeño- me advierte la rubia.

-Esta vez le va a encantar más que otras veces- me mira y sonríe.

-Bueno, diviertiros- nos dice Jane, da media vuelta y comienza a caminar hacia el hotel.

-¡Adiós y gracias!- decimos Blair y yo al unísono. Nos subimos al coche, arrancamos y nos alejamos del Hotel Único de Madrid.

¿Como conoce Blair la ciudad?
Voy mirando los edificios de la ciudad, y la verdad es que me sorprende la diferencia entre los de España y los de Washington.

Blair sigue conduciendo sonriente.

Nos vajamos en un parque, caminamos hacia el interior y ninguno de los dos dice nada. Observo el paisaje, muchos árboles. El ambiente es relajado y eso me gusta.

-¿Tienes hambre?-me pregunta Blair agarrándome de la mano.

-Si te soy sincera...si-le contesto, el sonríe y me venda los ojos-¿Qué haces?-pregunto sorprendida.

-Espera y verás- Me contesta él y me guía hacia algún lugar.

Blair esta lleno de sorpresas.
Me sienta en el suelo y después se posiciona detrás mío para quitarme la venda de los ojos delicadamente.

En mi campo de visión aparece un mantel extendido en el suelo y encima una cesta que imagino que contendrá comida.

-¿¡Cómo has logrado hacer esto?! --grito emocionada.

-Tuve que pagar a la empresa que lleva el parque para que nos lo depejaran- sonríe-tenemos todo el parque para nosotros dos solos- sube y baja las cejas pervertidamente

Le empujo a un lado y el cae sentado debido a que estaba de rodillas enfrente mío.

Abro la cesta y veo que están todos mis platos favoritos en ella. Al parecer lo prepararon los criados de Blair porque el no es capaz ni de freír un huevo.

-Lo he hecho yo mismo-dice mientras come un poco de patatas fritas.

-No te creo

- Me tuve que estar toda la tarde con los criados y criadas de mi madre para prepararte todo- me mira con esos ojos verdosos- fue idea de mi madre

Cada dia su madre me cae mejor.

-Recuerda que siempre puedes repetir- le digo a Blair para que sepa que me ha gustado su comida.

-Tuve que hacer las patatas dos veces porque la primera se me quemó

Comienzo a reirme. El se une a mi y justo una voz nos interrumpe.

-¡Blair, cariño!-una chica morena de pelo negro se acerca a nosotros. Va con unos pantalones cortos a los que le falta media tela y una blusa roja con estampado de flores. No parece de nuestra edad ya que, se le ven unas pocas arrugas a lo largo de toda la cara, supongo que tendrá unos treinta.

-¿Te conozco?- le pregunta Blair a la chica.

-¿No me recuerdas?-pregunta ofendida.

-Mmm... no y ahora si me haces el favor de salir de aquí sería muy amable de tu parte, está reservado- le dice Blair enojado. ¿Por qué se enfadó tan rápido?

-¿Ella es tu... hermana? - nos pregunta. Río seca.

-Es mi mujer y ya te dije que te vayas

-Relájate- le susurro al oido disimuladamente.

-Es increíble que no me recuerdes querido, ¿Te suena el apellido Vinsters? - Blair se tensa al instante.

Blair aprieta la mandíbula y me aprieta el brazo. Trato de soltarme, pero no puedo así que no me queda más remedio que esperar.

-¿Por qué nos sigues? - pregunto comenzando a enfadarme.

-¿Yo siguiéndoos a vosotros?-pregunta sarcástica.- Pasaba por aquí porque tengo que ir a las tres de la tarde a la plaza mayor. Además, solo cumplo órdenes

-¿Qué?- preguntamos Blair y yo al unísono.

-No debería deciroslo pero... Está vez lo haré - sonríe -sigo ordenes de mi misma- Blair al fin me suelta.

La chica enfrente mio ríe y comienza a comerse MI comida.

Oh,no. Eso si que no lo consiento

-No toques mi comida-le grito empujandola, ella cae de espaldas.

- Tu mujer está celosa- se dirige a Blair, se levanta y se sacude la ropa.

-No te necesitamos Aby, así que si no quieres que llame a la policía ya estas moviendo tu cuerpo de silicona hacia la salida- apunta con el dedo índice a la puerta principal del parque.

Espera, espera... ¿Cómo sabe su nombre si se supone que no la conoce?

-Tranquilos, ya me voy- anuncia y comienza a caminar hacia la salida. Pero cuando está a punto de irse se gira hacia nosotros -Blair, recuerda quien te sacó de la mismísima mierda - añade y sale por la puerta.
¿Qué acaba de pasar? ¿Como que de la mismisma mierda? No entiendo nada.

-Blair- lo llamo para que aparte su vista de la puerta. Me mira.-Explícame todo esto- le exigo con los brazos cruzados.

-Se que se llama Aby porque lo ponía en su camiseta- me dice. Eso no tiene nada que ver-Y por lo demás... No la conozco-añade y sigue comiendo.

-¿No tienes nada que contarme?- pregunto dudosa de su respuesta.

-No - contesta. Asiento no muy convencida y sigo comiendo con él.

No estoy muy de acuerdo con la respuesta de la respuesta de Blair. Lo conozco tan bien que se que no me lo ha contado todo. Una parte de mi ser quiere creerle, saber que no hay nada entre el y esa chica pero... Por otra parte... Las últimas palabras que dijo la chica... Siembran dudas en mí.

Le digo a Blair que me deje en algún lugar cerca de la plaza porque quiero ver tiendas. El lo hace y se marcha sin preguntarme nada, lo cual agradezco.

Si no recuerdo mal, la chica dijo que a las tres de la tarde estaría en esa plaza. Necesito aclarar mis dudas.

Voy buscando a esa chica por todos lados y la encuentro apoyada en una pared escuchando música. Comienzo a grabar en audio en mi móvil. Me acerco a ella.

-Sabía que vendrías- dice cuando estoy en frente de ella.

-No te hagas ilusiones, solo he venido para aclarar mis dudas-le digo seria.

-¿Qué quieres que te cuente?-me pregunta quitándose los auriculares.

-Todo.

Sonríe de lado.

-Los padres de Blair se casaron cuando él tenía cinco años. Le enseñaron bien, pero creo que lo consentian mucho. Su padre le enseñó a ser rencoroso sin que se de cuenta y su madre trataba de quitarle ese comportamiento. Cuando Blair tenía dieciséis años su madre fué infiel a su padre. Él lo descubrió un día que su padre no estaba en casa y su madre hizo entrar a un chico a su casa. Ella le dijo que era por trabajo. Blair salió de su casa y cuando volvió los encontró en la habitación de sus padres en pleno acto. Él se enfureció tanto que comenzó a pegar al hombre. Por suerte, no denunció. Desde ese día Blair comenzó a ir con personas malas, delincuentes y se metió en la bebida . Nadie podía sacarlo de ese horrible lugar. - no podía creer lo que estaba escuchando. ¿Tan poco conozco a mi marido?

- Un día, me conoció a mí. Yo lo hice cambiar de actitud y lo saqué del pozo sin fondo del que estaba metido. Por aquello, me cogió mucho cariño, hasta el punto de empezar a gustarle. Pero qué iba a hacer yo. Tenía 15 años más que él. Aún así el seguía intentando conseguirme. Pero un día me fui del país y supongo que me habría olvidado, pero...-mira al suelo.

-¿Pero?

-Pero por como me miró hoy... Vi que aún no lo hizo- susurra lo suficientemente alto como para que la escuche.

Algo en mí se rompió.

-¿Cómo se que no me estás mintiendo?- le pregunto seca.

-Sabia que me preguntarías eso- ella saca unas fotos de su bolso y me las da.-Quédatelas, espero que así me creas- se despide de mi y se va.

Observo las fotos. Las lágrimas comienzan a surgir de mis ojos.
¿Y si lo pierdo?

Marco un número.

-¿Jane, puedes venir a buscarme?

Le cuento todo lo que se y le pregunto si es cierto. Al asentir, mis ojos se llenan de lágrimas.

-Pensé que Blair te lo había dicho -me dice.
Me sentía dolida, destrozada, pensé que conocía bien a mi marido.

Cuando llegamos voy corriendo a mi habitación y me encuentro a Blair sentado en la cama.

-Tenemos que hablar- le digo tratando de calmarme.
El se levanta despacio y viene hacia mí.
Le digo todo lo que la chica me dijo y el sigue con su cara inexpresiva.

-¿Por qué no me dijiste nada? - le pregunto molesta. No dice nada. Le enseño las fotos.
D

espués de observarla las tira.

-No era necesario que lo supieras, el pasado, pasado es

-¿Y tu ves correcto ocultarle algo tan importante a tu mujer?

-¿Quién te dice que puedas excavar en el pasado de mi familia? ¡¡No tienes derecho!!- me grita a pocos centímetros de mi

-Blair, soy tu mujer, debería saberlo- le contesto calmada, no quiero perder los nervios

-¡Eso no importa, aún que seas mi mujer no tienes derecho a entrometerte en mi vida!- sigue gritando.

-¿¡Así que eso es lo que te importo?! -grito enfadada.- ¿¡No te importo nada?!- Blair no contesta.

Saco toda la ropa del armario y la pongo en mi maleta. Acabo de hacerla y me dirijo a la puerta.

-Asi que este es el verdadero Blair, y pensar que yo creía que te conocía...-salgo por la puerta de la habitación

-Si te vas no vuelvas -me dice. Me falta la respiración, pero no estoy dispuesta a perder esta discusión

-Tranquilo, no pienso volver