Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

🌻|Capítulo 18.|🌻

|𝓛𝓸𝓼 𝓖𝓮𝓶𝓮𝓵𝓸𝓼 𝓗𝔂𝓾𝓰𝓪|
Capítulo 18.
“Recuerdos, Momentos del pasado”

—–¡Neji!—insistió la pequeña, removiendo el cuerpo de su hermano entre las sábanas.–—¡Vamos, ya despierta!—decía frustrada.

Resopló al no obtener respuestas de su hermano gemelo, y se aproximó para levantar las sábanas. Pero se sorprendió al no encontrarlo, y el lugar de eso, ver un montón de almohadas.

—–¿Onii-chan?—murmuró su gemela, buscando a los lados.—–¿Dónde te metiste?—preguntó, con preocupación, para después soltar la manta.

Sintió que fue tomada por los hombros, y de una vez sus reflejos actuaron casi por sí solos. Se agachó pronto, causando que aquel ser que la tomó por detrás cayera por el impulso, y ella contraatacó con un golpe con la almohada.

—–¡Auch!—exclamó el pequeño niño.—–¡Nami, porqué eres tan brusca!

—–¡No tenías por que asustarme!—dijo, antes de sacarle la lengua.

Su padre, quien preparaba algunas cosas para ellos, llegó a la habitación alertado por el escándalo que escuchaba, luego suspiró con una sonrisa al ver como el par de mellizos estaba en corriendo alrededor de la habitación lanzándose y golpeándose con los cojines. Sus risas se escuchaban por todos lados, y hacían eco en las paredes.

—–¡Ya verás!—amenazó Neji divertido.

—–¡Haber si puedes alcanzarme,  tonto!—burló Nami.

A Hizashi le daba gusto ver la sonrisa de sus hijos, y pensaba con tristeza el cruel destino que la vida les tendría preparado para ésta jornada. Sin embargo, pocas eran las cosas que él podía hacer para evitarlo. Estaban atrapados.

Suspiró un poco, y se acercó a sus hijos, casi completamente idénticos, gemelos de nacimiento y con sólo cinco segundos de diferencia. Personalidades similares y gustos parecidos. Eran pocas las cosas que podían diferenciarlos, porque usaban también el mismo peinado.Primero estaba Neji, un pequeño niño dulce y gentil, con muchos sueños por cumplir. Siempre demostró tener esa chispa del kekeigenkai que todo Hyuga tiene al nacer, mostrando un byakugan poderoso desde que abrió los ojos al nacer. Luego, estaba su hermana gemela, Nami; Una pequeña niña de apretables mejillas rosadas y divertida personalidad, casi siempre temerosa por las cosas extrañas a su alrededor. Normalmente la encontraban junto a Neji o detrás de éste, escondida. Siempre demostró ser tímida,y muy fácil de asustar. Le gustaba mucho leer, y gracias a ello siempre iba adelantada en todos sus presaberes.

Al igual que su hermano gemelo, al nacer, sorprendió a muchos por aquella chispa en sus ojos. Se parecía mucho a su madre, que desgraciadamente murió meses después del parto.

Hizashi se hizo cargo de sus hijos, y nuna negará a todos esos momentos en el que los gemelos les trajeron alegría a su vida.

Es por eso, que le daba pesar saber que sus hijos también estaban destinados a vivir enjaulados en la miseria desde ese día.

—–Niños.—llamó, aunque sus hijos no le prestaron la debida atención.—–Niños.—repitió un poco más fuerte.

Neji de repente se detuvo, y causó que su torpe hermana chocara contra él, por el detenimiento de Neji tan repentino.

—–Auch...—se quejó ella, tocándose la cabeza, con unas pequeñas lagrimita formada en sus ojos.—–Me dolió, Onii-chan.

Hizashi suspiró, y se acercó a ella para cargarla y besar la frente de su pequeña, calmandola al momento y dejando ver una sonrisa por parte de su hija. Neji sonrió un poco y levantó los brazos para que él también fuera cargado, y no se hizo esperar.

—–Que llorona eres, Onee-chan.—burló Neji, simpático, causando que su hermana le sacara la lengua.

—–¡Tu eres un merluzo, Onii-chan!—se quejó ella sacudiendo los brazos con fuerza.

—–Ya... Dejen de pelear. Son hermanos, y se tienen el uno al otro.—reprendió su padre, mirando a sus hijos antes de bajarlos al suelo.

Los gemelos se vieron el uno al otro, y sonrieron asintiendo de acuerdo con las ideas que tenía su padre. Él estaba en completa razón. Eran mejores amigos.

Hizashi por otro lado, recordó la palabra con la que Nami había llamado a su hermano, y luego la miró algo confundido.

—–¿Como le dijiste a Neji, Nami?—preguntó, antes de sorprenderse por la respuesta de Nami. Luego se colocó en cuclillas.

La niña lo miró sonriente, y fue a buscar un libro a su mesita cerca al futon. Era algo grande y se veía de muchas páginas. ¿Habia estado leyendo una enciclopedia?

–—Merluzo: bobo o tonto.—señaló la parte de la página en donde estaba ubicada la palabra.—–Ví este libro y me pareció interesante.—agregó sonriendo.

Hizashi miró a su hija con cierto asombro. ¿Se había estado aprendiendo el significado de las palabras? Además le sorprendía el interés de ella por memorizar.

–—Vaya...—sonrió, y luego tomó el libro, antes de suspirar.—–Bueno, es hora de irnos, su tío nos estará esperando para que conozcan a su prima.—se levantó de las cuclillas y fue a guardar el libro de Nami.

A Neji no se le hacía extraño, aveces escuchaba a Nami insultarlo en palabras que no entendía, ya que eran complejas. Él consideraba a su hermana como un ratón de biblioteca. Pero sin embargo, está orgulloso de ello.

Ninguna pelea era tan fuerte como para separar a éste tierno par de hermanos gemelos.

–—Está bien, papá. Onee-chan y yo te esperaremos afuera.—dijo Neji, antes de tomar de la mano a su hermana y llevársela a las afueras de la casa.

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

Los gemelos fueron llevados por su padre a encontrarse con su tío. Muy pocas veces hablaban con él, pero lo reconocían.

Observaron maravillados y curiosos a una niña, que se encontraba detrás del jefe del clan, y hermano gemelo del padre de Nami y Neji. El mayor, por cinco segundos, de hecho.

Detrás de él se encontraba oculta la pequeña Hinata, la heredera legitima al cargo del liderazgo del Clan una vez su padre lo decidiera. Una pequeña y hermosa niña de cabello corto y azul ennegrecido, con ojos tan brillantes como perlas.

Neji y Nami se quedaron fascinados por la belleza de su prima, sonrientes y felices de por fin conocerla.

—–Oye padre, es muy bonita. ¿No lo crees?—susurró Neji a su padre, quién aún seriamente observaba a su hermano gemelo frente a él.

Nami observó a su padre con una ceja levantada, y luego observó hacia el frente, mirando a la pequeña Hinata, su prima por un año menor. Le sonrió levemente para demostrarle que no debía tenerle miedo, pero Hinata llena de timidez simplemente volvió a a aferrarse a su escondite, las ropas de su padre presente.

Nami hizo una pequeña mueca, y luego ignoró el hecho de que su prima le tuviera miedo, volviendo a sonreír levemente.

—–Es hora de que Neji y Nami enfrenten su destino, Hizashi.—habló el líder del clan, seriamente.

Junto a Hizashi, se acercaron dos hombres jóvenes, llevando a Nami y a Neji cargados hacia una habitación. Ellos estaban confundidos, sobretodo por la seriedad de su padre, y sentían miedo por lo extraño que era el lugar.

—–¿Onii-chan?—mencionó Nami, mirando a su gemelo.

–—Tranquila, Onee-chan.—sonrió Neji, tendiendo su mano, para darle valor.

Fue entonces cuando el líder del Clan, su propio tío, plantó aquella marca de maldición en sus frentes, condenando a los gemelos al mismo cruel destino que su padre tiene que vivir.

Siendo solamente niños. Negando sus derechos.

Desde ese día, la vida de los gemelos cambió. Fueron mudados a una casa más pequeña, y obligados a entrenar casi todos los días con Hinata, su prima, por horas, hasta que ella dominara sus jutsus. Aunque por desgracia para su padre, Neji y Nami, de la Rama Secundaria del Clan, superaban a La Rama principal por mucho, y eso que apenas eran sólo niños.

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

Su vista de estaba nublando, llenándose de oscuridad. Sentía su cuerpo debilitarse, y sus piernas tambalearse y temblar, sudor en sus manos, y su respiración irse poco a poco.

–—¡Nami-chan!—exclamó Kai angustiado, llegando a atajarla antes de que cayera al suelo.

Estaba tan pálida que podría igualar a Meiko.

—–Es producto del estrés.—explicó Rei,  llegando hacia sus pupilos con un gesto de preocupación.—–Siéntala.—ordenó, acomodandose el cabello.

Izumo y Kotetzu, que estaban ahí, le dieron un espacio a Rei para que pudiera usar su jutsu médico en Nami, y hacer que ella pudiera recuperar su energía.

Nami se había desmayado, por no soportar el cansancio mental que le da el recordar su pasado. Le causaba mucho estrés y ansiedad, y no le daba descanso a su cerebro; además no hablemos de las heridas en tratamiento que tiene.

—–¿Necesitas algo más, Rei-san?—preguntó  Izumo, dispuesto a ayudarle.

La mujer de cabello crema negó y sonrió, mirándolo.

—–No se preocupen, Izumo. Kotetzu.—dijo al sonreír.—–Yo me encargaré de llevarla al cuarto de hospital.—sonrió.

Una vez las heridas de las manos de Nami sanaron, Rei la cargó como un saco con delicadeza, y rápidamente desapareció dejando una leve cortina de humo. Kai y Meiko suspiraron confundidos, y se miraron los rostros, esperando a que su querida compañera estuviera bien.

–—¿Qué crees que dirá su padrino de esto?—preguntó Kai a Mei Mei.

—–A lo mejor irá a visitarla.—respondió Mei Mei, observando a Neji, después a Naruto, y después a Gemma.—–Rei sensei siempre dice que ella es muy importante para él.—comentó, y luego se apartó de la baranda.–—Después de todo, él era muy cercano al padre de Neji y Nami.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro