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Luego de la escuela, Lottie y Miguel fueron hasta el dojo. En el camino fueron hablando de temas randoms, sentarse con personas nuevas había ayudado a que Lottie se liberara un poco.

La siguiente clase se trataba sobre dar golpes.

Mientras Johnny le explicaba a Miguel como dar un buen golpe, su teléfono sonó. Dejando a los adolescentes solos.

-- Parece que le estás haciendo cariñitos. -- Dijo con burla. -- Debes Golpear con fuerza.

-- Eso hago.. -- Contestó.

La chica rodó los ojos. -- No parece.. Quítate, te enseñaré. -- El chico hizo caso. La rubia fijó su mirada en el muñeco y golpeó. -- Hazlo.

Luego de que la rubia le diera ese consejo, caminó hasta la oficina de su padre.

-- Robby ¿Que diablos? ¿Consumes drogas? ¿Quieres tirar tu vida por el retrete? -- Dijo el hombre.

La chica abrió la boca con sorpresa. -- Déjame escuchar.. -- Se acercó más al teléfono.

-- ¿Acaso no recuerdas lo que pasó con tu hermana? Te van a expulsar si sigues con ese comportamiento.. -- Dijo Johnny y Lottie lo miró con el ceño fruncido.

-- Viejo ¿Porque me pones a mi como ejemplo? -- Cuestionó con molestia.

-- Como si pudieras decirme algo, no actúes como mi padre. Eres un Perdedor. -- Respondió Robby. -- Y no metas a Lottie en esto, porque si tu no le hubieras enseñado ese Karate patético, no sería una estúpida impulsiva que quiere arreglar todo a los golpes..

Al escuchar como su hermano la había llamado, el corazón de Lottie se encogió con tristeza.

Luego de que cortaran, Johnny volteó a ver a su hija en silencio.

¿Fue culpa suya, que su hija terminara así?

Los ojos del hombre se dirigieron al latino, quien "golpeaba" el muñeco.

-- Lo haces mal ¿Que quieres? ¿Que sigan arrojando cosas en tu cabeza? ¿Quieres que las chicas crean que eres un idiota? Porque puedes dejar de entrenar e irte de aquí y dejar que todos sepan que eres un Perdedor..

-- Imagina a tu enemigo.. -- Dijo Lottie volteandose. -- ¡Visualizalo! -- Gritó, asustando a ambos.

-- ¿Tienes el rostro en la mente? -- Preguntó el rubio y Miguel asintió. -- ¿Que harás?

Miguel comenzó a golpear fuertemente el maniquí.

-- ¿Eres un perdedor? -- Preguntó el sensei.

-- ¡No, sensei! -- Respondió el chico.

Con cada golpe que Miguel daba, se podía sentir la furia con la que lo hacía.

Lottie pudo notar como los ojos de Miguel cambiaban. Era una mirada llena de odio. Una que la rubia conocía a la perfección y le traía recuerdos, unos no muy buenos.

••

Horas más tarde, Miguel y Lottie limpiaban el dojo.

Verdaderamente, Lottie estaba harta de limpiar. Pero debía hacerlo, ya que de esa manera pasaba más tiempo con su padre.

-- ¿Saben que? -- Habló Johnny. -- Limpien el baño y terminaremos.

Ambos adolescentes suspiraron cansados, lo cual le causó gracia al sensei.

-- Hazlo sobre tus manos y rodillas. Bestia.. -- La llamó. -- Asegúrate de que así sea.

Los adolescentes ya habían terminado de limpiar. Segundos antes se escuchó el sonido de la campana, indicando que alguien había entrado, pero ninguno le había tomado importancia.

-- ¡El baño está listo! -- Dijo el latino. -- ¿Necesita que hagamos algo más?

Johnny le hizo una señal para que se callara.

-- Disculpe, sensei.. -- Se disculpó. La rubia se colocó al lado de Miguel.

-- ¿Sensei? ¿En serio? -- Preguntó LaRusso con burla.

Johnny bajó la cabeza.

Tik Tik Tik..

-- Oh, chicos.. No se que les dijo, pero no deberían hacer nada de lo que les diga, o terminaran igual que el..

¡Boom!

Lottie caminó y se paró frente a Daniel, mirándolo con molestia.

-- Cuidado con lo que dices de mi padre.. -- Se acercó amenazante a Daniel, pero fue detenida por Johnny.

-- ¿Tienes una hija? -- Le preguntó al rubio.

-- Si y estoy orgullosa de serlo.. -- Se apresuró a contestar la rubia. -- El es valiente al tratar de salir adelante, mientras que otros no enfrentan los traumas que le dejó un dojo.. -- La chica conocía perfectamente la historia, desde la perspectiva de Johnny.

Daniel sonrió de lado. -- Como dice el dicho.. De tal palo, tal astilla.. ¿No?

Se acercó amenazante, pero Miguel colocó su brazo frente a la rubia. -- Será mejor que te vayas antes de que haga algo de lo que me arrepienta..

Daniel pensó que la chica tenía agallas, veía potencial en ella. Pero lamentablemente, para el, iba por el mal camino, donde solo habían malas enseñanzas.

Johnny se colocó frente a Lottie.

-- Tu y yo.. -- Le dijo al rubio. -- Esto no a terminado.. -- Se dirigió a la salida.

-- Muy bien, aquí estoy.. -- Contestó.

LaRusso volteó a verlo, pero simplemente sonrió con burla y salió de ahí.

-- Eso, huye como una nenita.. -- La chica sonrió. -- Idiota..

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Lottie y Miguel entrenaban dando golpes al muñeco y Johnny miraba las cuentas con preocupación. Lottie las había visto, eran demasiadas, ya le había ofrecido ayuda con sus ahorros, pero el rubio se negaba.

-- Muy bien, Miguel. Sigue así.. -- La rubia le dijo y el chico le sonrió.

-- Oye ¿No tienes amigos que quieran aprender Karate? -- Interrumpió Johnny, mirando al moreno. -- ¿Pero que digo? No tienes amigos, lo siento.. -- Dijo con burla y miró a su hija.

-- No, no tengo amigos.. -- Dijo cortante.

-- ¿Y ese chico rubio? El que siempre te acompaña a casa.

-- ¿James?

-- No se, no lo conozco.. Pregúntale si quiere tomar clases..

-- No creo que quiera..

-- Tal vez si ve que tú estás aquí, acepte. -- Interrumpió. -- ¿Tiene dinero, verdad?

Justo cuando la rubia iba a hablar Miguel Interrumpió. -- Oiga sensei ¿Cuando aprenderé a dar patadas? -- Cuestionó. -- Vi un video en YouTube, de un sujeto que rompía tablas y se ve genial.

-- ¡No me digas! Si, patear es super, pero no están listos. -- Respondió. -- Si no consigo estudiantes, no podré enseñarles.

-- ¿Pensó en hacer publicidad? -- Sugirió Miguel.

La rubia miró a su padre, con ambas cejas elevadas y una sonrisa divertida.

-- ¡Si, obvio! Claro.. -- Mintió.

-- Ajá, te lo dije desde que abriste el dojo. -- Dijo Lottie. -- Me dijiste que lo harías, pero luego te olvidaste.

Johnny la miró fulminante. -- No te pedí esa explicación. Cincuenta flexiones, ahora.

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-- El acoso cibernético no es broma, enviarle un mensaje cruel a alguien por ínternet puede ser tan hiriente como decírselo en la cara. -- Hablaba la consejera. -- No mencionaré nombres, pero el otro día una madre me llamó porque su hijo lloraba luego de que unos chicos se burlaban de él, por su deformidad facial..

Lottie frunció el ceño molesta. La muy tonta, no mencionó su nombre, pero con ese dato todos se dieron cuenta que se trataba de Eli.

La rubia volteó hacia Eli, quien se cubría el labio con su mano y desviaba la mirada. Sus ojos reflejaban tristeza, Lottie sintió pena por el chico.

Al escuchar como todos comenzaron a reír y murmurar. Lottie se levantó y golpeó la mesa con sus manos.

-- ¿Que es tan gracioso? -- Gritó, haciendo que todos se quedarán en silencio.

-- Señorita Lawrence. -- Llamó la consejera. -- Porfavor, contrólese.

-- ¿No ve que lo está empeorando? -- Le preguntó con molestia.

-- Si sigue con esa actitud, la llevaré a dirección y no creo que con su expediente la acepten en otro lugar.. -- Dijo la mujer. -- Así que, porfavor, siéntese..

A la rubia no le quedó de otra que olvidarse de su orgullo y hacer caso.

Moskowitz se sintió bien, nunca lo habían defendido de esa manera. El sonrió aún con su mano cubriendo su cicatriz.

La chica miró a Eli, tomó la mano que tenia en su rostro entre las suyas y sonrió. -- No te sientas avergonzado por eso.. ¿Bien?

El castaño asintió, mirándola a los ojos y con una pregunta en mente..

¿Como podía ser tan perfecta?

Ambos adolescentes se miraban a los ojos, como si fueran los únicos que estuvieran allí..

Se acababan de conocer, pero sus ojos se miraban como si ya se quisieran.

Este lindo momento fue arruinado por Miguel, quien no desaprovechó la oportunidad de promocionar Cobra Kai.

-- Si estás cansado de que te molesten, nuestro dojo de Karate busca reclutas..

-- Si, claro ¿Escuchaste eso, Eli? Un poco de entrenamiento de Karate y patearás traseros.

-- Te sorprendería lo que el Karate puede hacer.. -- Dijo la rubia. -- Si quieres puedo patearte el trasero por odioso. -- Sonrió falsamente.

-- Estoy hablando enserio, Demetri. -- Habló el moreno. -- Mi sensei es genial.. -- Miró a la rubia, quien asintió. -- Y puedo conseguirte un descuento.

-- Aunque suene tentador, creo que preferimos pasar la tarde jugando Crucible Control y no recibien golpes en la cara. -- Continuó el pálido.

Eso fue lo que colmó la paciencia de la rubia, quien apoyó ambos codos sobre la mesa y lo miró desafiante.

-- Si tu no quieres, está bien. -- Habló entre dientes. -- Pero no hables por los demás ¿Entendido?

-- Solo digo lo que pienso.. -- Dijo, mientras se cruzaba de brazos.

-- Decir lo que piensas te jugará una mala pasada..

La consejera continuó hablando sobre los disfraces de Halloween, pero la rubia habia dejado de escuchar, no iría, ya que no le aterraba la idea de estar rodeada de gente.

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Johnny y Miguel se encontraban en la piscina de la escuela, para enseñarle a Miguel a patear. Lottie estaba en el ring de Boxeo, ya que trabajaba a esa hora.

La rubia controlaba los pases de acceso al lugar, cuando su teléfono comenzó a sonar, algo extraño, ya que la única persona que la llamaba era James.

Vio la pantalla de su teléfono y vio que era un número desconocido.

-- No me interesa comprar nada de lo que me quieras ofrecer.. -- La rubia comenzó a hablar.

-- Lottie, soy yo.. Eli. -- Se escuchó del otro lado.

-- Eli.. -- Sonrió. -- Hola ¿Como conseguiste mi número?

-- S-se lo pedí a Miguel. -- Respondió. -- Espero que no te moleste.. -- Dijo con nervios.

-- N-no, para nada.. -- Contestó.

-- Te quería agradecer por lo de hoy.. -- Dijo. -- En la escuela..

-- No fue nada, aunque no lo parezca, me gusta ayudar..

-- Lottie. Me preguntaba si querrías ir a la fiesta de Halloween de la escuela..

-- Ahmm.. yo.. No iré.. -- Respondió. -- Me pongo nerviosa en ese tipo de situaciones.. Lo siento.

-- Entiendo.. Igualmente me hubiera gustado verte allí.. -- La chica se quedó en silencio. -- Buenas noches, Lottie..

-- Si.. Buenas noches, que descanses.. -- Respondió de vuelta con una sonrisa triste.

En ese momento se maldecía por dentro. Odiaba darle tanta importancia a lo que dicen los demás sobre ella..

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Días después, Miguel comenzó a romper tablas como todo un experto.

Lottie imprimía volantes, una ves que terminó, salió de la oficina y caminó hasta su padre y Miguel.

-- Ya está viejito.. -- Dijo y le entregó los papeles.

Johnny le sonrió. -- Gracias. -- Miró al moreno. -- Ponte el disfraz, te llevaré a ese baile y conseguiré más estudiantes.

Miguel se paró y se colocó su disfraz. Era una tela blanca cosida.

-- ¿Que diablos es eso? -- Preguntó Johnny.

-- Mi disfraz de Halloween. -- Respondió. -- Lo hizo mi abuela. Comenzó siendo Deadpool. -- La chica ladeo su cabeza, buscándole un poco de parecido con lo que el chico nombraba. -- Luego creo que el Hombre Araña y luego se volvió un superhéroe genérico.

-- Si, pero uno pobre. -- Se burló Johnny.

La rubia tapó su cara con ambas manos. -- Viejo..

-- ¡Eres super pobre!

-- No da miedo, pero da risa.. -- Dijo Lottie con una sonrisa de lado, contagiando a Miguel.

-- Bueno, no puedo dejarte ir así. -- Dijo el hombre. -- Debemos mantener una reputación.

-- ¿Que sugiere?

Johnny fue a desempolvar su viejo disfraz de esqueleto e hizo el intento de maquillar a Miguel.

Cuando el moreno fue a cambiarse, Johnny volteó hacia su hija.

-- ¿Por qué me miras así? -- Pregunto con los ojos entrecerrados.

-- ¿No iras? Tus amigos querrían que vayas..

-- No.. -- Johnny frunció el ceño. -- Y no tengo amigos.

-- Deberías ir y divertirte.

Suspiró. -- No quiero..

-- ¡Silencio! -- Gritó el hombre. -- Iras a esa fiesta.. Además tenemos una imagen que mantener.

-- No tengo un disfraz, no puedo ir así..

-- Eso no es un problema.. -- Dijo y caminó hasta la puerta del dojo.

-- Claro que lo es..

-- Deja de ser tan negativa, niña.

El hombre se acercó a su auto y de allí sacó una bolsa, sonrío y se lo entregó a su hija.

-- Ten, es de la peliroja sexy que ves en tus películas de nerdos..

-- Black Widow.. -- Corrigió con una sonrisa. -- Gracias, viejito..

-- Ve a cambiarte y diviértete. No te lo digo como sensei, sino como padre..

Los primeros alumnos de Cobra Kai entraron al salón, ganándose algunas miradas y, como no, algunos suspiros.

La rubia sentía las miradas sobre ella, pero no como solía ser, está vez se sentía bien.

-- ¡Oh, por Dios! Nos están mirando.. -- Susurró Miguel. -- Pero no nos miran como si quisieran golpearnos..

-- Tal vez sea por nuestros trajes exageradamente pegados.. -- Dijo la chica con una sonrisa.

Miguel río y comenzó a caminar, siendo seguido por la rubia, hasta el lugar apartado donde estaban Demetri e Eli.

-- Oh, esqueleto. Un clásico. -- Dijo Demetri viendo a Miguel. -- Genial..

-- Gracias, me gusta tu traje de hechicero.

-- ¿Hechicero? Por Favor, soy un nigromante..

-- ¿Que?

-- ¿No viste The Amulet? -- Preguntó la chica, mientras salía de detrás de Miguel.

Demetri e Eli miraban a la chica de pies a cabeza, estaban acostumbrados a verla con ropa tres tallas más grandes, las cuales ocultaban la hermosa figura de la rubia.

Finalmente Demetri movió su cabeza de un lado a otro y así dejar de mirarla, ya que sabía sobre los sentimientos de su mejor amigo hacia Lottie. -- Wow.. Tu eres Black Widow. -- La chica asintió. -- Te ves genial..

Lottie sonrió para luego mirar a Eli, quien la veía con sus mejillas teñidas de un tono carmesí. -- ¿Tu eres un doctor normal o...?

-- Cirujano plástico. -- Contestó rápidamente. -- Arreglo labios..

Lottie e Eli se envolvieron en un juego de miradas, mientras se dedicaban pequeñas sonrisas y, aunque el ojiazul llevaba puesta una mascarilla, la rubia podía ver como sus mejillas subían.

El DJ, al ver como estos dos adolescentes se miraban con cariño, comenzó a reproducir la canción For your eyes only.

Lottie se acercó a Moskowitz y le extendió su mano. -- ¿Te gustaría bailar conmigo? -- Pregunto con un leve sonrojo.

-- Y-yo no se bailar.. -- Respondió con ambas manos en su refresco.

-- Yo tampoco se, pero podríamos aprender juntos.. -- Dijo con una sonrisa de lado. -- Vamos.. No me dejarás sola, cuando se reproduce esa canción tan linda..

Los ojos de Eli viajaron hasta la mano de la chica y luego a sus lindos ojos, finalmente aceptó aquella propuesta. Ambos se dirigieron a la pista de baile, donde todos bailaban lentamente.

La rubia colocó las manos de Eli en su cintura, luego posó sus brazos en el cuello del chico. Ante ese contacto físico y cercanía, el castaño se puso algo nervioso. Ambos bailaban lentamente y en silencio, uno cómodo.

Casi al final de la canción, Lottie habló. -- Lamento haberte dicho que no vendría.. A último momento mi papá me convenció de venir..

-- No tienes que disculparte, lo entiendo.

La ojiazul sonrió. -- Solo quería que lo supieras..

Al terminar esa canción, comenzó a sonar Accidentally in Love, todos empezaron a bailar animadamente con sus parejas entre risas.

Lottie sonrió de lado ante la idea que llegó a su cabeza, acercó su mano hacia la mascarilla que Eli llevaba. -- ¿Puedo?

El chico detuvo con delicadeza la mano de la rubia y negó con nerviosismo. -- N-no..

-- ¿Cuál es el problema?

-- Que se burlarán de mi.. -- Respondió con tristeza.

-- Créeme. Que mientras yo esté presente, eso no volverá a pasar.. Lo prometo. -- Dijo con sinceridad. -- Porfavor.. Déjame ver tu linda sonrisa.

Eli soltó su mano, dejando que la chica le saque la mascarilla y la guarde en el bolsillo de su disfraz.

Eli sonrió ampliamente, contagiando a la rubia. Ambos conectaron sus miradas, Lottie le hizo caso a lo que su corazón indicaba y comenzó a acercarse poco a poco a los labios del castaño, Eli también le hizo caso a sus sentimientos y copió la acción de la rubia.

Estaban tan cerca, que sentían el corazón del otro, sus labios rosaban y sus respiraciones se mezclaron. Cuando estuvieron a punto de besarse, alguien los interrumpió.

-- ¿Lottie?

Los chicos se separaron rápidamente ante aquella voz que la chica reconoció. James estaba parado frente a ellos, mirando a la chica con duda y algo de tristeza.

-- Eli.. Hola. -- Saludó el rubio.

Eli volvió a colocarse su mascarilla, para ocultar su sonrojo tras casi besarse con Lottie.

-- Debo ir al baño.. -- Dijo el castaño, y sin esperar respuesta se marchó.

La chica vio a su mejor amigo. -- Hey.. ¿Cuando llegaste?

-- Hoy. -- Contestó. -- No pensé verte aquí.. Con toda esta gente.

-- Debería conocer gente nueva.. -- Dijo, viendo por donde se había ido Eli. -- ¿No crees?

-- Si.. -- Asintió. -- ¿Interrumpí algo?

La chica lo miró. -- Si..

Minutos después, el teléfono de Lottie vibró. La chica lo tomó para ver de que se trataba, era un mensaje, era un video de Aisha Robinson, Lottie la conocía porque compartían la clase de química juntas y hacían grupo, ya que eran las dos chicas rechazadas y que nadie quería en su grupo. En el video, la morena tenia una nariz de cerdo y un mensaje cruel.

Todos comenzaron a reír y a decirle "Cerdita" haciendo que Aisha salga huyendo de ahí.

Lottie miró al rubio, quien veía su teléfono con el ceño fruncido. -- No se que es lo divertido de avergonzar a alguien.. -- Dijo el chico.

-- Debo hacer algo.. -- Se dio vuelta.

-- No, Lottie. -- La detuvo. -- No tiene caso que te metas en una pelea..

La rubia ignoró olímpicamente al rubio y caminó hacia Yasmine, colocándose frente a ella.

-- Miren a quien tenemos aquí.. -- Dijo Yasmine. -- Charlotte Lawrence.. Te vimos con el chico raro de labio, supongo que entre basura se entienden. -- Soltó una risa, siendo seguida por sus amigas. -- ¿Que quieres?

-- ¿No tienes algo mejor que hacer? -- Preguntó. -- Molestar a alguien así como lo hiciste es de cobardes, pero no me sorprende viniendo de ti.. -- Comenzó a acercarse de manera amenazante. -- Después de todo, el tinte rubio te afectó la única neurona que te funciona..

Yasmine trago en seco ante la cercanía de la rubia. -- ¿Que vas a hacer? ¿Vas a golpearme?

-- No, no haré eso. -- Sonrió de lado. -- ¿No te dan suficiente atención? Porque si es así, yo puedo dártela.. -- Miró a su alrededor y se alejó de Yasmine. -- Te quiero lejos de Aisha y de mis amigos, o tendrás que vertelas conmigo..

-- ¿Es una amenaza? -- Preguntó.

Fingio una sonrisa. -- ¡Oh, no! Claro que no.. -- Su sonrisa se borró. -- Es una advertencia.

Se dió vuelta para salir de ahí, siendo seguida por James, quien reía por la cara de Yasmine.

-- Debo ir al baño.. -- Dijo la chica.

-- Bien ¿Te espero para llevarte a tu casa?

-- No, no te preocupes, papá está cerca.. -- Se frenó en la puerta del baño. -- Puedes ir tranquilo.

El rubio dejó un beso en la mejilla de su amiga y dijo. -- Bien, te veo luego.. -- Comenzó a caminar. -- Te quiero.. -- Se fue.

Lottie soltó una risa y entró al baño. Al entrar, escucho un sollozo. Al escuchar eso, se preocupó y comenzó a abrir cada puerta, hasta que encontró a la persona que lloraba.

Era Aisha.

Se le encogió el corazón al verla en ese estado. Así que se arrodilló frente a la morena y sonrió con tristeza.

-- ¿Por qué estás aquí? -- Preguntó la morena, con su vista en sus manos. -- Y no estás riéndote de mi..

-- Porque no me parece para nada gracioso lo que pasó.. -- Contestó y se quedaron en silencio por unos segundos. -- No les hagas caso..

-- Es fácil decirlo cuando tu eres sexy..

-- Lo físico no lo es todo, esto.. -- Se señaló. -- No es eterno, se va con el tiempo.. Pero esto.. -- Puso su mano en el corazón de Aisha. -- Es para siempre y eso es lo que vale..

Aisha sonrió de lado. -- Gracias..

-- Por cierto, me encanta tu disfraz.. Es original, me hubiera gustado ser el cloruro..

-- Sam iba a ser el cloruro.. -- Contó. -- Ella y yo hemos sido amigas por mucho tiempo, pero decidió juntarse con Yasmine..

-- Muy pronto se le acabará la popularidad y se arrepentirá de haberse alejado de ti.. Y si ella no te aprecia, yo estaría encantada de hacerlo.

-- ¿Me lo dices por pena, no?

-- Para nada.. -- Sonrió, contagiando a Aisha. -- Además me gustaría tener una amiga genial como tu.. -- La morena rió. -- ¿Ves? Te ves mucho más linda cuando ríes..

-- Gracias, de verdad.. -- Dijo. -- Hablar contigo me subió el animo.

-- Salgamos de este baño.. -- Dijo con una mueca. -- Hay mejores lugares para hablar..

Aisha soltó una carcajada. -- Tienes razón, vamos..

Ambas chicas salieron mientras reían, pero cuando Lottie vio a su padre con Alguien en brazos se alarmó.

Rápidamente se acercó. -- ¿Que pasó? -- Vio el rostro del chico en brazos. -- Miguel..

-- Unos idiotas lo golpearon. -- Respondió Johnny. -- Debemos irnos..

-- Si, voy a despedirme de mi amiga y voy.. -- Johnny asintió y caminó a la salida, Lottie se acercó a Aisha. -- Lo siento, debo irme ahora..

-- Si, no te preocupes, hablamos luego..

Se despidieron con un abrazo y se alejaron.

Amo a Lottie e Eli 🩷

¿Que piensan sobre nuestra protagonista?

Recuerden tomar awita y caminar por la sombraa

Nos leemos pronto!! <3

+3☆ Para Continuar.
Tali.