Capitulo 5: Pain
Dibujo echo por MiaBloodspill. TKM bb
Integra estaba al fin terminando los últimos papeles referentes a los kitsunes en su escritorio, en ellos había anotado todos los datos que Naosu le había facilitado esa noche, ya tendría tiempo de hacerle mas preguntas sobre su raza, con un bostezo guardo los papeles en su cajón y se dispuso a dirigirse a sus aposentos a descansar, ya era de madrugada y necesitaba dormir, giro el pomo de la puerta para salir pero al hacerlo la puerta choco contra la cabeza de la chica policía, Integra se sobresalto ante esto y de inmediato se dirigió a la jovencita
- Dios Seras avísame a la próxima -dice Integra mirando su frente roja-
- Lo siento sir Integra, pero venia a preguntarle algo -dice aturdida Seras mientras se acariciaba la frente la cual le dolía- Quería saber si sabe ¿dónde está mi maestro?
- Creí que estaba contigo enseñándote, como se supone que debe ser -arrastra sus ultimas palabras recordando que su sirvo no a estado entrenando a la oficial como debería- ¿Cuándo fue la ultima vez que lo viste?
- Pues estaba en el pasillo que da al patio trasero, ya sabe el que lleva al bosque y al campo de entrenamiento, dijo algo de, dar un paseo con una semejante a el o algo así, ya sabe que aun que tenga voz grave habla despacito -dijo Seras intentando recordar las palabras de su maestro a pesar de tener la cabeza dando vueltas-
***
Alucard sonrió con un aire de excitación cuando fue golpeado nuevamente por la Kitsune, esta puso su pierna contra la del hombre provocando que caiga al suelo, con el Nosferatu en el suelo la Ōkami se posiciono encima de el poniendo ambas piernas a sus costados, de su mano izquierda apareció un clavo de hielo listo para apuñalar el rostro del vampiro, Alucard aprovechó un descuido y extendió su mano hasta agarrar el brazo libre de la mujer, jalándola a su lado, se levantó de un brinco y de inmediato empezó a buscar con la mirada su amada pistola, la vio tirada a unos metros de ellos, el deseo de apuntar a la kitsune a su lado y jalar el gatillo en su cabeza se apodero de él, en dos zanjadas se acerco al arma plateada pero al estar a 3 metros de ella su pierna derecha se quedo estática en el sitio, miro su extremidad y vio que estaba congelada y pegada al suelo, detrás de el Ōkami se estaba levantando del suelo
-Ya aprendí de mis descuidos, no crea que tomara esa pistola de nuevo fácilmente -dijo Ōkami de pie acercándose a Alucard con una lanza de hielo en sus manos y la punta de su cola encendida en llamas, su aura era cada vez más imponente, Alucard sonrió aún más emocionado con este combate-
Alucard jalo su pie con fuerza y logro deshacerse del agarre del hielo contra el suelo, volvió a encaminarse a su pistola, Ōkami por su parte levanto la lanza y la apunto al vampiro, Alucard tomo la Casull y con el cargador listo apunto a la Kitsune detrás de él, aunque no podía ver el rostro de la mujer sentía sus ojos clavos en el esperando el momento indicado para atacarlo, un silencio abismal inundo el ambiente, ambos estaban listos para el siguiente movimiento de su adversario, Alucard se puso a pensar un momento en que ya llevaba un buen rato este combate y la mujer delante de el le a demostrado una y otra vez que es una caja de sorpresas, sabia buenas estrategias, era rápida, era fuerte, y no le tenía miedo, en todos los años que lleva sirviendo a Hellsing ningún vampiro le a dado tanta batalla como ella, lo mas probable es que pronto se canse, por que no es tonta, ella sabe que se está conteniendo, tal vez, debería dejar de hacerlo.
Alucard jalo el gatillo rompiendo con el silencio del lugar, la bala salió dispara hacia , en el último momento la Kitsune salto saliendo despedida unos metros hacia arriba desapareciendo del rubo del proyectil, Alucard la siguió con la mirada y vio como en un abrir y cerrar de ojos Ōkami había lanzado la lanza hacia él, casi no le da tiempo de esquivarla cuando se da cuenta, empezó a disparar hacia Ōkami mientras ella las esquivaba y bloqueaba con una nueva lanza de hielo, Alucard se escondió en las sombras para recargar el arma por su parte, retrocedió hasta ocultarse detrás de un árbol.
Alucard volvió a asomarse con su pistola en mano buscando a Ōkami, sin embargo, no la vio en su campo de visión, empezó a buscar su aura, esa aura de luz, de fuerza, de dominio, la busco y cuando la encontró sintió un escalofrió por su cuerpo
-Cu-Cu -dice Ōkami a sus espaldas en un suave susurro-
Alucard no tuvo ni tiempo de girarse cuando fue a puñalada por dos clavos de hielo en los hombros, y sus manos y piernas fueron apresadas por un látigo de fuego que, al hacer contacto con las prendas del vampiro las fue quemando hasta llegar a su piel, el vampiro soltó un gruñido y sintió como la mano de la mujer se posicionaba en su cuello jalándolo hacia atrás, sintiendo de inmediato su respiración en el oído
-Eres una caja de sorpresas -dice con una sonrisa-
Alucard sintió como sus extremidades eran liberadas del agarre de la soga, la misma desapareció una vez fue recogida por la Kitsune, esta se alejó del hombre unos metros mientras el se retiraba los clavos de hielo de la espalda, Ōkami se retiro la mascara dejando que pudiera respirar de mejor manera, la pelea había durado mas de lo que le gustaría, a pesar de que ambos se habían contenido bastante por ser su primer encuentro, les exaltaba la idea de una batalla donde de verdad el más fuerte sea el que vuelva a casa, pero no podían hacerlo.
-Debo admitir que su puntería me ha impresionado, podría enseñarme un par de cosas -dice Ōkami arreglándose la ropa cubierta de tierra y arugas- y en pelea cuerpo a cuerpo no ha estado mal
-Debo reconocer que estoy un poco oxidado en ese aspecto -dice Alucard a sus espaldas- pero su habilidad con la espada me trajo... recuerdos -dice con una sonrisa-
- ¿De otra vida?
-Si -dice acercándose al lugar donde estaba tirado su sombrero y saco, se dispuso a sacudir su abrigo antes de ponérselo mientras Ōkami le sostenía su sombrero- recuerdos de honorables batallas, pero esas historias serán para otra ocasión
- ¿Podría volver mañana? -pregunta suavemente Ōkami- me serviría a alguien que este a mi altura para mi entrenamiento personal -dice dándole el sombrero-
Alucard miro a la kitsune por un momento, ¿Cómo iba a rechazar esta oferta?, seguir peleando con alguien que, si estaba a su nivel, era algo imposible de ignorar, peor tenia un problema, su ama, ya encontraría algo para ocultárselo
-Revisare mi agenda y tal vez vuelva -dice colocándose el sombrero-
'Es un sí'
-Bueno... ya es hora de volver a casa, fue un honor tener este encuentro con usted, pero debo irme -se da vuelta para retirase cuando la mano de Ōkami lo detiene-
-Espere
Alucard se dio vuelta y al hacerlo la Kitsune empezó a limpiar un poco su traje que seguía con tierra y arrugas
-Sigue impresentable para Sir Integra – Ōkami fijo su vista en la corbata chueca del vampiro, así no podía irse- ¿puedo? -pregunto amable, Alu solo asintió rápidamente y Ōkami comenzó a hacerle un buen nudo para que este por lómenos un poco más decente-
Alucard no pudo evitar fijar su vista nuevamente en la mujer delante de él, se olvidó por un momento en que ella no estaba temblando de miedo como otras personas el verlo, o estaba en modo alerta, ella estaba tranquila, como si delante de el no hubiese un monstruo, vio su rostro y volvió a sentirse perdido en esos ojos bicolor, ambos llenos de brillo, un brillo tan hermoso.
-Ahora si -dijo Ōkami sacando al Nosferatu de su transe- ya puede retirarse, lo veo mañana si Dios quiere -se dio media vuelta para irse cuando la voz del vampiro la llamo-
-Que tenga buenas noches, Maestra Ōkami.
-Lo mismo digo Nosferatu Alucard.
Ambos se sostuvieron la mirada por un segundo ante de que la kitsune se trasformase en un lobo blanco y saliera corriendo rumbo a la base, Alucard por su lado se hundió en la oscuridad desapareciendo
***
El sol empezó a mostrar su rostro por el horizonte dando comienzo a un nuevo día, que buen comienzo de día, los Ktsunes corrían por el bosque buscando desesperados al autor de la señal enviada a la base hace 12H, había llegado un mensaje encriptado a la mascara que se usaba como forma de contacto entre Kitsunes, en el mensaje solo ponía que era enviado por el Ex teniente de la resistencia, Kiyoshi, no perdieron tiempo y se dirigieron al origen de la señal, los cuatro Kitsunes se dividieron para buscarlo hasta que el grito de pánico de Tori los llamo a todos.
Llegaron tarde
***
Sir Integra sostenía con su hombro el teléfono mientras con sus manos escribía todo lo que dictaba la mujer al otro lado, ese día varios soldados fueron a la base de los Kitsunes para llenarla de un equipo mejorado y también con armas humanas que seria usadas por los mismos, ya habían pasado una hora y media desde que los soldados se retiraron de la base, el día de mañana se procedería a hacerle un interrogatorio a todos los Kitsunes, solo para llenar las fichas de información y sobre su especie, ahora se encontraba Integra anotando los nombres de algunos lugares donde a estado operando el vampiro que seguían, este caso no lo llevaría lo organización solamente, sino también los Kitsunes, Ōkami tenía ya tiempo observando a este vampiro pues se lo ah visto conviviendo con Yakos, Integra puso en las manos de la maestra la investigación del objetivo y su eliminación.
Alucard estaba a punto de ir a dormir, pero antes dio un ultimo recorrido por la mansión terminando en la oficina de su ama para molestarla un rato, apareció por una esquina del despacho y la vio concentrada en su trabajo, cuando sus dedos soltaron el bolígrafo vio cómo se disponía a colgar
-Bien, entendido, mañana mismo serán recibidos a las 9 de la mañana para el interrogatorio... si entiendo -ubo un silencio en el cual Integra apretó los labios severamente frustrada- lo entiendo, usted no se preocupe por eso... bien hasta mañana Maestra, mi sentido pésame -dijo antes de cortar-
Las alarmas en Alucard se dispararon cuando su ama pronuncio la última frase, no sabía bien porque, pero algo no andaba bien y su curiosidad pedía a gritos respuestas
- ¿Paso algo con la señorita Ōkami? -pregunto tomando asiento frente a Integra ella solo se acarició la sien antes de responder-
-De hecho, si... la llame para acordar que mañana vendría con sus soldados, y me comento que esta madrugada encontraron el cadáver de un Kitsune zenko, un ex teniente de la resistencia Zenko, lo encontraron descuartizado y ahora están de luto, le propuse trasladar el interrogatorio para pasado mañana, pero prefirió que sea mañana -explico mientras sacaba de su cajón un paquete de cigarros- la note muy afectada, no quiero pensar como estarán los demás.
-Que pena -se limito a decir el Nosferatu con la mirada bastante molesta-
-Oh y también me dijo que la ayudaste en su entrenamiento personal ayer y tu me habías dicho que saliste a pasear -Alucard sintió un pequeño sentimiento de miedo ante sus palabras, ahora no quería lidiar con una Integra enojada- mira, la visita que tenias hoy con ella para un nuevo entrenamiento se cancela, la maestra ya tiene suficiente con su perdida y la investigación, asique aprovecha que tienes esta noche libre y entrena a Seras, le darás el pésame cuando venga mañana ¿oíste?
-Si ama -dijo bajando la vista-
***
Los portones de la mansión se abrieron dejando paso a los Kitsunes, los cuatro se dirigieron a la gran mansión que había hacia unos metros, Walter los esperaba en la entrada junto a Seras, Integra ya estaba llegando con una carpeta en mano, levanto su vista hacia los Kitsune y vio que la única que no tenia su mascara puesta era la maestra y ella no tenia buena cara, bajo un par de escalones para poder acercársele y al estar delante de ella abrió los brazos para darle un abrazo que Ōkami no puedo negar, Tori, Yuzuki y Naosu hicieron una reverencia ante Integra, paso su brazo por detrás de Ōkami y la acompaño hasta las salas de interrogatorio que estaban debajo del primer piso.
***
Estaba esperando las preguntas mientras tomaba un vaso de agua, los demás Kitsune sentados a cada lado de su maestra, Integra estaba en su despacho y con la pantalla del ordenador miraba las cámaras que graban a Los Kitsunes
-Señorita Ōkami y sus soldados ¿pueden alzar su mano derecha, por favor? -pregunto un hombre desde el otro lado de la mesa, Ōkami siguió sus palabras y levanto su mano, al igual que los demás Kitsunes-
- ¿Juran que en este testimonio lo que dirán será la verdad, toda la verdad, y nada mas que solo la verdad con ayuda de Dios?
-Si -respondieron los cuatro al unisonó-
- ¿Señorita Ōkami podría explicarnos que clase de ser inhumano son?
-Bueno, somos Kitsunes, somos seres místicos, protectores de los bosques y aldeas -contesto suavemente Ōkami-
-Sin entrar en muchos detalles ¿cuántas especies de Kitsunes hay?
-Dos en total, Zenkos y Yakos -contesto tomando de nuevo del vaso de agua-
-Señor Naosu, ¿podría decirnos su lugar de origen?
-La isla de Zandaka, hay antiguamente vivíamos todos los Kitsunes -contesto el curandero-
- ¿Podrían explicarnos sin entrar en muchos detalles como era zandaka antes de la guerra?
-Pues Zandaka era una isla muy hermosa, un lugar verdaderamente mágico -dijo Naosu- recuerdo que el templo de la capital siempre estaba decorado con flores al igual que las calles, en general era un lugar muy bonito -termino de decir antes de acomodarse la chaqueta-
- ¿Y las demás su lugar de origen también es Zandaka?
Las tres mujeres negaron con la cabeza al instante.
- ¿Podrían decirnos rápidamente su lugar de origen?
- Tori fue la primera en hablar- Las tres nacimos y crecimos en Londres, yo vivía en un pequeño pueblo cuando era humana -dijo ella con una sonrisa-
-Yo crecí con mis padres y hermanos en Whitechapel -dijo cortante Yuzuki-
-Y yo crecí en una casa de familia noble – dijo Ōkami –
- Bien. Entrando un poco en el terreno Yako, ¿Cómo era la relación de Zenkos y Yakos en Zandaka antes de la guerra?
-La verdad que yo recuerde nunca ubo ningún problema de gran magnitud con ellos, si es sierto que teníamos nuestras diferencias, pero... realmente los Yakos que conocí no eran, como ahora -dijo tranquilamente Tori-
- ¿Cuál creen que fue el detonante de la guerra?
-Ese detónate tiene un nombre y es Lord Shen -dijo Ōkami-
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