📱 :Capítulo cinco: . . ⇢ ˗ˏˋ Dibujo ˎˊ˗ ꒰💚꒱

Daiki frunció los labios, haciendo un esfuerzo inhumano para mantener sus ojos abiertos. No había logrado descansar correctamente la noche anterior, pues Naomi estaba muy inspirada conversando con Alluki, y al no querer interrumpirla, terminó durmiéndose a muy altas horas de la noche.

No lograba entender absolutamente nada de lo que su profesor explicaba, y sin ganas de perderse la clase, levantó su mano para pedir permiso de ir al baño. Supuso que si refrescaba su rostro con agua fria podría despertarse un poco, y se alivió mucho cuando su permiso fue concedido.

Salió del aula arrastrando los pies, mientras sobaba sus ojos con expresión adormilada. Agradeció no encontrarse con nadie en el pasillo, pues seguramente parecía un zombie justo ahora.

Entró al baño con rapidez, desesperado por lavar su rostro lo antes posible. Se sobresaltó un poco al notar la presencia de uno de sus compañeros de aula, el cual se encontraba sentado sobre el lavado mientras observaba la pantalla de su celular con el ceño fruncido.

―Ah, Killua.―bufó el nombre del albino, a lo que él levantó la vista momentáneamente para observarlo.

―Dereck ―saludó el chico, haciendo que el castaño frunciera el ceño enojado―. Has estado faltando mucho a clases últimamente, ¿que te pasó?

―Para empezar, es Daiki, imbecil ―masculló, haciendo una mueca―. Y solo tenía un poco de gripe, pero aquí son muy dramáticos y me dieron un reposo.

Killua simplemente asintió, sin tomarle mucha importancia. Daiki lo conocía desde que ambos ingresaron a primaria hace nueve años, y desde entonces siempre han quedado en las mismas clases. Ambos tenían sus grupos de amigos separados, así que solo intercambiaban palabras cuando era necesario.

―Hmm, ya veo... ―murmura desinteresado, dándole un ultimo vistazo a su celular antes de bloquearlo―. ¿Viniste a orinar?

El castaño frunció el ceño, mandándole una mala mirada―¿Que clase de pregunta es esa? Rarito.―murmura, para luego acercarse a uno de los lavados y abrir la llave. Juntó sus manos para atrapar un poco de agua, e inmediatamente la echó sobre su rostro, mojándose también los mechones delanteros de su cabello.

Repitió esa misma acción tres veces, bajo la atenta mirada del Zoldyck―¿Por que haces eso?

―No pude dormir bien anoche, y ahora tengo mucho sueño ―explica simplemente, tomando un poco de papel para secar su rostro―. ¿Tú que haces aquí? Las clases empezaron hace una hora.

El albino suspiró tristemente, apoyando su mejilla en una de sus manos―Yo tampoco pude dormir bien, y me quedé dormido en la mañana. Llegué hace diez minutos.

El castaño torció los labios antes de murmurar un "Que mal por ti..." y abandonar el baño. Ahora se sentía un poco mejor, y no quería desperdiciar su tiempo hablando con Killua.

Este ultimo se quedó solo nuevamente, observando distraídamente los cubículos del baño. Llevaba un buen rato tratando de contactar a su amiga de Tinder, pero hasta el momento no había contestado ninguno de sus cuatro mensajes. Supuso que también se había quedado dormida, pues la noche anterior terminaron de hablar a las tres de la mañana, y solo porque su mamá lo amenazó con apagar el wifi si no se dormía.

Una enorme sonrisa se formó en sus labios al sentir su teléfono vibrar en su mano, pero todo rastro de felicidad se esfumó al ver que había recibido un mensaje en WhatsApp. De mala gana lo abrió, confundiéndose al ver de quien provenía tal mensaje.

Dereck (Daiki) 💩

Oye, el profesor no se dio cuenta de que no entraste a clases.

Killua Zoldyck

¿En seriooooo?

Genial.

Dereck (Daiki) 💩

Si

Entonces yo le dije

Y te reprobó.

―Maldito imbecil...―masculló enojado, apretando fuertemente el artefacto entre sus manos.

Se aguantó las ganas de bloquearlo, y optó por simplemente ignorar su mensaje. Ahora estaba solo, aburrido y con una mala calificación en ciencias.

―¡Mira, saqué diez en mi examen!―presume el castaño orgulloso, entrando sin permiso a la habitación de su amiga.

Esta dejó el lápiz que anteriormente estaba utilizando para dibujar sobre su escritorio, levantándose para revisar la evaluación de su amigo. Sus cejas se fruncieron por la confusión, a la vez que le mandaba una mirada de reojo al castaño.

―Si, sacaste diez... de veinte puntos.―hace una mueca, devolviéndole la hoja.

El chico bufo, arrebatándosela indignado―Diez es nota y lo demás es lujo.

Naomi rio mientras negaba divertidamente con la cabeza. Su amigo solía ser bastante aplicado cuando era más joven, pero desde que entró en la adolescencia había empezado a descuidar mucho sus calificaciones. Se esforzaba lo suficiente para no reprobar, y solo por eso sus padres se mantenían contentos.

―¿Y que has hecho hoy?―pregunta el chico con curiosidad, lanzándose pesadamente a la cama de Naomi.

Ella titubeó un poco antes de acercarse rápidamente a su escritorio y tomar su block de dibujo. Le mostró el adorable gato que había estado dibujando en el transcurso de la mañana, haciendo que el chico sonriera tiernamente.

―Esto está supeer bonito, le tomaré una foto para subirla a mi estado.―habla rápidamente, desbloqueando su celular para abrir la cámara de WhatsApp.

Ella no se opuso, la hacía sentir muy feliz saber que a su amigo le gustaban sus torpes creaciones. Además, no era la primera vez que hacía algo como eso, así que ya estaba acostumbrada.

―Listo, ahora a jugar Lol ―sonríe, sacando una laptop de su bolso. Mientras esta se prendía, levantó la cabeza para observar a su amiga, la cual estaba observando distraídamente su dibujo―. ¿Alluki no te ha escrito hoy?

Ella se tensó al escuchar su pregunta, desviando la mirada incomoda. Si le había escrito, muchas veces en realidad, pero por obvias razones no había podido responderle. Normalmente lo hacía cuando Daiki llegaba de la escuela, pero esta vez quería que su amigo se tomara un tiempo para él, así que decidió mentirle.

―N-No...―susurra, abrazando el block contra su pecho como acto nervioso.

Daiki rodó los ojos, captando inmediatamente su espantoso intento de mentir. La conocía lo suficiente para saber cuando decía o no la verdad, y tambien sabía lo incomoda que se sentía por robarle tanto tiempo. Pero a él no le interesaba, la ayudaba con gusto. Además, hablar con Alluki si resultaba divertido de vez en cuando.

―Claro...―murmuró, fingiendo creerle―. ¿Que te parece si le escribimos ahora?

―P-Pero estabas por jugar...―susurra, observandolo con las cejas fruncidas. Daiki hizo una mueca, agitando levemente su cabeza mientras pensaba en alguna solución.

―¡Ya se! Preguntémosle si juega, y si es así, que juegue con nosotros ―propone, sonriendo por su maravillosa idea. Ella se quedó pasmada un par de segundos, para finalmente asentir―. ¡Genial! Pero mejor no juguemos Lol, ya sabes que me pongo algo agresivo.―murmura, tocando la pantalla agrietada de su laptop.

Naomi asintió repetidas veces, de acuerdo. No quería que Alluki se espantara al conocer el lado oscuro de su mejor amigo, y ella tampoco quería presenciar aquello otra vez.

―¿Q-Que jugamos entonces?―pregunta la chica, tomando su propia laptop para sentarse junto a él.

Daiki se quedó un rato pensando, analizando las posibles opciones. Conocía muchísimos juegos, pero en ninguno destacaban las habilidades de su amiga, así que finalmente optó por elegir uno fácil y divertido.

―Juguemos Among Us.―se encoge de hombros, a lo que ella asintió repetidas veces.

Sabía jugar muy bien ese juego, pues era lo que solía hacer mientras su amigo estaba en la escuela. Aún faltaban un par de horas para que sus clases empezaran, así que tenía tiempo para entretenerse un rato.

Le pasó el celular a su amigo, y este inmediatamente le mandó un mensaje a Alluki, invitándolo a jugar. La respuesta llegó casi al instante, así que el castaño le mandó el código a otros amigos más para que se unieran también.

―Hmm, ¿que nombre le pongo a mi personaje?―susurra el chico, para luego encogerse de hombros―. Dereck será.

Una vez todos estuvieron listos, la partida empezó. Daiki y Naomi se ayudaban mutuamente, ya que ninguno de los dos era el impostor en este caso. Ambos se estaban divirtiendo mucho, hasta que el primer muerto apareció.

―¡Maldito Alluki, me asesinó!―bramó el castaño enojado, apretando con fuerza los costados de su laptop―. Menos mal no estamos jugando Lol...

Naomi rio cortamente, mandándole una mirada compasiva a su amigo. Gracias a ese pequeño dato, lograron ganar la partida. Eso frustró mucho al albino, el cual se había esforzado mucho en mentir para cubrir su identidad.

Siguieron jugando un buen rato hasta que llegó la hora de las clases de Naomi. De mala gana se despidió de su amigo virtual, para luego acomodar sus cosas y acercarse a la puerta de su habitación para bajar al estudio.

Antes de que pudiera hacerlo, su amigo la detuvo tomándola por el brazo. Frunció las cejas confundida, observandolo con curiosidad. Este le pasó su celular con una sonrisa, pidiéndole que leyera la conversación que estaba abierta.

Killua Zoldyck ha respondido a tu estado.

Lindo dibujo.

Naomi frunció los labios, sintiendo como sus mejillas empezaban a calentarse. No conocía a ese chico, pero aún así logró avergonzarla. Su amigo rodó los ojos al ver su reacción, dándole un pequeño empujón para que terminara de salir de la habitación.

―Su opinión no es que valga mucho, pero pensé que te gustaría verla ―se encoge de hombros, sin tomarle mucha importancia―. Es uno de mis compañeros de clase, cuando ingreses lo conocerás. Pero no te ilusiones mucho, en persona no es nada simpático.

Ella asintió torpemente, dándole una última mirada al mensaje antes de regresarle el celular a su amigo y retomar el camino hacía las escaleras.

Espero que les haya gustado el cap uwu

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