Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

✰𝐓𝐡𝐞 𝐬𝐨𝐧𝐠 𝐨𝐟 𝐭𝐡𝐞 𝐧𝐢𝐠𝐡𝐭✰

AU: "Don't look up at the stars"

Clover despertó, los lloriqueos desde la otra habitación le hacían la vida imposible, se levantó pesadamente, prácticamente arrastrándose hacia allá, en la cuna, iluminados por la luz de la luna, había dos bebés.

Los motivos de las desgracias y alegrías de su vida.

-Oh vamos...-Estaba demasiado cansada como para una bienvenida afectuosa-¿Que les ocurre ahora?-

se sentó al lado de la cuna, mirándolos atentamente, solo tenía 16 años, ¿por qué tenía que ocurrirle esto a ella? Comenzó a sollozar a la par de sus hijos, encogida en el piso, estaba tan frustrada...

Había trabajado tanto, tantas horas de estudio, solo para que un tipo salido de la nada la engañara con su sonrisa fotográfica y sus regalos caros ¿Y para que? Poder llevarla a la cama, estaba segura que el muy bastardo no se haría cargo de sus vástagos, aunque viviera, ahora la había dejado, sola.

Abandonada en la casa en la que vivió alguna vez con su hermano, su hermano...

Tocó su cuerno roto con los dedos, aún gimoteante, quería morir.

Se levantó del suelo, simplemente no podía odiarlos, el había sido tan bueno, y su hermano la había amado, tomo a los bebés en sus brazos, también estaban ellos...

Si, eran mellizos, completamente diferentes el uno del otro, aún recordaba como el médico le había dicho que nacieron con los cuernos pegados y como presenció, a punto de desmayarse, como la partera serraba los huesos de ambos, partiendolos con un sonido hueco, separando lo que se había formado durante nueve meses.

Miro sus rostros, tocando delicadamente los cachos lastimados en la cabeza de ambos, su otro cuerno era normal, pero las marcas de rotura eran escalofriantemente parecidas a las que ella tenía en la cabeza.

Se odia por eso, por haber deseado, como un oscuro secreto de su corazón, que ellos no pasaran el día.

Pero ahí estaban, había abandonado la escuela y ahora trabajaba vendiendo su cuerpo por unos cuantos dólares, de sentía asquerosa, pero parecía ser su única manera de subsistir, se desabrochó la camisa, mirando a los niños.

No sentía nada por ellos, eran sus hijos, pero habían arruinado su vida, a pesar de todo, no podía odiarlos, solo cuidarlos y esperar lo mejor.

Les había puesto nombres parecidos: Diana y David, era algo lindo, tenían hábitos extraños, David era extrañamente parecido a ella, sentía un nudo en el estómago cuando lo veía, tenía los mismos rizos dorados y una mirada soñadora en sus ojos color verde oscuro, era lo único que le recordaba que no era una Clover pequeña, que era su hijo, hecho con alguien más, Era extrañamente llorón y empezaría a gimotear si ella salía del cuarto, estaba pegada a ella como si su vida dependiera de ello (Por qué así es) Diana era algo diferente, Amazona aventurera de brillante cabello oscuro y encantadores ojos azules como el cielo, Le encantaba mirar sus ojos, era lo único en lo que se parecían, le gustaba trepar la cuna y explorar lugares nuevos, pero lloraría si no la sentia cerca, era extrañamente independiente para tener solo 13 meses, los dos eran completamente diferentes, no se creerían que estuvieron en el mismo vientre, su interior ardía cada vez que los veía.

Ardía de rencor acumulado, algo que no quería descargar en ellos, no quería parecer su hermano.

No se había planteado la idea de dejar de amamantarlos, era más barato para ella, los acercó a sus pechos, sintiendo como empezaban a comer, al menos ya estarían tranquilos.

Suspiró, mirando al techo, estos meses habían sido los más dificiles de su vida, no podría disfrutar su juventud, no volvería a ser la de antes, pensamientos intrusivos en su mente, odio, odio, odio...

Todo por ser una tonta niña ilusionada con sueños rotos.

Miro a sus hijos, ellos parecían tan felices... tan inocentes a todo lo que pasaba, ellos pensaban que su mamá los amaba, que abría un futuro para ellos, comenzó a sollozar, todos estos meses contenidos en sus lágrimas, daría su vida por volver a ser, al menos unos minutos tan feliz e inocente como ellos, por tener una vida otra vez.

Sus mejillas se sonrojaron de la vergüenza, estaba tan molesta consigo misma, siguió llorando, sus lágrimas caían sobre sus hijos, lavando cualquier rastro de odio o rencor sobre ellos, se sintió libre por primera vez, su pecho tan pleno, sollozo más, las lágrimas lo lavarian todo, empezarían de nuevo.

Miro a sus hijos, y volvió a sentir el amor después de tanto tiempo....

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro