Cheryl y Alec acababan de llegar a su nuevo hogar, al menos temporalmente, a Cheryl le encantó la casa/mansión, Alec fue más indiferente am respecto, la casa era de un tono gris, tenía unos lindos ventanales al frente, el bosque quedaba detrás de la casa, el césped era de un hermoso verde, era una casa de ensueño, y eso a Chery le encantaba.

Cheryl apenas llegó, corrió a ver cuál sería su habitación, Lydia la había decorado como a ella le gusta, todo de color rojo y negro, eran los únicos colores en su habitación, en cambio la de Alec, era en tonos negros, gris y blanco, colores más neutros, a Lydia le encantaba ver que a pesar de que los mellizos eran opuestos, eran muy unidos, ella muchas veces se imaginaba como habría sido criarlos junto a Jasper.

Lydia tenía que decirle a Jasper, pero no sabia como, temía que Jasper la odiara, maldición, Lydia se odiaba en cierta parte por nunca haberle dicho, el merecía saberlo, Lydia iba a decirle, solo, buscaría el momento adecuado, primero tenía que enfocarse en mantener a salvo a Bella.

-Mami, me encanta la casa, es hermosa y agradezco que hayas cambiado de opinión- Cheryl la abrazo.

-Cher, cariño, recuerda, me tienes que llamar Lydia, pueden escucharnos- hablo mientras le devolvía el abrazo.

-Y vamos a ser discretos respecto a eso, lo prometemos- esta vez fue Alec el que hablo.

-Lydia, cuando vamos a conocer formalmente a los Cullen, a pesar de que ya sabemos quiénes son- Cheryl le pregunto a Lydia mientras se separaba del abrazo.

-Se que están emocionados por conocerlos, por lo que, si gustan, justo ahora- Lydia le hablo a los dos, a pesar de que Alec se hacía el desentendido.

Luego de que Alec y Cheryl se cambiaran de ropa y se dieran un pequeño baño, se subieron en el camaro de Lydia, Cheryl sin querer estaba transmitiendo emoción a Alec y a Lydia.

-Cher, tranquila-Alec le hablo, un tanto cansado de su actitud- Ya llega...- no pudo terminar de hablar, cuando Cheryl ya estaba tocando la puerta, Esme fue la que atendió, pero se sorprendió cuando Cheryl la abrazo.

-Cheryl- Lydia la llamo, con cierta advertencia.

-Oh si, lo siento señora Cullen, me deje llevar-

-No hay problema, pasa mi niña, el resto de la familia está en la sala de estar-Cheryl no perdió el tiempo y entro, en cambio Alec iba más receloso-Y tu debes de ser Alexander- Esme le regalo una gran sonrisa.

-Alec, si no le molesta- el rubio le devolvió la sonrisa, Lydia volvió a respirar, al menos Esme le cayó bien, solo faltaba seis vampiros más, y Bella.

Cuando Esme, Alec y Lydia entraron, pudieron observar como todos lo Cullen tenían cara de asombro, mientras Cheryl hablaba con alegría con todos.

-Cheryl, ve más despacio y preséntate como se debe- Lydia la medio regaño.

-Claro, mi nombre completo es Lissette Cheryl Marshall, aunque normalmente me llaman Cheryl, mi primer nombre es una unión de Elisabeth -Lizzie- y Josette -Josie- unas grandes amigas de la familia, me gusta mucho el color rojo, soy extrovertida, y soy la melliza de ese rubio amargado- Cheryl hablaba con entusiasmo, aunque lo último lo dijo con cierto reproche mientras señalaba a Alec.-Preséntate Alec, ¿o te presento yo?-

-Yo lo hago, gracias hermanita-Dijo con cierta burla, a lo que Cheryl le saco la lengua- Mi nombre es Nikolas Alexander Marshall, Alec para los amigos, mi primer nombre es en honor a mi abuelo, Nik, digamos que ganó una apuesta, no me gusta que me molesten, y lamentablemente soy hermano mellizo de ese duende de cabello rojo, es un demonio- la presentación de Alec era más seria, a pesar de que al final bromeo.

-Un gusto Alexander, Cheryl, mi nombre es Carlisle Cullen y estos son mis hijos, ya conocieron a mi esposa Esme-

-Dime Alec- Lydia estaba feliz, le estaban agradando.

Todas las presentaciones fueron bien, pero cuando Jasper se presentó, se formó cierta tensión.

-Es un gusto conocerlos, Alec y Cheryl, Lydia nos a hablado de ustedes, mi nombre es Jasper Hale- mientras Cheryl parecía querer saltar, Alec estaba completamente serio.

-Alexander para usted señor Hale-

-¡Alec!- Cheryl le gritó, en tono de regaño.

-Sonríe tu si quieres Cheryl, pero yo no, el no me agrada y lo sabes‐

-¡Pero no lo conoces!-

-Y te recuerdo querida hermana, tu tampoco lo conoces-

Cheryl se veía molesta, pero trato de calmarse, y empezó a influir en la emociones de Alec, para que estuviera más alegre, pero el se dio cuenta.

-Cheryl, no te metas con mis emociones-

-Pues, no me arruine el dia-

-¿Yo te arruinó el día?, conocer a ese señ...- pero Lydia lo interrumpió.

-Muy bien, basta, los dos- el tono que uso Lydia era como de una madre regañando a sus hijos, cosa que era, pero que los Cullen no saben.-Cheryl, no puedes manipular las emociones de tu hermano, y Alec, trata de no estar tan amargado, deja a Cheryl hacer lo que quiera, ¿entendido?-

-Si, Lydia- hablaron los mellizos a la vez.

-Bien, ignorando el hecho de que Lydia actuó como su madre y ustedes sus hijos, tengo que arriesgarme y preguntar, ¿por qué Alec no soporta a Jasper?- Emmett no pudo evitar preguntar, ganándose una mala mirada por parte de Rosalie.

-Por que le hizo daño a Lydia, la abandonó, por eso Jasper no me agrada- Alec contesto antes de que Lydia pudiera hablar, para luego alejarse de la casa a velocidad vampírica.

-¿El en serio es un familiar tuyo? ¿O es un novio pero no quisiste decirlo para no herir a Jasper?- Emmett volvió a preguntar, pero esta vez Rosalie le golpeo el brazo.

‐¿Que? ¡No!- Lydia hablo al mismo tiempo que Cheryl murmuraba "que asco"-No es eso... es complicado, lo siento si suena grosero, pero es algo que solo nos concierne a Jasper y a mi-

-¿A mi?-

-Si- Lydia lo observó con cierta tristeza- Jazz, ocupamos hablar, a solas-

Todos los Cullen salieron de la casa, solo quedaron Cheryl, Jasper y Lydia.

-Yo, voy a buscar a Alec, mientras ustedes hablen y aclaren todo, solo espero que todo salga bien- Cheryl comentó para luego correr, tratando de encontrar a su hermano, algo difícil, por que se había escondido con un hechizo, pero se le felicitaba ser su melliza.

Mientras Cheryl buscaba a Alec, el estaba meditando, no sabía por qué odiaba tanto a Jasper, el cuando era pequeño había querido conocerlo, Lydia siempre le dijo que lo conocería, solo tenía que esperar un poco, pero ahora que lo conoció, sintió enojo y Alec no sabía porque.

Jasper estaba en la casa Cullen esperando a que Lydia hablara, dándole su tiempo, ya que parecía ser un tema delicado y Lydia no sabía como decirlo, por lo que solo lo dijo.

-Jasper, tienes que saber que...-

☆♡☆♡☆♡☆♡☆♡☆♡☆♡☆♡☆♡

Habitacion de Cheryl.

Habitación de Alec