La semana pasó como un cohete para San, y en el fondo, lo agradecía mucho, los días últimamente se le hacían tan largos que percatarse de la hora y ver que el día se había pasado volando era un buen indicio de que, a lo mejor, su mente intentaba estar en paz con su alrededor y situación.

Debe admitir que en la desesperación de encontrar un hobby, las caminatas sin rumbo ya estaban comenzando a formar parte de su vida. Bueno, no es que fueran sin rumbo, San siempre sabía por donde iba, pero era la idea de no tener un destino en concreto que le hacía mucho más ligera y llevadera la experiencia. El ruido de la calle y los autos, junto a la gente que pasaba a su lado, los letreros de publicidad y las tiendas lograban acaparar su atención y ni si quiera necesitaba música para pasar el rato.

Así que durante toda la semana, aunque fuesen 15 minutos durante el día, San salía a caminar y a respirar aire fresco, Wooyoung le preguntaba a donde iba cada día y San nunca tuvo el temor de decirle que hacía y el por qué, San podía ver la duda en los ojos de Wooyoung cada día que preguntó, como si quisiera decirle si podía acompañarlo pero no tenía la fuerza necesaria para hacerlo, San tampoco insistió ni indagó en el tema, sin saber como Wooyoung podría afectar el nuevo método de San de relajarse y sobrellevar su vida.

Y estaba funcionando, de cierta manera lo hacía, el aire no era fresco ni tampoco limpio en Seúl, pero al menos no estaba encerrado o en su trabajo o en el departamento, seguía sobrepensando las cosas, pero al parecer estar realmente solo sin sentir la presión de tener que hacer algo con Wooyoung o con su vida dentro del departamento le bajaba las revoluciones y los sentimientos a flor de piel que estaba sintiendo en el día a día, si San antes lloraba por todo lo que estaba pasando, ya no lo hacía, el pecho le dolía y la angustia de su estómago seguía allí, pero era mucho más llevadero y tranquilo para él.

Con Wooyoung... las cosas no estaban bien ni mal, San sentía que estaban escondiendo la basura debajo de la alfombra con lo que estaba pasando en lo que sea que fuera su relación, la poca comunicación, el nulo afecto y la rutina de ir a trabajar, volver a casa, cenar y que cada uno hiciera lo suyo hasta ir a dormir no daba ningún espacio a los dos para intentar arreglar todo lo que pasaba, y San no sabía si quería hacerlo tampoco, estaba cansado, confundido y con la esperanza aún de que Seonghwa en algún momento iba a volver y estarían los 3 juntos, tampoco veía motivación por parte de Wooyoung de hacerlo, así que los motivos de San morían antes de tomarles un peso significativo.

Hoy San estaba algo nublado, durante el día había llegado una urgencia a la veterinaria, un cachorro había sido atropellado y una de sus costillas perforó el pulmón, y no pudieron salvarlo, San lloró y entregó con el dolor de su alma a la familia la noticia. Para un veterinario debería ser costumbre ya estas situaciones, pero San amaba los animales y su profesión era salvarlos, su corazón se destruía cada vez que no era capaz de hacerlo y la pequeña culpa quedaba en su cabeza con un gusto amargo que no se pasaba hasta mínimo el siguiente día.

Se sentía pesado y todo el personal estaba decaído, así que se propuso hacer su caminata usual desde la veterinaria hasta el departamento para despejarse. Estaba marcando la salida junto a Wooyoung y se acomodaba la ropa para salir al frío.

"Hoy me iré caminando", avisó al menor mientras enrollaba la bufanda en su cuello, Wooyoung le miró con ojos abiertos por dos segundos, "Puedes ir en metro, necesito algo de aire"

No esperó una respuesta de Wooyoung antes de salir de la veterinaria hacia la noche, todavía no era tarde así que había movimiento y las tiendas seguían abiertas, así que no debía preocuparse, tampoco era una distancia grande hacia el departamento así que no demoraría más de una hora a paso rápido.

"San"

Se giró hacia Wooyoung ante su llamado, el peligris le había seguido y estaba detrás de él mirándole a los ojos, se sintió algo desprotegido ante eso, hace mucho Wooyoung no lo hacía.

"¿Puedo acompañarte?"

A San se le atascó la respiración por un instante, era primera vez que Wooyoung le acompañaba, y la niebla de su cabeza se dispersó un poco al verle con genuinas ganas de acompañarle a través de sus ojos, aparte de vergüenza por su petición y timidez, era difícil ver a Wooyoung de esa forma siendo que de los dos, él era el extrovertido, pero San hace mucho no le veía así y era adorable, así que no lo pensó mucho antes de asentir y ver el rostro de Wooyoung iluminarse antes de situarse a su lado en la asolera.

Comenzando a caminar, San pensó que de alguna forma se haría incómodo que Wooyoung se metiera dentro de su nuevo hobby siendo que San lo hacía especialmente para pensar sobre él, pero le sorprendió de que no lo fuera en realidad, la presencia de Wooyoung no se sentía pesada a su lado ni le abrumaba, el silencio no era incómodo ni tenía ganas de alejarse lo más posible de él... Solo estaba allí, y de alguna forma San sentía que debía hablar con él sobre lo que estaba pasando, que ese era el momento indicado.

"Haz empezado a pasear estos días", comentó Wooyoung sacándole de sus pensamientos sobre como empezar el enredo de su cabeza de la mejor manera.

Mirando al costado, el perfil de Wooyoung en la oscuridad aún se distinguía por las luces de la calle, la piel canela y esos ojos mirando a todas partes menos a él, como si evitar mirarle pudiese evitar la situación de ahora.

"Mmh, me ayuda a pensar".

"¿En qué piensas?"

San suspiró, volviendo la vista al frente al parar en un semáforo, casi asustandole un poco lo calmado que se sentía y con la boca lo suficientemente floja para expresarse.

"En nosotros".

No giró hacia Wooyoung al cruzar la calle, a pesar de sentir esos ojos encima suyo y como la respiración de Wooyoung se atascaba por un momento, sus demonios estaban peleando dentro suyo una batalla a muerte entre la desesperación y ansiedad y la calma, y la calma iba ganando milagrosamente, no iba a arriesgarse a perderla mirando esos ojos bonitos.

El silencio de Wooyoung pareció ser eterno para San, podía verlo titubear sin saber realmente qué decir y en cualquier otro momento del pasado San lo hubiese encontrado tierno, pero estaba perdiendo la calma y estaba a nada de vomitar todo lo que se le pasaba por la cabeza de una exhalada.

"Yo también pienso en nosotros", no pudo evitar mirar a Wooyoung esta vez, encontrándose con esos ojos tristes y una mueca que intentaba ser una sonrisa, San de pronto sintió un nudo en la garganta y se mordió la mejilla interna de la boca al ver a Wooyoung exhalar de nuevo, "En nosotros dos, tú y yo, nadie más".

San volvió la vista al frente intentando tragar saliva y pestañeando rápidamente para evitar que sus ojos se nublaran, las palabras de Wooyoung en ese suave tono de voz le habían afectado en el pecho dolorosamente rápido y no estaba preparado para que Wooyoung realmente le respondiera, la valentía desapareciendo y sus demonios volviendo quitándole por completo la calma y lo pacifico que estaba todo hace un momento, San no esperaba el momento de llegar al departamento y encerrarse en su propia burbuja para no hacerse más daño, pero aún faltaba más de la mitad del camino, y Wooyoung al parecer aprovechó el momento.

"Lo siento, San" musitó Wooyoung, San no quiso pensar en como su voz se había quebrado un poco al mencionar su nombre, "Lo siento por hacerte creer que ya no te quiero".

San miró al cielo oscuro al sentir las lágrimas desbordarse de sus ojos, no estaba preparado para todo esto, no estaba preparado para escuchar a Wooyoung y sentir como se le clavaba una estaca cada vez más profundo en su pobre corazon roto escuchando al menor, San estaba débil, estaba indefenso, como un pajarito enjaulado que no sabia volar, no podía sobrellevar todo esto sin haberse preparado mentalmente, pero de todas formas San sabía que en el fondo nunca iba a estar preparado para escuchar las cosas y se aferraba a ellas como nunca.

"Siempre te quiero cerca, San", siguió Wooyoung, "Siempre te quiero en mi vida, aunque no lo parezca y no te lo demuestre, no hay día en el que yo piensa no estar contigo hasta el final".

San suspiró con pena y algo de alivio, el pensamiento de que a lo mejor Wooyoung queria alejarse de él desapareciendo de su mente con esas palabras pero aún así dañando más su pobre mente, San estaba convencido de que a veces Wooyoung ya no lo soportaba y no le quería como antes, todas las peleas y el desprecio siendo las que alimentaban esa forma de ver y que ahora Wooyoung venga luego de meses y le diga lo contrario era... extraño para San y no sabía como exactamente tomárselo.

San pensaba mucho en el futuro igual, pero inconscientemente lo hacia con Wooyoung en este, la costumbre y la seguridad de que Wooyoung no le iba a dejar estaba firme en él, pero en momentos de debilidad e incertidumbre verse solo le aterraba de sobremanera.

Wooyoung se adelantó, colocándose al frente de él para detenerle el paso y que le mirase, San no podía, con solo sentir las manos de Wooyoung en sus muñecas intentando detenerlo y hacer que le mirase hizo que su rostro se deformara en una mueca llorona antes de soltar un sollozo. San no quería seguir llorando, odiaba tanto llorar pero siempre terminaba haciéndolo al no saber contener sus emociones y sentir una especie de reconforte en llorar y dejar salir todo, San ya no quería llorar frente a Wooyoung y mostrarse débil, pero sentir esta vez esas manos buscando su rostro y guiándolo hasta el frente, cruzarse con los ojos de Wooyoung y ver esa sonrisa triste fue demasiado, empezando a llorar como un niño y sintiendo como era abrazado con fuerza en plena calle.

"Lo siento, lo siento tanto Sannie", sintió la respiración caliente de Wooyoung en la coronilla de su cabeza, San solo pudo aferrarse y ocultarse en el cuello contrario mientras se descargaba, "Perdón por haberte dejado tanto de lado y haberme comportado como un imbécil", la voz ahogada de Wooyoung se escuchaba quebrada y eso solo hizo sentir peor a San.

Wooyoung no era el único que debía disculparse, San había hecho tantas cosas mal también, pero la garganta no le daba, la mente menos para simplemente pensar en disculparse, San solo estaba recibiendo el poco amor decente que Wooyoung le estaba entregando y aceptando sus disculpas sin pensarlo, porque San estuvo mucho tiempo esperando algo que le dijera que Wooyoung seguía ahí con él y que todo podía volver a ser como antes, San no quería nada más que eso pero la culpa y el sentimiento de que él era el que más debía disculparse lo dejaban entre la espada en la pared y no sabía como realmente reaccionar mas que quedarse callado, llorar y recibir lo que le daban.

Abrazó a Wooyoung con más fuerza al sentir los hombros del menor sacudirse, no quería que Wooyoung llorara, menos estando en la calle, cuando San se calmara seguramente se volvería loco de la vergüenza por haber llorado y creado un escándalo en plena calle -no es como si ya no lo hubiese hecho, el conflicto del hospital clínico aún le daba tanta rabia y vergüenza que se sentía patético-, pero no podía evitarlo.

San solo quería volver a sentirse amado y dejar de mentirse con que las cosas estaban bien en su vida, solo quería volver el tiempo atrás y haber tomado distintas desiciones antes de que su vida se destruyera tanto como lo estaba haciendo en este momento, San solo quería descansar y estar bien, San quería muchas cosas, pero no podía obtener ninguna de ellas.

"N-no llores... ¿si?", pidió Wooyoung en un ruego, aún con el rostro enterrado en su cabello y San pudo sentir como se mojaba por las lágrimas del otro, lo que lo hizo llorar más fuerte porque era un tonto que ni si quiera era capaz de decir algo para tranquilizar a Wooyoung.

San solo lloró y se desahogó como un niño pequeño hasta cansarse, abrazando con fuerza a Wooyoung por debajo de las axilas y sujetando su abrigo con sus puños hasta que sus nudillos estaban pálidos, sentir el contacto caliente de Wooyoung, su respiración y sus lagrimas en su cabello, la silueta de su cuerpo contra el suyo y las caricias en su espalda se sentía tan bien, se sentía tan seguro y protegido en el momento, pero al mismo tiempo se sentía mal, la culpa en la boca de su estómago y el pensamiento de que él no merecía ser reconfortado luego de todo lo que ha pasado en los últimos meses, San no merecía una disculpa ni esas caricias, ni si quiera merecía a Wooyoung en este punto, pero era lo suficientemente egoísta y celoso para tragarse todo eso y aceptarlo todo, porque si eso significaba estar con Wooyoung, nada importaba.

Luego de un rato, ambos dejaron de llorar y el frío le llegó al cuerpo a San por estar tanto rato en la misma posición, y apartándose cuidadosamente de Wooyoung se sintió algo avergonzado porque seguramente su cara estaba roja e hinchada por todo el llanto, pero el peso en los hombros que estaba cargando había desaparecido y estaba relajado, por lo que no pudo evitar soltar una risa al cruzarse con los ojos de Wooyoung, una risita genuina que contagió al contrario de ojos hinchados igual.

San juntó sus frentes con cuidado, sintiendo la tibia frente de Wooyoung contra la suya y suspirando ante el contacto.

"Todo va a estar bien San... todo volverá a ser como antes", aseguró Wooyoung en un susurro, y San estaba tan cansado que decidió confiar de nuevo en las palabras de Wooyoung.

Cuando volvieron al departamento esa noche, por primera vez en mucho tiempo hicieron la cena juntos, comieron conversando de cualquier tontería, y se fueron a dormir esta vez dándole la cara al otro y con los brazos enredados, San durmió calentito y reconfortado como nunca esa noche y no quiso despertar temprano en la mañana.

hwalight | 231026

Ateez hace comeback y yo también.

Buenos días gente, han pasado unos meses.

La vdd no me metí a wattpad más de 10 veces desde mi último anuncio durante estos meses, mi vida personal y mi salud mental estuvieron bastante mal y necesitaba tiempo para superar cosas y aclarar mis ideas, ya verán que escribir este fic también es sumamente complicado al estar lleno de emociones y depresión junto con pensamientos contradictorios jajsjs, al final era muy pesado ver mi situación mental y pensar en escribir sobre San que también tiene la mente mal, terminaba intentando proyectarme demasiado y definitivamente no quería eso.

Pero bueno, llegó el concierto de ateez en chile y fue como un cambio de ciclo igual ajsjs, fue la mejor noche de mi vida y aunque terminé muerta realmente me hizo muy bien, mi salud mental y física comenzó a mejorar y creo que ya me encuentro en capacidades de volver 🩷

Perdón por la demora, espero actualizarles seguido esta vez y terminar este fic luego para seguir con mis próximos proyectos 🫶🏻

Fotito del concierto para ustedes (la vdd no tomé fotos y solo grabé lo siento mucho es lo que tengo)