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 Morir era todo menos divertido.

No sabía si estaba en el limbo, en un paradero antes de ir por el rio Estigia, no tenía ni idea. La arena era blanca y el mar variaba entre un color azul y verde, el cielo estaba despejado y todo era tan tranquilo... enfrente mío había una casa azul de playa con un balcón.

El cielo no lucia tan mal. Lo único que sabía era que había muerto.

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La diosa del amor fue a confrontar a Hermes.

— ¡TU HIJO ES MALPARIDO, IDIOTA QUE SE VA A IR AL TARTARO EN ESTE MISMO INSTANTE Y TU TAMBIÉN! - Le dió un puñetazo en la cara

— ¿Qué hizo, Luke?

— ¡APARTE DE SER EL MALDITO TRAIDOR, APUÑALO A ADHARA! ¡ESE ENGENDRO QUE TUVISTE COMO HIJO ACABO DE DECLARARME LA GUERRA!

— Dita, yo-

— NI TE ATREVAS A DECIR OTRA PALABRA

Afrodita no termino de amenazar al dios de los viajeros, porque llegó la diosa de la caza, con una lanza en mano. Todos se voltearon a ver a quien atacaría. Hermes palideció al verla, pero su ataque no fue hacia él, si no hacia Poseidón.

— ¡A tu asquerosa decendencia no le bastó con matarla antes, lo vuelven a hacer, como siempre!

— No te dejes llevar por tus emociones, Artemisa, hemos terminado una guerra para comenzar otra

— Si tu hijo jamás hubiera aparecido ella no estaría muerta. Siempre uno tiene que morir para que el otro sobreviva

— ¡CALMENSE TODOS! - exclamó Zeus invocando su rayo

— Ella no puede morir, no voy a dejar que lo haga - comento Afrodita

— No puedes intervenir más de lo que ya has hecho. No querrás sufrir consecuencias, ¿no es verdad? Además, solo es una niña que se murió, no es como si fuera la primera y tampoco va a ser la última.

A pesar de cualquier cosa que Zeus podría decirle, la diosa del amor no se rendiría, siempre fue así, pues tenía sabía que tenía el apoyo de Artemisa, Apolo, Hefesto y Hades.

✧*･ﾟ*

Era como si estuviera esperando a que algo pasará. No había nada más que la cabaña. Me harte de esperar y entre.

Lucía acogedora, por afuera parecía normal, pero por adentro era idéntica a mi cabaña... el campamento..., las cortinas era de seda rosa pastel, los muebles lucían antiguos pero elegantes y delicados.

Iba a la cocina en busca de comida, no tenía hambre, pero igual era necesario comer, cuando oí como una puerta se abría. Toque mi collar y me prepare para atacar a quien sea que este ahí.

¿Afrodita? Era Afrodita... ella apareció, estaba preocupada y asustada, ¿qué hacía aquí?

— Ady, mi niña - corrió a abrazarme mientras me examinaba - ¿Estas bien? ¿Sabes quién soy, no?

— Sí - suspiré

El campamento... ahí estaban mis amigos...Azami, mi hermana. Tenía una hermana y... PERCY, él estaba ahí, en el bosque... herida... Luke.

— ¿Dónde está Percy? ¿Está bien?

— Ay, cariño - me acariciaba el cabello... como Luke - Él llego al campamento y está bien, incluso creo que ya despertó

Estaba bien, me alegraba, pero no es que no quisiera estar con él.

— ¿Y Luke?

— ¿TE PREOCUPAS POR ESE IDIOTA? ¡ADHARA! POR ÉL ESTÁS AQUÍ, NO DEBERIAS DE ESTAR EN ESTE LUGAR TAN PRONTO

— Él no lo hizo con esa intención, fue Cronos, él debe controlar a Luke y-

— ¡BASTA! No menciones el nombre de ese engendro del mal. Tiene suerte de que no lo haya asesinado.

— ¿Y exactamente dónde estoy? ¿En el cielo?

— Estas en un limbo, no puedo revivirte, pero esto es todo lo que pude hacer... No estas ni viva ni muerta, depende de ti que decisión tomes.

— Yo... yo quiero vivir.

— Lo sé, pero eso depende de ti ahora. Tendrás que enfrentarte a tu pasado, tu futuro y destino.

— ¿Qué? ¿No solo pueden revivir y omitir todo eso? No leí el último libro de Harry Potter, pero ahí, solo conversaban y luego regresaba a la vida.

— Tú eres una semidiosa, Ady, los semidioses tienen su vida más complicada.

Remarco mi idea de YO NO PEDÍ DE SER MESTIZA.

— Gracias

— De nada, cariño. Si logras vivir... lamento no poder ayudar mucho más, ahora estarás sola. - me sonrió amargamente

¿Por qué decía eso?

En un segundo una niebla rosa me cegó y aparecí en ¿otra playa? Esta vez esta nublada, la marea estaba alta y llovía. Afrodita me cambio por última vez de vestuario, un vestido rosa con una media cola amarrada con un lazo rosa pastel. Era bonito, pero no creo que me ayudara mucho a pelear.

En eso, salió un chico musculoso, moreno... de ojos verdes como el mar, cabello negro y unos ¿seis años mayor que yo?

No sabía qué hacía, pero era realmente muy lindo, tenía un lindo novio, pero ¿estaba mal admitir que ese chico igualaba en belleza a los dioses? Podría decir que ni los dioses eran tan lindos. Lo había visto antes, en mis visiones.

Yo me quede quita viéndolo, hasta que el agua me rodeo. ¿ERA HIJO DE POSEIDON? Vi a Poseidón y no se parecía nada a él. El chico misterioso sacó su espada... una muy similar a la de Percy... y me la puso en el cuello.

— ¿Dónde está Hester?

— ¿QUÉ?

De cerca era más lindo... BASTA ADHARA. TIENES NOVIO Y ESE CHICO TE INTENTA DE MATAR.

— Tú no eres Hester, ella dijo que nos veríamos aquí. ¿Qué hiciste con ella?

— No lo sé yo solo aparecí aquí y-

— No... no no no ¿comenzó de nuevo? Mátame

¿Era suicida o qué? Saqué mi espada y ambos empezamos a pelear. Él realmente no se esforzaba, podría ganarme con los ojos cerrado y aún así yo estaba ganando. Lo desarme y apunte mi espada a su cuello...

— No voy a matarte

— Si quieres sobrevivir, si quieres que ambos lo hagamos, tendras que matar a varias personas. Solo hazlo...

— No puedo...

— Nunca pudiste - me sonrió

Él mismo agarro mi espada y se la clavo en el corazón. 

— Buena suerte, mi estrella. Sálvanos.

Lo miré espantada, ¿por qué hizo eso? Quise ayudarlo, aunque sea en algo, pero la arena me consumía y caí en el bosque.

Esto en vez de parecer una pelea, era CONFUSO, MUY CONFUSO.

DE LA NADA ALGUIEN ME EMPEZO A LANZAR UN MONTON DE FLECHAS. Seguramente en otro momento diría algo más inteligente pero ahora solo podía decir una cosa.

— ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH!

Corrí por todo el bosque y aun así me seguían lanzado flechas, ninguna acertó, por suerte.

Lamentablemente, me tropecé. Alguien me dio la mano para levantarme.

— Tranquila, estarás bien - me sonrió una bella mujer

Era parecida a mí, solo que su aura era distinta, hipnotizante y atrayente... era como si fuera imposible negarle algo. Por suerte, yo era muy terca.

— No

Podría ser la que me intentaba de matar.

— ¿No? Sigues siendo igual de insoportable

Sacó su espada y empezó a atacarme. Ambas luchamos por un tiempo, ella tenía mucha más experiencia que yo... sus movimientos eran rápidos y precisos. Intenté de hacer lo mismo que hice con Ares, usar su sombra.

— προκύπτουν σκιές

¿Desde cuándo sabía griego? Las sombras de cualquier cosa a nuestro alrededor se juntaron y la rodearon

— ¡Ay! ¡Maldita Andrómeda, esta vez Perseo no podrá escapar de mí!

Veremos eso, desconocida. La misteriosa mujer desapareció entre las sombras.

— ¡TÚ! - grito alguien atrás mío

¿Ahora qué?

— ¿Vas a matarme o te vas a dejar matarte?

— Sígueme, no tienes tiempo que perder

La chica de cabellos dorados y ondulados con ojos celestes me miraba. Lucía como una cazadora, las había visto de pequeña...

— ¿Y si no quiero?

— Tú decides, quedarte o la oportunidad de no terminar muerta

— Entonces, ¿a dónde vamos?

✧*･ﾟ*

Ella me llevo a un templo destruido.

— ¿Desde cuándo lo conoces?

— ¿A quién?

— Al de ojos azules

Percy.

— Unos días.

— ¿Y ya estás aquí? ¿No te cuidas o qué? Cada vez me vuelvo más estúpida

— ¡Oye! Yo no soy estu... ¿Eres yo?

— Algo así - ella buscaba de un lado a otro algo - ¿Conoces la historia de Perseo y Andrómeda?

— Sí. ¿Por? ¿Soy su descendiente o qué?

— Eres su reencarnación

¿QUÉ? Y NO SOLO ¿QUÉ?, SI NO ¿¡QUÉ!?

— ¿ERES ANDROMEDA?

— ¿No sabias nada?

— ¿Parece que supiera algo?

— No tengo mucho tiempo, tú eres la clave, Adhara. Estas hecha para algo más grande de lo que pensaron, eres mi venganza. Les prometí que regresaría y los destruiría, como lo hicieron conmigo, con nosotras.

— Yo no quiero ninguna guerra

— No es lo que quieras Adhara, es tu destino. Para eso naciste. Serás su mayor temor y su destrucción.

— Yo... yo no quiero eso...

— La guerra se acercará y tú la lideraras.

¿Mi destino era unirme a Luke?

Antes de que pudiera preguntar algo más. Volví a aparecer en un nuevo lugar... mi antigua casa, el suelo estaba cubierto de vidrios rotos, de las paredes se escurría sangre y solo una habitación estaba iluminada... el cuarto de mi padre.

Me acerqué silenciosamente y lo vi ahí, esperando con una botella en mano, toda su habitación estaba rodeada de velas y la ventana seguía rota.

— Sabía que regresaría, mi niña.

Solo era un desafío más, solo era eso.

— Eres solo un desafío

— ¿Te parezco uno?

Todo a mi alrededor, lucia tan real.

— ¿Cómo te atreviste a dejarme? No lograste irte muy lejos, ¿verdad? Al final volviste

— No volví, esto solo es un reto, un estúpido reto.

— Veo que creciste muy bien. ¿Qué tal, Luke? ¿Él también te termino lastimando?

Invoqué mi espada y fui a atacarlo.

— No menciones su nombre

— Lo hizo - sonrió

Tomo una daga y me araño la mejilla.

— ¿Tú...?

— ¿Creíste que no sabría luchar? Te recuerdo que también fui mestizo y que logré escapar de ese lugar.

Él luchaba mejor que cualquiera del campamento. Muchas veces termine tambaleando, en una de esas deje caer un vela que empezó a incendiar toda la habitación.

— No...

Corrí hacia las escaleras, pero el me alcanzo.

— ¿Creíste que sería tan fácil? - me sostuvo del polo y me levanto - Tu naciste para tener un final trágico, vas morir Adhara y no podrás hacer nada para impedirlo. Tú decides si quieres rendirte o sufrir.

Me soltó y rodé por las escaleras. Me arrastraba por el suelo lleno de vidrios, intentado de escapar de él. Mis manos sangraban y mi ropa empezaba a romperse.

El fuego estaba alcanzando toda la casa, como si le hubiera derramado alcohol a cada lugar. Tenía que salir de ahí.

La puerta estaba a unos pocos metros de mí, podía escapar, podía volver con mis amigos, con mi familia, con Percy... solo tenía que aguantar un poco más.

— No tan rapido, estrellita.

Mi padre me tomo del cabello, obligándome a verlo antes de que pusiera su daga en mi cuello.

— Si vas a matarme, hazlo ahora, idiota

— ¿Y así tratas a tu padre? Malagradecida

— Tú no eres mi padre, eres un monstruo

— ¿Entonces quién lo es? ¿Luke? Él te apuñaló ¿Quiron? ¿Te va a salvar ahora? ¿Quién más es tu maldito padre?

El fuego nos rodeó, ahora solo estábamos él y yo.

— Tal vez no lo sean. Pero eso no significa que seas mi padre, de lo único que ambos estamos seguros es que yo seré la que termine tu caída.

El fuego a mi alrededor empezó a rodearlo.

— ¿Qué estás haciendo?

— Estoy jugando, papá.

Me levante y tome mi espada. Si en algún momento le tenía miedo... eso había terminado. Ambos luchamos... él podría tener más experiencia, pero yo era más poderosa.

Hice un mandoble obligándolo a retroceder hacia el fuego.

— Tuve una maldita como hija

— Tal vez, y yo tuve a un maldito como padre.

Lo empujé y cayó al fuego. Solo oía como gritaba de dolor mientras el fuego lo consumía y terminaba hecho cenizas.

Sin embargo; el fuego no paro, seguía consumiendo toda la casa, ¿por qué no regresaba?

La puerta estaba rodeada de fuego, pero era la única salida. Mientras caminaba hacia ella, el fuego empezaba a consumirme, dolía... Dolía mucho.

Con mi mano, abrí la puerta, y por primera vez estando en esa casa lo hice. Mi mano se quemó a cambio, pero nada de eso importaba en este instante.

Yo regresaría, regresaría y esta vez, no iba a dejarme morir tan fácil.

Salí y todo se volvió blanco por unos segundos...

✧*･ﾟ*

Abrí los ojos y desperté en la enfermería rodeada de flores.

— ¡ADY! - gritó mi hermana al verme despertar - Creí... creí que habías muerto...

— Tranquila, Zami, desde ahora en adelante estaremos bien.

Había asesinado a mi padre, no correríamos ese peligro. Ahora solo tenía que recuperar a Luke...

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Holi, ¿Cómo están?

La conciencia me empezó a afectar, por eso Ady no se va a ir ahora. 

El futuro de Adhara será algo que ni los dioses se esperan.

¿Estamos de acuerdo que el enfrentamiento con su padre fue el inicio de su decadencia a la locura? Mi niña no era así.

No se olviden de votar y comentar que me ayudaría mucho <333