𝟎𝟎𝟖 ┆𝕾𝖎𝖓𝖈𝖊 𝖜𝖍𝖊𝖓 𝖆𝖗𝖊 𝖜𝖊 𝖉𝖆𝖙𝖎𝖓𝖌?
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¿Estaba en un spa? ¿De nuevo?
Ese lugar realmente era inmenso porque por más que trata de buscar a Afrodita no la encontraba, hasta que me toco el hombro.
— ¡Ady! - grito emocionada, abrazándome - Por los dioses, estás horrenda, tenemos que hacerte un tratamiento especial, ¿con qué quieres empezar?
Ahora su cabello era mucho más ondulado y sus ojos definitivamente era como los de Percy. Me sonrojé al notarlo, la diosa del amor tomaba la forma de la persona que queremos ver. Me agarro de la mano llevándome a ¿la piscina de lodo? Pero me solté de su agarre.
— ¿Qué quiere, Afrodita? - le pregunte - ¿Acaso tratará de volver a convencerme de que me aleje de Percy?
— No digas tonterías - rio y me tomo de los hombros - Sabes perfectamente que fue una votación de los dioses y gano la mayoría... pero ahora las cosas son diferentes, tienen mi bendición y por ahora, serás mi protegida
¿Su protegida? Los dioses no solían proteger a cualquier semidiós y menos darles su bendición.
— Primero que todo, yo no sabía el motivo de esa votación ridícula cuando no se deben de meter en la vida de otras personas. Segundo, ¿por qué me va a dar su bendición? Los dioses no dan nada gratis
— Vi tu potencial y quiero enseñarte todo lo que pueda mientras estés bajo mi cuidado - ¿mientras? - Solo que cómo mi protegida tendrás que obedecerme y lo único que te ordeno, es que aproveches tu belleza, es muy fácil de manipular a las personas.
— Gracias por su gran consideración hacia mí, pero... no gracias, paso.
— No puedes rechazar una bendición de un dios - sonríe - Además, con esto volverás a tener un hogar, tus poderes y tus armas
— Bien - suspire
¿Me daba buena espina? NO. Definitivamente no, pero no podía hacer nada más. No puedes rechazar a una diosa.
— Perfecto, seguirás usando ese collar como devoción a mí, ¿es bonito, no? - señalo mi collar - Ese hijo de Poseidón estará babeando cuando te vea
Saltó de la emoción.
✧*・゚*
Si dijera que estar en un spa con Afrodita fue lo peor que me paso en la vida, sería una mentira, fue divertido. Silena me había ensañado algunas cosas de cuidado de la piel, cabello, cremas, maquillaje, etc. Chase se encargaba de enseñarme todo lo de como conquistas a alguien, del amor, era un fan del romance. Pero estar con la diosa de la belleza y el amor era otro nivel. Podrías estar hablando horas con ella de estos temas y siempre aprendería algo nuevo. Trate de preguntarle un poco de mi padre, desde que volvieron algunos recuerdos había cosas que no cuadraban; sin embargo, ella ignoró estas preguntas por completo.
Desperté en el mismo lugar que dormí, y noté como Percy seguía durmiendo mientras me abrazaba. Los rayos de luz iluminaban sus rizos perfectamente definidos. ¿Cómo alguien podía ser tan lindo?
En eso se despertó y me encontró mirándolo.
༉‧₊˚✧
Desde hace rato me había levantado. Me quedaba mirándola y evitando que le llegue la luz, ya que movía su nariz cuando esto pasaba.
Parecía que por fin soñaba con algo bueno porque sonreía dormida, las otras veces que la había visto dormir estaba muy intranquila y lloraba dormida, esta vez... lucia tranquila.
— Percy - susurro mi nombre dormida
¿Había soñado conmigo? Sonreí inconscientemente, ¿tuvo una visión buena donde estábamos los dos juntos o simplemente soñaba conmigo?
Ese estúpido italiano ya hubiera querido eso. ¿Acaso él le dio un beso? No, solo lo hice yo. No el tipo de beso que yo quería, pero era mejor que nada.
En eso noté como empezaba a despertarse y fingí dormir por un tiempo hasta que decidí "levantarte" y la encontré mirándome, ¿tenía algo en la cara?
— Ya despertaste, ojos bonitos, aún babeas cuando duermes - me sonrió.
— ¿Y tú, brujita? Debes tener un defecto mientras duermes como hablar dormida o roncar - le sonreí de vuelta acariciando su mejilla
Obviamente, no tenía ninguno y eso lo sabía perfectamente.
— No que yo sepa, ¿por qué? ¿Te desperté con mis ronquidos?
— No, porque si lo hubieras hecho yo ya te habría callado con la almohada
— No puedo culparte, le hice lo mismo a Chase. Ese molestoso ronca muy fuerte cuando duerme, pero es un buen amigo
— Pensé que era tu mejor amigo
— En realidad, tú eres mi mejor amigo, ojos bonitos
— Y tú eres la mía, brujita
No sabía si quería ser su amigo o algo más, todos esos sentimientos me confundían. Pero estaba seguro de algo, no quería confundirla ni perder su amistad.
— ¿No se te ocurrieron otros apodos aparte de "brujita"? Él mío suena bonito, literalmente es "Ojos bonitos"
Se me ocurrieron varios:
1. Mi estrella
2. La chica de mis sueños
3. La chica más linda que he conocido
4. La futura señora Jackson
A mi mamá le encantaría Adhara.
— En realidad, no - le contesté - Ady te dicen todos, quería que ese apodo sea solo de los dos
— Aww, qué lindo eres Percy
¿Por qué tenía que llamarme por mi nombre?
Ella se sentó y le llegó el sol. Pude notar como su color de cabello le había cambiado, paso de ser castaño claro a ser rubio medio. Era unos tonos más claros y tenía unos reflejos en su cabello. Cualquier herida que había tenido desapareció completamente y sus labios tenían un color más rosado. Sus mejillas seguían siendo igual de rosadas. Ella seguía siendo igual de hermosa que siempre, solo que tuvo unos pequeños cambios que note fácilmente, no es porque había observado cada pequeño detalle.
Lo único diferente en ella era que se sentía como si emitiera un brillo, no como el sol... sino como el de las estrellas. Antes era un brillo muy leve, pero que se notaba, ahora era un brillo que ya no se ocultaba.
Podía mirarla por horas y nunca me cansaría. Era la chica de mis sueños, la chica que me había salvado, la chica que me hacía sentir diferente... era la chica que me empezaba a gustar.
— ¿Por qué me miras con esos ojos? - rio mientras terminaba de amarrarse el pelo
— ¿Qué ojos? - le pregunté, perdiéndome en sus ojos, tan hipnotizantes
— Como un cachorrito o esa mirada, ya sabes la que a veces haces
— ¿Un cachorrito?
— Sí, los perritos son lindos, pero prefiero los gatos. Justo en el Loto estaba yendo con Enzo a ver los gatitos y había miles. Todos eran tan adorables y tiernos.
¿Asique así se llama el desgraciado?
— Si quieres después de todo esto, vamos a adoptar un gato
— ¿En serio? - se emocionó y me abrazo
— Sí
Ambos nos abrazamos y reímos por un tiempo mientras sonaba "Can't Help Falling in Love" de fondo. No sabía en qué momento encendimos la radio.
— Lo siento por interrumpir su luna de miel, pero debemos de ir a comprar algo para comer - interrumpió Annabeth
— ¿Les gusto la música de fondo? - pregunto Grover sonriente
— Voy a comprar la comida - dijo rápidamente mi Ady
— Te acompaño - agregué mientras ella ya salía del carro.
— ¿Debemos dejarlos solos? ¿No se van a besar? - le susurro Grover a Annie - Mira cómo estuvieron teniendo en cuenta que estábamos nosotros
— Ignoraron nuestra existencia, Grover - suspiró, Annabeth - Estarán bien
Los ignoré y acompañé a Ady.
✧*・゚*
Yo me fui a comprar algunas galletas y Percy fue por algunas bebidas. La última vez que fui a comprar, no nos dio tiempo de saber qué productos eran buenos y cuáles no. Pero lo más caro debía ser lo más rico, ¿no?
Mientras agarraba algunas gomitas azules, alguien me toco el hombro.
— ¿Me extrañaste, princesa? - me llamó ¿ENZO?
— Tú - lo fulminé con la mirada - ¿Qué te hice para que me dieras esa pulsera? ¿Qué haces acá?
— No te molestes conmigo, linda. Solo seguía órdenes de los dioses, de dos que conoces muy bien. Era una misión; sin embargo, vine porque si encuentras al amor de tu vida, no lo puedes dejar ir. — me sonrió mientras me acariciaba la mejilla
Yo me alejé rápidamente.
— Lo siento, pero me tengo que ir. Y no me vuelvas a buscar, andas hablando puras estupideces - le respondí yendo a buscar a ojos bonitos para irnos de este lugar.
Ya tenía a mi primer acosador y esperaba que el último.
Había encontrado a Percy junto a otras dos chicas que le coqueteaban. ¿Cómo sabía eso? Porque había visto a mis hermanas haciendo y Chase me había enseñado a hacerlo. El hijo de Poseidón solo les sonreía divertido y mantenía la conversación con las chicas.
Fui hacia ellos y Percy sonrió cuando me vio mientras que la pelirroja y la rubia me miraban mal. ¿A esas qué?
— Hola, disculpa, pero estábamos teniendo una - me sonrió petulante una de esas dos, ¿quiénes se creían?
— Vámonos - le pedí (ordené) a Percy
Él solo me miró confundido.
— ¿Tú eres? - me pregunto la otra
— Yo soy-
— Mi novia. — Sentenció ojos bonitos mientras me sonreía y su brazo me abrazo por los hombros acercándome a él
¿QUÉ DIJO QUE DIJO? ¿QUÉ? ¿DIJO LO QUE YO CREÍ? ¿ESTABA ALUCINANDO? ¿ERA VERDAD? ¿NO CAÍ EN LA LOCURA? ¿ERA REAL? ¿DIJO QUE ERA SU NOVIA? ¿ESTABA SOÑANDO? NO PODÍA ESTAR SOÑANDO... ¿POR QUÉ DIJO ESO?
Traté de disimular lo mejor que pude mi asombro y confusión.
— ¿Ella? ¿En serio? - hizo una mueca la rubia - Yo pensé que venías solo, te iba a invitar a salir - empezó a agarrarlo de la mano
Si realmente era su novia, le había dado sus buenos golpes y aunque no lo era, estaba a punto de hacerlo.
— Sí, ¿y? - alejo él la mano de ella - Gracias por decirme que películas se van a estrenas y donde están los mejores observatorios, pero debemos de irnos
Las dos se quedaron sorprendidas antes de que Percy casi me besara enfrente de ellas. Luego me agarro de la mano y me llevo hacia la caja registradora.
En ese momento pude desmayarme, pero por suerte no lo hice.
— ¿Desde cuándo soy tu novia? - me reí nerviosa
— Tenía que decir algo. No iba a dejar que te trataran mal y no podíamos hacer una escena, porque podría venir la policía.
— No contestaste mi pregunta
— Bueno-
Enzo me separa de Percy y me susurro algo.
— Debes alejarte de él, princesa. Los dioses jamás lo dejarán estar juntos, en cambio, me dejarían estar contigo - me susurro poniendo un mechón de mi cabello detrás de mi oreja - Piénsalo. Si me necesitas solo llámame mientras toques esta pulsera
Me volvió a dar una pulsera rosa, parecía de oro y tenía grabado el nombre de la marca, Dior, ¿esa marca no era cara? No era tan ingenua cómo para caer de nuevo en su juego.
— Te dije que no me volvieras a hablar, mentiroso - le devolví su pulsera
Quise volver a irme, pero él no me dejaba.
— Te dijo que la soltaras, idiota - Percy empujo al chico haciendo que cayera al suelo.
Ojos bonitos sacó su espada y la coloco cerca del cuello de Enzo.
— Avísale a tus dioses, que dejen de meterse o se la tendrán que ver conmigo - sonrió antes de que nos fuéramos
Sabía que los semidioses podían manipular la niebla asique intente cubrir todo el lugar con niebla.
Nos tomamos de la mano y salimos de la escena del "crimen" antes de que alguien llamara a la policía.
— ¿Compraste solo galletas Oreo y dulces azules?
— Sí - sonreí en respuesta
Nos sentamos en unos bancos cerca del lugar mientras abrí unas gomitas de tiburón.
— ¿Cuál es tu color favorito? - me preguntó
— El azul y gris - le contesté apoyando mi cabeza en el hombro de "mi novio"
— ¿Por?
— El azul, mire el color azul tanto en mis sueños que simplemente empezó a gustarme y me recuerda al mar. Cuando estaba en el campamento, en los momentos que me sentía mal o abrumada, iba a la playa y solo miraba el mar.
— ¿Y el gris?
— Me recuerda a la luna y a las estrellas
༉‧₊˚✧
Por unos momentos estuvimos solos los dos, mirando el cielo.
Para mí, Adhara era como una estrella. A la primera impresión para tan lejana, pero te hipnotizaba con su belleza, con su brillo. Era cómo las estrellas que guiaban a los marineros. Pero ahora dejo de ser lejana y está junto a mí, era una estrella caída.
⁂
En el Olimpo, Afrodita estaba observando la bella escena junto al resto de dioses. Habían programado la alarma de "ADHERCY" para que supieran que en ese momento su novela comenzaba.
— Volviste a interferir, ¿no, Dita? - le sonrió el dios del sol a la diosa de la belleza
— Solo felicité a mi protegida, y le di un merecido regalo. No nos solíamos a sentar a ver la vida de dos semidioses desde que Zale y Hester estaban juntos, aunque esa vez sí hubo peleas y llantos y-
Todos se tornaron tensos al momento que Afrodita menciono esos nombres, mencionar el nombre de los dos semidioses estaba prohibido.
— ¿Siempre hablo de más, no? - le susurro Afrodita a Apolo
— Sí - contesto este serio
Todos vieron como la diosa de la caza se fue furiosa. Apolo siguió a su hermana.
— Sé que Afrodita fue imprudente al mencionar su nombre, pero no te puedes poner así siempre que alguien la menciona. — la confronto - Ella ya murió hace mucho, hermana.
— Lo sé - contesto la diosa - Y no quiero que vuelva a morir en esta vida. Le prometí que haría todo lo que sea posible para que no muera por ese idiota.
— No puedes cambiar su destino. No pudiste evitar que se enamoren y no vas a poder evitar su destino. — suspiro el Dios - ¿Tu no crees que yo quisiera cambiar su destino? No eres la única que la extraña
— Sabes que aún puedo hacer algo
— No te atreverías. Le ocultamos quién es, su destino, su profecía, su historia, que paso con sus padres. Es solo una niña que no sabe a lo que está destinada, ella no es Hester.
— Eres mi hermano, fuiste su padre y sobre todo, estarás de mi lado. Cuando llegue al campamento le dirán una parte de la profecía. Lo que necesitamos que sepa.
El dios de las profecías, la miro atónito
— No puedes decirle su profecía.
— Le diré lo que yo quiera. Ya le dije a Quiron y a Dionisio. Esta vez, Perseo no me arrebatará, no de nuevo.
Los dos hermanos miraron las estrellas, ambos supieron en ese momento que la historia de esos dos semidioses iba a seguir su destino desde ese momento, su felicidad y tranquilidad les duraría poco, porque nadie puede evitar el destino, ni los mismos dioses. Y eso es algo que Artemisa no podía aceptar.
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Holi, ¿Cómo están?
Espero que les haya gustado <33
VIVA EL ADHERCY
Pronto sabremos más de Adhara y su destino.
No se olviden de votar y comentar que me ayudaría mucho <333
PDT: Enzo se ve como una combinación entre Lorenzo Zurzolo y Enzo Vogrincic.
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