NINE.
★. celoso ⭑ ⋆

Lydia se encontraba en la sala de los Baker, estaba leyendo un libro cuando oyó la puerta de entrada ser abierta y unos pasos dirigirse a donde ella estaba. Así que, levantó su cabeza y su mirada se encontró con la de Cameron.

Lydia le sonrió, al igual que Cameron a ella.

—Pensé que ya te habías ido —le dijo Lydia, una vez que el chico se sentó a su lado.

Cameron negó con la cabeza. —Quería verte.

—¿A si? —el chico asintió —y se podría saber, ¿para qué?

—Bueno... quería saber, ¿si tienes algo que hacer mañana?

—¿Mañana? No, ¿por qué?

—Uh —Cameron se rascó su nuca nervioso —¿Quisieras tener una cita conmigo?

Lydia lo miró sorprendida, ya que realmente no se esperaba eso. Si, se coqueteaban mutuamente, pero jamás llegaron a algo más que simples coqueteos, así que, el que la invitara a salir si la sorprendió.

—Una cita como amigos claro, no tiene que ser algo romántico y tampoco tienes que decir que si, no es una obligación —hablo rápidamente Cameron al ver que Lydia se quedaba callada.

Lydia le dio una sonrisa dulce. —Claro que quiero tener una cita contigo Cam.

Cameron sonrió al instante. —¿Te parece bien si paso por ti a las 5:00?

Lydia asintió con una pequeña sonrisa.

—Me parece bien.

Cameron se levantó de donde estaba sentado, al igual que Lydia.

—Entonces, hasta mañana Miri.

Lydia se acercó a él y le dio un beso en la mejilla, al separarse le dio una sonrisa, que fue devuelta por él.

—Hasta mañana Cam.

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Ya era viernes por la tarde y Lydia se encontraba terminando de arreglarse mientras esperaba a Cameron.

Se vio por ultima vez en el espejo, traía un vestido camisola con parte delantera drapeada y hombros anudados, de color blanco. De joyería traía una cadenita con un dije de un sol, unas pulseras de cadena y unos pendientes de aro abierto, todo de oro. Mientras de calzado traía unos tacones de punta abierta con tacón pequeño.

Tomo su bolso y pertenencias, cuando escucho a alguien tocar el timbre, ya sabía que era Cameron.

Bajó hacia la primera planta y vio a sus tíos abrir la puerta y saludando al recién llegado.

Lydia llegó hasta ellos, llamando la atención de los tres, en ese momento Cameron fijó su vista en ella, la miró de arriba hacia abajo, para él se veía hermosa.

—¿Nos vamos? —le preguntó Lydia a Cameron.

—Claro —dirigió su vista a los tíos de ella
—no se preocupen, la cuidaré muy bien.

Los tíos de Lydia le dieron una sonrisa, para después ambos jóvenes salir de la casa y dirigirse hacia el carro del chico.

—Que linda te ves —hablo Cameron, al abrirle la puerta del carro.

—Tú no te quedas atrás. —contestó de la misma manera Lydia, con una sonrisa.

El camino hacia el restaurante fue de risas y de coqueteos por parte de ambos.

Hasta que llegaron a su cita, se dirigieron hacia la entrada del restaurante que Cameron había reservado. Ellos se situaron en una mesa, Lydia miraba a su alrededor con admiración, amaba el lugar.

—Este lugar es muy lindo —dijo Lydia volteando a ver a Cameron —¿Ya habías venido aquí?

—Sí —soltó una pequeña risa —el dueño es mi hermano.

—¿En serio? —Cameron solo asintió —entonces la comida a de estar muy buena.

Cameron solo asintió soltando una risa, ellos empezaron hablar sobre algunas cosas de sus vidas, riendo y divirtiéndose.

Una vez llegó la comida se dispusieron a comerla mientras platicaban un poco. Una vez que terminaron, pidieron el postre. Y mientras esperaban, Cameron agarró la mano de Lydia, haciendo que ella pusiera toda su atención en él.

—Quiero decirte algo.

—¿Qué me quieres decir?

—Yo sé que llevamos poco tiempo en conocernos, pero desde que nos conocimos, te me hiciste una persona muy linda y te has vuelto para mi alguien especial. Yo quería pedirte que si me puedes dar una oportunidad.

Lydia lo miró, no quería lastimarlo, pero tampoco iba a mentirle.

—Cameron es que yo...

—No tienes que decírmelo ahora, puedes pensarlo si quieres...

—No —Lydia suspiro, antes de confesar le todo —Cameron eres una persona maravillosa, yo te quiero mucho, te has vuelto una persona muy especial para mí, en serio...

—¿Pero? —le preguntó mirándola fijamente.

—Pero no puedo fijarme en otros chicos, cuando tengo a alguien metido en mi corazón, aunque me haya lastimado sigue ahí —dijo Lydia pensando en un chico pelinegro de ojos azules —lo siento, no te mereces que te lastime.

Cameron solo asintió con una mueca.

—Lo siento —volvió hablar Lydia, cuando vio que Cameron estaba callado.

—No tienes porque disculparte, esta bien, fuiste honesta y es mejor que me lo hayas dicho ahorita, en vez de después —dijo
Cameron con una sonrisa para calmarla
—el chico, es Charlie, el hijo del entrenador, ¿cierto?

Lydia bajo la mirada, viendo su plato solo.

—Sí, es él —dijo Lydia viéndolo —aunque no quisiera, no puedo evitarlo. Te aseguro que si él no estuviera ahí, tú lo estarías.

Cameron le dio una sonrisa, para luego tomarle la mano y darle un suave apretón.

—Lydia, no se que haya pasado entre ustedes dos, pero me di cuenta que él siente algo por ti.

—No lo creo.

—¿Como qué no? He visto como te mira, le gustas muchísimo. Además, cada que nos mira juntos pareciera que me quiere matar, se pone celoso.

—No lo sé Cam, me hizo mucho daño.

Cameron se quedó callado, pensando en cómo ayudarla, pero después se acordó de algo.

—Eh visto el cómo intenta acercarse a ti, solo que tu siempre huyes o lo evitas
—Lydia hizo una mueca —empieza por aceptar hablar con él, que te explique el porqué de sus acciones.

Lydia le dio una pequeña sonrisa. —Es cierto, lo haré.

—Prométeme que cuando lo veas o cuando el intente otra vez hablar contigo, lo vas a escuchar.

—Lo prometo —dijo Lydia con una sonrisa.

—Bien y si se vuelve a portar como un idiota, aquí estaré yo para que te desahogues o para que te olvides de ese.

Lydia soltó una pequeña risa divertida, mientras Cameron sonreía y le guiñaba el ojo en forma de coqueteo.

Al final Lydia se había conseguido una buena amistad con Cameron. Y puede que esa amistad se vuelva aún más unida.

━━ ♡ ♡ ♡ ━━

Lydia ya había llegado a su casa, pero en vez de entrar a la suya, se dirigió hacia la de los Baker, para ver un poco a los niños. Porque en todo el día no los vio por estar ocupada con lo de la cita, aparte su hermano le dijo que los niños se habían peleado hoy en la escuela y que Tom los había castigado a todos.

Cuando entró a la casa, vio a todos en el comedor, los niños al verla corrieron hacia ella abrazándola. Lydia soltó una risa mientras los abrazaba.

—Lydia te extrañamos.

—Yo también los extrañé niños —les dijo viéndolos con una sonrisa.

—¿Porque estás arreglada? —le preguntó Sarah que la miró que venía muy arreglada.

Lydia miró de reojo que Charlie estaba mirándola y escuchando lo que decían.

—Es porque...

—¿Tendrás una cita? —preguntaron las gemelas Kim y Jessica al unísono.

—Más bien, ya la tuve —soltó una risa nerviosa —acabo de volver de ella.

Charlie tenía sus manos hechas puño y su ceño estaba fruncido, ¿qué si estaba celoso? Claro que estaba celoso, porque sabía con quién fue esa cita.

No podía evitar el pensar en que si Lydia podía llegar a sentir cosas por Cameron. El que haya funcionado esa cita o el imaginar a Cameron besándola, le daba tanta rabia. Porque no quería a nadie besando esos labios que el primero besó. Aquellos labios suaves y rosados, que desde que los besó no quería parar de hacerlo.

Charlie sabía que si llegara a pasar algo entre Lydia y Cameron, no podía hacer nada, pues él fue el único que tuvo la culpa de que Lydia ya no quisiera hablar con él.

Porque sabía que la lastimó y todo por idiota. Porque no pudo saber que sentía por ella, hasta que le dijo que todo lo que pasaron fue un error. Fue hasta ese día que se dio cuenta lo que realmente sentía por ella.

Pero parece que ya es demasiado tarde.

—¿Con quién? —preguntó Sarah.

—Con Cameron —respondió con una pequeña sonrisa.

—¿El que está en el equipo de futbol de papá? —preguntó Jake con el ceño fruncido.

Lydia asintió con la cabeza. —Sí, ese.

—¿Son novios? —preguntó Mark.

—No, no somos novios.

—Pero, ¿te gusta? —preguntó Henry.

—A ver, esto parece un interrogatorio
—soltó una risa nerviosa.

—Queremos saber —dijo Kim.

—Además, como nuestra amiga, tenemos que ver si es bueno para ti —dijo Jessica.

Lydia soltó una risa. —Los quiero mucho.

—Nosotros también —dijeron todos al unísono.

Lorraine caminó hacia ella emocionada.

—Vamos a mi habitación, quiero saberlo todo —le dijo emocionada, jalándola de la mano hacia las escaleras, para irse a la habitación de la rubia.

Una vez ahí Lydia le contó todo lo que pasó hoy en su cita, sin saltarse nada. Mientras Lorraine la escuchaba atentamente.

—Es una lástima que no sientas lo mismo por él. Se ve que es un buen chico —le dijo Lorraine una vez que la castaña terminara de contar lo de su cita.

Lydia soltó un suspiro. —Lo sé, pero no puedo hacerme la tonta cuando tu hermano está todo el día en mi cabeza.

Lorraine le dio una sonrisa triste. Se acercó a ella, abrazándola.

—Aunque en algo Cameron tiene razón —le dijo mirándola a los ojos —deberías darle la oportunidad a Charlie de hablar contigo y que te explique las cosas.

—Lo haré... pero todavía no estoy lista para hacerlo.

Se quedaron un rato más platicando hasta que la castaña se despidió de la rubia para irse a su casa.

¡Últimos Capítulos!

Como son los últimos capítulos quisiera llegar a una meta de votos en estos capítulos.

70 votos para actualización.

Capítulo dedicado a Natalia_potter66 espero que te haya gustado linda <3

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Los quiero estrellitas ☆