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Contenido +18
(Hybrid AU!, ligero Bondage)

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🔞 Quinto gemido~
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Ya por fin podía ir a su hogar.

Su nuevo trabajo lo estaba agotando un poco debido a los últimos derechos que se trataban de implementar para los híbridos.

Conseguir que la gente de dinero dejara ir a "sus mascotas" era extremadamente difícil y lo era aún más encontrar un juez con poder suficiente que no se dejara sobornar por el dinero y que si le importaran los hechos.

Pero no se rendiría, esos jóvenes y niños eran inocentes, ellos no pidieron ser creados y no se merecían ser maltratados y abusados por hombres que creían estar por encima de todo.

Cuando su carrera concluyó no dudo en hacer la especialización para entrar en la nueva división para la defensa de los derechos de los híbridos, está poco a poco estaba tomando poder y esperaba que pronto las cosas mejorara aun mas.

Su paso era tranquilo y algo pesado, se encontraba totalmente sumido en sus pensamientos, pero a unos cuantos pasos de la salida un fuerte ruido lo detuvo.

Volteó y observo como uno de sus superiores y algunos guardias formaban un semicírculo cerca de la recepción.

Con su curiosidad a flote se acercó hasta que pudo ver lo que pasaba.

Un chico, al parecer, menor de veinte años se encontraba hincado en el suelo con un extintor entre sus manos. El chico era un híbrido de gato, sus orejas y su cola de un tono arenoso dorado se agitaban constantemente y sus ojos verdes miraban fijamente a su superior Yoongi.

Se colocó detrás del mayor y con un toque en el hombro llamó su atención, queriendo informarse de lo que sucedía.

— Yoongi-sunbaenim, ¿qué ocurre? — Su voz fue un susurro pero aun así sabía que él híbrido lo podía oír, pues sus orejitas apuntaron en su dirección.

— Hola Namjoon, lo que pasa es que el pequeño Taehyung no puede confiar en los humanos al parecer. Acaba de ser rescatado, pero cuando lo dirigíamos a los dormitorios con los demás se quiso escapar. Los guardias lograron acorralarlo pero como no querían dañarlo no lo obligaron a moverse ni lo cargaron. Acabo de llegar y quise acercarme pero tomó el extintor.

Probablemente el golpe que antes escuchó era aquel objeto cayendo debido a que los delgados brazos no lo pudieron sostener. Aquel lindo chico lo sostenía como si su vida dependiera de ello enterneciendo su corazón ante tal imagen.

— ¿De donde fue rescatado?

— De la mansión del CEO de las industrias Jwa, tenía ocho híbridos bajo su poder, todos entre los diecisiete y veinte años, al parecer no los vendía para entretenimiento, los mantenía para el mismo.

Su estómago se revolvió ante lo dicho por el mayor. El abuso sexual y el físico eran lo único que esos pequeños conocían desde que nacieron, era obvio que no creyeran fácilmente en los humanos.

— Crees que pueda hablar con él sunbaenim.

— Suerte con ello, creo que no puede hablar, desde que fue rescatado ha permanecido callado, solo sabemos su nombre porque otro de sus compañeros nos lo dijo, probablemente tampoco te entienda, no importa que le digamos no responde.

Dio un paso un poco más cerca del híbrido de gato y se puso sobre sus rodillas, ya que él era alto y no quería intimidarlo. Los verdes ojos siguieron cada uno de sus movimientos con miedo reflejado en ellos pero también curiosidad.

— Hola Taehyung, mi nombre es Namjoon. Me gustaría hablar contigo, pero no se si me entiendes, crees que puedas mover tu cabeza para decir si entiendes las palabras.

Los ojos verdes dejaron de verlo unos segundos para ver hacia las personas que se hallaban alrededor antes de mover lentamente la cabeza afirmando.

— Genial, al parecer yo le caigo mal — refunfuño a sus espaldas él pelirrojo.

— Tengo un amigo llamado Hoseok que es un híbrido como tu. — Con la mano detrás de su espalda le indicó a Yoongi que mandaran a llamar a quien mencionó. Rápidamente un guardia salió corriendo. — Él también fue rescatado y ahora vive aquí, ¿te gustaría conocerlo?

Nuevamente asintió, pero esta vez con un poco más de energía.

— Sabes — sabia que tenia que seguir la platica para evitar que el chico buscará una oportunidad de escapar —, él quiere ser un doctor, quiere aprender a curar a la gente y también híbridos, nosotros le estamos ayudando para que pueda serlo, nosotros queremos que la gente con tus características y las de Hoseok puedan encontrar algo que quieran ser y vivan felices. Aquí no serás obligado a pelear, aquí te cuidaremos, nos encargaremos de darte educación para que tu tomes tus propias decisiones.

Los nudillos de las manos del menor empezaron a recuperar color cuando dejó de ejercer fuerza contra el objeto que sostenía.

El elevador se escuchó en el silencio que se había formado y el guardia de antes junto a un híbrido de labrador se dirigían a ellos.

— Mira Taehyung, él es Hoseok. — El mencionado sonrió amablemente y se arrodillo a un lado de él para mirar al híbrido de gato. — Él fue rescatado al igual que tu y lleva viviendo dos años en libertad, ¿te gustaría platicar con él?

Otra vez menor asintió y todos empezaron a alejarse, dándoles privacidad pero manteniéndose cerca en caso de que quisiera volver a huir. Durante algunos minutos observo como ambos intercambiaban palabras, al parecer si podía hablar, solo que todavía no confiaba en los humanos.

Con una seña de mano Hoseok les pidió que se acercaran a él y a Yoongi. Se ubicaron a unos cuantos pasos de distancia para no incomodar al menor pero cerca como para poder tener una platica sin tener que alzar la voz.

— Taehyung si quiere estudiar, pero él no quiere vivir aquí, dice que el lugar es muy grande y le da miedo, dijo que quería vivir conmigo, pero yo vivo contigo Yoongi.

— ¿Entonces? Por mi no hay problema de llevarlo a vivir con nosotros Seok pero yo no puedo darme el lujo de trabajar desde casa y tu tienes casi todo el día ocupado estudiando, no lo podemos mantener vigilado.

— Lo se. De todos modos no podemos llevarlo porque él te tiene miedo — Realizó una pequeña pausa mientras reía un poco viendo la cara enojada de su novio —. Pero no es necesario, dijo que le agrada Namjoon, así que yo sugiero, que le des el trabajo en casa a Nam y que él se lleve a Tae a su casa, por lo menos hasta que pierda un poco el miedo a convivir con los humanos.

Sus ojos se abrieron con sorpresa, pues creía que era una pésima idea, el apenas y podía cuidar de sí mismo, pero la afirmación de Yoongi mientras decía que confiaba en él no le permitió decir nada más.

Ahora tendría a un híbrido viviendo en su pequeño departamento.

Abrió la puerta de entrada y con una sonrisa invito a pasar al delgado chico híbrido que entró mirando todo con curiosidad.

Dejó sus cosas en el mueble junto a la puerta y respiró profundamente.

No podría ser tan difícil.

¿Cierto?

— Ven Taehyung te mostraré tu cuarto.

Su departamento era pequeño, solo tenía un baño, dos recamaras donde apenas cabía una cama y muy pocos muebles, la sala y la cocina solo eran separados por una barra que usaba como mesa para comer, porque no alcanzaba el espacio una mesa con sillas incluidas.

Abrió la última puerta del pasillo donde normalmente se quedaba su hermana menor cuando lo visitaba y se adentro en la habitación con el rubio siguiéndolo de cerca.

— Mira esta va a ser tu cama, aquí guardaremos la ropa que vayamos comprando para ti, y también te compraremos una lámpara para que puedas poner en la mesita de noche, ¿esta bien?

— ¿No tengo.. que dormir en el piso?

Era la primera vez que escuchaba la voz del más bajo y quedó totalmente impresionado, contrario a su apariencia delicada, su voz era ronca y gruesa, era muy agradable de escuchar.

— No Tae, esa cama es para ti.

— ¿Dónde dormirá usted?

— Mi habitación está al lado de esta, es la puerta que está enseguida.

— ¿No me obligara a dormir con usted?

Su sangre se heló. Al parecer la información de Yoongi estaba mal, sintió los ácidos gástricos queriendo subir por su garganta, pero se contuvo un poco, primero tenía que explicarle al menor.

Se acercó a la cama individual y se sentó cerca de la orilla del colchón.

— Taehyung ahora nadie te puede obligar a nada, te tenemos que poner reglas por el momento, pero te aseguro que ninguna de ellas buscará hacerte daño, solo buscaremos que puedas valerte por ti mismo.

— Entonces, los días que mi cuerpo se siente raro, puedo decirle a usted que me ayude, ¿no tengo que ir con ningún otro señor?

Le tomó unos segundos comprender aquellas palabras.

¿Acaso se estaba refiriendo al celo? ¿No le habían explicado lo que era su celo?

— S-sí puedes elegir con quien.. pero tenemos pastillas que te pueden ayudar si no quieres pasar tu celo con nadie.

— No, yo quiero quiero estar con usted.

La determinación en esas palabras hicieron que su boca se secara, estaba muy claro que tenía que decirle que no era correcto, que primero tenía que tratar de hacerse una idea de cómo eran las cosas, pero esas palabras no fueron las que salieron de su boca.

— Cla-claro.

Cuidar de un híbrido de gato que era realmente hermoso y que al parecer ya no temía decir las cosas que quería, iba a ser mucho más complicado de lo que pensaba.

Bueno cuidarlo no, más bien resistirse a tan hermoso ser.

La junta fue un trabajo enorme, pero al menos ya estaba en marcha su nueva iniciativa para ayudar a los híbridos.

Sus hombros, sus piernas y prácticamente todo su cuerpo dolía después de dos noches seguidas sin poder dormir decentemente, solo tres horas cada día para poder tener lista la propuesta, pero había valido la pena.

Entró a su departamento, el cual estaba en completa calma.

Eso era extraño, normalmente un feliz Taehyung ya estaría recibiéndolo y restregando su olor en él, pero por lo que podía ver no se encontraba ni en el sofá ni en la cocina.

Después de casi un año de relación con su pequeño híbrido se había acostumbrado completamente a aquella rutina, pues el mitad-gato odiaba cuando llegaba con olores de diferentes personas e híbridos.

Ya habían pasado dos años desde la primera vez que Taehyung fue a vivir con él a su casa y le ayudó a adaptarse poco a poco a su nueva vida, pero cuando lo quisieron llevar de regreso a la sede su rubio gatito lloro desconsoladamente pidiendo quedarse con él y no podía negar que también le dolía el separarse.

Así que lo que vino a su mente en ese momento fue decir que Taehyung ahora era su novio y que él quería que siguiera viviendo en su departamento.

Su hermoso chico se soltó de los brazos de Yoongi y corrió directamente hacia él abrazándose a su torso e intentando calmarse, no se arrepentía en lo absoluto de sus palabras.

Su relación solo mejoró desde ese día, su gatito era realmente tierno pero como demostró el día que se conocieron, sabía decir que es lo que quería y ya no se dejaba intimidar por nadie. Ahora ayudaba en la sede para que los nuevos híbridos rescatados se adaptaran, pero salía mucho antes que él para poder llegar a su curso de fotografía y finalmente cuando él llegaba a casa su novio ya lo estaba esperando y la puerta abierta le informaba que él ya estaba en casa.

Camino hacia la habitación convencido de que su pequeño estaria dormido plácidamente pero aunque sí se encontraba en la cama recostado, dormir no era lo que hacía.

Se encontraba bocarriba con los ojos cerrados, mejillas sonrosadas y labios entreabiertos de donde salían leves y casi inaudibles gemidos, una de sus piernas estaba doblada hacia arriba y ambas manos se perdían dentro del pantalón de chándal verde. La punta de su cola se meneaba insistentemente  totalmente extendida sobre el colchón y sus orejitas se inclinaban levemente hacia adelante.

El movimiento de las manos empezó a aumentar debajo de la tela y ahora los maullidos salían del fondo de la garganta combinados con jadeos.

Con el mayor silencio posible se acercó a la cama y se quedó de pie a un lado de ella viendo como el semen salía disparado al abdomen manchando la camisa blanca que le vio ponerse esa mañana y la piel que se encontraba expuesta debido a unos cuantos botones desabrochados.

Cuando sus ojos se abrieron y ese impresionante color verde se mostró ambos conectaron miradas, las manos del rubio salieron rápidamente y en un ágil movimiento se encontraba en medio de la cama sentado sobre sus talones y tratando de eliminar los restos de semen con la manga de la camisa.

— Namjoonie no escuche cuando llegaste.

— Claro que no precioso — Levantó un poco la barbilla contraria con sus dedos, lo suficiente para poder dejar un leve roce en esos bonitos labios cuando se inclinó —, estabas muy ocupado.

— ¿T-te ayudo con tu corbata?

Con una sonrisa de lado se puso con la espalda recta nuevamente.

— Claro.

Dejó que los largos dedos tomaran la tela y empezaran a soltar el agarre alrededor de su cuello.

La corbata fue dejada a un lado de las esbeltas piernas mientras los primeros botones de su camisa eran desabrochados hasta que los traviesos dedos tuvieron espacio para colarse por debajo de la tela masajeando levemente sus hombros y terminando en su nuca.

— Bonito, se que tu celo es dentro de un mes, así que me gustaría saber porque estabas tan desesperado por correrte.

El híbrido empezó a morder su labio inferior mientras sus cola se agitaba detrás de él.

— Es que Namie ha estado ocupado las últimas dos semanas y yo quería que me tocara, pero no me hacía caso.

— Así que mi gatito quiere mimos, pero yo estaba muy ocupado.

Tomó varios mechones de cabello sin lastimarlo y lo jalo levemente hasta que su largo y delgado cuello quedó expuesto ante él.

Una de sus clavículas quedaba a la vista debido a la grande camiseta y la piel color caramelo lucía realmente apetitosa ante su hambrientamirada.

Pasó su lengua muy lentamente desde el delgado hueso que sobresalía hasta delinear un poco la mandíbula dejando un camino húmedo que se encargó de repasar otras dos veces más.

— Mmm.. Namjoonie~.. meow~..

Sabia cuanto le excitaba a su pequeño que lo acicalaran, por ello repitió el proceso exponiendo su otro hombro para finalmente tomar los delgados labios entre los suyos en un beso hambriento.

Aprovechando la distracción del menor tomó la corbata abandonada y llevó las manos de éste hacia atrás para sujetarlas firmemente a su espalda.

Después de algunos meses de tener relaciones, Namjoon noto cuánto le gustaba a su híbrido ser sujetado de las manos, ya sea atado, con esposas o con sus propias manos y debía de admitir que el estado vulnerable en cómo lucía lo ponía completamente duro.

Cuando sus manos se aseguraron de que el nudo no se deshacía fácilmente, una de ellas la introdujo debajo de la ropa interior de su lindo gatito notando el encaje de las bragas que tanto le gustaban usar e inicio suaves movimientos sobre el miembro semierecto.

El movimiento lo detuvo una vez que el pene se encontraba totalmente excitado y soltando algunas gotas de presemen.

— Mi lindo gatito, iré a ducharme rápido, quédate aquí y sé bueno, no te vayas a tocar, ¿entendiste?

— Mgh.. no.. por favor ya quiero correrme~

Ignoro las palabras del pequeño y entro al baño quitando rápidamente las ropas de su cuerpo, obviamente él estaba igual o peor que su pequeño, pero quería que creyera que lo dejaría ahí un poco de tiempo.

El se metió rápidamente debajo del chorro de agua sin dejar que esta se calentara, de todas maneras el agua fría no podría bajar la punzante erección que tenía por la imagen del fascinante cuerpo de Taehyung.

Salió unos pocos minutos después pensando que ya no podría esperar más para estar dentro de su novio. Pasó una toalla secando el exceso de agua de su cuerpo y salió con solo está alrededor de su cintura.

El híbrido se encontraba en el piso de espalda a la puerta del baño y con ambos brazos ahora frente a él tratando de deshacer el nudo de la corbata con sus dientes, totalmente sonrojado y con sus orejas nuevamente inclinadas hacia delante.

— Parece que cierto gatito travieso sabe aprovechar bien su flexibilidad. — Los dientes soltaron la tela y la cabeza giró para observarlo. — Veamos que tan bien la utilizas en la cama cariño.

— Joonie~ por favor.. quiero correrme..

Con cuidado lo cargó y lo depositó en medio de la cama mientras se dedicaba a retirar la prenda que cubría sus esbeltas y perfectas piernas largas.

El encaje negro que portaba se amoldaba perfectamente a sus anchas caderas y la punta de su erección sobresalía tentándolo terriblemente.

Subió al colchón tirando la toalla a un lado y abrió un poco el arco de las piernas color caramelo para situarse en medio de ellas, una de sus manos acariciaba la piel del abdomen mientras la otra se colaba por la espalda del contrario para llegar a esa entradita que soltaba chorros de lubricante natural.

Su boca salivaba por lamer ese bonito pene de punta rojiza y completamente hinchado. Bajando un poco la ropa interior, se dedicó a lamer y delinear el miembro palpitante mientras dos de sus dedos se aventuraban a entrar en la estrechez de su gatito.

— Mgh~... estoy listo... por favor~.. entra-meow~

Los ruegos de Taehyung se volvían más intensos al igual que los espasmos que estaban atravesando su cuerpo.

Rompió el encaje completamente sintiéndose impaciente por sentir a su pequeño, tomó las piernas sosteniéndolas por debajo de las rodillas y las abrió hasta que estas estaban tocando el colchón cada una a la par de sus hombros.

Amaba la flexibilidad que poseía ese delgado cuerpo, pues su entrada se exhibía completamente toda húmeda y boqueando por ser llenada.

Su erecto miembro se adentro siendo recibido cálidamente y con espasmos deliciosos en las paredes anales.

Sus embistes fueron rápidos desde el principio pues los juegos previos habían durado lo suficiente para tenerlos a los dos al borde de la desesperación.

Entraba y salía sintiendo claramente como cada centímetro era devorado fácilmente por esa codiciosa entrada, su pequeño se encontraba tan apretado y húmedo haciendo que se diera cuenta de cuánto había extrañado estar dentro de él durante esas dos semanas.

Con su mano derecha tomó los brazos que seguían unidos por la corbata y los llevó por encima de la cabeza de adorables orejitas, aprovechando la nueva inclinación para arremeter más fuertemente.

— Ahhh... ahi~... Joonie~ meow~

— Me aprietas tan bien mi hermoso gatito... eres tan cálido.

— Mmmgh~ meow~

Sus gemidos iban en aumento y eso le indicaba que estaba muy cerca de terminar, sin saber de donde saco mas fuerzas volvió a aumentar un poco más el ritmo creando un fuerte sonido cuando su pelvis se encontraba con las abultadas caderas del rubio, probablemente se le crearían algunos moretones pero en ese momento no parecía importarle y menos cuando se corrió nuevamente soltando el más fuerte de sus maullidos.

Siguió moviendo sus caderas un poco más hasta que por fin dejó salir toda su semilla dentro de Taehyung, pero fue tanta que empezó a salir aun cuando él seguía dentro de su novio.

— Te corriste mucho Joonie.

— Yo también estuve dos semanas sin extrañándote mi gatito, mi pene está feliz de estar dentro de ti.

La larga cola se enredó en su pierna desnuda y las tiernas orejitas seguían inclinadas, su pequeño seguía excitado.

— Parece que nos extrañamos tanto que una vez no será suficiente.

La cabecita rubia negó varias veces con una sonrisa que pretendía ser inocente, pero que él sabía que estaba llena de deseo.

Beso los labios de su novio con pasión y empezó a mecer sus caderas buscando despertar por completo su nueva semierección.

Nunca era suficiente una sola vez con su gatito que gemía tan bien su nombre.

Capítulo publicado el día:
20 de Septiembre del 2020

Editado el día:
13 de Noviembre del 2020