๑ Maratón 2/3 ๑

Jungkook se quedó parado enfrente de la habitación, intentando regular su respiración.

Su mano temblorosa se dirigió a la puerta, abriendo lentamente y entrando.

Taehyung elevó la mirada, sonriendo grande para Jungkook mientras en sus brazos protegía con tanto amor al pequeño que se había vuelto su mundo entero.

—Ven —lo llamó.

Jungkook caminó lento y a tropiezos, mirándolo sin ninguna expresión que delatara el temor que sentía al saber que ahora era padre. Porque, aunque le haya dicho a Taehyung que el bebé sería su responsabilidad, no podía negar su paternidad, ese bebé llevaba su sangre.

—Está hambriento y... ¡Estoy tan feliz, Jungkook! —sonrió, lágrimas llenas de felicidad corriendo por sus mejillas.

Bajó lentamente la cobija que cubría al pequeño, Jungkook lo miró. Este estaba rojo y aferrado al pecho izquierdo de Taehyung, succionando tanto como podía.

Pudo mirar su rostro de perfil, su piel perlada y algunos mechones de cabello oscuro y corto.

Respiró hondo, intentando tomar aire y calmar el dolor en su pecho que le causaba la ansiedad.

—Se que tienes miedo y que no quieres estar aquí, yo... Lo respeto, ahora entiendo un poco más de ti y no quiero hacerte sentir presionado con todo esto... Solo... Gracias por traerme hasta aquí.

—No. No agradezcas nada, Taehyung... —intentó respirar.

La mano de Taehyung tomó la de Jungkook, este le miró con ojos muy asustados.

—No hay nada que temer, Jungkook... Tú no eres y nunca serás como él. Mírame e imítame.

Taehyung respiró hondo, soltando poco después, luchando contra el pequeño cosquilleo en su vientre.

Jungkook lo siguió, lentamente pensando en otra cosa, dejando el miedo atrás.

El doncel le miró alegre, asistiendo para él.

—Así está mejor.

Jungkook soltó el aire, agradeciendo mentalmente a Taehyung por entenderlo y ayudarlo cuando fue un verdadero hijo de puta con él.

El pequeño soltó el pezón derecho para comenzar a removerse en el pecho de papi y buscar más calor que le otorgaban sus brazos a su cuerpo desnudo, cubierto solamente por un pañal, antes de que las enfermeras llegaran por él para terminar de limpiarlo y ponerlo presentable para todas las personas que esperaban afuera para conocerlo.

Jungkook miró todo en silencio, apartando la mirada cuando el pecho desnudo de Taehyung quedó descubierto.

A ciegas logró llegar hasta la bata que lo cubría para esconder sus pechos y regresar la mirada. Tal vez Taehyung pudiera sentirse incómodo si notaba que estuvo todo el rato con los pechos al aire.

—Oh, no lo noté, gracias —sus mejillas estaban rojitas.

Jungkook nunca miró su cuerpo cambiar durante el embarazo, tampoco notó sus pechos crecer. Le apenaba, ellos no se habían visto desnudos desde hace unos largos meses y estaba seguro que Jungkook no había visto a un doncel embarazado al desnudo. Bueno, Taehyung fue la primera vez.

—¿Ya sabes como le llamarás? —preguntó, intentando cubrir sus mejillas calientes.

Taehyung lo miró de igual forma, pero pronto miró al pequeño para que Jungkook no notara su sonrojo.

—Pensé en muchos nombres pero no logró decidirme... ¿Quisieras ayudarme a elegir uno? —preguntó.

Jungkook lo pensó, pero al final asintió.

—Tengo muchas opciones, escucha atentamente —aclaró su garganta, regresando la mirada al pequeño que dormía cómodamente en su pecho—. Primero pensé en Yeonjun, también en Taejung y en Soobin, pero los tres son tan bonitos que no logro decidirme —hizo puchero, mirando a Jungkook ahora.

Este lentamente se acercó, lo suficiente para mirar nuevamente a la pequeña bolita de piel arrugada y roja. Lo observó por algunos segundos para regresar a su postura inicial y mirar a Taehyung.

—Taejung le queda bien, él tiene cara de Taejung.

Taehyung rio un poquito, regresando la mirada al pequeño.

—Tienes razón, él tiene cara de Taejung. Muchas gracias, Jungkook.

Este solo pudo sonreír levemente.

Taehyung estuvo por decir algo pero llamaron a la puerta, después entraron dos enfermeras por el pequeño Taejung.

—Papás, en un momento su pequeño regresará, es hora de ponerlo más guapo y hacerle algunos últimos exámenes para regresarlo y que toda su familia pase a conocerlo ¿De acuerdo? —la mujer les sonrió.

Taehyung asintió alegre, pero un poco triste porque no quería que se llevaran al pequeño.

—Está bien, solo tráiganlo pronto, por favor —pidió.

Ambas enfermeras rieron con ternura, asistiendo para Taehyung antes de lentamente tomar al pequeño de su pecho y retirarse.

—No quiero ponerte de malas pero mis padres y Yugyeom están afuera.

—No quiero que Yugyeom se acerque a mi bebé, si lo hace me levantaré de esta cama y no me dirigiré a él con la intención de dialogar —dijo entre dientes.

Jungkook rio, ese Taehyung le caía muy bien.

—Y no lo hará, yo me encargo de que no se acerque a él o a ti.

—Gracias Jungkook.

Fue lo último que dijo para acomodar su bata de Hospital y llevar sus manos a su vientre. Sí, ya no estaba su bebé ahí pero se había hecho costumbre.

[💔]

Taehyung elevó la mirada y sonrió tan grande, estirando sus brazos en cuanto las enfermeras regresaron con el pequeño. Se lo entregaron con mucho cuidado, una de ellas lo ayudó a bajar la bata del Hospital para colocar la boca del bebé donde comenzó a succionar con gusto.

—Es un bebé muy comelón —rio alegre.

—¿En algún momento puedo quedarme sin leche? —preguntó con preocupación.

—Tranquilo, papá —sonrió—. Los padres primerizos siempre preguntan estas cosas y no, seguirás produciendo leche por unos largos meses, mientras el bebé vaya creciendo y dejando de amamantar, tu cuerpo comenzará a producir menos hasta que ya no tengas nada de leche y tus pechos regresarán a la normalidad.

—¿Eso no es doloroso para él? —Jungkook preguntó.

La enfermera lo miró alegre, sonriendo ante el hombre preocupado por su esposo.

—Lo será si no se cuida correctamente, además, tiene que aprender a acomodar al pequeño correctamente cada que lo amamante, mientras siga todas esas indicaciones, podrá llevar unos lindos meses amamantando al pequeño sin dolor. Usted puede ayudarlo de vez en cuando, puede darle masajes con aceite antes del baño, le puede hacer baños con agua tibia y llenarlo de amor, de mucho amor, esta es una nueva etapa en sus vidas y es la más hermosa para unos padres primerizos como ustedes.

Jungkook apartó la mirada. Taehyung intentó sonreír y rápidamente cambió el tema.

Ellos no eran una pareja feliz y alegre, Jungkook nunca haría nada de eso, de hecho, ni siquiera lo ayudaría con el bebé y estaba bien, solo... Era demasiada información.

Las enfermeras se despidieron nuevamente, avisando que dentro de algunos minutos darían indicación de que los familiares podían pasar.

—Eso fue incómodo... —soltó, sin mirar a Jungkook, solo al pequeño bebé.

—Necesito salir de aquí, no es por ti, no es por el bebé....

—Puedes irte cuando quieras, Dahyun o alguno de los chicos se quedará, además, Hoseok vendrá seguido a cuidarme y prometió quedarse conmigo en las madrugadas cuando haga sus vigilancias nocturnas.

—No me agrada mucho...

—Ya que lo mencionas, me gustaría saber por qué te cae tan mal, Hoseok es tan bueno, además, fue mi amiguito de la infancia... Simplemente no entiendo.

—Ni yo lo sé... Es solo que lo miro y tengo tantas ganas de golpearlo.

—¿Por qué?

—En cuanto lo sepa te diré —dijo con sarcasmo.

Taehyung rio un poco, mirando a Jungkook.

—Han sido unos meses difíciles para ambos, pero sabes... No me arrepiento de haberme entregado a ti, debido a eso ahora soy padre y estoy tan feliz —Taehyung parecía brillar, vaya que Jungkook lo notaba.

Pareciera que desde que el bebé nació, todo en Taehyung cambió, ya no se veía triste, ya no se veía cansado, era todo lo contrario.

Ese bebé había llegado para darle un motivo para ser feliz a pesar de las adversidades.

¡Hola!

¿Qué les pareció?

Capítulo 2 del maratón, listo ✔️

El pequeñito ya nació, qué felicidad 🥺💜

Nos leemos ahora ➡️

¡Adiós!