
Hoja #14
06 de mayo 2022.
Luego de varios años de terapia y vivir medicado para evitar las pesadillas, encontré el diario. No recordaba haber escrito nada de esto, pero me di cuenta de que jamás, en ningún momento, me disculpé con Rogers.
Él, quien jamás debió disculparse por nada, lo hizo.
Y, aunque, aprendí a vivir a sin culparme por la muerte de Rogers, debía disculparme.
"Él tomó su decisión" afirmó mi terapeuta, pero fui yo quien lo orilló a tomar esa decisión. No podía disculparme con sus padres porque ellos se mudaron a la semana siguiente del suceso y tampoco puedo ir a su tumba porque incineraron sus restos y esparcieron sus cenizas en el río que pasaba debajo de aquel puente donde solíamos juntarnos, el puente que jamás pude volver a ver sin sentir ganas de llorar.
Así que, Ángel Rogers, lo lamento tanto por todo. Siempre, quien estuvo equivocado, fui yo, pero me negaba a creerlo y te hice daño. Tampoco llegué a decirte que te quise muchísimo y, a raíz de eso, también te dañé. Y todo fue mi culpa, tu sufrimiento y tu decisión. Y, aunque, ahora no me creas, te amé y lo sigo haciendo por alguna razón.
Perdóname por pensar que eras falso frente a mí cuando era todo lo contrario; tú eras tú cuando estabas conmigo y fingías ante el resto. Eso también me enseñó mi terapeuta, sí, el mismo que alguna vez insulté.
Y, posiblemente, esto no repare en nada del daño que te causé y tú ni siquiera querrías perdonarme, te agradezco por, aunque haya sido un tiempo corto, haber estado presente en mi vida. Y jamás me perdonaré a mí mismo por todo lo malo que te hice.
Solo espero que, sin importar donde te encuentres, sigas siendo el ángel que siempre fuiste.
Y al que perdí por mi propia estupidez.
Extrañamente, mientras escribo esto, puedo ver el puente desde el árbol donde amaste leer, y estoy llorando y no por el puente, sino porque puedo verte parado en él, despidiéndote de mí.
"Te amo".
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro