𝐷𝑜𝑐𝑒.
—Vamos, ¿seguirás enojada conmigo? — le pregunté mientras le daba una tierna mirada y hacía un lindo puchero.
Me dio una mirada asesina y volvió a girarse indignada. Me acerqué de manera cautelosa, ya que me estaba dando la espalda y la abracé. Pude notar como su cuerpo se tensó, para luego relajarse. Pero aún así no volteó.
—Juro que no volveré a colocarme celoso de nadie más, lo juro — extendí mi palma dejándola abierta, como signo de juramento. Poco a poco comenzó a voltear y al tenerla frente a mí, con esos ojos tan lindos que tiene, me dan ganas de abrazarla y no soltarla más. Llevé mi mano hasta su frente y comencé a estirarla, para dejara de tener esas arrugas justo ahí, por verme mal. Cuando estaba molesta siempre hacía eso. — es solo que... se notó como el tipo tenía otras intenciones contigo y yo... yo no lo pude evitar. Lo siento — confesé avergonzado. No solía actuar así.
Pero ver como el tal Jimin no dejaba de mirar a Iseul y quería estar en todo momento pegada a ella, mis instintos primitivos salieron a la luz sin yo quererlo y actúe de manera errática.
Y quizás... traté muy mal al chico.
—Le dijiste que dejara de comerme con la mirada y quitara esa cara de estúpido, Jungkook — chilló, golpeando mi brazo. Siseé de dolor solo para molestarla.
—Era una mirada lasciva, sin duda alguna — me defendí aunque no tuviera excusa alguna. Suspiré rendido. — tienes razón, no debí hacer eso. Si tú no estabas incómoda, no debí tratarlo mal. Pero ya, ¿me puedes dejar de hacer sufrir y perdonarme? quiero un abrazo — rogué.
Si Taehyung y Yoongi me vieran en la situación que estoy, sin dudas tendrían material para burlarse por los próximos cinco años.
—Está bien — se encogió de hombros y me dio un apretado abrazo el cual gustoso le devolví, enrollando mis brazos en su cintura. —¿Te quedarás a dormir? — preguntó una vez se separó de mi anatomía.
Me he quedado algunas veces a dormir, pero nunca ha pasado algo más allá — más que muchos besos — así que no era algo loco cuando lo hacía. Me gustaba dormir con ella. Sentía que podía dormir tranquilo y por arte de magia las pesadillas que tenía desaparecían.
Era algo increíble.
—Debo arreglar un asunto bonita. Te espero mañana para llevarte al trabajo, tú conductor siempre estará ahí para ti — le guiñé un ojo y le deposité un beso en la comisura de sus labios.
—Está bien. Nos vemos mañana.
Pensé que no haría nada más, pero siempre me termina sorprendiendo.
Tomó mi rostro entre sus manos y estampó sus labios junto a los míos. Me costó seguirle el ritmo, pero cuando pude hacerlo, todo desapareció a mi alrededor. Solo existía ella y yo en este preciso momento. Sus labios son tan suaves que te provocan una adicción y siempre querías más.
Mucho más.
Me separé primero, si seguía tenía claro que no podría irme. Pero debía tener una conversación con Areum.
—Porqué me haces esto — lloriqueé, uniendo mi frente con la suya — me debo ir y tú no me la haces fácil Han Iseul. Tienes poder sobre mí, considérate afortunada.
—Que bueno saber eso, veré que mas puedo hacer con mi poder — dijo de manera aduladora. Sonreí.
—Eso lo veremos — le dije para darle un último beso y salir de su casa por fin, porque si me quedaba un minuto más, no me hubiera podido ir.
Wow, esto era tan irreal. Entré al vehículo y camino a casa no pude evitar pensar en el primer momento que vi a Iseul.
Desde el primer momento que la vi llamó absolutamente mi atención. Con su mirada triste, sus ojos humedecidos por aguantar el llanto y aún en esa situación la encontré preciosa. Por eso quise entablar una conversación y me pareció una mujer muy interesante.
No voy a mentir... si me sentí mal al escucharla decir que tenía novio y tampoco podía mentir al decir que pasaba a propósito cada mañana solo para encontrarme con ella. Y fue lo mejor que pude haber hecho.
Una sonrisa tonta se dibujó en mis labios. Pero de manera efímera se borró al ver como Areum estaba en la puerta de la casa esperándome.
Bajé lentamente del auto y caminé a paso lento hasta la entrada.
—¿Dónde estabas?
Enarqué una ceja. El tono que había utilizado no me gustó en absoluto.
—¿Por qué haces esto Areum? — pregunté de manera cansada. Tomé mi cabeza y desordené todo mi cabello por la frustración que sentía en este momento. — ¿Por qué ahora estás actuando de esta manera?
—¿Podemos hablar dentro por favor?
La miré unos segundos y asentí.
Areum caminó hasta la sala de estar y se sentó en el sofá. Golpeteo el cojín del lado para que me fuera a sentar junto a ella.
—¿Me vas a decir por qué estás actuando tan extraño? — inquirí una vez me senté — no lo entiendo. Nuestra relación siempre ha sido de amigos, ¿por qué siento que eso cambió?
—Porque lo hizo Jungkook — enfatizó cada palabra. La miré dudoso — tú... tú no entiendes lo que siento...
—Y que es lo que sientes, si no lo dices por supuesto que no puedo entender — le respondí de manera obvia, apoyándome en el respaldo del sofá.
—Ese día que me besaste... — solo con escuchar aquello, mi cuerpo se tensó. No quería hablar de ese tema — yo te dije que nunca más lo volvieras a hacer, que estaba saliendo con un chico y que yo te veía solamente como un amigo...
Claro que recordaba ese día. No le confesé lo que sentía, pero a mi parecer hice algo peor que fue el besarla y ser rechazado de manera instantánea. Después de unas horas me excusé al decirle que había bebido de más y que no volvería a ocurrir, quedando como los buenos amigos que siempre hemos sido.
—Si y yo te dije que había sido un error porque bebí mucho — respondí mirando fijamente el cuadro que estaba en la pared — ¿a que quieres llegar?
—Jungkook, yo... yo no te correspondí porque tenía miedo — giré mi rostro y la observé. Areum siempre ha sido bella, pero desde que conocí a Iseul, siento que ya nadie se le puede comparar. — yo siempre he estado enamorada de ti y y-yo, yo nunca supe como expresarlo. Me asusté y te dije todas esas cosas. Cuando confirmaste que había sido un error, sentí que todo se derrumbó dentro de mí. Y ahora... — su voz se quebró al final de la oración — ahora sé que estás conociendo a alguien... y duele, duele bastante.
Me quedé mudo ante su confesión y no pude articular palabra alguna. Esto era irrisorio, ¿estaré soñando?.
—Deja las bromas, Areum — respondí nervioso, pero sonriendo para que no se notara. Pero cuando la vi taparse el rostro y sollozar de la manera mas desgarradora posible, comprendí todo a la perfección. — no estás bromeando...
—No lo estoy — levantó su rostro, dejando ver su lado mas vulnerable, una cara que nunca había visto en los cinco años que llevamos viviendo juntos. Su cara más indefensa — y mierda, me arrepiento de no haber dicho nada. La sola idea de verte con otra hace que mi estómago se revuelque de la cólera.
—Areum... yo... — carraspeé levemente. De pronto sentía que la voz se me había ido — yo... agradezco que tuvieras el valor de confesar algo de esta magnitud — no sabía que mierda estaba haciendo, pero mi vómito verbal no se detendría. — efectivamente estoy conociendo a alguien y estoy feliz. — al decir aquello su llanto cesó y su mirada cambió — yo... yo si tuve sentimientos por ti, pero eso cambió cuando conocí a Iseul. Lo que sentía por ti no se compara a lo que siento por ella. — di un respiro — perdón por decirte aquellas cosas, pero creo que debes entender y también respetar mis sentimientos — dije de la manera mas cautelosa posible.
La mueca de disgusto fue evidente, como también su cambio de actitud. Hace unos minutos atrás estaba llorando de la manera mas triste posible y ahora ya no había rastro de aquello... solo su gélida mirada.
Un escalofrío recorrió cada vértebra.
—Está bien... yo... yo entiendo. Me demoré en confesar... solo... s-solo olvida lo que dije, ¿sí? Nada de esto sucedió — se puso de pie y fue casi corriendo hasta su habitación.
Analicé la situación.
Mi lado ingenuo y cegado hubiera ido corriendo a su lado al enterarme que sentía cosas por mí... pero ese lado ya no existía.
Si siempre estuvo enamorada de mí, ¿por qué traer chicos a la casa? ¿Por qué besar a otros frente a mí? No entendía absolutamente nada y toda esta mierda me estaba causando una jaqueca horrible.
Mi celular vibró, lo saqué del bolsillo de mi jeans y sonreí al ver que Iseul me había mandando un mensaje de buenas noches... si, sin duda Iseul era la chica que quería a mi lado.
Tendría que contarle sobre Areum y espero que logre entenderme.
Esto sería difícil.
Ysi, volví a publicar capítulo. Como será una historia corta, se acerca el drama 😈🤌🏻 eh jajajaja
Capítulos reveladores, no se lo pierdan ah hacia propaganda JAHSJAJ las amo xau 💝.
≫≫≫≫≫
Que escribía capítulos cortos dios disculpen KAJSKS gracias por el apoyo que le están brindando a la historia 🫶🏻.
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