— Gracias otra vez por acompañarme — repitió una vez más su amigo beta que los miraba a Jimin y a él con ojos de cachorro.

— No tienes porque agradecernos Taetae, tu mamá merece una buena bienvenida.

— Además, así con nosotros juntos me podré asegurar de que estemos perfectos  y a tiempo para la fiesta de Jin-hyung.

— Minie si tu nos supervisas, es seguro de que estemos perfectos pero te juro que nunca estaremos a tiempo.— Se burló ganándose un puchero de su lindo y bajito amigo.

— Es cierto Minie-hyung, hoy duramos como cinco horas en el salón solo porque tú les estabas dando instrucciones especificas a los estilistas, los pobres terminaron super agotados de seguirte.

— Pero se ven fantásticos, tú con ese color rojo quedaste super seductor y guapo y Hobi-hyung me tendrá que agradecer cuando Namjoon-hyung se lo lleve a la cama en cuanto vea su cabello pelirrojo con ese permanente que le ondula el cabello.

Bueno su menor tenía razón en algo, Taehyung se miraba completamente fantástico con ese color rojo intenso, pero él aún estaba nervioso sobre la reacción de su novio, aunque pensar en la opción que había planteado Jimin lo tenía con el sonrojo escalando por su cara.

— Y tu ahora pasaste de ser un tierno y rosado mochi para ser un sensual mochi de cabello plateado — añadió buscando desviar la atención de él.

Su plática continuó durante unos minutos más mientras los tres esperaban sentados en las bancas de esa estación de autobuses. Cuando las grandes pantallas anunciaron la llegada del que ellos estaban esperando rápidamente se levantaron a la espera de que los pasajeros empezaran a  bajar.

Él y Jimin no podrían ayudar a Taehyung en la búsqueda de su madre, pues no la conocían así que dejaron que fuera el beta quien desesperado estiraba el cuello para buscar a quien tanto esperaba.

Cuando una mujer de complexión delgada, cabello pore encima de los hombros y castaño, piel color caramelo y rostro hermoso salió, ellos la identificaron en automático como la madre de su amigo sin siquiera saberlo a ciencia cierta.

Eran parecidos y miraba a su hijo con amor desbordando de sus grandes ojos. Rápidamente quedaron asombrados con esa sonrisa simétrica tan conocida para ellos pero viéndola en el rostro de alguien a quien veían por primera vez.

— Oh por la diosa luna, yo sabia que tenia un hermoso bebe, pero tu eres un hermoso hombre.

Con lágrimas ya saliendo de su rostro su amigo fue a abrazarse de la mujer que extendía sus brazos para acunarlo entre ellos.

— Te extrañe tanto mamá.

— Y yo a ti, mi vida. — El momento se alargó un momento en que ellos miraban enternecidos la escena con grandes sonrisas en sus rostros. — Si hubiera sabido que hay tantos rostros hermosos en la capital hubiera venido mucho antes — dijo la mayor cuando se separó de su hijo y los volteo a ver a ellos —. Déjenme adivinar, tu eres Hoseok, porque me ha dicho mi hijo tiene un bonito cabello pelirrojo y un cuerpo envidiable y tu entonces eres Jimin, porque tiene unas mejillas apretables y una sonrisa de ojos que te mata de ternura.

— ¡Mamá!

Todos rieron de la vergüenza que se instaló en el rostro de su amigo, tan potente que hizo que casi se viera del mismo tono que su cabello. Tal y como les pasó con Taehyung, congeniaron rápidamente con la madre de él, ambos tenían un carácter similar y sus anécdotas sobre todo lo que había hecho el pequeño Tae los mantuvieron a él y a Jimin riendo y a su amigo beta sonrojado durante todo el camino.

Les costó un poco de trabajo el convencerla para que asistiera con ellos a casa de Namjoon para celebrar a Jin y presentarla con los demás, pero finalmente lo lograron luego de varias caritas de cachorro y pucheros por parte de los tres.

Ahora solo les faltaba terminar de alistarse y por fin después de todo un día separado de su Namjoon, podría volver a estar entre esos brazos que tanto le gustaban.

Cálido.

Ahora si concordaba con el pensamiento de su omega, los brazos de Namjoon son lo mejor y más cálido del mundo.

Eran su lugar seguro.

Su sala de estar ya se encontraba llena de gente.

Su madre y padre platicaban con los de Jimin, los que trabajaban con ellos en el restaurante ya se encontraban esparcidos entre la sala y la cocina conversando entre ellos y él esperaba junto con Jungkook a que Jin y Yoongi dignaranan a aparecer después de haber salido desde temprano en la mañana.

No podía mentir, el trabajo de calmar a un pelinegro alfa que no tenía ni idea de dónde se había metido su omega era un trabajo totalmente difícil. Si no lo había golpeado y salido en la busca de Yoongi se debía probablemente al hecho de que se encontraba seguro con Jin o a que por medio del lazo lo estaban tranquilizando, pero eso no quitaba el hecho de que el menor cada quince minutos miraba el reloj que portaba siempre en la muñeca.

— Kookie cálmate, hasta yo puedo sentir tu aroma. Ellos están bien. Jin-hyung es fuerte y se encargará de cuidar a Yoongi-hyung.

— Lo sé Nam-hyung, es solo que es la primera vez que Yoongi-hyung sale de mi vista tanto tiempo desde que su hermano vino a Seúl. Aunque yo esté en el trabajo siempre hablo con él por mensaje y siempre se donde esta, pero hoy ni siquiera hemos hablado desde el desayuno. — Un puchero se formó en el alfa mientras nuevamente miraba la hora. — Hyung, ¿tú tampoco sabes dónde está Hobi-hyung?

— Yo si se donde está Hobi-hyung, él, Jimin y Tae fueron al salón y después iban a arreglarse en casa de uno de ellos.

— Wow ¿tanto tiempo para ir al salón? — preguntó un sorprendido pelinegro con sus grandes ojos más abiertos.

— Así es, después de todo Minie se asegurará que todo quede tal y como él quiere.

— Pobres de los trabajadores.

Siguieron hablando de varias cosas incluido el trabajo del menor y los minutos transcurrieron con su tarea de distraer al alfa siendo totalmente exitosa. Él si sabía dónde estaba Yoongi y Jin, habían ido al mismo salón que su novio y sus amigos. El bajito Jimin había hablado con ellos un día antes para decirles que ya había apartado las citas, pero su amigo dijo que lo mantuviera en secreto de Jungkook. La verdadera razón no la sabía, pero tal vez su pálido amigo quería sorprender a su novio.

— Oh. — Con un tierno gesto como si estuviera olfateando el aire, el pelinegro detuvo su plática. — Ya llegaron Hobi-hyung, Jiminie y Taetae.

Volteo a ver hacia la puerta de entrada y unos cuantos segundos después, tal y como había dicho Jungkook entró su novio y sus dos amigos. El olfato del pelinegro sin duda era increíble, pero lo que lo dejó sin palabras fue lo bonito que se veía su novio con su cabello ondulado y vestido completamente de blanco.

Dios es un ángel.

— No puede ser, es la señora Kim.

La voz sorprendida del alfa a su lado lo hizo fijarse en algo más que la tímida sonrisa que se instaló en el rostro de su omega para fijarse a un lado de él. Una mujer joven estaba con ellos y aunque no hubiera escuchado lo que dijo anteriormente Jungkook, rápidamente habría deducido que se trataba de algún familiar de Taehyung, eran demasiado parecidos.

El nuevo grupo que entró en su hogar se dirigió directamente con ellos saludando en el corto camino a las personas que se toparon y haciendo las presentaciones que correspondían. Cuando finalmente estaban frente a ellos, el menor a su costado se abrazó al cuerpo de la madre de Taehyung en un agarre apretado.

— Kookie, me alegra tanto verte. Te has puesto tan guapo. Donde consiguen tantos amigos apuestos.

— Señora Kim, ¿cuándo llegó? ¿Por qué no me dijo nada?

— Perdón Kookie, pero lo planeé con Tae de un momento a otro y decidimos que fuera sorpresa para ti.

— Pero se quedará en Seúl, ¿cierto?

— Así es. Pero ya tendremos tiempo para hablar de ello y de muchas más cosas, ahora presentenme a este alto y guapo beta con tan bonita sonrisa.

— Madre, por favor. — Aunque el tono que uso Taehyung era de regaño la sonrisa en su rostro quitaba validez a su supuesto enojo, sea como se él ya se encontraba totalmente apenado por las palabras de la mujer. — El es Namjoon-hyung, es el novio de Hobi-hyung.

Su bonito omega se abrazó a su lado derecho mientras él saludaba a la beta con una inclinacion.

Cuando la plática inició entre sus amigos alejo un poco a su pelirrojo. Abrazó el cuerpo del más bajo y se acercó al oído para poder hablarle.

— Te ves tan, tan bonito mi Hobi.

— ¿Si te gusta?

— Me encanta, cualquier cosa que te pongas se te ve increíble. Aunque tal vez sería mejor que mañana no uses nada en lo absoluto, asi sera mas facil que te haga el amor.

Sintió como su mayor se alejaba un poco para poder verlo a los ojos. — El celo normalmente varía algunos días. ¿Cómo sabes la fecha exacta?

— Lo se porque mi Bonito-hyung un día antes empieza a frotarse y a dejar su olor en mi.

— ¿En serio lo hago?

— Si y me encanta cuando lo haces. Lo haces de manera tan inconsciente y te ves tierno.

La cara sonrojada de su omega se enterró en su pecho. — Eres un tonto, como hablas de mi celo cuando estamos todos reunidos.

— ¿Qué tiene eso de malo mi Hobi? — Pregunto divertido.

— Que ahora estaré pensando en eso durante toda la noche.

Con una sonrisa en su rostro besó el lado lateral del cuello de su novio, escuchando como un suspiro escapaba de esos finos labios.

— Mi bonito, eso sería muy malo porque hoy me di cuenta de que Jungkook puede oler bastante bien, los olfateó desde antes de que entraran y aun por encima de todos los aromas que hay en este momento. — Su ropa fue arrugada entre los puños del avergonzado omega que casi se fundía contra su torso. — Yo lo podría distraer con algunas historias penosas de Yoongi, pero corro riesgo de ser asesinado por mi amigo.

— Si, sobrevives te prometo recompensarte bien por ser mi héroe.

— Ese me parece un trato excelente. Ahora donde dejaron a Yoongi-hyung.

— Creímos que ya estaría aquí. Nos separamos para ir por la mamá de Tae, pero por lo que escuche Jin-hyung lo quería obligar a usar ropa que hyung no usaría, probablemente estén tardando por ello.

— O porque Yoongi-hyung está escondiendo el cadáver de Jin-hyung.

— Eso me parece más probable.

Las risas de ambos se detuvieron cuando por la puerta entraron sus amigos viéndose totalmente atractivos como siempre.

A unos cuantos paso Taehyung y su madre se burlaban de unos muy embobados Jungkook y Jimin y a su alrededor la mayoría se quedó en silencio al saber de la nueva unión que su pálido amigo portaba en su cuello descubierto. Aunque ya casi todos sabían que había algo entre Yoongi y su amigo pelinegro, pocos sabían que era una marca lo que compartían.

Era la primera vez que el mayor mostraba la marca a todos sus conocidos y él no pudo sentirse más orgulloso de la oportunidad que se estaba dando su mayor para ser feliz, era muy valiente para enfrentar las propias determinaciones que se implantó durante años para poder entregarse aun con varios miedos atormentándolos.

Ahora solo quería que el asunto de Jin, Jimin y Minjae se resolviera, de ser posible de la mejor manera posible. Solo le quedaba confiar en que el pensamiento que rondaba en su cabeza desde que platico con el menor de los hermanos Kim se hiciera realidad, si era así, era posible que todo se solucionara rápidamente.

S

e que el capítulo no hizo avanzar nada la historia, pero quería que algunos capítulos fueran tranquilos antes de empezar nuevamente con el drama 😅

Para recompensarlxs les dejo las imágenes de sus nuevos colores de cabello y en caso de Hobi de su cabello ondulado.

Nos leemos en el siguiente capítulo ♡.♡

I PURPLE YOU 💜