Solo se aseguraría de que estuviera vivo y ya.

Namjoon se había vuelto bastante amigo de Jimin, pasaban algunas tardes hablando en el trabajo porque lo que hacían era un poco parecido, o eso creía porque en realidad no entendía la mayoría de lo que hablaban cuando estaban juntos.

Así que ver a Namjoon tan triste esos dos días en el trabajo por lo que le había sucedido a Jimin no era extraño. A todos les había afectado de alguna manera la noticia de lo que estaba pasando el tierno gamma.

Pero no saber absolutamente nada del beta durante un día, ya era preocupante.

Su habitación estaba mas cerca al ascensor, y no es que hubiera estado pegado a ella todo el día, solo por casualidad se dio cuenta de que Namjoon no había salido en ningún momento de su habitación. ¡Y ni siquiera había pedido servicio a la habitación!

Si no salió a comer, no pidió comida y no sabía cocinar, ¿no estaba enfermo, muy deprimido o algo así?

Su conciencia no le permitía no hacer nada. Jungkook estaría triste si perdiera a un amigo, aunque fuera alguien tan molesto como Namjoon. Y también Hye-jin y el señor Kim también estarían tristes.

Golpeó la puerta tres veces y esperó… por cinco segundos antes de volver a golpear.

Maldición, pareciera que estoy impaciente. ¡Pero claro que no lo estoy!

Golpeó de nuevo, esta vez más fuerte porque alguien se estaba demorando demasiado.

— Mierda, Hoseok, ¿tanto te urge verme?

— Pues estas bien… y tan idiota y mal educado como siempre. — Empujó con fuerza la bolsa de comida que había pedido antes para ese grandísimo tonto beta, se aseguró de golpear el pecho del más alto. — Ten, asegúrate de comer.

Era obvio que el tonto beta estaba bien. Regresaría a su habitación y se enojaría consigo mismo por haberse preocupado por nada.

O ese era el plan.

— No vas a huir, Hoseok.

El brazo que rodeó su cintura lo apretó con fuerza. En solo unos segundos su espalda estaba recibiendo el calor del cuerpo de Namjoon. El ligero aroma de las castañas y el trigo llegó a su nariz con más fuerza, quizás porque Namjoon había estado a solas por todo un día y su aroma no se había mezclado con ningún otro, o quizás lo que percibía era la esencia del menor saliendo por la puerta abierta.

O solo te has vuelto más consciente de todo lo relacionado con Namjoon, tonto enamorado.

— Su-Suéltame tonto.

Trato de empujar el brazo que lo rodeaba pero Namjoon mantenía un firme agarre.

— Entra un momento, vamos a hablar.

Definitivamente no se estremeció por esa voz baja que hablo contra su oído.

— N-No pienso entrar ahí… — Maldición, no estaba admitiendo que podría solo ceder si estaban solas… pero era exactamente lo que iba a ocurrir y no podía permitirlo, seguía enojado. — Aún recuerdo como estaba tu oficina en Busan, no pienso entrar a un lugar así de desordenado.

Wow, esa es la peor excusa que se te pudo ocurrir, Jung Hoseok. Por qué no solo cerramos la boca en este momento.

— Oh eso… — Se desconcertó por la risa divertida de Namjoon, incluso giro su cabeza con una ceja alzada olvidando por un segundo que se supone que tenía que tratar de irse. — En realidad lo hice a propósito. — Alzó aún más su ceja esperando una explicación. — Si Jungkook estaba fuera, significaba que irías a mi oficina y quería molestarte un poco. Incluso le pedí ayuda a mis compañeros y ese día me dieron algunas de las envolturas de comida que iban a tirar. Tu cara valió totalmente la pena.

Namjoon volvió a reír, como si le acabarán de contar el chiste más gracioso.

— Eres un idiota.

— Si, lo admito, eso fue un increíble plan. — El brazo a su alrededor se soltó pero su huida se vio interrumpida por el Cuerpo grande del menos frente a él. — Ahora, vamos a entrar.

Comenzó a ser empujado hacia adentro de aquella habitación. Lo único que alcanzo a hacer, fue tomar el marco de la puerta para no entrar por completo.

— ¿Estas sordo? — Miró mal al más alto. — Te dije que no entraría.

— No te estoy preguntando.

La voz de Namjoon fue tan seria y tan baja que se estremeció como si la temperatura hubiera descendido unos segundos. Y no tuvo mucho tiempo para recuperarse de ese tono serio cuando el mismo brazo que antes había rodeado su cintura, rodeó sus piernas, justo debajo de su trasero. Solo alcanzo a gritar y sostenerse de los hombros de Namjoon cuando este lo elevó y camino más adentro después de cerrar la puerta.

Aún después de que Namjoon lo bajó en el centro de la habitación, estaba sin habla. Aunque puede que se debiera a esa mano cerca de su trasero y no por la manera en que había sido cargado con tanta facilidad.

— Eres pesado, casi te dejo caer.

Bueno, Namjoon no hace fácil que deje de estar molesto con él.

— Tu eres el idiota que me cargo de esa manera.

— No me dejaste opciones. Te estabas sosteniendo del marco de la puerta como si te intentarán secuestrar.

— ¡Pues esto es prácticamente un secuestro!

— Eres tan exagerado.

Namjoon rodó los ojos pero había una sonrisa marcando sus hoyuelos.

El más alto dejo la bolsa con comida sobre una, sorprendentemente, ordenada mesita y volvió a pararse frente a él, a unos pocos pasos de distancia.

Debió de aprovechar cuando el menor le dio la espalda, pero en realidad solo se había quedado quieto, viendo como la alta figura de Namjoon se movía.

La ropa color negro le queda bien, fue en lu único que pudo pensar, así que huir ni siquiera firmo parte de sus pensamientos.

— Escucha  lamento lo que dije esa vez. — La voz de Namjoon volvía a ser sería, al igual que esos ojos que ni le quitaban la mirada de encima. — Es que parecía que ibas a decir que si y solo… lo dije.

— Lo dijiste porque parecía que iba a responder que si? — Bueno, ahora se sentía mas molesto. — ¿Entonces querías que dijera que no? ¿Fue una broma?

— No bromeaba cuando te pregunte si querías ser mi novio, Hoseok. — Un sonoro suspiro fue el único ruido por algunos segundos. — Supongo que yo solo… tenia que sabotearlo de alguna una manera. Pero no lo hice de manera consciente.

— ¿Por qué fue entonces?

Su voz se quebró en la última palabra., había mantenido su rostro serio, pero no podía pretender que no le importaba

— Dijiste que mi papá te contó como murió mi mamá y lo que pasó después. — Solo asintió, no quería que su voz lo delatara de nuevo. — Yo creí que supere todo cuando volvimos a ser una familia, incluso después me tomé el tiempo de comenzar una relación con un omega… Pero yo simplemente no puedo olvidar. No me queda duda alguna de que mis padres se amaban, vi lo destrozado que quedó mi papá por ello, al punto de olvidarse de sus hijos, de Hye-jin quien era quien más lo necesitaba en ese momento… — Tonto, tú también lo necesitabas aunque no lo quieras admitir. — Me gustas, Hoseok. — Com9 si esas palabras no fueran suficientes para alterar su corazón, Namjoon sonrió mostrando encantadoramente sus hoyuelos. — De hecho me gustaste desde que Jungkook nos presentó. — Y ahora ya se podía despedir de su calma, porque su rostro ya debía de estar completamente rojo, sus pulmones estaban trabajando a mayor velocidad y su corazón no dejaba de volverse loco en su pecho y solo lo hacia más con cada uno de esos lentos paso que en menor daba dejándolos cada vez más cerca. — No creo que tengas ni idea de lo deslumbrante que eres, Hoseok. Por supuesto que me sentí atraído por ti. Pero después comenzaste a contar tus sueños de una familia, una pareja a la cual amaras mucho… y yo di marcha atrás. No tenía duda alguna de que yo podía caer tan fuerte por ti como mi padre lo estaba de mi mamá… y eso me asustó. Cuando estaba a tu alrededor, había dos preguntas que no dejaban de rondar en mi mente. ¿Estarías bien conmigo aunque no fuera una opción tener hijos entre nosotros, con lo mucho que querías una familia? — Aun con un par de pasos distanciándolos, Namjoon alcanzo sus manos y las sostuvo. — ¿Y si te amaba tan fuerte como se amaban mis padres y te perdía?... Esta era la que resonaba con más fuerza.

Namjoon finalmente se acercó por completo. Manos grandes dejaron un ligero apretón y después fueron a su cintura para acercarlo hasta que estaban firmemente pegados.

Se sintió nervioso de repente, estar así después de todas esas sinceras palabras que le dijo el menor y bajo esa atenta mirada sólo lo hizo querer huir.

Intentó alejarse un poco empujando el pecho de Namjoon, pero sus palmas se encontraron con algo que lo detuvo.

Su latido… esta tan rápido como el mío.

A Namjoon realmente le debió costar el sincerarse, pero lo estaba haciendo. Frente a él, para que entendiera el porque detrás de las palabras que dos semanas atrás lo hirieron y molestaron tanto.

Y quizás no podía sentir ese miedo al nivel de Namjoon, pero lo entendía.

— Esos miedos los puede tener cualquiera, en menor o mayor escala, pero entiendo lo mucho que pueden retenerte a ti por lo que tuviste que vivir. Yo no puedo quitarte esas incertidumbres, Namjoon… — Su mano subió a la mejilla del menor, pretendía acariciar un poco con su pulgar debajo de ese ojo que lucía un poco rojizo, pero el más alto buscó su toque con ansias, se acaricio a sí mismo contra su mano con ojos cerrados y mueca tranquila. La sensación en su pecho fue indescriptible, tan intensa que parecía que se ahogaba y al mismo tiempo flotaba. — Pero tampoco voy a dejar que te retengan. Kim Namjoon, ¿quieres ser mi novio?

Los ojos del menor se abrieron. Aunque la intensa mirada tenía una sombra de duda, había un brillo más intenso

— Hoseok-hyung, yo-

— Te juro que si contestas algo que no sea si, te voy a ahogar en el inodoro.

Namjoon soltó una fuerte carcajada que resonó en la habitación. El también sonrió cuando vio esos hoyuelos aparecer.

— Entonces supongo que mi respuesta es si.

Se levantó sobre sus puntas para alcanzar ese grueso labio inferior y besarlo suavemente.

— Que inteligente eres.

— Me lo dicen mucho.

Namjoon hizo lo mismo que él, pero tuvo que agacharse un poco para dejar un beso rápido.

Sabía que estaba sonriendo como un tonto, pero en ese momento no podía controlar su expresión.

— Eres un idiota.

— Eso solo tú me lo dices mucho.

— Bien, nadie más puede decirte así.

Esta vez ambos se acercaron y juntaron sus labios en un beso lento. No tenían prisa alguna.

De todas maneras ahora tenían mucho tiempo juntos por delante.

No había sido la mejor idea, tenía que admitirlo.

Aunque en realidad pensaba que Yoongi no iba a aceptar cuando preguntó.

— ¿Por qué mierda sigues caminando de un lado a otro? — Se detuvo y miro al alfa que lo miraba desde la cama con el ceño fruncido. — Solo acuéstate, ya es tarde.

Realmente era hora de dormir… ¿pero como podía hacerlo tranquilamente teniendo a Yoongi a su lado?

Cuando lo invitó a dormir no pensó en lo tentador que sería.

Aunque el problema real estaba en que su lobo aún no dejaba el cortejo, así que en realidad estaba tan excitado y duro por tener a Yoongi ahí pero no podía hacer nada al respecto.

— Jungkook, ya ven a la cama.

Esto es sufrir de verdad. ¿Por qué tu voz es tan sexy cuando estás a punto de dormir?

Además estaba seguro de que ese ser caliente lo estaba haciéndolo a propósito, no había manera que no pudiera oler lo excitado que el estaba cuando su aroma bañaba la habitación cerrada.

No podía evitarlo, ya habían pasado más de tres semanas desde que había tenido a Yoongi debajo de él, desde que se habían enredado con ese cuerpo y había bañado su piel en el aroma del mayor. Y masturbase no estaba funcionando como debería, se corría pero después de tardar una maldita eternidad y de todas maneras ni se sentía bien, no cuando solo podía evocar las imágenes de lo sensual que se veía Yoongi en la cama pero no oler esa agencia que provocaba sus sentidos ni sentir la piel caliente debajo de sus manos.

Su lobo tenía que ser un verdadero masoquista, porque realmente no podía ser el único que estuviera sufriendo por no poder follar a Yoongi hasta que ambos se desmayaran de cansancio.

Pero aun así se metió a la cama, no podía pasearse toda la noche, de cualquier manera su erección no bajaría.

— ¿Por qué me pediste que viniera a dormir si ibas a estar así?

Eso mismo me preguntó…

Suspiró y se giró sobre su costado para poder ver al mayor.

— Solo ha pasado mucho desde que dormimos en la misma cama.

— Solo han sido nueve días, desde el día en que fuimos a ver a Sunyoul al hospital. — Yoongi le sonrió de manera burlona. — El día que te auto-invitaste a mi cama.

También sonrió.

— Te encantó tenerme en tu cama, admítelo Yoongi-hyung.

Se moría por arrastrar al mayor más cerca y besarlo, pero eso solo haría que su pene duro doliera aún más y al final su lobo se molestaría  tomaría el control y lo haría retroceder.

Que cruel tortura no poder tocarte.

— Sigue creyendo eso. Pero yo ni siquiera pude dormir cómodamente porque un maldito alto alfa ocupaba gran parte de mi cama. — Estaba sonriendo mientras Yoongi tomaba una postura similar a la suya, pero el mayor se apoyo sobre su lado izquierdo, así que ahora ambos estaban mirándose de frente. — Tú aroma y esta siendo insoportable. — Yoongi arrugó su nariz como si le molestara, pero ese par de ojos gatunos brillaron mostrando su lobo. — ¿Por qué no sólo lo haces?

Oh, su pene estaba muy de acuerdo con la idea, podía sentir como se contraía. Pero por supuesto que su lobo le gruñó por los pensamientos que comenzaban a inundar su mente.

Solo le quedo suspirar derrotado.

— Yoongi-hyung, te dije que mi lobo te está cortejando.

Esos ojos brillosos lo miraron por unos largos segundos.

— Bueno, entonces tu no hagas nada.

Con un empujón, Yoongi le hizo recostarse por completo sobre su espalda. Cualquier pregunta naciendo en su garganta murió cuando ese alfa se levantó y de repente tenía su rostro malditamente cerca de su entrepierna. Pudo ver como su propia erección se contrajo emocionada cuando el aliento del alfa chocó con la tela de su pijama.

Y su pene solo saltó cuando esos largos, delgados y pálidos dedos bajaron el elástico de su pantalón de pijama.

— Dices que me estabas cortejando, pero aún así decidiste no poner tu ropa interior.

Su lobo gruñó y lloriqueo, no se decidía. Estaba decidido a cortejar al lobo de Yoongi, pero también lo deseaba.

El aroma del mayor que comenzaba a llenar la habitación ciertamente era delicioso y embriagante, todo en él solo querían complacerlo.

— Yoongi-hyung… mgh~

Su respiración se cortó cuando esas manos apretaron su pene sin ninguna consideración. Sintió como su líquido preseminal comenzó a salir malditamente sin control.

— ¿Cómo has aguantado tanto?

Yoongi no le preguntó esperando que contestara porque apenas termino su pregunta cuando ya estaba llevando su glande dentro de esa caliente boca.

Mierda.

Casi había perdido su carga por esa sensación en su sensible erección. Ya estaba seguro de que no iba a durar mucho más, había pasado tanto desde que había tenido a Yoongi chapado su pene que se sentía mas excitado que nunca.

Además…

Realmente…

El aroma excitado de Yoongi lo estaba volviendo loco.

Malditamente delicioso.

— Yoongi-hyung…

Sus manos se enredaron en el cabello azabache y sus caderas se movieron hacia arriba al mismo tiempo que el alfa bajaba por su erección. Fue simplemente el cielo.

No salió ninguna queja de parte de Yoongi cuando el comenzó a embestir desesperado en esa caliente y apretada boca que lo estaba succionado como si se tratara de un dulce. El mayor solo apretó una de sus manos un poco arriba de donde estaba la protuberancia de su nudo para evitar que lo metiera del todo, pero ni siquiera importaba porque ya se sentía fantástico embestir esa boca que se adapto a su tamaño y contra esa lengua que se presionaba duro contra la parte inferior de su pene.

Incluso si la saliva de Yoongi comenzó a hacer un desastre húmedo en las manos del mayor, en su pene y en su cadera, todo fue magnífico.

Fue humillantemente corto el tiempo que paso antes de sentir que su orgasmo se acumulaba en su abdomen bajo. Sus testículo se apretaron más cerca de su cuerpo y ya sabía que su liberación haría que su visión se desenfocara.

— ¡Mierda! ¡No!

Sintió cuando sus ojos cambiaron, desesperado porque Yoongi se había alejado. Esa boca caliente ya no estaba rodeando su pene, solo eran dos manos masturbándolo con un ritmo duro. Pero se sintió insuficiente después de estar en ese lugar húmedo y cálido.

Dudaba poder correr se ahora tan intenso como pensó.

— Córrete.

Oh mierda.

La voz de mando de Yoongi le afecto como si realmente hubiera funcionado en él. Aunque fue por ese indiscutible tono ronco y excitado que escuchó detrás de esa única palabra y ese aroma de Whisky que se mezclaba en el aire con el suyo.

Su semen abandono su cuerpo con tanta fuerza que algunos hilos alcanzaron su barbilla y su mejilla.

— Creo que ahora si dejaras de caminar como loco y por fin dormirás.

El tono burlón de Yoongi le hizo salir de su bruma.

Tomar al alfa y extenderlo sobre la cama y colocarse encima fue malditamente fácil porque el mayor estaba con la guardia baja.

— ¿Cómo podría dormir ahora cuando puedo 9ler una deliciosa erección? — Se froto contra el pene duro de Yoongi, arrancando un gemido de ambos. — Es mi turno de probarla.

Los dedos del mayor apretaron el cabello de su nuca con fuerza, había una sonrisa traviesas en Yoongi mientras lo hacía. Igual a esa que el mayor le dio antes de besarlo frente a Jin y Jimin.

Y cuando una lengua caliente lamió desde su barbilla hasta su mejilla limpiando el semen que antes estaba ahí, supo que les esperaba una noche divertida.

— Entonces date prisa.

Tenía que hacerlo. No podía negarse a la voz de mando de su alfa.

Unos minutos más tarde de lo que prometí pero esta vez sus fue culpa de Wattpad porque no cargaba las imágenes de este capítulo, tuve que bajarles la calidad para que las quisiera😭

Por cierto, ¿a cuantxs más les pasa que ven a Namjoon completamente vestido de negro y solo se sienten como que se van a derretir? Es que todos los colores se le ven divino, pero completamente de negro 🥵🤭🙈

Espero que les haya gustado el capítulo mis bellezas, ahora ya saben que esperar para el siguiente porque continuaremos de aquí 😉🤭🤭

Bonita noche y lindo día el de mañana 💜