Vampiro
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Pareja: Jungwon x Lectora.

Advertencias de contenido: Sexo sin protección, sexo oral, menciones de sangre.

Recuento de palabras: 1K.

Sinopsis: La lectora vive en un pequeño pueblo desde pequeña, así que no puede evitar sentirse atraída hacia el nuevo vecino de al lado que estaba más que segura, que escondía un secreto.

Especial: 5/7.

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Vivías en aquel barrio desde pequeña y sabías a la perfección que solo había ancianos y niños, así que te tomó por sorpresa ver cuando alguien se mudaba a la casa de al lado. Había estado abandonada por tantos años que pensabas que estaba embrujada.

Veías entrar y salir a tu lindo vecino todos los días y siempre tenían la misma rutina fe siempre, salir en la mañana, volver en la tarde y volver a salir en la noche. No es que no espiaras, pero según tú, él era demasiado lindo como para no verlo. Tú y él habían compartido una que otra palabra casual y una que otra vez habías visitado su casa y él la tuya, pero nada más.

A ti en verdad te gustaba ese lindo rubio llamado Jungwon así que una que otra vez fantaseaste con como sería salir con él. Pero nunca imaginaste conocer el secreto, sé por qué Jungwon siempre salía en la noche.

Era Halloween en la noche y tú te habías aburrido ya de estar en la fiesta que te había invitado tu amiga, así que un poco ebria llegaste a tu casa y de alguna forma terminaste pasando la cerca que dividía la casa de tu vecino y la tuya.

Caminaste un poco por el patio trasero donde estaba la piscina hasta que escuchaste algunos gritos de dolor venir de entre los arbustos y árboles que había en la parte de atrás de la casa, pensaste que solo era tu imaginación y el alcohol en tu sangre haciendo efecto hasta que volviste a escuchar esos gritos desgarradores.

Sentiste la necesidad de huir, pero te sorprendiste a ti misma cuando ya estabas entre los arbustos viendo como a solo unos pasos de ti había un cuerpo tendido lleno de sangre. Sentiste, como tu corazón latía con fuerza y la necesidad de correr te invadió, así que eso hiciste llegando solo hasta la piscina porque que un cuerpo más grande que el tuyo se metió delante de ti impidiéndote huir. Levantaste la vista encontrándote con los ojos ahora rojos de Jungwon, su piel más pálida de lo normal y su boca manchada de sangre que para nada parecía falsa.

—Hola, vecina.—Te sonrió tranquilamente como si no tuviera la boca llena de sangre y dos grandes colmillos sobresalieran de esta.

Soltaste un fuerte grito y retrocediste en busca de una salida cayendo en la piscina. Pataleaste tragando agua al no saber nadar intentando no morir ahogada. Jungwon al notar que no sabías nadar, se lanzó a la piscina agarrándote entre sus fuertes brazos para llevarte al borde de la piscina. Tosiste escupiendo el agua que tragaste volviendo a sentir el aire en tus pulmones.

—¿No sabes nadar?—Te pregunto inocentemente en un tono preocupado.

—Claro que no.—Le gritaste aterrada, ahora no sabías si morir ahogada hubiera sido mejor que morir en las manos de tu crush por haberlo pillado matando a alguien.

—Está bien...—Lo viste reír con nervios.—Deja te llevo a dentro y te secas.—Te extendió su mano sonriendo levemente.

Rápidamente, te apartaste levantándote del suelo para ponerte a la defensiva.

—Hey, TN... Calma.—Lo viste sonreír intentando calmarte.—Puedo explicarlo todo, solo quédate quieta.

—Acabas de matar a una persona y no es lo que yo creo.—Le gritaste exaltada, él solo te veía con sus afilados ojos de gato de forma tranquila, intentando hacerte comprender.

—Esa persona no era buena, era un estafador profesional, había estado estafando a muchos ancianos de esta zona que se quedaron sin hogar, además de que había estado en prisión por asesinato.—Aclaro Jungwon viéndote, con ojos suplicantes en serio creía que le creyeras.

—Espera... ¿Qué?.—Preguntaste ahora confundida.

—O sea, solo me alimento de las personas malas y...

—Eres un caníbal.—Volviste a gritar.

—No...—Ahora él fue el que grito.—Soy... Bueno, pensé que ya te habías dado cuenta, soy un vampiro dios TN.—Se quejó intentando acercarse a ti.

—Igual eres un asesino, así que voy a llamar a la policía y...—Te quejaste, pero detuviste tus palabras sin sentido al escuchar la palabra vampiro.—Espera... ¿Dijiste vampiro?.—Te quiso dar un ataque, los vampiros no existían según tú y ahora este chico te decía algo así.

—Si... Eso soy, creeme por favor.—Pidió acercándose pero tu restrosediste intentado procesar la información.

—Emm... Yo, creo que me siento un poco mal.—Reiste nerviosa sintiéndote mareada. Todo se volvió negro a tu alrededor y te desmayaste escuchando como Jungwon te llamaba hasta que perdiste la conciencia por completo.

Abriste tus ojos desorientada mirando a todos lados era de mañana y estabas más que segura que esa no era tu habitación. Entonces... ¿Donde estabas?.

—Ya despertaste, vaya me preocupe mucho.—Dijo Jungwon viéndote con alivio.

Entonces caíste en cuenta que lo de anoche no fue una pesadilla.

—¿Donde...—Jungwon te cortó dándote un vaso con agua que aseptaste dudosa.

—Estas en mi casa, te desmayaste así que me preocupé y te traje aquí.—Te explicó viéndote con sus hermosos ojos de gatito.

Escuchaste sus palabras para luego mirar tu cuerpo cubierto por un hoodie bastante ancho que seguramente era de él.

—Tube que cambiarte ya que tu otra ropa estaba toda mojada y no queria que te enfermaras. Y por si te lo preguntas, no llevas ropa interior.—Te aclaró tranquilamente pero tu te sonrojaste al saber que te había cambiado.

—Espera... Entonces tu me cambiaste.—Sentiste tu cara arder.

—Tranquila, e visto muchos cuerpos a lo largo de mí...—Lo cortaste mirándolo mal.

—Mejor callate pervertido.—Murmuraste mirando hacia su ventada, escuchaste su leve risa así que lo miraste de nuevo.—Creeme aunque este aquí aun quiero uir.—Le aclaraste viendo como sus labios se fruncian un poco y un suspiro salia de estos minutos después.

—Bueno... Hasta ahora eres la única que sabe mi secreto así que esperaba que no se lo contaras a nadie.—Te pido viéndote con ojos suplicantes.

—Esta bien no lo contaré, si prometes no hacerme daño.—Le pediste aun un poco asustada.

—Nunca lo haría, ya te lo dije solo me alimento de personas malas y solo cuando es necesario, no ataco a las personas así como así.—Te explico viéndote de forma triste.—Ademas tu me gustas y se que yo a ti e leído tus pensamientos por favor no me odies.

—Bueno... Es algo difícil de digerir.—Murmuraste sonrojandote al escuchar su confesión.—Pero no estas un poco viejo para mi Jungwon.—Bromeaste intentando aligerar el ambiente.

—No soy tan viejo, solo e vivido demasiado.—Se quejó en broma pero luego volvió a su tono serio.—Nunca te dañaría lo juro.—Volvio a explicarte como si buscara tu perdón de cualquier forma posible.

—Descuida ya lo se.—Le afirmaste sonriendo un poco.—Aunque aun suena como si estuvieras jugando conmigo.—Reiste nerviosa.—No es como que haya visto muchos vampiros en mi vida.

—Lo se es algo difícil, pero ya te acostumbrarás.—Sonrió y tomó tu mano besando tus nudillos para luego soltarla.—¿Puedo…? ¿Besarte?—Pregunto tímidamente acercándose más a ti.

Asentiste viendo como se inclinada mas sobre ti. Tomó tu rostro entre tus manos uniendo sus labios en un suave beso. El beso era tentó dejando que sintieras la suavidad de sus acolchonados labios. Aquel beso que inicio dulce se volvió cada ves más hambriento y necesitado, mordió tu labio inferior pidiendo el acesso a tu boca que le diste gustosamente entreabriebdola para comenzar un vaivén en el que sus lenguas danzaban explorando el sano del otro.

Jungwon se inclinó sobre ti haciendo caer tu cuerpo hacia la cama. Sus manos te recorrieron metiéndose por debajo del hoddie comenzando a levantarlo hasta llegar a tus senos, que masajeo con lentitud sacandote jadeos involuntarios por lo bien que te tocaba. Jungwon tomó el hoddie y lo paso lo encima de tu cabeza dejándote completamente desnuda frente a él. Se aparato un poco de ti para comenzar a quitarse su ropa. Una vez que estuvo desnudo como tú volvió a unir sus labios con los tuyos bombeando su pene para minutos después entrar en ti. Gemiste en sus labios al sentir como te llenaba.

Sus embestidas comenzaron siendo lentas hasta que te acostumbraste a la sensación comenzando a embestirte en un ritmo mas desesperado y rudo.

—Wonie.—Gemiste cerca de sus labios enredando tus brazos alrededor de su cuello.

Jungwon llevo sus labios a tu cuello dejando besos húmedos, mordiendo y chupando la piel sensible haciéndote estremecer. Sus colmillos presionaron contra la piel de tu cuello sintiendo como chupaba la sangre de este. No lo apartaste  solo dejaste que chupara sintiendo el ardor que te provocaba sintiendo un placer inigualable por su acción. Se alejó de tu cuello dejando besos en el área donde te mordió hasta subir hasta tu mandíbula. Levanto su rostro mirándote con ojos hambrientos, viéndose tan bien a pesar de tener sus labios manchados por tu sangre.

Unió tus labios con los suyos permitiendote por bar el sabor de tu sangre pero no te importaba solo querías tenerlo cerca de ti. Llevo una de sus manos hasta tus senos jugueteando con uno de tus pezones. Salio de ti comenzando a besar y morder tus senos, bajando por tu abdomen hasta llegar a tu entrepierna, donde beso y mordió la suane piel de tus muslos limpiando con su lengua la sangre que salia de las pequeñas heridas. Paso su lengua por tu clítoris dando leves círculos, su lengua era demasiado buena dándote atención, sentias que en cualquier momento te correrias sobre su boca. Pero se detuvo volviendo a subirse sobre ti.

—Eres deliciosa, lo sabes.—Ronroneo volviendo a besarte.

Se enterró en ti nuevamente sin parar sus embestidas, agarró tu caderas apretándolas con rudeza volviendo mas profundas sus estocadas. Sus caderas chocando golpeando sobre tu centro probocandote fuertes gemidos mientras te aferrabas a sus hombros hasta llegar junto a él al orgasmo.

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