Las siguientes horas Yoongi estuvo callado y tranquilo, no jugaba con los otros niños, ni siquiera con Taehyung, quien por muchas ganas que tenía de correr a jugar se mantuvo sentado a su lado, Jimin se preguntó para sus adentros si esto sería así por siempre. Tae y él revoloteando al rededor de Yoongi, aunque le costaba imaginar que podía ocurrir cuando el alfa creciera, pues esté estaba mucho más cerca de tener edad para cortejar a Yoongi que él. 

―¿Qué ves? ―indagó Jimin tratando de divisar la pantalla de su celular con muy bajo brillo. 

 ―Gatitos ―respondió sin despegar los ojos de la pantalla.

A ojos del alfa, Min se veía muy entretenido, incluso llegando a reír por las acciones agresivas de los cachorros felinos.

―¿Te gustan mucho los gatos?

Vaya pregunta, Yoongi era uno de ellos, y estaba mirando un video, claramente le gustaban, pero el cerebro de Park se vio amedrentado por lo tierno de la situación.

―Si, quiero tener un gatito blanco y llamarlo azúcar ―comento abultando las mejillas.

Jimin sonrió enternecido, pronto se le ocurrió una idea.

―Abuela ―llamó dulcemente a la señora de cabellos canosos.

―Dime Minnie ―sonrió.

―Se que hay una feria cerca, es muy linea y cierra en un par de días ¿Podríamos ir? ―hizo puchero. Sabía que la señora Min era incapaz de resistirse a su ternura.

―No lo creo cariño, hoy haremos cosas que no impliquen demasiada multitud ―negó apenada.

Rose, quien había estado mirando la conversación desde una esquina de la mesa se acercó a ellos.

―Anda abuelita, si no va toda la familia podemos ir Jimin y yo, cuidaremos muy bien de los niños ―la rubia pestaño deseando que funcione.

La mayor dudo, estaba apunto de negarse cuando su hijo SeoJoon se unió a la suplica.

―Si te deja más tranquila yo puedo ir con ellos, no soy muy responsable pero soy adulto ―dijo el muchacho provocando la risa de todos los presentes.

―Esta bien, si crees que puedes con todos esos jovencitos pues adelante ―contestó entre risas.

Por supuesto, los padres tanto de Rose como de Yoongi estuvieron de acuerdo en dejarlos ir bajo la supervisión de SeoJoon.

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Más tarde los jóvenes y los niños partieron hacia la feria acompañados por el único adulto entre ellos.

El lugar apenas comenzaba a llenarse, lo cual era una ventaja para ellos. Jimin cargaba a Yoongi en sus brazos, mientras Tae iba de la mano con Rose. A mitad de recorrido, una pelota anaranjada con estrellas aterrizó frente a los pies de SeoJoon. Este esperó unos segundos para ver si llegaba el dueño de dicho objeto, sorprendiéndose al ver a un niño pequeño, parecido a Taehyung.

―Gashiash ―dijo el niño cuando le fue devuelto su juguete.

―De nada ―respondió el mayor acariciando su cabello. ―¿Cómo te llamas? ―preguntó mientras buscaba con la mirada a algún mayor que viniera por el pequeño.

―Mi nombe es Gim Chonguk ―respondió abrazando su pelota.

El alfa mayor supuso que el niño quería decir "Kim", apellido que le sonó sumamente familiar, pues era el que figuraba en los registros de nacimiento de Taehyung.

―¿Cuantos años tienes? ―Indagó.

Jungkook miro su pequeña mano, después de unos segundos frunciendo el ceño en busca de hacer memoria, mostró cuatro dedos.

―Oh ya veo ¿Estás so-

Antes que SeoJoon terminará la frase una voz proveniente de unos pocos metros lo interrumpió.

―¡Jungkook! ¡Canguro! ―el dueño de la voz era un niño de aproximadamente la misma edad que Tae.

―Aquí toy ―contestó Jungkook con cara de enojado.

―Te dije que no te alejaras ni hablaras con desconocidos o serías carne de conejo asado ―lo regaño tomando su mano libre.

―¿Es tu hermanito? ―preguntó el alfa con interés.

Los demás miraban la escena expectantes. Taehyung sintió cierta familiaridad cuando vio a los niños. Entre ellos había un tercer infante que lo miraba en silencio.

―Sip, Namu también, pero el no habla mucho ―dijo en referencia al omeguita que seguía tomado de su mano y con la otra abrazaba un peluche celeste en forma de koala.

―¿Y sus padres? ―preguntó desconcertado.

―Papá, solo tenemos papá, el tiene un puesto de muñecos aquí ―señalo el camino.

SeoJoon decidió que todos acompañarían a los tres niños. En el camino continuaron conversando, resulta que Jin tenía trece años y Namjoon la misma edad que Yoongi. Ambos omegas pequeños no tardaron en comenzar a platicar. Jungkook y Tae también entraron en confianza inventándose juegos en el pequeño camino. SeoJoon estaba seguro de que había encontrado lo que tanto buscaba, la verdadera familia de su adorado pequeño.

Pronto llegaron a un puesto donde habían muchos muñecos hermosos que al parecer eran tejidos. Un hombre estaba allí, se levantó y respiro aliviado cuando vio a sus tres niños sanos y salvos.

El corazón de SeoJoon pego un brinco, su lobo parecía un cachorro, no entendía que le sucedía con el padre de los niños.

Para suerte de Jimin, el puesto tenía lo que él buscaba, un tierno muñeco tejido en forma de gato blanco.

―Ammm disculpen que los interrumpa pero me interesa el gatito ―dijo moviendo el muñeco de un lado al otro.

―C-Claro, claro, ese vale diez mil wones ―respondió sonrojado, pues Bogum, nombre del padre de los niños, había pasado quien sabe cuentos minutos prestandole atención a SeoJoon y Taehyung.

Jimin tomó dinero de su billetera y pagó por el muñeco que luego entregó a Yoongi.

―Gracias hyung ―sonrió Min.

Namjoon los quedó mirando, Yoongi le regalo una linda sonrisa y se acercó a su oído.

―Cuando yo sea grande Jimin hyung será mi alfa ―susurró, cosa ante la que ambos niños rieron.

―¿De que se están riendo? ―preguntó Jimin.

―Cosas de niños ―respondió Yoongi abrazando a su gatito. 

Un rato más tarde se despidieron de los niños y del padre de estos, volvieron a casa cansados y contentos. SeoJoon no dejaba de reírse porque Jin había querido regatear el precio de algunos muñecos para que compraran más, hablaba como un pequeño empresario. Taehyung se había sentido muy a gusto con los tres cachorros, cosa que lo relajaba.

Una vez que estuvieron en casa, todos se turnaron para darse un baño. Jimin le secaba el cabello a Yoongi mientras esté pensaba en que debería escribir sobre su libreta de Kumamon.

―¿Qué tal si haces una lista? ―dijo el mayor ganándose la mirada curiosa de Min. ―Pero una pequeña, para cuatro días. Elije diez cosas que quisieras hacer y me encargare de que podamos cumplirlas antes de que te vayas ¿Te parece?

El omega asintió, esa era una buena idea, pero tenía que ser preciso y no extenderse demasiado.

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Hi! Otro capítulo nuevo! Ya solo faltan cuatro capítulos para que la historia termine ¿Como se imaginan el final?

Les cuento que la razón por la que los padres de Yoongi decidieron terminar las vacaciones antes es porque para ocuparse de la enfermedad del pequeño omega tienen que hablar con su doctor de cabecera y todas esas cosas, quieren que Yoongi inicie su tratamiento en un lugar donde puedan estar al pendiente todo el tiempo y no asustar a nadie si pasa algo.

Terminada la explicación espero que les haya gustado este capítulo, ¡Tuvimos nuevos personajes! A ellos los van a conocer en el segundo libro.

¿Les gustaría otra historia bien fluff del Jimsu? Como siempre estaré super atenta a sus comentarios ♡

Lxs amo♡