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(Si leen este capitulo con la canción de Lewis blisset- Sick thoughts, me lo agradecerán, jeje. Si no les abre aquí, vayan a youtube normal y la ponen o simplemente léanla cómodamente, pero la música teletransporta.)
—Sus travesuras van ser complicadas. —dijo NamJoon sentándose en el mueble al lado de TaeHyung. —Oye. —llamó al pelinegro que estaba sumergido en sus pensamientos. —Tranquilo, ¿Si? No te pasará nada. Solo debes cuidarte de una persona.
TaeHyung arrugó el ceño.
—De ese que está allá. —señaló a JungKook quien reía junto a HoSeok al toquetear las ropas elegantes. —Das un paso en falso y amigo mío, estás atrapado.
—No me dejaré de él. Él solo me molesta. —comentó TaeHyung haciendo reír a NamJoon. El peligris se le acercó para susurrarle al oído. —También puede enredarte en las sabanas y no dejarte ir. —el castaño abrió los ojos sorprendido. —No juegues al inocente con él, TaeHyung.
—Yo... no e...estoy jugando a na...nada... —la voz le tembló al sentirse nervioso por lo que NamJoon le había dicho.
El peligris levantó una ceja y rio.
—Tranquilo, no diré nada. —le guiñó el ojo. —Tu secreto está guardado conmigo. Solo no dejes que él se dé cuenta lo mucho que te gusta. —murmuró en voz baja.
TaeHyung tragó duro mirando la espalda tatuada el pelirrojo y se mordió el labio inferior temblante. Era inevitable no mirarlo con otros ojos e ignorar las propuestas indecentes de doble sentido que este le hacía.
Una vez que YoonGi pudo alcanzar a JiMin, agarró de su suéter y lo empujó contra la pared colocándose bastante cerca de este. Le agarró las mejillas y hizo que lo mirara.
—¿Por qué no me lo pides? —le dijo YoonGi.
—Su...suéltame... —JiMin le quitó las manos mirándolo vuelto ira y sintiendo de nuevo la ola de calor darle un abrazo. —¿Pedirte qué?
—¿Hacía falta hacer ese numerito porque te dejé con las ganas aquella noche? —se burló este en su cara. —Si tanto quieres tener sexo conmigo, solo dímelo.
JiMin rompió en risas.
—Sí, ajá. El que dijo "Eso no debió pasar. Fue el maldito momento." —imitó su voz. —No te hagas, YoonGi. Tampoco quiero involucrarme sexualmente contigo. De ninguna otra forma si es posible.
—Lastimosamente tu boca dice una cosa y tú entrepierna otra... —el rubio deslizó su mano encima del bulto notorio del JiMin haciendo que este se exaltara. —Vamos... ¿Por qué no me lo pides? —movió su mano encima del pantalón haciendo que el pelinegro cerrara los ojos con fuerza para contenerse.
Este pegó más su cuerpo al del pelinegro y se acercó al cuello de este lamiéndolo. El vello se le volvió a erizar y un jadeo escapó de su boca haciendo reír a YoonGi, quien ahora besaba lentamente el cuello del pelinegro. Sintió las manos de este rozar su espalda desnuda y lo atrajo más a cuerpo.
—Pídelo, JiMin... No seas orgulloso, no va contigo... —murmuró mientras subía los calientes besos por la oreja de este y llegaba a los labios abultados y rojizos del pelinegro.
YoonGi sintió como su respiración se agitaba y su miembro respondía al llamado. Trató de controlarse por no besar sus labios, así que simplemente aumentó el movimiento de su mano en el bulto de este y mordisqueó un poco su oreja provocando un gemido bajito de JiMin.
—No... —dijo JiMin.
—¿No? —rio el rubio besando su cuello de nuevo. —Dilo, no te cuesta nada.
Fue entonces cuando JiMin acercó su mano al cuello del rubio y lo empujó hacia atrás apartándolo de su cuerpo. Lo agarró del brazo e intercambió lugar con él ahora siendo quien lo arrinconaba. El pelinegro apretó el agarre del cuello haciendo que YoonGi riera.
—Bastante agresivo, eh... —se mordió el labio inferior. —¿Así pides las cosas?
—No te estoy pidiendo nada, Min. —contestó JiMin. —Tengo más dignidad que tú al hacer estas cosas. No caigo tan bajo como para rogarle a una persona por sexo, manipulas a tu gusto.
—¿Y? —rio. —Te estaba haciendo un favor de que me pidieras algo. ¿No estás enojado por lo aquella noche?
—Fue tu maldita culpa por besarme.
—No escuché que te quejaras. —la mano de YoonGi agarró el brazo del pelinegro con fuerza y quitó el agarre del cuello. —Para mí que te gusta que te rueguen. —se burló. —Así nunca llegarás a nada.
Los dos mantuvieron la mirada unos segundos.
—Imbécil... —dijo JiMin.
—Idiota... —dijo el rubio mordiéndose el labio inferior.
Lo cogió de la camisa con fuerza una vez más y lo volvió a estampar contra la pared. Le cogió las muñecas y las elevó hasta la altura de la cabeza del pelinegro. Sus respiraciones agitadas se entrelazaron al mismo tiempo que sus labios se tocaron y sus lenguas se encontraron en un beso apasionado y lleno de deseo. Sus jadeos al besar se hicieron más intensos al roce de sus excitados cuerpos. Gritaban por más que un solo intenso beso.
YoonGi cortó el beso dejando a JiMin en el aire buscando por más.
—Para que te sigas quejando, te volveré a dejar con las ganas... —le susurró. —Ahora es tu turno de rogar por más. —le soltó las muñecas y se alejó de él caminando
JiMin se quedó observando la espalda desnuda de este mientras se alejaba. Había quedado tan excitado y YoonGi había vuelto a dejarlo a medias. Si eso le parecía divertido a él para el pelinegro era un desagradable castigo. Pero, ¿Rogarle? JiMin no era de esos. Tampoco quería verse a los pies de nadie, así que soltó un suspiro y subió las escaleras para regresar a la casa.
Una vez que YoonGi regresó al lugar, HoSeok se le acercó de brazos cruzados y curioso.
—A la próxima no seas tan evidente, Min. —le dijo.
—Y tú cuida tus ojos, enfermo. —lo miró de reojo.
—Ustedes sí que tienen un problema llamado: deseo sexual.
—HoSeok, nadie te preguntó. —el rubio se le acercó a NamJoon.
—Bueno..., entonces, permiso. Yo también tengo mis necesidades... —este se giró para salir.
—Quieto ahí. Regrésate y pon tu culo en el mueble. —ordenó el rubio con su semblante serio.
—Pero, si tú no quieres, Min. No puedes dejar pasar una oportunidad así...
—¿Y tú quieres ser carne molida? Tampoco quiero dejar pasar una oportunidad así... —YoonGi le sonrió sarcásticamente haciendo que HoSeok le diera una mirada asesina.
—¿Ni un poquito?
—No.
—¿Ni una tocada?
—Que no.
—Pero lo puedo amarrar para ti.
—HoSeok...
—Ya ya, perdón. —soltó un suspiro caminando hacia el mueble evitando la mirada fuerte de YoonGi. —En fin, ¿Qué mascaras llevaremos? Quiero una dorada.
—YoonGi, aquí está el número... —se le acercó YunHo extendiéndole un papel y un celular.
El rubio los tomó y digitó el numero en el teclado numérico. Se lamió los labios y los miró a todos para luego darle a llamar. Esperó al tercer tono hasta que aquella voz de su pasado salió por el altavoz.
—Estoy ocupado. Quien quiera que seas, habla rápido.
—Tanto tiempo, SeokJin....
Hubo un largo silencio.
—¿YoonGi? ¿Min YoonGi?
—¿Hay otro más?
—Tres años... ¡Tres malditos años!
—¿Debo pedir perdón por irme sin decir nada?
—Quiero verte.
—¿Ah sí? Y yo también.
—Mi cumpleaños es el sábado. Te espero.
—¿Llevo regalo?
—Contigo solo basta...
La voz melosa hizo que YoonGi riera.
—No has cambiado nada. Pero, sabes que nunca voy solo. Tengo personas conmigo.
—Solo quiero verte a ti, no me interesa nadie más.
—Oh..., bueno. Tal vez..., te lleve un regalo.
—Ya me estás emocionando... ¿De cuánto estamos hablando?
—Creo que de billones ¿Tal vez?
—Me encanta cuando pones el precio... Te veo el sábado, es una fiesta de máscaras. Llega temprano.
—Ahí estaré, SeokJin.
Y colgó mirando los rostros de suspenso de los presentes en el lugar.
—Quiten esas caras. —dijo el rubio.
—Fue la conversación más extraña que había escuchado. —dijo JungKook sentándose al lado de TaeHyung.
—SeokJin y yo tenemos una larga historia. Que a ustedes no les interesa saber.
—Oye, Min. Cuando hablaste de regalo... ¿Con regalo te refieres a... —preguntó NamJoon.
—No hace falta decirlo para saber de quién hablamos. —se encogió de hombros y le entregó el teléfono a YunHo.
—¿Por qué? —cuestionó HoSeok cruzándose brazos.
—No hay un por qué en realidad, es solo un querer. —caminó hacia el computador y se sentó frente a este. —JiMin también es valioso, ¿Saben? Así que la única cosa que les pido es que no lo dejen solo y tampoco con SeokJin. ¿Entendido?
Los presentes se miraron los rostros al escuchar la orden que YoonGi les había dado. Algo que no era común y corriente en él. Estaba pasando algo, algo bastante intrigante y tentador.
—Entendido. —respondieron al unísono, HoSeok, NamJoon y JungKook.
4/4
*El que gritó por la tensión deposite su emoji vergonzoso aquí*
*El que le dio igual la tensión deposite su emoji sensual aquí*
Nos vemozzz <3
Esa fiesta va estar de locos, literalmente xd
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