—Jungkook, es increíble lo que dices. — Mencionó Seokjin maravillado mientras buscaba las fotos de la última vez. — Lo estás viviendo como un sueño.

—He conocido un poco de Taehyung, verás... — Abrió un cajón para empezar a buscar. — Esas fotos que vimos, son sus recuerdos cuando iba a Europa en cada verano, jamás le interesó una relación ya que prefirió vivir sus años de juventud antes del matrimonio.

—Vaya, sabía lo que hacía. — Caminó a un lado de la silla mecedora para abrir un clóset, encontrando sacos allí dentro, tomó uno para visualizar el diseño. — Como contaste, el tal Taehyung es como todos nuestros conocidos, unos idiotas. Y con el castigo que recibió, aprendió la lección de alguna manera... o tal vez no.

—¿Crees que eso sea una excusa? — Seokjin encoge de hombros.

—Las personas cambian por su cuenta, lo vas a descubrir por el tiempo y verás si valió la pena. — Cerró el clóset para ir directo a un mueble.

Jungkook entró en la duda, no conoce a Taehyung lo suficientemente para saber si está mintiendo o no, no le agrada que saliera de su castigo para que vuelva a tratar a las personas como sus padres, pero se sentiría mal por dejarlo después de haber dado su promesa. En verdad a su corta edad no debe lidiar con esto, y está aquí ayudando a un tipo de veinticuatro años.

Seokjin sacó unas cosas, y al notar que eran las fotos se acercó donde está su amigo, zarandeó su brazo para llamarle la atención, Jungkook soltó una diminuta sonrisa tomando las fotos, efectivamente era Taehyung en sus viajes.

—¿Qué piensas hacer con esas? No creo que haya una pista.

—Tal vez se sienta feliz de que sus recuerdos sigan aquí o no lo sé. — Dijo guardando las fotos en un folder.

Lo que les llamó a ambos la atención es ver una sábana polvorienta que se encontraba hasta al fondo del ático, pudieron ver algo brillar asomarse, a lo que ambos se acercaron y notaron que cubría algo, Seokjin tomó una extremidad para quitarla de ahí, demostrando una linda pintura.

Jungkook quedó maravillado, era un lindo retrato de Taehyung, así que con cuidado quitaba unas cosas para sacar ese cuadro, Seokjin no dudó en ayudarlo, no les importa hacer tanto desorden ya que solo ellos este lugar ha sido descubierto por ellos mismos. Los colores y los detalles dan un poco realismo, tuvo la curiosidad la historia detrás de esta pintura, Taehyung pagaría un buen pintor para esto.

Sacó su celular para tomar una foto, no estaría llevándose eso a su habitación si es que no quiere llamar la atención de nadie, Seokjin no supo porque la necesidad de tomarle una foto pero podría resultar útil.

Después de volver acomodar todo, se recargaron en la pared agotados, desordenó sus cabellos mientras soltó un suspiro cansado, al parecer era todo lo que necesita para su siguiente punto.

—Cuentas lo que hay dentro del espejo. — Mencionó Seokjin después que Jungkook empezó a caminar a los escalones para salir del ático. — Y no te quedes encerrado allí dentro.

—Alguien con buena vibra tiene el poder de entrar y salir. — Dijo sin preocupación. — Lo tengo bien pensado.

—Kook, te conozco. — Cerró la puerta del ático y ambos caminaron directo a la habitación del pelinegro. — Hay ocaciones que te arrepientes después de hacer las cosas que decidiste.

—Esto será una noche larga, creo que dormiré después de comer.

—Muy bien, ya que a nadie le importa lo que hagas. — Ambos entraron a la habitación de Jungkook.

El pelinegro dejó el folder en su escritorio para después recostarse en su cama, su amigo hizo el mismo movimiento para estar a un lado suyo. Estuvieron en silencio por unos minutos, el pelinegro planeaba lo que hará en esa noche, antes de arrepentirse como su amigo lo ha mencionado, en verdad no tiene miedo en vivir esta experiencia de fantasía, no comprendía porque terminó aquí, ayudando a un sujeto que ni conoce bajo una maldición, ¿En verdad cambiaría por el tiempo? ¿O simplemente es chantaje suyo? Es más, ni tenía la mínima idea porque hace esto. Tal vez Taehyung lo puede considerar alguien inmaduro, pero Jungkook tiene la mente abierta e inteligencia, solo esperaba que esto vaya bien.

—¿Cómo te imaginas ese otro mundo? — Soltó Seokjin de la nada sin apartar la mirada de su celular. Jungkook volteó a verlo. — ¿Crees que sea como en las películas?

—No lo sé, o tal vez sea mágico.

—La magia existe, si eso fuese un mito, porque dejarían al tal Taehyung allí. Es lógico que una bruja lo hizo, hay demasiadas en este mundo ¿Qué tal fue maldecido fuera del país?

—Primero vamos con lo ligero, tengo que conocerlo como cualquier persona normal, ya veremos después de eso.

—Solo... ten cuidado ¿si? No sé con que estás lidiando.

—Todo estará bien, tranquilo hyung. — Soltó una sonrisa.

La noche llegó y el reloj marcaba las once cincuenta, Jungkook si pudo conciliar el sueño por la tarde, preparándose mentalmente lo que podría venir, Taehyung ha hablado que ahí se encuentra un guardián así que puede ser un ser tenebroso o algo por el estilo, puede haber cosas sorprendentes en ese otro mundo, tal vez bueno o malo. Se colocó sus tenis para después tomar su suéter para cubrirse del frío, tenía solo unos cuantos minutos, la luna se encontraba brillante en el cielo nocturno, así que recorrió un poco las cortinas para que su brillo tocara el espejo.

Quedó esperando un poco ansioso por lo que podrá pasar, se paró enfrente del espejo viendo como la luz de la luna se movía por los segundos, hasta que al fin vio la silueta de Taehyung, se llegó a preguntar si se cambiaba de ropa, a pesar que no es un espíritu o algo si es extraño.

Soltó una pequeña sonrisa, diciéndose asimismo que no debe dejar esto después de saber que es igual como su familia, no puedes juzgar a nadie sin conocerlo al cien.

—¿Qué fue lo que hiciste en el ático? — Cuestionó el mayor curioso, luciendo tranquilo.

—Encontrar tus fotos. — Dijó alzando un poco el folder. — Tal vez te sientas mejor o yo que sé cuando las veas.

—Supongo que encontraste más cosas. — El menor asintió.

—Necesito estar allí contigo primero. — Taehyung niega con la cabeza.

—No querrás estar aquí encerrado conmigo ¿o si?

—Dijiste cosas buenas sobre mi después que te conté un poco de mi vida. — Tocó una extremidad del espejo, sintiendo un cosquilleo en ese momento, vio que soltaba pequeñas luces azules y moradas, notó que Taehyung lo miraba con un poco de súplica de que se alejara, pero no obedeció.

—Tienes las agallas. — Soltó con sarcasmo.

—¿Por qué dices eso si no estoy seguro si eres igual a ellos? Dijiste que confías en mi, y yo te di mi palabra en sacarte de aquí. — Taehyung soltó un bufido mientras cruzaba de brazos, asintió lentamente con la cabeza.

—Está bien... — Rodó los ojos, alargando un poco la palabra. — Entra. — El menor sonrío ansioso. — Yo no me hago responsable de...

—Muy tarde, Taehyung. — Dijo introduciendo la mano en el espejo, para después hacer con el resto de su cuerpo.

La poca experiencia ha sido totalmente extraña para él, notó que la habitación es la misma pero más oscura, lo que hizo primero es ir directo a la ventana, recorrió las cortinas y empezó a visualizar lo que hay afuera, encontrando gente caminando lentamente, las flores iluminaban y habían mariposas de colores volando por doquier. Entre abrió la boca maravillado, no puede creer que esté presenciando esto que parece ser un sueño, Taehyung volvió a cruzar de brazos mientras observaba a Jungkook, suplicando en que pueda regresar.

—No puedo creer que estés aquí encerrado por cincuenta años, se ve maravilloso.

—No creas eso, todo es hermoso para ti, pero esas personas que ves, son las otras personas que conoces. — Jungkook volteó a verlo confundido.

—¿Osea cómo?

—Los buenos de tú mundo, son los malos en este, y viceversa.

—Entonces, si yo encuentro a mi familia por aquí, ¿Son los buenos? — Taehyung asintió.

—Pero todos de aquí son malos, el guardián los aleja de mi.

—¿Dónde está? — Empezó a observar a su alrededor en búsqueda del guardián. — ¿Es un ser grande o...

Al escuchar un ruido hizo que Jungkook sobresaltara, volteando al instante de donde vino el ruido, no podía ver nada en esa oscuridad, lo que le asustó es ver unos par de ojos azules relucientes como el zafiro, el ruido que hizo este ser ha sido algo espeluznante para el joven. Jungkook corrió donde está Taehyung para esconderse detrás suyo, eso le ha provocado una risa de su parte.

—D-Debe ser un guardián aterrador.

El mayor no dijo nada, solo que los ruidos no son tan aterradores como Jungkook comenzó a creer, el sonido de un aleteo le dio saber que este ser tiene alas, Taehyung se quedó allí sin la intención de alejarse.

Jungkook espera que todo esto vaya bien y no se arrepienta al momento.

Eso lo pensó al posar la mirada hacia al frente de ellos, la luz de una lámpara normal y antigua ayudaba muy poco, viendo la sombra sobre la pared.