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CAPÍTULO 33: AMISTADES PELIGROSAS

-- AMISTADES PELIGROSAS --

Elara se bajó de su coche mientras caminaba hacia el interior del instituto cuando un peculiar sonido llamó su atención, se detuvo mientras analizaba el sonido. Sabía que era uno de los emisores que los Argent y, anteriormente, sus padres usaban cuando iban de cacería, frunció el ceño confundida al mismo tiempo que agudizaba sus sentidos para poder seguirlo.

Se alejó de los pasillos principales del instituto y descendió las escaleras hasta el sótano, donde se encontró con Scott y los gemelos, los cuales también estaban siendo "atraídos" por el aparato. Los cuatro se detuvieron al ver que al final del pasillo estaba Stiles con el emisor en sus manos, el cual brillaba y desprendía un tenue sonido. Sin pensarlo y, en parte, guiados por su instinto, Ethan y Aiden salieron corriendo hacia Stiles. Al ver la reacción de ambos, Elara no dudó en actuar y en atacar a los gemelos.

-¡Alto!- Ordenó Scott mientras Elara soltaba al gemelo que tenía agarrado del cuello a Stiles.

-Si queréis ser parte de una manada comenzar a comportaos civilizadamente y no como dos perros callejeros que se pelean por un trozo de carne.- Sentenció la morena llevándose un gruñido por parte de los dos Omegas, el cual fue correspondido. -La próxima vez mi rugido será más fuerte y doloroso.- Les advirtió a ambos mientras los dos la miraban molestos, pero al mismo tiempo siendo conscientes de lo que una vez, Deucalion, les dijo. «Ella no era como Scott».

-Soy yo, Scott.- Aseguró Stiles mirando a su amigo. -Os juro que soy yo.- Miró a Elara intentando convencer, así, a sus amigos. -No se dónde estado los últimos días, ni que he hecho. Pero soy yo, soy vuestro amigo.

-¿Sabes que pasó en el hospital?- Preguntó Ethan dolorido por el ataque de la Alfa.

-Se más que eso.- Al escucharle decir aquello, Scott y Elara compartieron una mirada.

Stiles pasó al lado de sus amigos mientras suspiraba frustrado y les mostraba el interior de una bolsa, la cual estaba repleta de cosas, entre ellas un mapa que el pecoso les mostró y que extendió.

-Es un plano del sistema del cableado del hospital.- Comenzó a explicar. -¿Veis las marcas en rojo? Es mi letra.- Los cuatro se arrodillaron para mirar mejor el plano y entender la explicación de él. -Esto lo hice yo. Yo provoqué el accidente.- Les explicó haciendo que Elara y Scott le mirasen con seriedad. -Todo lo que hay aquí podría ser parte de algo más grande.- Ethan cogió una sierra eléctrica.

-¿Que demonios has estado haciendo?- Le preguntó.

Sobre una mesa comenzaron a vaciar todo lo que contenía la bolsa, en la cual había distintos tipos de herramientas y de cadenas, haciendo que los dos Alfas compartieran pequeñas miradas cómplices.

***

Elara y Stiles se bajaron del Jeep mientras Stiles intentaba persuadir al entrenador de que sacará a todos los estudiantes del sendero debido a las trampas que el padre de Malia puso cuando intentó dar caza a su propia hija.

-¿Mamá?- Elara descolgó su teléfono al ver que su madre la estaba llamando. -¿Alex está bien?- Preguntó preocupada.

-Sí, creo que es más Alex que su alter ego. La cosa es que acaban de detener a Kiernan, a Chris y a Derek.- Al escuchar que habían sido detenidos, la morena frunció el ceño confundida al no saber que hacía Derek con los dos Argent. -Creo que tiene relación con el Nogitsune.- Aclaró Minerva.

-Yo también lo creo, mamá. Y te digo más, que Stiles haya aparecido me hace pensar que es algo relacionado con su plan.- Aseguró Elara, justamente cuando veía aparecer a varios de los estudiantes, entre ellos a Scott y a Kira. Rápidamente finalizó la llamada con su madre.

-Deteneos.- Elara frunció el ceño al escuchar la orden de Stiles, justamente cuando esté comenzaba a sacar, de entre la tierra una cadena sin nada.

-Felicidades, Stilinski.- Ironizó el entrenador justamente cuando tocaba una cuerda y activaba una especie de trampa, la cual constaba de una flecha que se clavó en su abdomen, asustando a todos.

Alrededor del entrenador, el cual estaba tendido en el suelo, se pusieron todos los alumnos, los cuales estaban completamente sorprendidos ante lo que estaba pasando.

-Entrenador, escúchame.- Le llamó Elara para poder tranquilizarlo.

-¡Voy a morir!- Gritó completamente asustado.

-No va a morir.- Aseguró Stiles, mientras Elara le indicaba a Scott, con la mirada, de que alejará a todos de ahí, para poder curarle. El Alfa la obedeció e hizo retroceder a todos, mientras Elara tocaba el brazo del entrenador para poder extraer su dolor, acto que le calmó y tranquilizó.

-Creo que se desmayó.- Puntualizó Aiden, mientras Stiles miraba sus manos ensangrentadas.

-¿Y si se muere?- Preguntó Stiles asustado al ver sus manos llenas de sangre.

-No va a morir.- Sentenció Scott mientras Elara se concentraba para saber si iba a morir o no, pero, por mucho que pusiera de su parte, todavía no llegaba a controlar aquel lado.

-Él va a estar bien.- Aseguró Elara forzando una pequeña sonrisa para intentar tranquilizarlo.

-No os preocupéis, la ambulancia ya está llegando.- Les informó Aiden.

-Y mi padre.- Añadió Stiles con miedo.

***

Elara estaba sentada al lado de su hermano mientras esté le explicaba lo que le había pasado, la morena tenía los puños cerrados, intentando mantener la calma, pero Alexander comprendía la frustración de su hermana.

-Lara ha salido bien. Estoy bien.- Aseguró Alexander mirando a la morena.

-Pero sigue estando esa posibilidad, Alex... ¿Y si ocurre?- El rubio rió.

-Si llegará a pasar se que Elara Rogers bajaría hasta el purgatorio y me sacaría de él con o sin la ayuda de su manada. Por que eso es lo que haces, hermanita. Y se que lo harías. No eres como Scott, ni como los Hale o los Argent, ni mucho menos como los Rogers, muy en el fondo eres una Miles y actúas como uno. Es por eso que debes de ser tú misma.- Elara sonrió al escuchar a su hermano, realmente había echado de menos aquellos momentos con él. Esos momentos en los que no eran más que dos adolescentes que fingían ser ajenos a lo sobrenatural.

-¡Lara, Alex!- Los mellizos alzaron la cabeza y miraron a Scott. Justamente cuando Elara se removía incomoda al sentir como si varios cristales se incrustaban en su espalda. -La bomba estaba en la estación de policía.- Al escuchar aquella frase Elara y Alexander se miraron asustados y al mismo preocupados.

***

Al llegar a la estación de policía, los mellizos, seguidos de Scott, entraron corriendo llamando a su madre. Elara se centró en el olor de su madre, pero era muy tenue, hacia tiempo que había estado allí, ya que no era tan fuerte como el olor de Chris, Derek o Kiernan.

-Iré a buscarla al hospital.- Tranquilizó Alexander a su hermana mientras se marchaba, y Elara comenzaba a ayudar a Scott con los oficiales heridos.

Elara se acercó a uno de los oficiales gravemente heridos, y comenzó a quitarle el dolor, el cual era insoportable y se juntaba con el dolor que tenía a raíz de las heridas que Derek debía de tener. Al ver que el policía dejaba de respirar, Elara le soltó, mientras suspiraba con frustración y le cerraba los ojos, los cuales no tenían nada de vida. En aquel instante su teléfono sonó, recibiendo un mensaje por parte de su madre donde decía que estaba bien y que habían trasladado a los tres detenidos a otras celdas.

-¡Lara, los Oni!- Gritó Scott haciendo que una especie de zombie Elara se pusiera de pies y se reuniera con Scott, Stiles y Kira, la cual acababa de aparecer.

Los cuatro se subieron en el Jeep y se dirigieron a la clínica veterinaria. Al llegar Scott y Stiles intentaron abrir la puerta con ayuda de Kira y Elara, pero la presencia de los Oni provocó que ella se alejará de la puerta para poder enfrentarse a los Oni si era necesario.

-Abrir esa maldita puerta.- Ordenó la Alfa con frustración. Scott se unió a su amiga en la pelea con los Oni, mientras que Stiles, con miedo en su cuerpo, intentaba buscar la llave que abriría la clínica veterinaria para poder entrar. Al ver que Stiles había conseguido abrir la puerta Elara agarró del cuello de la cazadora a Scott y tiró de él hacía atras para que se quedará tras ella, e instantes después rugió con toda la fuerza que tenía en su interior, afectando a los Oni, y al mismo tiempo debilitándola.

Aunque el rugido para ella era como su "arma secreta", dependiendo de la intensidad que empleará en él, la dejaba más o menos cansada.

Al ver que los Oni estaban afectados por el ataque sonoro de la Elara, los dos entraron en la clínica ayudados por Kira la cual ayudaba a caminar a Scott. Pero, antes de que alguno de los dos Alfas pudieran reaccionar, el Nogitsune noqueó a Kira y clavó una de las katanas de los Oni, que la Kitsune había cogido, a Elara, y un bisturí a Scott en un nervio para impedir que se moviera, para que después darle un golpe y dejarle inconsciente.

-Por favor.- Suplicó Elara.

-Esta bien.- El Nogitsune se acercó más a ella, agarrándola del cuello y agarrando, al mismo tiempo, la espada que tenía en su abdomen. -Siempre sentí curiosidad por escuchar el rugido o aullido de un Beskyttende, he de decir que estoy realmente sorprendido. Y si no fueras alguien tan... amable, tu otro lado y yo seríamos grandes amigos. Pero tú fuerza de voluntad es fuerte. ¿Donde reside? ¿En tu aprecio por los asesinos de tu madre o en aquellos que te siguen teniendo miedo? O tal vez... ¿Tal vez en esa unión con Scott al ser una especie de hermanos sobrenaturales? Tuvo que ser complicado, ¿no? Estar entre tú hermano sobrenatural y tu alma gemela, pero sabes lo bueno de todo esto. Que el dolor que hoy les has quitado al entrenador, al policía, ese dolor que sientes por Derek y tu propio dolor me ayudará a hacerme más fuerte.- Elara comenzó a quejarse de dolor al sentir como el Nogitsune absorbía o extraía todo aquello de su cuerpo, provocando que sus ojos terminaran iluminándose de una forma bicolor. El derecho de un tono verde esmeralda y el rojo de un tono rubí tirando a rojo sangre. Algo que llamó la atención del Nogitsune, justamente antes de que Deaton apareciera y le inyectará liquen, "neutralizando" al Nogitsune.

★★★

Un capítulo intenso ¿no creéis?

Bueno estos capítulos en relación con la serie me encantan, amo todo en ellos. Y ame hacer esto.

Me encantó que Alex vuelva a ser él, porque eso de alguna forma ayuda a su hermana, ya que la afecta el hecho de que su hermano este así. Por otra parte, lo que Alex dice del purgatorio sigue siendo muy importante. El purgatorio será clave para The Truth. Junto a otros temas que no se cómo abarcar.

Ahora bien, ¿os gustaría ver, en The Truth, una cita entre Derek y Elara?

Estamos entrando en los últimos capítulos de The Moon y estoy muy emocionada. Es posible, que en The Truth haga una pequeña parada debido a que no tengo nada avanzado, no confirmo nada os avisaría. Pero de hacer esa parada retomaría las actualizaciones en septiembre. Porque estoy casi segura de que esta saga de FanFics terminará pronto, y es algo que me da pena. Por un lado no quiero que termine y por otro sí.

¿Qué os parecío el capítulo?

¿Seguís en cuarentena?

Os leo ♥

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