"Cause he was sunshine
I was midnight rain"

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ALESSIA ✩

Hacía ya unas cuantas horas que Charles había marchado hacia el paddock, la película que yo estaba viendo ya había terminado, asi que para despejar mi mente decidí salir a dar una vuelta.

Me vestí, tomé mis cosas y salí a la calle.

me pareció una buena idea hacer nuestra ultima cena algo mas amena así que pensé en cocinar para Charles y que no se tomara tan mal mi decisión, asi que fui a una pequeña tienda que se encontraba en la costa de Monaco a comprar un par de velas rojas y unas pequeñas flores para decorar el mantel, no sabia si esto de la cena seria muy buena idea, pero al menos darle una alegría antes de soltarle el bombazo.

Caminé unos 5 minutos hasta que llegué a la tienda mencionada anteriormente, uan vez dentro la señora quien atendia la tienda me saludó alegremente como cada vez que iba allí.

Caminé un poco por la tienda hasta que un objetó cautivó mi atención, me acerque a paso lento hacia ello, recordando un montón de cosas, era un relicario en forma de corazón, tal y como el que me había regalado Charles en nuestro primer aniversario de pareja, sustuve el colgante en mis manos y los recuerdos empezaron a invadirme

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Flashback:

Era una preciosa tarde de verano en la que Charles me había invitado a dar un paseo por la playa, teniendo en cuenta que eran pasadas las 19:00 de la tarde el sol ya no pegaba tan fuerte, asi que era un ambiente en el que se estaba muy bien y no hacia mucho sol.

Ese dia la playa estaba vacia asi que solamente nos encontrábamos yo y Charles.

El puso un mantel en la arena y sacó una cesta que el mismo había preparado (claramente con la ayuda de su madre), era una cesta bastante grande, y de ahí empezó a sacar comida, rabbioli, refrescos y ni mas ni menos importante, una tarta, pero no una tarta cualquiera, era mi tarta favorita, una tarta de queso y arandanos.

—Has traído mi tarta favorita!—grité emocionada mientras le abrazaba

—Como iba a olvidarme?—contesta riendo

Ambos empezamos a comer y a charlar animadamente mientras presenciamos las preciosas vistas de la playa que se podían contemplar desde donde estábamos.

Pasa un rato cuando veo que Charles busca algo en la cesta, y antes de poder preguntarle el saca una pequeña caja de terciopelo azul y la abre, dejando a la vista un hermoso colgante en forma de corazón

—Charles, es precioso—le digo contemplando el precioso regalo que me acaba de hacer

—Todo es poco para el amor de mi vida—dice sacando el colgante de la cajita y dejando la cajita en el mantel

yo me doy la vuelta y me recojo el pelo para que pueda colocarme el colgante, el lo pasa por mi cuello y la abrocha con mucho cuidado, y cuando termina me da un beso en el hombro y me abraza por los hombros haciendo que me recueste de espaldas en sus piernas.

—Es precioso Charles, me encanta—digo dándole un beso y recostándome de nuevo en sus piernas

—Eso no es todo—dice el causando curiosidad en mi—ábrelo—dice refiriéndose al colgante

—Como que lo abra?—pregunto en confusión antes de darme cuenta de lo que quiere decir—
es un relicario!—digo emocionada

Abro el colgante en forma de corazón y me encuentro con una foto de ambos besándonos la cual nos habíamos tomado unas semanas atrás.

—Charles—digo sin saber que decir—me encanta, nunca me han hecho un regalo tan bonito—digo incorporándome para abrazarle

—Me alegro de que te guste mon amour—dijo dándome un beso

—Lo voy a llevar siempre conmigo, será mi amuleto de la suerte—le digo una vez nos separamos del beso

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Instintivamente llevo mi mano a mi pecho donde reposa el colgante que me regaló Charles aquella vez mientras suelto el colgante de la tienda el cual se me cae al suelo

— Dios, soy un desastre — digo para mi misma mientras me agacho para recoger el colgante de la tienda.

Respiro un poco e intento olvidarme de aquello y me dirijo a la sección de las velas.

Una vez ahí compro dos velas rojas y las pago para por fin irme de allí.

al salir a la calle el viento me azota el rostro y yo simplemente procedo a regresar a casa para poder hacer la cena que tenía planeada.

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La cena ya estaba más que lista, la mesa preparada y las velas puestas y encendidas, asi que simplemente me sente a esperar a Charles, quien como un reloj estaba entrando por la puerta a la misma hora a la que me había dicho que volvería.

—Hola mon amour!, ya estoy en casa—dijo dejando sus cosas en un pequeño sillon que hay al lado de la puerta y dándome un abrazo

—Que tal ha ido el dia?—pregunto nerviosa

—Muy bien, el monoplaza cada vez tiene mejor pinta, creo que este será mi fin de semana—dice separándose del abrazo y de pronto se da cuenta de la cena que he organizado—a que se debe todo esto?—dice sonriente

—La charla que teníamos pendiente—le digo nerviosa

Charles de repente parece ponerse serio y ambos nos sentamos en la mesa

—Pasa algo cariño?—pregunta con curiosidad y muy seriamente

—Hay algo de lo que tenemos que hablar hace ya un tiempo—estaba muy nerviosa, no podía hablar, ni siquiera había pensado bien como decírselo

—Habla cariño, me tienes en ascuas—dice poniendo una mano encima de la mia en la mesa y apretándomela para darme apoyo

Yo batallo en como decírselo, no me atrevia, era lo que quería?, un deje de confusión se presenta en mi, y me deja con mas nervios de los que ya tenia.

—Yo...—empiezo a hablar — lo cierto es que yo hace un tiempo no me he estado sintiendo igual que antes respecto a...— habla Alessia! me dice mi voz interna, pero yo claramente flaqueo—respecto a las flores de la boda — termino de hablar nerviosa

Charles se pone una mano en el pecho y vuelve a respirar con normalidad al igual que yo

—Dios Alessia, no me de esos sustos, por un momento me has hecho pensar que ibas a romper nuestro compromiso o algo así —dice riéndose— que flores tienes en mente?—dice continuando la conversación que yo había sacado hacia unos segundos

—Pues preferiría cambiar las flores azules por unas rojas—digo continuando con la excusa

—Sabes que?, yo pienso exactamente lo mismo, las rojas quedarían muchísimo mejor—dice con una sonrisa comprensiva—Tienes unas ideas maravillosas mon amour!—dice levantándose de la silla para caminas hasta mi y darme un beso—ya que estoy de pie voy a la cocina a por vino, ahora vuelvo—dice alejándose

—Está bien mi amor—le respondo

Me quedo ahí sentada mirando a la nada y pensando en como soy tan cobarde de no poderle expresar a Charles como me siento, soy una completa estúpida.

—Quieres vino blanco o rosado?—pregunta Charles desde la cocina

—El rosado por favor—digo, ya que me haría falta para olvidar lo estúpida que he sido

Mientras estoy esperando a que Charles vuelva a la mesa escucho a mi móvil recibir una notificación, lo tomo de la mesa y miro el mensaje que acabo de recibir.

Tal y como esperaba era un mensaje de Carlos, y aun me siento peor.

CARLOS:
¿Ya has roto con Charles?
¿Quieres que te recoja de tu casa?

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NOTA DE LA AUTORA

Holaaa, espero que hayáis disfrutado este capitulo, ya se siente la ruptura viniente!

Se que siempre lo digo, pero se viene drama del bueno🤭

Creeis que la historia esta avanzando rápido?

Nos leemos en el próximo capitulo💕