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EL VERANO había llegado demasiado rápido a Japón para el gusto de la familia Todoroki, la mayoría de los poseedores de un quirk frío, sufrían bastante con la sofocante calor que azotaba Musutafu. A la que peor le iba era Fuyumi, que no soportaba bien el verano a pesar de su singularidad. Elaine también odiaba el verano, si ya de por si sentía calor por su singularidad, en esa época la temperatura subía muchísimo. Por esta razón Rei había decidido llevarse a los niños a acampar por una noche a la playa, aprovechando que su esposo estaba fuera de la ciudad, en una misión importante.

Mientras Fuyumi le ponía protector solar a Shoto, la matriarca lo hacía con la pelirroja, asegurando de cubrir muy bien todos los lugares. Natsuo ya se encontraba en la orilla del mar junto a un balón inflable jugando solo, embarrado hasta las patas de protector solar, de hecho se lo había puesto tan rápido que no esparció bien. Touya, en cambio esperaba de forma paciente que su madre terminara con Elaine. Desde lo que había sucedido en su cumpleaños había tenido tiempo para pensar en sus sentimientos, aceptando que los tenía por la niña de ojos dorados, fue algo difícil para él pues Elaine era menor y si su padre se enteraba de ello, estaba completamente seguro de que no volvería a verla jamás.

— Listo, cielo. — Elaine sonrió cuando la mayor le acarició las mejillas.

— ¿Puedo ir con Touya ahora? — preguntó, recibiendo una respuesta afirmativa.

Touya le tendió la mano y ella la tomó de inmediato, era ya una costumbre que tenían.

Rei los observó irse con Natsuo, ellos habían decidido jugar en la orilla porque la menor no sabía nadar y desde el accidente en el cumpleaños del pelirrojo, ahora tenían su vista puesta en Sunshine. Ya no era nada raro ver a Elaine pegada como garrapata a sus dos hijos. Pasaba más tiempo con ellos porque tenía mucha energía que gastar a diferencia de Fuyumi, que era un desastre total en los deportes o juegos donde tenías que usar su habilidad física, también era más tranquila a comparación de Elaine. Quien diría que la alegre niña de ojos dorados cambiaría tanto con el pasar de los años.

Los varones vestían trajes de baño color azul, mientras Elaine tenía uno de color amarillo girasol, porque era su color favorito hasta que vio las llamas azules de su amigo. Ahora dudaba de cual de los dos colores le gustaba más.

La playa estaba lo suficientemente vacía como para poder ver a sus hijos sin necesidad de estar gritando por sus nombres, así que Rei se relajó. Fuyumi hacía castillos de arena con el pequeño Shoto, su madre no le dejaba jugar mucho con sus hermanos porque los mayores eran demasiado brutos entre sí, y si algo le sucedía a su hijo, Endeavor se volvería completamente loco.

— ­ ¿Por qué no has aprendido a nadar, Sunshine? — preguntó el albino, lanzándole el balón a su hermano.

— Me da miedo. — confesó. — Una vez mi madre lo intentó, casi me ahogo.

— El viejo nos enseñó de esa forma. — comentó con una sonrisa. — Nos lanzó al agua y dijo: "aprendan", fue gracioso.

— No, no lo fue. — se quejó el mayor. — Casi me muero.

— Por eso, fue gracioso. — el balón inflable le dio al albino en todo el rostro, logrando que cayera de espalda al agua. Natsuo comenzó a chillar, lloriqueando de lo fría que estaba el agua.

Elaine levantó la mirada hasta su amigo, comenzando a reír de lo gracioso que había sido eso. Aunque su madre jamás la lanzó directamente como le hicieron a los Todoroki, pero si fue bruta y poco paciente al intentar enseñarle, cómo le dio miedo no pudo hacerlo y finalmente su progenitora se rindió y acabó molesta ese día. Su madre parecía tener preferencia por los mellizos pero no con ella, su padre en cambio era más justo pero aún así se sentía un poco desplazada.

La pelirroja se acercó para ayudar a Natsuo a levantarse, en vez de aceptar su mano, el chico la jaló y terminó en el agua junto a él. Ella también se quejó pero fue auxiliada por Touya y una vez estuvo de pie nuevamente, el agua que anteriormente escurría por su cabello ahora se transformaba en vapor, provocado por la singularidad de Sunshine.

— ¡Oigan! ¿Puedo unirme? — la voz de Fuyumi les llamó. La albina vestía un lindo bañador de color rosa palo y corría hasta la orilla con una sonrisa.

— ¡Claro! Ahora que estamos pares podemos hacer una batalla de caballería.

Natsuo explicó de forma básica y rápida el juego a las dos féminas que no sabían jugar, pero advirtió que tendrían que meterse un poco más adentro para jugar. Esto lo dijo porque sabía que la menor no podía nadar. El mayor de los Todoroki le apretó la mano, eso significaba que todo estaba bien.

— ¿Y si me caigo? — preguntó en voz baja.

— No lo harás. — acarició su cabellera, sonriendo. — Además, jamás dijeron que no se podía usar las singularidades.

— ¿Prometes que no me dejaras caer? —

— Lo prometo. — respondió, depositando un beso sobre su sien, enrojeciendo a Elaine.

Cuando ambos dejaron de murmurar, los mayores su pusieron en cuclillas. La pelirroja pasó sus piernas por los hombros del mayor, Touya le ayudó sujetando sus brazos para que pudiera equilibrarse y una vez estuvo sentada de forma correcta en sus hombros, soltó sus manos y las envolvió en sus piernas. Elaine había enterrado los dedos en la cabellera pelirroja de su amigo, acariciando con cariño.

Las dos féminas estaban sobre las espaldas de los varones, al estar ya listos se dieron una mirada retadora y caminaron lentamente hasta que el agua les llegó al pecho. Se colocaron frente a frene, claramente la pareja de Fuyumi y Natsuo era más alta que la de ellos, porque Touya era más bajo que su hermano menor, pero eso no importaba, con la fuerza física que tenía la pelirroja podía derribarlos con un golpe.

— Venga, que Elaine y yo les patearemos el trasero. — dice de forma orgullosa.

— Ni hablar, nosotros ganaremos.

A la cuenta de tres Touya se echó hacia atrás, previendo el ataque de su hermano menor, el cual tuvo que frenar de golpe al notar que iba a tirar a Fuyumi. Rieron un poco antes de volver a estabilizarse y cuando eso sucedió, la albina y pelirroja se vieron envueltas en una pelea de fuercitas en donde estuvieron por varios minutos luchando con las manos, intentando tirarse la una a la otra, hasta que Elaine se aburrió y haciendo uso de su particularidad terminó por tirar a Fuyumi de un empujón. Junto a Touya festejaron su victoria al escuchar como el cuerpo de la fémina caía al agua, salpicando sus cuerpos.

— ¡Eso es trampa! — acusó con su dedo.

— En ningún momento prohibimos el uso de singularidades. — dijo Touya en su defensa.

Los menores ya estaban limpios y secos cuando el sol había comenzado a ocultarse, estaban comiendo unos sándwiches que la matriarca les dio luego de que estuvieran literalmente casi todo el día jugando. No se sorprendía de que Elaine tuviese mucha energía que debía gastar pero si de sus dos varones, que no se separaron y jugaron con ella por horas sin siquiera detenerse a comer.

Ahora, estaban sentados dentro de la carpa que habían armado con dificultad y ayuda de Rei. El pequeño Shoto dormía plácidamente sobre los brazos de su madre y Fuyumi estaba cabeceando por el cansancio que sentía, además, la playa relajaba a cualquiera. La pelirroja estaba igual que la albina, apoyada en el hombro de Touya intentando mantener los ojos abiertos, pues no quería perderse de la puesta del sol, que era el causante de su particularidad.

— ¿Por qué te gustan tanto los atardeceres? — se atrevió a preguntar, Touya.

— Porque no hay uno igual a otro. — respondió en voz baja, cerrando los ojos y disfrutando de la compañía del mayor.

— Eso es muy cursi. — fingió tener una arcada, haciendo reír a la menor.

— A mi me gusta.

— Porque eres una niña cursi. — dicho esto, acarició la mejilla de Elaine. — Abre los ojos, mira.

Elaine obedeció, dejando que sus dorados ojos se fijaran en los bellísimos colores que se mezclaban en el cielo, en sol casi se perdía en el horizonte lentamente y las nubes se veían gomosas de un lindo color anaranjado. La fría brisa marina movió suavemente las cabelleras pelirrojas de ambos niños, Elaine no lo dijo, pero Touya se veía muy guapo en ese momento y no pudo disimular para nada su interés en él. Él se dio cuenta de que lo estaba mirando, se puso nervioso pero finalmente terminó por devolver la mirada, provocando que el rostro de Elaine hiciera juego con su cabello.

— ¿Qué pasa? — dijo de forma tranquila, buscando la mano de Elaine.

— Sólo te miraba. — admitió con una sonrisa.

— ¿Por? — la niña se quedó en silencio avergonzada, no quería decirle. — Anda, sabes que puedes decirme.

— Touya...— balbuceó. — ¡Eres muy lindo! — chilló con vergüenza, el mayor soltó unas cuantas carcajadas por lo adorable que había sido aquello, incluso sintió su estómago revolverse por las mariposas.

— ¿Tu crees? — la menor asintió rápidamente. — Elaine. — llamó, entrelazando sus dedos. — Tu eres la niña más linda que he visto.

— ¿En serio? — ladeó la cabeza confundida. — En tu clase hay chicas muy lindas, como Ikari-chan.

— Ella es insoportable. — contestó, rodando sus ojos mientras hacía una mueca de asco. — Tú eres la más bonita, para mi eres la más bonita. — Sunshine sonrió mostrando todos sus dientes, acelerando el corazón del mayor.

Se sumieron en un silencio muy cómodo, ella estaba feliz al lado de Touya, se sentía extremadamente bien cuando estaba con él y lo mismo le sucedía al Todoroki. Era genial el cómo se sentía tan bien y a gusto cuando estaban juntos, ella le transmitía un cariño tan sincero que no recibía de nadie más. No lo iba a admitir jamás pero muchas veces deseó que su padre los comprometiera, así como sus padres lo hicieron. Elaine adoptaría el apellido Todoroki, no le importaba la diferencia de edad ­— que no era mucha — Touya esperaría a su niña de ojos dorados y jamás permitiría que ningún otro chico intentara entrar a u corazón, porque era suyo. Ni siquiera dejaría que el molesto de su hermano menor le robara a la pelirroja, antes muerto.

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ᴄ ᴜ ʀ ɪ ᴏ s ɪ ᴅ ᴀ ᴅ ᴇ s

➥ Tamaki y Elaine suelen compartir comida, ambos comen mucho.

➥ Cuando se conocieron, Elaine y Keigo median lo mismo.

➥ A Hawks le gusta Elaine desde que la conoció, pero nunca intentó nada con ella por la diferencia de edad en ese momento (15-18)

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˙˚˓˒˙˛ʿʾ․·‧°⋆ও ──
¡ɴᴏ sᴇ ᴏʟᴠɪᴅᴇɴ ᴅᴇ ᴠᴏᴛᴀʀ ʏ ᴄᴏᴍᴇɴᴛᴀʀ, ɴᴏs ᴠᴇᴍᴏs ᴇʟ ᴘʀóxɪᴍᴏ ᴠɪᴇʀɴᴇs!