Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Tres

El trabajo estaba avanzando correctamente. Aquino, al parecer, sabía más de que aparentaba. Y eso en cierto modo es bueno. Aquino siempre se esmera en sorprender a las personas o eso creo, porque de alguna manera u otra siempre lo consigue.

Es una especie de caja sexy con sorpresas.

Digo... Supongo.

La investigación estaba realizada. Todo el marco teórico estaba concreto y correcto, aunque, claro.. ¿Por qué no habría de estarlo si yo lo hice? No es por ser egocéntrico o esas pendejadas, pero estoy seguro de que este trabajo no contiene ningún error como de costumbre, o al menos de mi parte.

Aquino se encarga de la decoración. Es decir de colorear transcribir y decorar las cartulinas o cómo el prefiere llamarlo: "Diseño gráfico y visual del trabajo" pues "La presentación es un elemento muy importante para cualquier trabajo" y "Quien lo hace debe tener una mente y creatividad ilimitada" y eso "Me abrirá miles de puertas, pué nadie se resiste a mi talento".

Claro, además del útil resumen de media cuartilla qué Aquino logró hacer. Sí, lo admito, fue bueno, pero que siga trabajando cómo decorador que en nuestra relación, yo soy el listo.

─ Aquino tengo hambre, alimentame.

Aquino se estiró sobre la mesa del comedor haciendo que el sonido de unos cuantos huesos en su cuerpo se escuchara y resonara. Me levanté de la silla y caminé a la cocina.

──Hay pizza en el horno. Sé que te debí atender yo por ser mi casa pero.. Estás cómo en tu casa Duxito.

── Claro... Aprovechemos a Duxo y su innegable talento culinario y habilidad gastronómica ¿Me viste cara de refrigerador o qué? ── Me quejé, mientras sacaba del horno los pedazos de pizza y los ponía a calentar en el microondas.

─ Seguramente usar el microondas requiere mucha experiencia. Y en realidad ahora te veo como un gran pedazo de carne humana. ── Dijo.

Reí al igual que el.

─Si esperas que te diga "ven y cómeme", tu espera será eterna. ── Bromee.

─No mientas... No puedes negarte, soy Irresistible.

Reí

── Soy un pedazo de carne difícil.

── Y eso es mejor.

── Aveces me das miedo. ── Le dije. Saqué el plato con seis trozos |de los cuales seguramente yo comería cuatro| regresé al comedor y puse el plato en la mesa, sobre los cuadernos y libros.

─ ¿Te doy miedo cuando tengo hambre? ── Tomó un pedazo de pizza y le dio una mordida amplia.

─ Un poco.

Dije haciendo lo mismo.

─ Pero si tú eres la bestia al comer, yo no. ── Se quejó.

─ Sientes envidia porque yo sé cocinar. ── Tomé otra porción de pizza.

─ Usar el microondas no cuenta cómo cocinar.

── ¡Sí cuenta!

── No.

── ¡Sí!

── No porque...

── ¡Ya! ── Interrumpí.

Cuando menos me di cuenta el plato ya estaba vacío |yo solo comí tres|.

─ ¿Ya le dijiste a tu mamá que te quedarás a dormir?

── Sí, le mandé un mensaje. ── Contesté restándole importancia al asunto.

Aquino sonrió mientras ocultaba una sonrisa qué apareció en las comisuras de sus labios.

─ Creo que ya es tiempo de... Decir mi secreto. ── Habló con voz determinada.

Alcé ambas cejas con sorpresa y lo miré atentamente.

─ ¿Cómo? ── Pregunté. Aquino se encogió de hombros.

─ Si te vas a quedar a dormir tienes que saberlo. ── Dijo.

Lo observé con curiosidad ¿Qué tiene que ver su secreto con que me quede a dormir esta noche?

─ Ya dime, anda. ── Le pedí.

── Tengo problemas nocturnos, Duxo.

Sonreí, no es tan grave ¿por qué lo hace parecer cómo di fuera tan importante?

─ Tranquilo, yo también ronco y lanzo patadas. ── Solté una carcajada.

── No, no ese tipo de problemas, tengo un trastorno... Extraño. ── Trató de explicar.

¿Transtorno?

─ ¿De qué trata? ── Cuestioné con mis cejas fruncidas y una expresión de confusión en el rostro.

Aquino solo sonrió

─ Padezco de sexomnia...

── ¿Y eso con qué se come? ── Bromee.

Aquino volvió a reír.

── ¿Seguro que quieres quedarte a dormir conmigo? ── Cuestionó con un tono pícaro

── ¿Sí supiera qué es eso tendría que no hacerlo?

── Totalmente.

── No puede ser tan malo. He dormido con Locochon, sus pies apestan. ¿Qué podría ser peor? ── Pregunté a Aquino con una risa burlona y un aire confiado.

No creo que Aquino tenga algo peor que eso, además, dormiremos en habitación separadas. Seguramente quiere asustarme diciendo que es sonámbulo y asesino dormido, o que hay fantasmas en su casa. Ya saben, sus webadas de siempre.

── Tengo sexo inconscientemente cuando duermo, sin importar con quién.

A este paso voy a hacer racha.

Hasta nuevo aviso!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro