Tres
El trabajo estaba avanzando correctamente. Aquino, al parecer, sabía más de que aparentaba. Y eso en cierto modo es bueno. Aquino siempre se esmera en sorprender a las personas o eso creo, porque de alguna manera u otra siempre lo consigue.
Es una especie de caja sexy con sorpresas.
Digo... Supongo.
La investigación estaba realizada. Todo el marco teórico estaba concreto y correcto, aunque, claro.. ¿Por qué no habría de estarlo si yo lo hice? No es por ser egocéntrico o esas pendejadas, pero estoy seguro de que este trabajo no contiene ningún error como de costumbre, o al menos de mi parte.
Aquino se encarga de la decoración. Es decir de colorear transcribir y decorar las cartulinas o cómo el prefiere llamarlo: "Diseño gráfico y visual del trabajo" pues "La presentación es un elemento muy importante para cualquier trabajo" y "Quien lo hace debe tener una mente y creatividad ilimitada" y eso "Me abrirá miles de puertas, pué nadie se resiste a mi talento".
Claro, además del útil resumen de media cuartilla qué Aquino logró hacer. Sí, lo admito, fue bueno, pero que siga trabajando cómo decorador que en nuestra relación, yo soy el listo.
── Aquino tengo hambre, alimentame.
Aquino se estiró sobre la mesa del comedor haciendo que el sonido de unos cuantos huesos en su cuerpo se escuchara y resonara. Me levanté de la silla y caminé a la cocina.
──Hay pizza en el horno. Sé que te debí atender yo por ser mi casa pero.. Estás cómo en tu casa Duxito.
── Claro... Aprovechemos a Duxo y su innegable talento culinario y habilidad gastronómica ¿Me viste cara de refrigerador o qué? ── Me quejé, mientras sacaba del horno los pedazos de pizza y los ponía a calentar en el microondas.
── Seguramente usar el microondas requiere mucha experiencia. Y en realidad ahora te veo como un gran pedazo de carne humana. ── Dijo.
Reí al igual que el.
──Si esperas que te diga "ven y cómeme", tu espera será eterna. ── Bromee.
──No mientas... No puedes negarte, soy Irresistible.
Reí
── Soy un pedazo de carne difícil.
── Y eso es mejor.
── Aveces me das miedo. ── Le dije. Saqué el plato con seis trozos |de los cuales seguramente yo comería cuatro| regresé al comedor y puse el plato en la mesa, sobre los cuadernos y libros.
── ¿Te doy miedo cuando tengo hambre? ── Tomó un pedazo de pizza y le dio una mordida amplia.
── Un poco.
Dije haciendo lo mismo.
── Pero si tú eres la bestia al comer, yo no. ── Se quejó.
── Sientes envidia porque yo sé cocinar. ── Tomé otra porción de pizza.
── Usar el microondas no cuenta cómo cocinar.
── ¡Sí cuenta!
── No.
── ¡Sí!
── No porque...
── ¡Ya! ── Interrumpí.
Cuando menos me di cuenta el plato ya estaba vacío |yo solo comí tres|.
── ¿Ya le dijiste a tu mamá que te quedarás a dormir?
── Sí, le mandé un mensaje. ── Contesté restándole importancia al asunto.
Aquino sonrió mientras ocultaba una sonrisa qué apareció en las comisuras de sus labios.
── Creo que ya es tiempo de... Decir mi secreto. ── Habló con voz determinada.
Alcé ambas cejas con sorpresa y lo miré atentamente.
── ¿Cómo? ── Pregunté. Aquino se encogió de hombros.
── Si te vas a quedar a dormir tienes que saberlo. ── Dijo.
Lo observé con curiosidad ¿Qué tiene que ver su secreto con que me quede a dormir esta noche?
── Ya dime, anda. ── Le pedí.
── Tengo problemas nocturnos, Duxo.
Sonreí, no es tan grave ¿por qué lo hace parecer cómo di fuera tan importante?
── Tranquilo, yo también ronco y lanzo patadas. ── Solté una carcajada.
── No, no ese tipo de problemas, tengo un trastorno... Extraño. ── Trató de explicar.
¿Transtorno?
── ¿De qué trata? ── Cuestioné con mis cejas fruncidas y una expresión de confusión en el rostro.
Aquino solo sonrió
── Padezco de sexomnia...
── ¿Y eso con qué se come? ── Bromee.
Aquino volvió a reír.
── ¿Seguro que quieres quedarte a dormir conmigo? ── Cuestionó con un tono pícaro
── ¿Sí supiera qué es eso tendría que no hacerlo?
── Totalmente.
── No puede ser tan malo. He dormido con Locochon, sus pies apestan. ¿Qué podría ser peor? ── Pregunté a Aquino con una risa burlona y un aire confiado.
No creo que Aquino tenga algo peor que eso, además, dormiremos en habitación separadas. Seguramente quiere asustarme diciendo que es sonámbulo y asesino dormido, o que hay fantasmas en su casa. Ya saben, sus webadas de siempre.
── Tengo sexo inconscientemente cuando duermo, sin importar con quién.
A este paso voy a hacer racha.
Hasta nuevo aviso!
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