📚𝗅𝗅 22
Capitulo veintidós// "Trío de idiotas"
—Entonces...¿Estuviste sonrojada todo el tiempo mientras y él te sonreía y tú a el?—preguntó Tonks.
—Sí. Después me preguntó si quería ir con el a Rumanía. Y le dije que si—contesto sonrojada.
—¡Oh Por Merlin!.—expreso Sirius con los ojos abiertos—¿Escucharon lo mismo que yo, Cornamenta, Tonks?.
—Fuerte y claro Canuto—contesto James.
—¡Nuestra pequeña tendrá una cita!—exclamo aplaudiendo—Crecen tan rápido.—Dijo simulando que se secaba las lágrimas.
—Lo sé, estoy orgullosa de nuestra pequeña—dijo Tonks imitando a Sirius.
—¿Se imaginan?, Nuestra pequeña cuidando a otra bebé. Sería algo extraño—menciono James con los ojos abiertos—Pero todos sabemos que yo sería el padrino.
—Callense.—susurro Alice con vergüenza.
—Le damos vergüenza—murmuró Tonks finjiendo estar dolida.
—Lo sé.—contesto James de la misma manera.
—¡Por Merlin!—exclamo frustrada pasando una mano por su rostro—¿Cómo los aguantás?.
Remus se encogió de hombros—Supongo que ya estoy acostumbrado.
—Son un trío de idiotas...—murmuro la rubia pero no pudo evitar soltar una pequeña sonrisa.
—No fue tu culpa.
—¿Qué?—pregunto Alice casi como un susurro.
—No fue tu culpa.—afirmo Sirius—Se que te culpas sobre la muerte de James. Pero no debes hacerlo.—explico bebiendo un vaso de Whisky.
—Yo lo sabía. Y no hice nada para evitarlo.—respondio cabizbaja.
—El tampoco querría que lo hicieras Alice. Si el decidido... arriesgar su vida por mi, es por qué sabía que Harry estaría a salvo con todos nosotros. Con Remus, Tonks, Molly y Arthur, yo, pero sobretodo tu. Sabía que Harry nunca estaría solo, por qué nos tendría a nosotros para estar para Harry. Tu no tienes la culpa, después de todo se cuanto adorabas volver a pasar tiempo con...James.
—Gracias Orion.—susurro.
—¿Para qué son los amigos?.—la abrazo sabía que ella estaba mal igual que el, pero sabía que no le diría nada, y lo comprendía. Al principio se tensó ante su tacto, pero segundos después correspondió. La rubia respiró profundamente, y la atrajo más a él, sus manos estaban en su cintura.—No es nada Rubia. Se que puedo ser un arrogante o en veces insoportable, pero sé como te sientes y también sé que necesitás un abrazo.—susurró apoyando su cabeza sobre la de ella.
Toda la noche estuvo en silencio. Necesitában de alguien en ese momento, y ahí estában.
Apoyándose mutuamente.
—¿Acompañaras a Harry mañana?—pregunto la rubia con la cabeza sobre su hombro.
—No lo creo. Creo que para este punto todos saben que soy un animago.
—No te preocupes. Yo me ocuparé de que estés mañana junto a Harry. Te necesita. A ti y a Remus, aunque no lo acepte, son lo más cercano a un padre para el.
—Gracias Rubia.
—De nada Orion.
NO OLVIDEN VOTAR
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro