Elena había hecho un listado largo de cosas que necesitaría a Klaus, y él no tuvo más opción que traerle todo lo que había anotado en la lista. Ahora Elena estaba feliz porque tenía un lindo aire acondicionado en su habitación, el cual, no la dejaría sufrir de calor, y también otras cosas más para su habitación.

Más tarde, tanto Elena como Klaus, Marcel y Kol se reunieron para hablar de un tema en particular ya que necesitaban despertar a Freya lo más pronto posible.

Klaus era quien mayormente quería traer de nuevo a ellos a su hermana Freya aunque para eso debían primero hacer un plan ya que no querían despertar también a Dahlia en el proceso la estar lijada a Freya.

─ Tengo el ataúd con mi madre, las cenizas de Mikael y ya mandamos por suelo noruego ─ comentó Klaus.

─ Necesitaríamos a Bonnie y a su madre Abby, recuerden que dos descendientes de la línea Bennett pueden abrir el ataúd ─ dijo Kol.

Eso era verdad, Ayana hace más de mil años atrás había puesto un hechizo en el ataúd de Esther cuando murió para que solo dos brujas de su linaje pudieran abrir el ataúd.

─ Hablé con Bonnie anteriormente en Mystic Falls sobre esto, ella está dispuesta a ayudarnos ─ murmuró Elena.

Bonnie había accedido a ayudarlos en ese tema ya que solo las brujas Bennett podían hacer eso.

─ ¿Y Abby? ─ Kol levantó sus cejas.

Él dudaba que la madre de Bonnie fuera a ayudarlos de buena manera ya que ellos eran vampiros, y no cualquier vampiro, sino los originales.

─ Bonnie puede convencerla ─ comentó Elena mirándolos.

─ Bueno, pongamos en marcha el plan, ya sabemos dónde está Freya así que cuando tengamos todo listo, procedemos ─ dijo Marcel.

Todos asintieron con sus cabezas al escucharlo antes de salir del despacho por rumbos diferentes.

Elena fue la última en salir del lugar, suspiró mientras caminaba en dirección de su habitación al saber que de nuevo deberían enfrentarse a una bruja muy poderosa como Dahlia.

Las cosas marchaban bien por el momento, Bonnie había ido a Nueva Orleans por unos días para ayudar en ese problema a los Mikaelson, y también pudo convencer a su madre de ayudar en todo eso aunque ésta se negó rotundamente al principio.

Después, todo siguió de acuerdo a lo planeado y también involucraron un poco a Elijah y a Rebekah en todo eso contándoles que su hermana mayor Freya estaba viva.

Eso claramente había dejado impactados a los dos originales al saber que la supuesta hermana muerta que había fallecido de la peste cuando era niña en realidad estaba viva.

Ellos hicieron muchas preguntas empezando el cómo sabían Klaus y Kol sobre su hermana Freya ya que ellos parecían saber mucho de ella por todo lo que les contaron.

─ Bueno, yo conocí a nuestra hermana Freya en 1914 ─ había dicho Kol cuando Elijah le preguntó dejando más sorprendidos a sus hermanos ya que él nunca les había dicho nada de eso.

─ ¿Y hasta ahora nos dices? ─ Elijah se cruzó de brazos indignado de que Kol guardará algo así por tantos siglos.

─ Ustedes no me preguntaron nada, además, recuerden que Klaus me clavó una daga ─ se defendió Kol.

Las preguntas por parte de Elijah y Rebekah continuaron en los siguientes minutos haciendo gruñir a Klaus quién estaba desesperado por tantas preguntas.

─ Bueno ya, dejemos las preguntas de lado y seamos unos buenos hermanos ayudando a Freya que nos necesita ahora ─ dijo Klaus interrumpiendo a sus hermanos mientras tomaba asiento cruzándose de piernas

Rebekah y Elijah se miraron mutuamente al escucharlo, ellos no creían nada la supuesta amabilidad de Klaus por su hermana Freya.

─ ¿Qué ganarás con todo eso? ─ preguntó Rebekah sin rodeos al oírlo.

Ella conocía a su hermano desde hace aproximadamente más de mil años, sabía que Klaus nunca haría algo bueno por alguien que apenas conocía, incluso si se trataba de una hermana suya.

─ Nada ─ negó Klaus.

Elijah avanzó un poco hacía él mirándolo detenidamente.

─ Por favor, Niklaus ─ dijo Elijah ─ tú no harías algo bueno por alguien que apenas y conoces, aún si se trata de nuestra hermana que no murió ─ aseguró.

Klaus levantó sus cejas indignado al escucharlo, mientras que Kol no pudo evitar reírse en ese momento ya que sus hermanos conocían bastante bien a Klaus.

─ Nuestra hermana es una bruja muy poderosa, es una primogénita Mikaelson, Nik la quiere cómo su bruja de confianza ─ dijo Kol diciéndole lo que ellos querían escuchar ya que no creerían que Klaus realmente hacía todo eso en gran parte para ayudar a su hermana a quien ya le tenía aprecio.

Klaus desvió su mirada hacía Kol al oír sus palabras, se escuchaba tan convincente que hasta él casi le creyó.

─ Bueno, eso tiene lógica ─ murmuró Rebekah.

Después de esa pequeña conversación, Klaus les contó con más seriedad un poco sobre su tía Dahlia y de lo que ésta le había hecho a Freya al ser una primogénita Mikaelson.

Luego de lo que él les contó, Elijah y Rebekah sabían que el futuro hijo de Klaus también correría riesgo cuando naciera al ser un primogénito.

Finn no había tardado mucho en ir a Nueva Orleans reuniéndose con sus hermanos al enterarse por medio de una llamada de Elijah sobre su hermana Freya.

Los siguientes movimientos del plan que tenían preparado para despertar a Freya y desvincularla de Dahlia para finalmente matar a la bruja mayor, había traído un poco de controversia entre Klaus y Elena ya que él la había sacado afuera de todo eso para su bien, sin embargo, Elena como era Elena no estaba para nada feliz con eso pero Klaus como era Klaus no le hizo caso a su berrinche y así Elena no tuvo más opción que estar afuera de todo ese lío aunque no quisiera.

─ ¿Sigues molesta con Klaus? ─ le preguntó Bonnie cuando estuvieron a solas en la actual habitación de Elena.

─ Detesto que me haya sacado de todo eso, es injusto ─ murmuró Elena mientras acomodaba su ropa.

Bonnie se sentó en la cama.

─ Lo hizo por tu bien y lo sabes, nadie puede asegurar que el plan que tenemos saldrá del todo bien ─ dijo Bonnie.

Elena suspiró, sabía que Bonnie tenía razón, sin embargo, no le daría la razón a Klaus al estar molesta con él.

─ De igual manera él no debió dejarme afuera de esto, merezco saber lo que pasa, por lo menos debió decirme las últimas novedades de su plan ─ aseguró el doppelganger.

Bonnie abrió sus labios para volver a hablar pero silenció cuando la puerta de la habitación fue abierta dejando ver a Klaus.

─ Déjanos a solas Bonnie ─ pidió Klaus.

─ Claro ─ dijo Bonnie saliendo de la habitación para dejarlos a solas.

Una vez que Elena y Klaus se quedaron solos, él avanzó hacía Elena quién le dio la espalda en ese momento para ver por la ventana de su habitación acto que hizo rodar los ojos al original por su actitud.

─ Actúas como una mocosa caprichosa ─ dijo Klaus.

Elena giró en su lugar mirándolo mal al escucharlo.

─ ¿Vienes a fastidiarme? ─ preguntó Elena.

─ No, vine a hablar ─ aclaró él.

─ ¿Y de qué? ─ Elena levantó sus cejas mientras se cruzaba de brazos.

─ Entiende que lo que hago es por tu bien y por nuestra hija, lo que menos quiero es que te mueras embarazada, sabes bien lo que Dahlia puede llevar a hacer si algo sale mal de nuestro plan de derrotarla ─ dijo el original.

Elena suspiró, desvió su mirada de él al oírlo.

─ Lo sé pero ya sabes cómo soy ─ murmuró Elena a regañadientes sintiéndose rendida.

─Si, eres muy terca ─ asintió él.

─ Mira quién lo dice ─ dijo Elena mirándolo ya que Klaus era peor que ella en ese sentido.

Klaus sonrió de lado acercándose más hacía Elena.

Ella volvió a suspirar nuevamente apoyando su frente en el pecho del original, entonces Klaus tomó su cara entre sus manos rozando sus narices.

─ Me colmas mucho la paciencia ─ murmuró Klaus.

─ Tú a mí igual ─ dijo Elena.

Ambos se miraron mutuamente a los ojos sonriendo en el proceso.

─ Bonnie se fue ─ comentó él ya que la escuchó irse, lo que significaba que estaban ellos solos en la residencia Mikaelson.

Elena mordió sus labios al sentir el fresco aliento de él chocando su cara.

─ Eso es bueno, ¿no? ─ dijo Elena sin quitarle la mirada en ningún momento.

Él asintió.

─ Si ─ susurró Klaus rodeando con sus brazos su cintura.

Klaus la besó en ese momento y Elena no se hizo de rogar en corresponder a su beso, sus hormonas estaban por el cielo en ese instante, además, los brazos de Klaus alrededor de su cintura la derretía.

¡CAPÍTULO 28!

Hola, nuevo capítulo de está historia y un poquito de escena Klena.

Elijah y Rebekah ya saben un poco de Freya aunque no entiendan casi nada de cómo Klaus y Kol saben tanto de ella.

Me compadezco de Elijah y Rebekah, los pobres no entienden nada de nada.

Finn está en Nueva Orleans al enterarse de su hermana Freya.

La pobre Freya se emocionará demasiado cuando vea a su hermano Finn de nuevo.

MOMENTO KLENA.

Necesitaba una dosis de algo de ellos.

¿Qué les pareció?