LONDRES, INGLATERRA

Lunes 9 de noviembre 2020

— ¡Basta Sandra! — Grité — Estás más nerviosa que yo —

— Amiga es tu primera cita en mucho tiempo, tienes que saber que hacer ante cada situación — Rodó los ojos.

Sandra sigue buscando en mi closet que ponerme para esta noche.

Hoy es mi primera cita con Gio y no puedo estar más emocionada, ayer jugaron un partido de liga al cual no fui, ya que por el momento no viajo junto al equipo.

Mi madre entra a mi habitación y al verme sonrió ampliamente y puedo notar también mucha emoción en su rostro.

— Quería desearte buena suerte antes de que Gio llegará — Menciona mi madre cerrando la puerta de mi habitación — Estás hermosa, cariño —

— Gracias mamá — Dije — Estoy muy nerviosa... —

— Es normal cariño, le pasó lo mismo con tu padre, pero lo único que puedo decirte es que disfrutes esta noche —

— Mamá, si te soy sincera jamás creí tener algo con alguien en mucho tiempo, pero todo cambio cuando Gio llegó a mi vida. Es el mejor chico que pude conocer —

— Y te lo mereces Mariana, eres una buena chica y Gio es un buen chico, en conclusión ambos están destinados a estar juntos — Abrace a mi madre — Déjame ayudarte con el maquillaje —

— Claro — Sonreí.

Entre mi madre y mejor amiga me ayudaron con el maquillaje, no hay otras personas que me conozcan más que ellas dos y saben que mi estilo es sencillo y quiero que así sea siempre.

Me miro en el espejo, me encanta todo. El vestido que llevo es cómodo y nada extravagante, además que junto con el maquillaje hacen una buena combinación.

Mi madre baja al salón principal, Gio está aquí. Tomo mi bolso y tomo aire antes de salir de mi habitación.

— Si intenta sobrepasarse contigo, llámame y yo lo mató — Suelto una carcajada — Suerte amiga mía y haz lo que tu madre dijo, disfruta esta noche, te la mereces —

— Te quiero tonta — Abrazo a Sandra, me despido de ella y salgo de mi habitación.

Bajo las escaleras y camino rumbo al salón de dónde proviene voces.

— Papá! — Me acerco a mi padre al verlo sentado junto a mi madre y Gio — ¿Qué estás haciendo aquí? —

— Quería decirle un par de cosas a Gio, ya sabes, es mi papel como padre — Niego riendo — Estás divina, cariño —

Sonrío y abrazo a mi padre una vez más. Al separarme de él notó la mirada de Gio sobre mí y mis mejillas se sonrojan.

— Tu padre tiene razón, estás preciosa — Gio se levanta del sofá y besa mi mejilla.

Nos despedimos de mis padres y juntos salimos de mi casa, Gio se adelanta y abre la puerta de su auto deportivo color negro.

— Gracias — Le sonrío y me acomodo en el lado del copiloto.

Gio imita mi gesto y se acomoda en el lado del conductor.

— Tú también estás... lindo — Él me mira riendo — Ay por favor te dije un cumplido Lo Celso —

— Y no puedo estar más feliz por eso — Los dos reímos — Eres la más hermosa de todas Mariana y hablo en serio —

Acarició su mejilla dulcemente y nuestros rostros se acercan poco a poco.

— Te quiero Gio — Menciono y él besa mis labios delicadamente.

— No me equivoqué cuando mi corazón te eligió a ti — Sonreí feliz.

— Pero ahora quiero que me digas ¿Qué es lo que mi padre te dijo cuando estaban en el salón? — Nos separamos y Gio ríe.

— Lo que un padre sobreprotector le diría al novio de su única hija, cuídala o te arrepentirás —

— Mi padre nunca cambiará — Reí — Pero no te hará nada, porque tú no me harás daño Gio nuestro amor es sincero y verdadero — Gio juntó nuestras manos y depósito un beso sobre ellas.

— Jamás te haría daño mi princesa, y sobre todo te cuidaré muy bien —

— No lo dudo amor —

Gio conduce hasta el lugar que eligió para nuestra primera cita oficial, miro mi teléfono mientras llegamos hasta que el auto se estaciona frente a una casa muy elegante.

— ¿Dónde estamos? — Pregunto y lo volteo a ver.

— Es una sorpresa — Dijo — Vamos —

Bajamos del auto y lo esperé hasta que llegó a mi lado, la temperatura había bajado y por suerte Sandra escogió el suéter perfecto si no en estos momentos me estaría muriendo de frío.

Entramos a la enorme casa hasta que llegamos a la salida a un enorme jardín.

— Gio... — Abro los ojos emocionada al ver todo eso y algunas lágrimas de la emoción caen sobre mis mejillas.

El jardín estaba decorado con luces y algunos globos, además de una mesa en el centro de todo.

— Eres el mejor — Mi voz tiembla y lo abrazo fuertemente — Nadie jamás había hecho esto por mí —

— Bueno, vete acostumbrando — Gio hace que lo miré y con sus pulgares limpia algunas lágrimas — Yo daría todo por ti —

— Te amo — Murmuró para después besarlo.

No es hasta que nos separamos por la falta de aire.

— Mariana, aún no lo hemos hecho oficial, bueno si frente a las personas que queremos, pero yo no te he hecho la típica pregunta —

Una sonrisa se dibuja en mi rostro al darme cuenta a lo que se refiere.

— Mariana Díaz ¿Quieres ser mi novia? —

Me hago la pensativa y no digo nada por dos minutos hasta que notó que la cara de Gio cambia por completo.

Suelto una carcajada y él me mira sin entender.

— ¡Por supuesto que sí tonto! Si Gio, si quiero ser tu novia —

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locelsogiovani

locelsogiovani: Juntos🔒💖 @soymarianadiaz 💑

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soymarianadiaz: Mi vida❤️

dele: 😲😲 Por fin seguiste mi consejo 👀😌

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