❁ 𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟎𝟕 ❁
Tatsumi: OYE— Gritó captando la atención de Aioria —¿Es lo que buscas? — Preguntó serio con la caja dorada con el símbolo de Sagitario en brazos —Llévatela, pero te advierto que si la tocas vas a arrepentirte durante el resto de tus días— Habló con temor y temblando, pero tratando de sonar firme en sus palabras —¿¡TE QUEDÓ CLARO!? — Gritó observando al caballero que ya estaba muy cerca de él, con una mano tomó la armadura y se la quitó sin decir nada haciendo que Tatsumi retrocediera asustado.
Aioria: — Se dio la vuelta y comenzó a caminar —Esta vez voy a perdonarles la vida.
Tatsumi: ¡Señorita Saori! ¡Señorita! — Exclamó alarmado corriendo hacia ella e hincándose a un lado observando cómo estaba.
Aioria: No sé si tu seas la verdadera Athena— Se detuvo y observó hacia el frente captando la atención de todos —Si lo eres ven al santuario y demuéstraselo al patriarca— Pausó y miró de reojo a Saori —Demuestra que eres la Diosa que Aioros protegió hasta la muerte— Miró hacia el frente —Si no vienes entonces prepárate para morir— Sentenció por último observando a la pelinegra para después brillar y desaparecer por un gran rayo dorado.
En ese momento la joven amazona estaba perdida en sus pensamientos, haciéndose varias preguntas, con una mano tomó el dije que su hermano mayor le había dejado y la abrió observando las fotos que había en él.
Su mirada se posó en el pequeño que estaba con su hermano mayor, lo observó detenidamente y fue cuando entendió de que el caballero que acababa de venir por la vida de su hermana, era su segundo hermano mayor... cerró el medallón y apretó con fuerza el collar.
Tn: Maldición— Habló con rabia haciendo que los de bronce quienes ya se habían levantado la miraran —Todos estos años y ahora que por fin te encuentro vienes para acabar con nosotros— Susurró con impotencia, una lágrima recorrió su mejilla en ese momento Shun iba a acercarse.
Tatsumi: Resista ama... RESISTA AMA— Gritó alarmado captando la atención de todos, la pelinegra rápidamente se acercó a su hermana que se encontraba desmayada.
Tn: La llevaré a su habitación— Habló de manera seria pero algo rota, tomó a su hermana en brazos y se dirigió hacia la mansión.
Shun: Tn— Intentó hablar.
Tn: Estoy bien Shun, enseguida regreso— Aclaró sin detenerse llevando a su hermana a que descansara.
La joven amazona se dirigió a la recámara de su hermana, abrió la puerta con cuidado de no golpear a su hermana en el momento y entró, se acercó a la cama y despacio la colocó acomodándola, la arropó y le dio un beso en la frente para después tomar asiento en la silla que se encontraba a lado de la cama.
Tn: Como me gustaría que no tuvieras que enfrentarte a esto— Susurró dolida acariciando el suave cabello lila de Saori para luego levantarse y salir de la habitación.
Al salir de la habitación, bajó las escaleras... todos al verla algo seria se preocuparon, pero no dijeron nada, ella sin decir nada salió de la casa y se quedó en el patio donde se podía ver el puente rojo delante suyo. Al ver que estaba completamente sola soltó un gran suspiro y miró hacia la luna.
Tn: ¿Por qué todo lo que amo está en peligro? — Habló frustrada —Mi hermano mayor murió por protegernos a mí y a Saori, Aioria... mi segundo hermano... ¿Por qué? — Bajó la mirada y apretó fuertemente los puños.
xx: No seas dura contigo misma— Una voz la hizo sobresaltar haciendo que volteara rápidamente encontrándose con el joven peliverde.
Tn: Shun— Suspiró relajada —Me asustaste no creí que me seguirías— Mencionó al mismo tiempo que se daba la vuelta y miraba al cielo.
Shun: Se que es difícil todo esto para ti— Mencionó un poco serio avanzando hacia donde estaba ella colocándose a un lado, la joven lo observó —Me contaste muchas cosas de tu pasado y sé que algo de eso te hizo dudar al final que te encontrabas cerca del caballero dorado.
Tn: Descubrir que el caballero dorado que intento acabar con Athena y de paso con nosotros es tu hermano, no es algo de todos los días— Habló como si nada obteniendo una expresión de sorpresa por parte de él.
Shun: ¿A qué te refieres? — Preguntó sorprendido.
Tn: — Saca el medallón y se lo muestra —El caballero que vino tiene un gran parecido con Aioros, pero sobre todo siento que ese pequeño que está en la foto es Aioria— Finalizó suspirando tratando de relajarse mientras guardaba el collar.
Shun: — Tomó sus manos y la observó —Sabes que si vamos al santuario lo volverás a ver ¿Cierto? — Preguntó sereno mirando a los ojos a la pelinegra.
Tn: Lo sé, necesito respuestas y tanto él como el patriarca las tienen— Mencionó seria, pero sin apartar su mirada del peliverde.
Shun: Pase lo que pase, prometo estar a tu lado— Sonrió tiernamente haciendo sonrojar a la joven.
Tn: Aunque todavía no comprendo... ¿Qué fue ese cosmos que emanó de mí? No parecía que fuera mío, fue como si su poder fuera similar al de Athena— Habló confundida no sabía con exactitud de que podría tratarse.
Shun: Te ayudaré a encontrar respuestas, sabes que no permitiría que algo te pasara— Le dio un ligero apretón en sus manos en señal de apoyo —Estaré a tu lado y juntos obtendremos las respuestas— Habló cálidamente al mismo tiempo que poco a poco comenzaba a acercarse.
La joven lo miró nerviosa al ver que el peliverde comenzaba a acercarse a ella, ella inconscientemente también comenzó a acercarse hasta el punto en que la respiración de ambos se mezclara, justo cuando estaban a punto de besarse, el sonido de la puerta los hizo alejarse con un gran sonrojo por parte de ambos, voltearon a ver hacia la puerta encontrándose con Shiryu y Hyoga, pero la pelinegra se quedó confundida al no ver a Seiya con ellos.
Tn: Chicos... ¿Dónde está Seiya? — Preguntó confundida al no verlo.
Hyoga: Fue al puente— Comentó señalando el puente rojo donde efectivamente se encontraba el castaño —Se siente culpable por lo sucedido con el caballero de Leo— Se cruzó de brazos observando a la pelinegra quien estaba seria.
Tn: Entiendo, pero no fue su culpa, ninguno de nosotros esperaba el ataque, aunque ella no resultó herida realmente solo le cortaron el cabello y eso es responsabilidad mía— Mencionó apretando los puños.
Shiryu: No seas dura contigo, la has protegido de todo— La joven lo miró —Entrenaste duro y llegaste hasta aquí con tu esfuerzo, Saori sabe que siempre la protegerás— Intentó animar haciendo que la joven sonriera.
Tn: Gracias... de todas formas tengo que estar alerta— Dio un paso al frente —No puedo permitirme cometer otro error— Miró a los chicos —Nuestro deber es proteger a Athena y sé que eso lo lograremos.
Los chicos la miraron y sonrieron ante la gran determinación de la joven pelinegra.
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